El Abrazo era una serie de cavernas en el mundo natal de la especie aing-tii. Los aing-tii reunían artefactos sagrados que tenían prohibido tocar, que llamaban reliquias, y los colocaban en el Abrazo.
En el 43.5 DBY, el Gran Maestro Jedi Luke Skywalker viajó con su hijo, el Caballero Jedi Ben Skywalker, al planeta para aprender sobre la caída al lado oscuro de la Fuerza del Señor Sith Darth Caedus. Ahí ambos fueron entrenados en el arte de caminar en la corriente y la teleportación por el aing-tii Tadar'Ro. Tadar'Ro llevó a los Skywalker al Abrazo, donde esperaba que descubrirían una revelación importante que ayudaría a resolver la división que habían sufrido recientemente los aing-tii. Dentro del Abrazo Luke encontró el Codex, una reliquia que Caedus había tocado durante su estancia con los aing-tii cuando aún era Jacen Solo.
Para decepción de Tadar'Ro y los demás aing-tii, el Abrazo no ocasionó ninguna revelación para su especie.