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«Es el deber de todos los ciudadanos poner a prueba a sus líderes, hacer que sigan siendo honestos, y hacer que asuman su responsabilidad si no lo son.»
―Ahsoka Tano[fuente]

Ahsoka Tano, apodada por su Maestro como «Sabionda», «Chulita» o «Mocosa», fue una Padawan Jedi togruta que, tras las Guerras Clon, ayudó a establecer una red de células rebeldes para combatir al Imperio Galáctico. Tano fue descubierta en su planeta natal Shili por el Maestro Jedi Plo Koon, quien la llevó al Templo Jedi de Coruscant para que fuese entrenada en las artes Jedi. Después del estallido de las Guerras Clon, el Gran Maestro Jedi Yoda asignó a la joven Tano como Padawan del Caballero Jedi Anakin Skywalker, a quien se unió durante la Batalla de Christophsis. Mientras que Tano estaba ansiosa por probarse a sí misma, Skywalker tenía una reputación de imprudente, y ambos tuvieron un complicado inicio en su relación como maestro y aprendiz. Pronto, trabajaron juntos para rescatar a Rotta, el hijo del señor del crimen Jabba Desilijic Tiure, y lograron su objetivo, facilitando una alianza crucial entre el Cártel Hutt y la República Galáctica.

Como comandante en el Gran Ejército de la República, Tano encontró a un mentor en el Capitán Clon Rex de la Legión 501, quien junto a ella y Skywalker colaboró liderando a sus tropas en numerosas campañas bélicas contra la Confederación de Sistemas Independientes. En su primera labor como comandante durante la Batalla de Ryloth, Tano desobedeció las órdenes de sus superiores y perdió a un escuadrón de pilotos entero, aunque finalmente colaboró decisivamente para alcanzar la victoria en Ryloth. Tano hizo frente a una gran variedad de oponentes, desde el general Grievous y la Aprendiz Sith Asajj Ventress hasta cazarrecompensas como Cad Bane y Aurra Sing. Con el tiempo, Ahsoka maduró hasta convertirse en una respetada líder, contribuyendo en batallas clave como la Segunda Batalla de Geonosis y la Batalla de Mon Cala. Tano incluso murió durante una serie de eventos ocurridos en Mortis, pero la portadora de la Fuerza conocida como la Hija se sacrificó para resucitar a Ahsoka.

Tano ganó mucha experiencia en el frente de batalla y también lejos de él, liderando a un grupo de Iniciados Jedi para rebelarse contra sus captores trandoshanos, ayudando a rescatar una colonia de togrutas condenada a la esclavitud, y sirviendo como consejera de los Rebeldes de Onderon - con su gran amigo Lux Bonteri entre ellos - mientras liberaban a su planeta de la presencia de la Confederación. En un dramático giro de los acontecimientos, Tano fue acusada de bombardear el hangar del Templo Jedi y de haber cometido actos homicidas, por lo que escapó a los bajos fondos de Coruscant para demostrar su inocencia. Aunque formó una alianza con Asajj Ventress, fue detenida por la República y expulsada de la Orden Jedi. Finalmente, Skywalker descubrió al verdadero culpable, la amiga de Tano y también Padawan Barriss Offee, de modo que evitó que Tano fuese condenada por sedición. Sin embargo, la actitud del Consejo Jedi hizo que Tano perdiese la fe en los Jedi. Ahsoka rechazó la oferta de unirse de nuevo a la Orden Jedi y se marchó, en busca de un nuevo camino.

Luego de ayudar a las hermanas Trace y Rafa Martez, Bo-Katan Kryze dio con ella para pedirle que ayude a la Guardia de la Muerte a derrocar a Maul del trono de Mandalore. Ella, junto con el recien ascendido Comandante Rex y miembros de la 501, partieron a realizar el Asedio de Mandalore, en el cual lograron capturar a Maul, sin embargo, durante su regreso a Coruscant sintio que habia comenzado la Orden 66, y todos sus hombres se volvieron en su contra, incluyendo Rex. Luego de liberar a Maul para causar una distraccion y retirarle a Rex el biochip de modificación conductual, escaparon de su nave poco antes de que se estrellara, pasando ambos a la clandestinidad.

Después de que el Imperio Galáctico llegara al poder, Ahsoka pasó a la clandestinidad en Thabeska y Raada. Tras la evacuación de Raada, Ahsoka se unió al creciente movimiento rebelde del senador Bail Organa. Se convirtió en la líder de su red de inteligencia y adoptó el nombre en clave de «Fulcrum». Como Fulcrum, Ahsoka proporcionó inteligencia a varias facciones rebeldes incluyendo los Espectros de Hera Syndulla. Ahsoka tomó un interés particular en la célula rebelde de Syndulla debido a que uno de sus miembros, un antiguo Jedi llamado Kanan Jarrus, había comenzado a entrenar a su propio Padawan, Ezra Bridger. Además, los esfuerzos de Tano contra el Imperio la pusieron en contacto con Skywalker, quien por entonces se había convertido en el Señor Oscuro de los Sith Darth Vader, así como los inquisidores imperiales conocidos como el Quinto Hermano y la Séptima Hermana. Después de una misión en Malachor Ahsoka se perdió entre los restos y sombras de un Templo Sith y se creía muerta por muchos por muchos, incluyendo a Jarrus y Bridger, tras batirse en duelo con Darth Vader.

Sin embargo, Ahsoka fue salvada inesperadamente de Darth Vader por un Ezra Bridger del futuro, quien la arrastró a través de un portal hacia el Mundo entre mundos, una dimensión de la Fuerza que conectaba todo el tiempo y el espacio. Después de una confrontación con Darth Sidious, quien deseaba acceder a esa dimensión, Ahsoka regresó a su tiempo, prometiendo a Bridger que le buscaría en cuanto regresara. Tras el final de la Guerra Civil Galáctica, en el 4 DBY, Ahsoka volvió a un Lothal liberado y se unió a Sabine Wren en su búsqueda del desaparecido Ezra Bridger, quien había desaparecido durante la Liberación de Lothal. Más adelante, Tano viajó a la ciudad de Calodan en el planeta boscoso Corvus buscando información del paradero del Gran Almirante Thrawn, quien había desaparecido junto a Bridger, de manos de la Magistrada Morgan Elsbeth. Necesitando rescatar la ciudad del dominio de Elsbeth, en el 9 DBY se alió con el mandaloriano Din Djarin, que buscaba entregar al niño sensible a la Fuerza Grogu a los Jedi. Tras liberar Calodan, Tano rechazó entrenar a Grogu y envió a Djarin al planeta Tython. Posteriormente visitó a Luke Skywalker en su nuevo Templo Jedi y, cuando Skywalker asumió el cuidado de Grogu tras ser convocado por una piedra vidente, supervisó su entrenamiento del niño temporalmente.

Décadas después de la búsqueda de Tano, su voz se unió a una multitud de espíritus Jedi para guiar a la joven Jedi Rey durante la última batalla de la Guerra Primera Orden-Resistencia. Ahsoka inspiró a Rey para que se enfrentara al resucitado Darth Sidious y lo destruyera de una vez por todas.

Biografía

Vida temprana

«Fue el Maestro Plo Koon quien me encontró y me llevó al Templo, mi hogar...»
―Ahsoka Tano a Anakin Skywalker[fuente]
Plo discovers Ahsoka

Plo Koon descubre a Ahsoka Tano en Shili.

Ahsoka Tano fue una togruta nacida en el planeta Shili en el 36 ABY. En el 33 ABY,[2] Ahsoka Tano fue descubierta por el Maestro Jedi Plo Koon entre su gente en el planeta Shili[1] y con tres años de edad fue aceptada en la Orden Jedi.[2] Alrededor de ese tiempo, casi fue esclavizada por un impostor que interceptó la señal de la Orden Jedi y esperaba usar sus poderes para sus propios fines. Sin embargo, su engaño fracasó, y Tano inició su vida como Jedi.[8] Igual que todos los Jedi de su era, fue criada en el Templo Jedi de Coruscant.[11]

Guerras Clon

Batalla de Christophsis

«Reconozco que Ahsoka aún está por pulir, pero con un poco de entrenamiento… y paciencia… podría llegar a algo.»
―Anakin Skywalker[fuente]

Tano era una talentosa estudiante y fue ascendida al rango de Padawan antes de lo normal por el Gran Maestro Jedi Yoda con sólo catorce años,[2] siendo asignada al Caballero Jedi Anakin Skywalker en un intento de poder inculcar a Skywalker un mayor sentido de la responsabilidad.[6]

R2-D2 Anakin and Obi-Wan meet Ahsoka

Ahsoka conoce a Anakin Skywalker, Obi-Wan Kenobi y R2-D2 en Christophsis.

El Consejo Jedi esperaba que a medida que Tano se fuese haciendo más independiente, Skywalker aprendiera a dejar atrás su problemático sentimiento de apego hacia los demás.[12] Ellos enviaron a la Padawan al planeta Christophsis para que se uniera a Skywalker, esperando que ayudase en la batalla y llevase el mensaje de que Obi-Wan Kenobi y Skywalker debían regresar al Templo Jedi. Aunque se suponía que Ahsoka iba a ser la nueva Padawan de Kenobi, ella reveló que había sido asignada a Skywalker.[6]

Desafortunadamente, el general separatista Whorm Loathsom había activado un escudo deflector y tenía a su ejército droide avanzando tras él, haciendo inútil el uso de cañones. El Maestro Skywalker y su nueva Padawan planearon cómo infiltrarse en el escudo y destruir su generador. Se escondieron bajo una caja y esperaron a que los droides y tanques pasasen ante ellos sin que se diesen cuenta de su presencia. Por desgracia, chocaron accidentalmente con un droideka. Tano intentó luchar, pero Skywalker insistió en correr. Mientras corrían, Skywalker dijo a Ahsoka repentinamente que parase, dándole la oportunidad de partir en dos al droide que corría tras ella mientras pasaba por su lado. Cuando llegaron al generador, Tano pisó sin querer unos sensores, alertando a droides repetidores de su presencia. Skywalker distrajo a los droides mientras Tano colocaba cargas explosivas en el generador. Uno de los droides se le acercó por detrás, pero Ahsoka fue capaz de destruirlo con su sable de luz.[6]

Christophsismeeting

Tano se reúne con Yoda tras la Batalla de Christophsis.

Sin embargo, el cuerpo del droide rodó sobre más sensores, alertando a más de los droides. Viendo a su Maestro en inferioridad numérica, Ahsoka se fijó en que los droides y Anakin estaban al lado de una pared con un agujero en el centro. Tano usó la Fuerza para tirar la pared, de modo que Skywalker pasó a través del agujero, y los droides que se encontraban a su alrededor quedaron aplastados. Luego, Tano activó las cargas, destruyendo el generador, y permitiendo a la artillería destruir a legiones de droides que estaban atacando a las tropas de soldados clon de la República Galáctica.[6]

A pesar de que inicialmente Skywalker se negó a tomar un Padawan, él y Tano entablaron amistad rápidamente, lo que dejó a Yoda pensando si la responsabilidad de entrenar a un Padawan podría terminar calmando los impulsos de Skywalker, o si los incrementaría.[6]

Batalla de Teth

Ahsoka: «Pero la parte difícil ha terminado, ¿verdad? Quiero decir, hemos escalado un precipicio bajo fuego enemigo y destruido un batallón de droides o algo así.»
Rex: «Me temo que no, pequeña, la parte difícil no terminará hasta que pongamos los pies sobre suelo de la República de nuevo, preferiblemente con el Huttito a bordo. »
— Ahsoka Tano y el capitán Rex [fuente]
Ahsoka vs Ventress Teth

Ahsoka se enfrenta a Ventress en Teth.

Después de la Batalla de Christophsis, se encargó a Anakin Skywalker y a Ahsoka la tarea de encontrar al hijo secuestrado de Jabba el Hutt, Rotta, al cual los exploradores de la República Galáctica habían localizado en el planeta Teth. El éxito de su misión era vital para completar las negociaciones de Obi-Wan Kenobi con Jabba para usar las rutas comerciales de los Territorios del Borde Exterior vitales para el esfuerzo bélico. De camino a Teth, Tano explicó a los soldados clon como ella había salvado a Skywalker de los droides repetidores. Al llegar a Teth, se vio que era imposible aterrizar en el Monasterio B'omarr donde Rotta estaba siendo prisionero, lo que forzó a las fuerzas de la República a aterrizar en otro lugar. La única forma de llegar al monasterio era escalando las paredes verticales del acantilado sobre el que se encontraba. Skywalker y Ahsoka se tomaron el ascenso una carrera y empezaron a escalar hasta la cima.[6]

Tano se subió a un andador AT-TE, y lo defendió del fuego de droides araña enanos cuando su artillero fue asesinado. Varios STAPs casi hicieron que el andador perdiese el equilibrio, pero Skywalker robó uno de ellos y llegó a la cima, ganando la carrera a su aprendiz. Una vez arriba, Tano usó el cañón del AT-TE para salvar a su maestro de tres droidekas.[6]

Después de asegurar el Monasterio, descubrieron a un droide de protocolo guardián llamado 4A-7, que les informó de que Rotta estaba encerrado en las mazmorras. Después de destruir a unos cuanto droides de combate, los Jedi encontraron a Rotta, descubriendo que no era más que un bebé, y Tano pensó que era "una monada". Por desgracia, mientras intentaba cargar con Rotta — a quien Ahsoka llamó "Apestosito" —en una mochila, una grabación de sus acciones fue tomada por 4A-7, que en realidad era un sirviente de la Acólita Oscura Asajj Ventress. La asesina transmitió la grabación al Conde Dooku, para que convenciese a Jabba de que los Jedi habían sido quienes secuestraron a Rotta.[6]

Con un ejército de droides enviado para recuperar la custodia de Rotta, los Jedi tuvieron que encontrar una alternativa para salir del planeta, ya que Rotta estaba enfermo. Los dos Jedi vieron una plataforma de aterrizaje secundaria en el monasterio. Allí, Tano tuvo un breve duelo con Ventress antes de que su Maestro la subiese encima de un can-cell, escapando los dos seguidos por el droide astromecánico R2-D2. En poco tiempo, descubrieron una nave llamada Crepúsculo, con 4A-7 en su rampa. Cuando varios droides de combate descendieron por la rampa, fue obvio para Tano que 4A-7 era un espía. La Padawan consiguió eliminar a los droides y decapitó a 4A-7.[6]

Anakin y Ahsoka tripularon la nave e intentaron aterrizar en el Destructor Estelar clase Venator Espíritu de la República, pero su hangar fue destruido antes de su intento de aterrizaje. Sin ninguna otra opción, los Jedi viajaron directamente a Tatooine a bordo del Crepúsculo. Durante el viaje, Tano pudo tratar a Rotta con la medicina de a bordo de la nave, salvando su vida.[6]

Duelo en Tatooine

«Ser Padawan es más duro de lo que creía. »
―Ahsoka, tras derrotar a tres MagnaGuardias[fuente]
AhsokaVsMagna Tatooine

Ahsoka lucha contra tres MagnaGuardias.

El Crepúsculo llegó al planeta natal de Anakin Skywalker, Tatooine, pero la nave fue atacada por magnaguardias IG-100 y se estrelló. Los Jedi sobrevivieron a la caída y viajaron por el Mar de Dunas hacia el Palacio de Jabba. Tano deseó conocer más de la vida de su maestro en su planeta natal, pero él no quiso hablar de ello. Durante el camino, tanto Tano como Skywalker percibieron que les habían tendido una trampa. Por eso, Tano se separó de su Maestro, llevándose con ella a Rotta. Luego, mientras Anakin se enfrentaba al Conde Dooku, Tano se vio forzada a luchar contra tres magnaguardias.[6]

Aunque le fue difícil, Ahsoka fue capaz de derrotar a los MagnaGuardias y llevar a Rotta hasta su padre antes de que Jabba pudiese ejecutar a Skywalker, bajo la falsa creencia de que los Jedi habían matado a su hijo. Sin embargo, Jabba creía que los Jedi le seguían utilizando y ordenó matarlos. Por suerte, en el último momento, la senadora Padmé Amidala de Naboo apareció vía holograma con pruebas de que el tío de Jabba, Ziro Desilijic Tiure, era responsable del secuestro de Rotta. Una vez se supo la verdad, Jabba prometió a la República Galáctica paso seguro por sus territorios del Borde Exterior, y los Jedi prometieron que llevarían a Dooku ante la justicia. A su vez, Ziro sería castigado por los Hutts. Momentos después, Tano y Skywalker fueron contactados por Obi-Wan Kenobi y Yoda.[6]

El Malevolencia

«¡Esperad! Que antes no haya habido supervivientes no significa que esta vez no los haya.»
―Ahsoka al Canciller Supremo Palpatine y al Consejo Jedi[fuente]
Ahsoka speaks out

Tano interrumpe en una reunión con el Consejo Jedi y el Canciller Supremo Palpatine.

Algún tiempo después, se difundió la noticia de la existencia de un arma separatista secreta que había destruido más de una docena de buques de guerra de la República Galáctica, sin dejar supervivientes. Plo Koon, el Jedi que había traído a Tano al Templo Jedi durante su infancia, fue al sistema Abregado con tres cruceros de ataque para localizar el arma. La flota de Anakin Skywalker estaba estacionada en el sistema Bith en ese mismo momento, con Tano acompañando a su maestro. Koon se puso en contacto con ellos y, tras dar una cálida bienvenida a Tano, reveló a Skywalker la amistosa relación que mantenían ambos. Las comunicaciones, sin embargo, fueron cortadas cuando el Malevolencia se acercó a la pequeña flota de Koon. Skywalker contactó con el Consejo Jedi, para informarles de la situación. Las fuerzas de Plo parecían haber sido destruidas, y al Maestro Koon se le daba por muerto. El maestro Mace Windu asignó al equipo de Skywalker proteger una serie de convoyes vitales, pero Tano, que no quería aceptar la muerte de su viejo amigo, interrumpió para instar al Consejo a ir en busca del Maestro Koon. Sin embargo, Ahsoka fue regañada por su arrebato impulsivo e impetuoso, y después de la conferencia, Skywalker la reprendió por haber hablado fuera de lugar. Skywalker ordenó al almirante Wullf Yularen desplegar a un equipo para la protección de los convoyes frente a la amenaza de cualquier enemigo, mientras que él y Tano volaron en el Crepúsculo para "reconocer el terreno".[13]

El Crepúsculo llegó al Sistema Abregado, pero en lugar de buscar el arma secreta, Skywalker ordenó a R2-D2 calibrar los sensores para buscar formas de vida. Skywalker había incumplido sus órdenes para buscar a Plo Koon, para sorpresa de Tano. Skywalker explicó a su Padawan que él siempre había tenido la intención de buscar supervivientes, pero que estaba tratando de enseñar a Tano una lección sobre el uso de la discreción. Skywalker había elegido interpretar creativamente sus órdenes, en lugar de oponerse totalmente a ellas tal como Tano había hecho. Ambos registraron un campo de escombros sin suerte y poco después, Obi-Wan Kenobi se puso en contacto con ellos, diciéndoles que regresaran con su flota. Cuando estaban a punto de dar la vuelta, R2-D2 captó una señal de socorro y decidieron continuar la búsqueda.[13]

Jedi discover the Malevolence

Tano, Skywalker y Plo Koon descubren al Malevolencia.

Luego, el Canciller Supremo Sheev Palpatine contactó con los dos Jedi, ordenándoles que escucharan al Consejo Jedi y se reuniesen con los convoyes. Sin embargo, justo cuando estaban a punto de regresar, Tano sintió la presencia del Maestro Koon y empezó a pilotar el Crepúsculo hacia él. Ella y Skywalker se encontraron con que el Maestro Koon y tres de sus clones eran los únicos supervivientes del ataque, y los llevaron a bordo del Crepúsculo, proporcionando atención médica inmediata para los clones heridos: el comandante clon CC-3636 "Wolffe" y los soldados Sinker y Boost.[13]

Koon les informó de que el arma secreta que los Separatistas estaban usando era un cañón de iones capaz de desactivar todos los sistemas electrónicos, dejando a las naves completamente indefensas. En ese momento, el Malevolencia apareció, obligándoles a apagar todos los sistemas antes de que pudiera detectarles. Sin embargo, se olvidaron de apagar el droide médico, TB-2. El droide fue detectado por el Malevolencia, que respondió disparando su cañón de iones. El Crepúsculo logró escapar de la ola de iones saltando al hiperespacio, escapando con el conocimiento de cómo era el arma separatista que hasta el momento había sido secreta.[13]

AhsokaR2Ywing

Ahsoka Tano y R2-D2 durante el ataque al Malevolencia.

Poco después, Skywalker ideó un plan para utilizar unos cazas estelares ala-Y BTL-B recién adquiridos en un audaz ataque al Malevolencia, centrándose principalmente en la destrucción del general separatista Grievous para garantizar una resolución más rápida de la guerra. La República Galáctica dedujo que la súper arma separatista se dirigía al Centro Médico de la Nebulosa Kaliida, donde eran atendidos más de 60.000 clones heridos. En un intento de llegar allí antes que Grievous, la fuerza de ataque se abrió camino a través de la Ruta de Balmorra. Sin embargo, la pequeña fuerza no había contado con encontrarse con mantas Neebray.[14]

Después de apenas escapar con vida de la nebulosa, el equipo de ataque entró en combate contra el Malevolencia, sufriendo varias bajas. Cuando se hizo evidente que el plan original fallaría, Tano, actuando como artillera de su maestro, sugirió un cambio de táctica. De acuerdo con su sugerencia, el maestro Koon ideó un plan de ataque. Los cazas restantes dispararon contra uno de los cañones de iones, que estaba recargándose, haciendo que se sobrecargara, y destruyendo así tanto el puerto como las superarmas de estribor. Después de la destrucción de los cañones de iones, el maestro Kenobi llegó al sistema con tres naves de la República e inició la persecución del Malevolencia, que huía.[14]

All batteries open fire

Tano, Koon y Yularen a bordo del Resuelto.

Debido a que el Malevolencia era capaz de soportar un intenso fuego enemigo, gracias a su inmenso tamaño, de los Maestros Kenobi y Koon, así como Skywalker y Tano contactaron con la Maestra Jedi Luminara Unduli para solicitar refuerzos, aunque la Maestra Jedi mirialana fue incapaz de ayudar debido a que ella misma estaba inmersa en una escaramuza con una flota separatista. A medida que continuaba la batalla, Tano descubrió que una pequeña nave de Naboo había entrado en el sistema; a bordo no iba otra persona que la senadora Padmé Amidala de Naboo, quien pensaba que había sido enviada en una misión diplomática en la región.[15]

Por desgracia, la senadora fue atrapada por el rayo tractor del Malevolencia y fue llevada cautiva a bordo del mismo. Mientras Skywalker y Kenobi emprendían una misión para rescatar a Amidala, Tano se quedó con las fuerzas de la República para ayudar al Maestro Plo Koon. Pronto, el pequeño grupo escapó del Malevolencia con la senadora. A bordo del Malevolencia, Skywalker había reiniciado el ordenador de navegación de la nave para hacer que se chocara contra una luna cercana, destruyéndola y eliminando la amenaza separatista.[15]

La desaparición de un droide

«¡Maestro, te han traído a tu droide astromecánico sustituto! Te presento a R3-S6. He oído que los nuevos R3 son más rápidos procesando y más resistentes que las antiguas unidades R2.»
―Ahsoka presenta a R3-S6 a Anakin Skywalker[fuente]
Anakin Ahsoka and R3-S6 search for R2-D2

Anakin, Ahsoka y R3-S6 buscando a R2-D2.

Después de que la República Galáctica sufriese una serie de derrotas a manos del general Grievous, Tano se encargó de participar en la defensa del planeta Bothawui junto con su maestro y su batallón. Tano comandó la nave insignia de la República, a la vez que su maestro lideraba un asalto con cazas estelares. Aunque la República logró repeler a Grievous, la nave de Anakin Skywalker fue destruida en la batalla, y a pesar de que se logró rescatar a Skywalker, nadie encontró a R2-D2 en el caza. Skywalker estaba convencido de que R2-D2 había sobrevivido a la destrucción de la nave, por lo que él y Tano emprendieron una misión con el objetivo de recuperarlo.[16]

Tano insistió en el uso del droide R3-S6 como sustituto de R2, especialmente después de que ella y su maestro hubiesen fallado en recuperar a R2-D2. Más tarde, Skywalker participó en una misión para descubrir un puesto de escucha utilizado por Grievous. Sin embargo, debido a la incapacidad de R3, se encontró en graves problemas. Afortunadamente, la oportuna intervención de Tano y Rex a bordo del Crepúsculo aseguró que Skywalker se salvara.[16]

Misión a la Estación Skytop

Anakin: «¡Fue una tontería que te enfrentases a Grievous tú sola!»
Ahsoka: «Bueno, yo estaba al mando de la misión, ¡y me pareció que esa era la mejor opción!»
— Skywalker y Tano [fuente]
Ahsoka vs Grievous

Ahsoka lucha contra el General Grievous.

Todavía buscando a R2-D2, Ahsoka y Anakin Skywalker siguieron una pista acerca del droide astromecánico y llegaron a la Estación Skytop, un puesto de escucha usado por el general Grievous. Al llegar a la estación con el objetivo de destruirla, Skywalker se separó de Tano y dejó una pequeña fuerza de clones bajo el mando de Ahsoka, con la tarea de colocar cargas explosivas y destruir los reactores de la estación, mientras él buscaba a R2-D2. Tano se encontró cara a cara con el mismísimo general Grievous, que pilló al grupo por sorpresa. Después de salvar al Capitán Clon Rex de un ataque de Grievous, Tano se enfrentó al cíborg en un breve duelo, aislándolo de los clones. A pesar de ser una Padawan, se distinguió por ser una de las escasas personas que fueron capaces de luchar con el cíborg y sobrevivir. Ahsoka descubrió más tarde que R3-S6 era un droide separatista bajo las órdenes del general.[17]

R3-S6 delató a Tano cuando se escondió de Grievous, después de que el general hubiera demostrado a la Padawan que era demasiado fuerte para ella. Grievous agarró a Tano por el cuello, cogió su sable de luz y le dijo que lo añadiría a su colección. Cuando Grievous se distrajo por la detonación de las cargas de los clones, Tano pudo cortar la mano derecha del cíborg, usar la Fuerza para recuperar su sable de luz, y escapar a través del conducto de ventilación. Tano fue hasta el hangar, dónde ayudó a su Maestro y a los clones a luchar contra superdroides de combate B2 y la legión Vuelo 88. Después de que R2-D2 hubiese conseguido llegar al hangar dónde el Crepúsculo estaba preparándose para escapar, Tano, Skywalker, y los clones huyeron justo antes de que la estación estallara alrededor de la órbita de una de las lunas de Ruusan. Más tarde, Tano observó junto a Rex como Skywalker se dirigía a su caza personal para reparar a R2.[17]

Captura de Gunray

Ahsoka: «Mira por dónde, la harpía calva.»
Ventress: «Si es la sucia y desagradable mascota de Skywalker.»
Ahsoka: «Qué bueno por tu parte. Te diré una cosa, voy a darte una muerte misericordiosa.»
— Tano y Ventress intercambian insultos[fte.]
AsajjAhsoka focus

Ahsoka se enfrenta a Ventress a bordo del Tranquilidad.

Más tarde, Tano fue asignada a la nave de Luminara Unduli para proteger al virrey de la Federación de Comercio Nute Gunray, que había sido capturado en Rodia. Durante el interogatorio de Gunray, Tano amenazó al virrey, recibiendo una reprimenda de Unduli. Cuando la nave de Luminara fue abordada por superdroides de combate, Tano permaneció junto a la celda de Gunray, mientras Unduli luchaba con los droides.[18]

Al cabo de un rato, Tano se enfrentó a Asajj Ventress cuando la asesina Sith irrumpió en el bloque de detención para liberar a Nute Gunray. Sin embargo, Tano fue engañada y terminó encerrada en la celda de Gunray. A continuación, Unduli vino a rescatarla, y brevemente las dos lucharon juntas contra Ventress. Unduli insistió en perseguir a Asajj por sí sola, a pesar de las advertencias de Tano de proseguir juntas. Finalmente, Tano decidió ir a ayudar a la Maestra Jedi, y las dos volvieron a combatir de nuevo contra Asajj. A pesar de que el capitán Faro Argyus traicionó a la República Galáctica y rescató con éxito a Gunray junto a la asesina dathomiriana, Ahsoka y Luminara pudieron hacer un seguimiento de la nave en la que los fugitivos habían escapado. Tano habló con su maestro, quien le dijo que se reuniese con él en un punto de encuentro, y acudió a él después de despedirse de Unduli. También informó al Maestro Jedi Kit Fisto sobre el posible paradero de Gunray.[18]

Captura de Dooku

«Oh, ya veo. ¿Qué parte de la situación teníais bajo control? ¿La entrada bloqueada? ¿El gas venenoso? ¿O ese gundark que tenéis detrás?»
―Ahsoka duda de Anakin Skywalker y Obi-Wan Kenobi[fuente]

Cuando Anakin Skywalker partió en busca del Conde Dooku para arrestarlo, él y Obi-Wan Kenobi contactaron con Tano para que dirigiera un ataque contra la fragata de Dooku desde el Resuelto. Después, tras un aterrizaje forzoso en el planeta Vanqor, los dos Jedi quedaron atrapados en el interior de una cueva. Ahsoka los rescató desbloqueando la entrada de la cueva para dejarlos salir, y ordenó a los soldados clon sellar la cueva de nuevo en cuanto vio que un gundark avanzaba hacia ellos desde dentro de la cueva. Luego, cuando la República Galáctica quiso negociar un acuerdo con los piratas establecidos en el planeta Florrum para obtener la custodia de Dooku, Skywalker y Kenobi fueron allí para confirmar la presencia del Conde. Ambos fueron capturados, pero posteriormente escaparon con la ayuda de Jar Jar Binks.[19]

Reanimando a Skywalker

Aayla Secura: «No se deben arriesgar mil vidas para salvar a una sola.»
Ahsoka Tano: «Es posible, pero eso no significa que no vaya a intentar salvar su vida.»
— Aayla Secura y Ahsoka Tano [fuente]
Aaylaanakinashoka

Aayla y Ahsoka atienden a Skywalker, gravemente herido.

Más adelante, Ahsoka y Anakin Skywalker acudieron a bordo del Resuelto a ayudar a la Caballera Jedi Aayla Secura, cuyo crucero estaba siendo fuertemente atacado por fragatas clase Munificente separatistas. Tano, Skywalker, Rex y un pelotón de soldados clon se dirigieron a la nave de Secura a ayudar en cañoneras LAAT. Skywalker utilizó varios droides cohete como escalones para entrar en la nave de Secura, mientras Tano, Rex y los soldados llegaron en cuanto su nave de combate fue derribada y penetró el casco del destructor de Secura. El crucero había sufrido grandes daños, y no tuvieron más remedio que escapar de su inminente destrucción mediante el uso de un crucero clase Consular atracado. De camino a su transporte de huida, vieron una explosión acercarse a ellos, y Skywalker utilizó un empujón de la Fuerza para tirar a los demás hacia delante mientras él mantenía a raya la explosión y cerraba unas puertas blindadas con la Fuerza. Sin embargo, la explosión destrozó las puertas, llevándose a Skywalker por delante pero dejando a los demás a salvo. Después, Tano logró subir a un inconsciente Skywalker a bordo de la nave de escape junto con la ayuda de Secura. No obstante, antes de que pudieran acoplarse al Resuelto, un grupo de droides buitre noqueó al piloto y accionó accidentalmente el hiperimpulsor. Afortunadamente, el Resuelto logró maniobrar a tiempo para no chocar contra otras naves, y la fragata saltó al hiperespacio.[20]

Al entrar en el hiperespacio, el comandante clon CC-5052 "Bly", Secura, Tano y Rex se dieron cuenta de que las coordenadas no se habían establecido correctamente en el ordenador de navegación antes de que se activase el hiperimpulsor, enviándolos directos hacia una estrella cercana. Secura ordenó apagar todos los sistemas de energía para reiniciar el ordenador de navegación. Tano protestó ya que, hacerlo, supondría apagar el respirador de Skywalker, pero fue convencida por Secura de que de otra manera no podrían sobrevivir. Después de apagar y reiniciar los sistemas de la nave, Tano logró mover la nave alrededor de la estrella, pero por causa de la tasa de velocidad a la que iban, la nave se puso en curso de colisión contra un planeta cercano, llamado Maridun. Tano mantuvo con éxito a todos los ocupantes vivos con sus maniobras, a pesar del daño que el buque sufrió debido al aterrizaje forzoso, cosechando elogios por sus habilidades de pilotaje de Secura.[20]

Ahsoka Lurmen village

Tano, Secura y Bly llegan a una aldea lurmen en Maridun.

Una vez tuvieron asentado el campamento, decidieron buscar ayuda para Skywalker y encontraron pruebas de vida inteligente en Maridun en forma de una tabla con el dibujo de un gran árbol tallado en ella. Tano se ofreció a quedarse atrás; pero, Secura decidió que ambas tenían que trabajar juntas. Rex tranquilizó a Tano y aseguró que montaría guardia para proteger a Skywalker mientras los demás iban a buscar ayuda. Mientras estaba con Secura, Tano aprendió de la maestra twi'lek que el Código Jedi prohibía tener apegos personales, pero ella le habló de su apego a Skywalker. Secura respondió hablando a Tano de su apego a su antiguo maestro, Quinlan Vos. Secura dijo a la togruta que por el bien mayor, tuvo que dejar de lado a su maestro. Después de perder a tres soldados clon tras los ataques de animales nativos, los Jedi encontraron un poblado lurmen, que se había establecido en el planeta para escapar de la guerra. Aunque su líder, Tee Watt Kaa se mostró inflexible en que no participarían en el conflicto de la República Galáctica con los separatistas, accedió a dar a Skywalker atención médica. El hijo de Watt Kaa, llamado Wag Too, acompañó a Tano y a Bly para ir a buscar al maestro de Tano. Llegaron al campamento a tiempo para salvar a Skywalker y a Rex de unos agresivos mastiff phalones. Después de traer a Skywalker de vuelta a la aldea para que Wag Too lo tratara, Ahsoka admitió a Secura que si se hubiera quedado con su maestro, nunca habrían encontrado la aldea a tiempo para salvarlo.[20]

Batalla de Maridun

Rex: «No entiendo por qué esos aldeanos no quieren pelear. No tienen orgullo.»
Ahsoka: «Yo diría que les falta coraje. »
Aayla Secura: «A veces hace falta valor para defender tus propios principios, joven padawan. Como todo Jedi bien sabe.»
— Rex, Ahsoka y Secura hablan de la conducta pacifista de los lurmens.[fte.]

Mientras Anakin Skywalker se estaba curando sus heridas, una nave separatista apareció en Maridun, y los Jedi y los clones se vieron obligados a huir para que los lurmens no fueran asesinados debido a su presencia. Tano no podía entender la aversión de los lurmens a la lucha, pero Aayla Secura le dijo que requería coraje seguir las creencias de uno mismo. Momentos después, un droide sonda los descubrió, y aunque Tano, Rex y Bly salieron a toda prisa a darle caza, Secura fue capaz de destruirlo antes. Al subir a un árbol, el grupo descubrió que los separatistas habían establecido una base, y que iban a probar una nueva arma usándola contra la colonia lurmen. Esa noche, el grupo cortó las comunicaciones de los separatistas y les robaron un lanzadera de transporte, pero en lugar de abandonar el planeta, regresaron a la colonia lurmen. Tee Watt Kaa se mostró inflexible en su decisión de no recibir la ayuda de los Jedi, pero Skywalker logró convencerlo para que permitiera a los Jedi defender la aldea.[21]

Ahsoka Maridun

Ahsoka luchando en Maridun.

Los Jedi activaron un escudo deflector alrededor del poblado, y fueron capaces de resistir la nueva arma separatista. Ahsoka y los demás consiguieron derrotar a la primera oleada de droides, pero la segunda era mucho más numerosa, y los androides lograron superar los Jedi y destruir los generadores de escudo. El general Lok Durd ordenó recargar su arma, pero antes de que pudiera dispararla, Skywalker llegó hasta ella y la destruyó. Mientras tanto, Wag Too combatió a los droides en contra de los deseos de su padre,atando a los droides restantes con una cuerda. Luego, Tano fue capaz de destruir a los ya desarmados droides. Más tarde, cuando los Jedi se preparaban para marcharse, Wag Too dio los Jedi su agradecimiento. Tee Watt Kaa también expresó su agradecimiento, pero se preguntó a qué precio habían defendido su aldea. Poco después, el Resuelto y otros dos destructores de clase Venator salieron del hiperespacio, ya que el almirante Wullf Yularen había sido capaz de encontrar a los Jedi por su cuenta.[21]

Misión a Naboo

«Por cierto, tu Padawan estuvo brillante.»
―Padmé Amidala sobre el rendimiento de Ahsoka en la misión[fuente]
AhsokaVindi'sLab-MoaTM

Tano comienza a notar los efectos del Virus Sombra Azul.

El Consejo Jedi envió más tarde a Tano, junto con Anakin Skywalker y Obi-Wan Kenobi a Naboo, en respuesta a una información que sugería que un bio-laboratorio separatista se había establecido en el planeta. Cuando el contacto con la senadora Padmé Amidala y el representante Jar Jar Binks, que habían comenzado la búsqueda del laboratorio, se perdió, Skywalker envió a Tano junto con la nativa gungan Peppi Bow a localizarlos.[22]

Mientras buscaban en el pantano donde desaparecieron Binks y Amidala, las dos encontraron accidentalmente una cámara espía. Mientras se escondía de la cámara, Tano contactó con Skywalker y Kenobi, quienes le ordenaron que detonara una bomba en el búnker del sur para crear una distracción. Ella levitó un detonador termal usando la Fuerza y lo dejó caer justo en la escotilla del búnker. Tano dijo a Bow que se quedase fuera del laboratorio y no dejase pasar a nadie, mientras ella entraba en el laboratorio. Una vez dentro de él, actuó como una distracción ante los droides de combate para que la persiguiesen a ella y permitir así a Skywalker vía libre para rescatar a Amidala y Binks, lo que finalmente fue conseguido. Por suerte, los Jedi también fueron capaces de capturar al doctor Nuvo Vindi, el científico responsable del laboratorio, y lograron evitar la liberación del mortal Virus Sombra Azul.[22]

Ahsoka Blue Shadow Virus

Ahsoka se debilita a causa de los efectos del Virus Sombra Azul.

Mientras Kenobi y Skywalker se preparaban para llevar a Vindi a Coruscant, Tano, Amidala y varios clones se quedaron en el laboratorio para asegurarlo, sólo para descubrir que una bomba con el virus había desaparecido. A pesar de que fueron capaces de hacer dar la voz de alarma, no recuperaron la bomba a tiempo, y un droide personal de Vindi fue capaz de detonarla y soltar el virus por todo el laboratorio. Afortunadamente, Amidala y Binks llevaban puesto un traje seguridad en ese mismo momento y pudieron evitar la infección, aunque Tano y los clones que estaban con ella no tuvieron tanta suerte. A pesar de enfermar gravemente, Tano ayudó a Amidala a purgar el laboratorio de la presencia de droides de combate que querían salir al exterior para expandir el virus por todo Naboo. Durante esa misión, la propia Amidala se infectó por el virus cuando su traje de seguridad se rompió.[23]

Momentos antes de que Tano sucumbiera a los efectos del virus, Skywalker y Kenobi regresaron con el antídoto que habían adquirido en el planeta Iego, y consiguieron curar a Tano, Amidala y a la mayoría de los clones.[23]

Batalla de Ryloth

Rompiendo el bloqueo
Skywalker: «Fue una trampa, Chulita. No fue culpa tuya.»
Ahsoka: «Maestro, perdí a muchos de mis pilotos.»
Skywalker: «No te desanimes. Esa es la realidad de estar al mando.»
— Anakin Skywalker y Ahsoka Tano[fte.]
Anakin Ahsoka Storm Over Ryloth

Anakin intenta aumentar la confianza de Ahsoka en sí misma.

Después de que el líder de la Tecno Unión, el Emir Wat Tambor, tomase el control del planeta Ryloth y sus habitantes, el Consejo Jedi envió a Anakin Skywalker y a Ahsoka a destruir el bloqueo que rodeaba el planeta, para despejar el camino para las fuerzas invasoras lideradas por Mace Windu y Obi-Wan Kenobi. Tano, y su nuevo droide astromecánico, R7-A7, lideraron un escuadrón por primera vez, el Escuadrón Azul. Ahsoka guió a su escuadrón al salir del Resuelto y todos procedieron a atacar a los droides buitre entrantes, logrando abrirse paso directamente al Procurer. Sin embargo, después de que llegaran refuerzos separatistas, Ahsoka desobedeció una orden directa del almirante Wullf Yularen y Skywalker de retirarse. Los droides buitre comenzaron a atacar al Resuelto en carreras suicidas, y Tano regresó, pero perdió a la mitad de su escuadrón en el camino. Después de que las fuerzas de la República Galáctica se retirasen, estuvo muy angustiada. Skywalker trató de consolarla, pero fue en vano. Más tarde, Tano fue a ver Yularen, que había quedado herido durante el ataque y estaba inconsciente en un compartimento médico, y tristemente se disculpó por su fracaso.[24]

Skywalker recibió órdenes de continuar con el plan a pesar de sus pérdidas. Tano, ahora decidida a no tomar el mando por causa de su fracaso anterior, cuestionó la confianza de Skywalker en ella, y Skywalker le ordenó volver a su dormitorio para que se calmara. Más tarde, las alarmas comenzaron a sonar, y Tano se enteró gracias a un soldado clon que pasaba por su lado de que la nave había recibido la orden de evacuar. Al llegar al hangar del Resuelto, se encontró con que Skywalker había ideado un plan para pilotar el Defensor él solo y embestir contra la nave de control principal enemiga, dejando así fuera de combate a los droides a cargo del bloqueo. Tano quedó abrumada, ahora se sentía más presionada con la responsabilidad adicional de asegurar la vida de su Maestro, pero antes de que pudiera detenerle, Skywalker se fue al Defensor y la dejó al mando de las fuerzas restantes.[24]

Ahsoka y Tropas de la Legion 501

Ahsoka llega al puente de mando del Resuelto.

Ahsoka estaba indecisa sobre la elaboración de un plan para eliminar al bloqueo restante. Finalmente ideó un plan para que un ángulo del casco del Resuelto fuese hacia el bloqueo de cara a las naves agresoras, de forma que actuase como una pantalla que atrajese a los disparos enemigos y el puente de mando y el hangar quedasen relativamente protegidos de cualquier posible ataque. Así e podrían desplegar los bombarderos, más rápidos y veloces, y atacar las naves enemigas. El oficial de navegación del Resuelto dudaba del plan, pero la estratagema acabó recibiendo el apoyo del Almirante Yularen, ya recuperado. Después de que Skywalker embistiera con el Defensor la nave de mando principal del bloqueo y de que el general separatista Mar Tuuk huyese, el Resuelto salió del hiperespacio, Tano lideró a los cazas y bombarderos, y con éxito destruyó las fragatas restantes del bloqueo. Tres naves clase Acclamator salieron del hiperespacio, con la nave principal llevando a Obi-Wan Kenobi y Mace Windu a bordo. Kenobi conversó con Tano, y ella le informó de que tenían vía libre para aterrizar en el planeta. Obi-Wan se irritó por el imprudente plan de Skywalker, pero a pesar de ello se alegró de que hubiera funcionado. Tano despachó a Rex para enviar un servicio de transporte que recogiera la cápsula de escape en la que se encontraba Skywalker.[24]

Retomando la ciudad capital

Poco después de que el general Obi-Wan Kenobi destruyese varios cañones de protones permitiendo que las naves de la República Galáctica aterrizasen en Ryloth, Mace Windu se dirigió a la capital del planeta con sus fuerzas. Tano se unió a su maestro en un combate para destruir diversos bombarderos clase Hiena desplegados. Mientras Mace Windu se preparaba para atacar la ciudad con el twi'lek Cham Syndulla y la Resistencia Twi'lek, Maestro y Padawan se encargaron de los bombarderos, que estaban atacando a varias aldeas habitadas. Wat Tambor se quedó sin su lanzadera y su droide táctico TA-175, y a pesar de la presencia de Tambor, el Conde Dooku ordenó bombardear la ciudad de Lessu. Sin embargo, antes de que las fuerzas de la República Galáctica y los habitantes twi'leks fueran volados en pedazos, Skywalker y Tano llegaron justo a tiempo para destruir los bombarderos. Tambor fue capturado, y la República salió victoriosa: Ryloth fue finalmente libre una vez más.[25]

Felucia y castigo

Anakin Skywalker: «Maestros, todo este incidente es culpa mía. A pesar de las habilidades avanzadas de Ahsoka, olvidé lo joven que es. Le di más libertad de la que debía.»
Mace Windu: «Es posible. Pero eso no excusa lo que ocurrió en Felucia. Creo que necesita permanecer un tiempo alejada del campo de batalla.»
— Anakin Skywalker y Mace Windu discuten el castigo de Tano [fuente]

Mientras la guerra continuaba, las fuerzas de la Confederación de Sistemas Independientes, lideradas por el general Grievous, invadieron el planeta Felucia, en el Borde Exterior. Los Altos Generales Jedi Plo Koon y Obi-Wan Kenobi, el General Jedi Anakin Skywalker y su Padawan Ahsoka, dirigieron un asalto para contrarrestar la amenaza separatista. Las fuerzas de la República Galáctica hicieron frente a la Armada Confederada sobre el planeta y comenzaron a diezmar su avance. Sin embargo, las tropas de droides buitre causaron estragos entre las filas de la República. Por eso, llegaron unos pocos transportes de soldados clon a la superficie del planeta para apoyar a Kenobi y Skywalker en tierra. Mientras los droides de combate continuaban disparando a los soldados en tierra, el Plo Koon limpió el cielo de droides buitre dentro de su caza estelar. Mientras tanto, un fragmento de droide buitre cayó del cielo y aterrizó sobre uno de los caminantes AT-TE de la República Galáctica, destrozándolo. Al ver que las fuerzas de la República habían perdido gran parte de sus refuerzos, Kenobi dio luz verde a una retirada inmediata. No obstante, tanto Kenobi como Skywalker notaron que Tano se encontraba desaparecida. Tras ponerse en contacto con ella a través de su comunicador, Tano reveló que se había encontrado a otro grupo de droides de combate a 6 klicks al este de la ubicación de los Maestros Jedi, contra los que ahora estaba luchando. Kenobi le dijo que las fuerzas de la República se retiraban y que tenía que volver, pero la Padawan togruta se negó a ello y le dijo que había logrado abrirse paso a través de las defensas de los separatistas. Sin embargo, Skywalker y Kenobi aterrizaron sus cañoneras LAAT frente al Turbo Tanque Juggernaut de Tano, que gritó a Skywalker consternada. Skywalker la obligó a entrar en su cañonera. Una vez que las fuerzas de República estuvieron a bordo de las cañoneras LAAT, mientras se elevaban del suelo, las fuerzas dentro de ellas fueron testigos de la destrucción del Turbo Tanque de Tano y de sus refuerzos, lo que hizo que Ahsoka, finalmente, se diese cuenta de sus errores.[26]

Ahsoka and anakin

Anakin y Ahsoka en la Cámara del Consejo Jedi en Coruscant.

Después de salir de Felucia, las fuerzas de la República volvieron a Coruscant. Dentro de la Cámara del Alto Consejo del Templo Jedi, Skywalker y Tano se presentaron ante los Maestros Jedi Mace Windu y Yoda. Kenobi había proporcionado información al Consejo sobre lo que Tano había hecho en Felucia. Después de que Windu comunicase a la padawan la información que Kenobi les había proporcionado, Windu preguntó si estaba de acuerdo con las reivindicaciones de Kenobi. Ahsoka estuvo de acuerdo, y le dijo al Maestro Jedi que estaba arrepentida de sus acciones y que había estado obcecada. Skywalker defendió a su padawan, asumiendo la culpa de lo ocurrido al haber dado a Tano demasiada libertad; Sin embargo, Windu desestimó su reclamación. El Maestro Jedi anunció entonces que Tano estaría algún tiempo fuera del campo de batalla y se convertiría en guardiana de los Archivos Jedi, bajo la asistencia de la bibliotecaria Jedi Jocasta Nu. Skywalker y Tano pronto abandonaron la sala del Consejo y se dirigieron a los archivos. De camino a allí, Tano reflexionó sobre sus acciones y pidió disculpas a su maestro. Skywalker le dijo que él entendía lo que ella sentía, porque él también había sido un padawan hacía poco tiempo. El Caballero Jedi saludó a Nu, que estaba sentada en su escritorio fuera de la sala principal de los Archivos. Skywalker presentó a Ahsoka a Nu, y le dijo a la bibliotecaria Jedi que Tano iba a ser su nueva guardiana de los archivos.[26]

Después de que Skywalker se retirara, Nu enseñó a Tano todos los Archivos. Después de dar a la padawan autoridad para vigilar la Bóveda de Holocrones, Nu dejó a Tano sola y partió de regreso a su escritorio. Al reconocer a un Jedi al que había conocido en el pasado, Tano saludó al Maestro Jedi Ord Enisence. Sin embargo, sin saberlo ella, una cazarrecompensas de la especie clawdite había tomado la apariencia de Enisence para infiltrarse en el Templo Jedi. Tano comenzó a molestar al decoroso Jedi, preguntando si necesitaba ayuda. La cazarrecompensas, enfurecida, le dijo a la Padawan que le dejase en paz. Después de que la padawan se alejase, la cazarrecompensas, Cato Parasitti, utilizó la terminal de un ordenador para proporcionar información secreta sobre el Templo Jedi al cazarrecompensas Cad Bane a través de su comunicador. Cuando Bane y su droide, Todo 360, entraron en el Templo Jedi a través de un conducto de ventilación, el Gran Maestro Yoda sintió a los intrusos a través de la Fuerza y, rápidamente, puso el templo en alerta máxima. Como los acontecimientos en curso empeoraron, Jocasta Nu dijo a Tano que permaneciera en guardia, mientras ella iba a notificar a todos que el templo estaba en alerta máxima.[26]

DuelAtTheArchives-HH

Tano lucha contra Cato Parasitti en el Templo Jedi.

Nu fue en primer lugar a informar a Enisence, pero sin embargo, la cazarrecompensas disfrazada de Enisence dio un puñetazo a Nu en la cara, dejándola inconsciente. Yoda contactó con Tano, a través de su comunicador, y la alertó del peligro. Preocupada, Tano dejó la sala principal de los archivos y se enfrentó a Cato Parasitti, que había cambiado su aspecto del de Enisence al de Nu. Parasitti combatió con Tano en un breve duelo con sables de luz en el interior de la sala principal de los archivos, pero no era rival para la padawan que, rápidamente, derrotó a la clawdite, haciéndole caer al suelo. Varios Jedi – entre los que se encontraban Mace Windu, Yoda, Obi-Wan Kenobi, Anakin Skywalker, Aayla Secura y Kit Fisto– llegaron al interior de la sala de los archivos Jedi. El grupo arrestó a la cazarrecompensas, pero notaron que faltaba un holocrón de la bóveda. Antes de que los Jedi interrogasen a la cazarrecompensas capturada, Parasitti reveló por sí misma que Cad Bane estaba a punto de atacar al Maestro Jedi Bolla Ropal para recuperar un cristal kyber de memoria, un cristal que contenía una lista de potenciales niños sensibles a la Fuerza en toda la galaxia. Temiendo por el futuro de la Orden Jedi, Skywalker sugirió ir a rescatar al Maestro Jedi junto a Tano, cosa que acabó aceptando Windu.[26]

Recuperando el holocrón robado
Cad Bane: «No tenemos mucho tiempo. Apresúrate, Jedi, o ella morirá.»
Ahsoka: «¡No maestro! ¡No lo hagas!»
— Cad Bane amenaza de muerte a Ahsoka [fuente]

Después de salir de Coruscant a bordo del destructor Estelar clase Venator, el Resuelto, Ahsoka se unió a Anakin Skywalker y a un soldado clon en el puente del crucero. El almirante Wullf Yularen se unió al grupo y le dijo a Skywalker que estaban cerca de las fuerzas navales del despiadado cazarrecompensas Cad Bane. Sobre el planeta Devaron, los destructores estelares de la República Galáctica encontraron las fragatas estelares clase Munificiente de Cad Bane. Tras ser testigos de la ubicación de la fragata de Bane, Skywalker y Tano se unieron a Rex y a sus hombres en el hangar del Resuelto. Después de que Rex revelara que no tenían medios de transporte para llevar a los soldados hasta la fragata de Bane, Yularen se unió al grupo y ofreció su ayuda. Skywalker ordenó a este último activar algunos caminantes AT-TE que estaban cerca de ellos. Sin embargo, Yularen no estaba contento con la decisión de Skywalker. Decidido a utilizar los caminantes AT-TE, Skywalker ignoró la afirmación del almirante, y pronto estuvieron activados, con lo que Tano afirmó que su maestro era un genio.[27]

AhsokaAnakinRex-Cargo

Skywalker, Tano, R2-D2, Rex y Denal se preparan para luchar contra Cad Bane y sus droides.

Mientras Skywalker y Tano estaban vestidos con trajes presurizados, los soldados clon pronto subieron a bordo de los caminantes, y se dispusieron a aterrizar en la cima de la fragata de Bane. La plataforma de liberación inferior del Resuelto dentro del hangar se abrió, dejando caer a los caminantes hacia la fragata de Bane. Algunos droides de combate serie B1 les hicieron frente, aunque fueron derrotados por las fuerzas de la República. Skywalker ordenó a su droide astromecánico, R2-D2, abrir la escotilla principal de la fragata, lo que permitió al grupo entrar en ella. Al entrar, el grupo se abrió camino hacia el puente. Después de destruir más droides de combate, no encontraron ni a Bolla Ropal ni a Bane. Entonces, el grupo se fue del puente y entró en el nivel de detención. La búsqueda de Ropal pronto concluyó cuando Tano encontró su cadáver dentro de una sala de torturas. Sin saberlo ellos, Bane tenía acceso a las funciones de la nave a través de su guantelete de muñeca, y, rápidamente, apagó las luces a lo largo de la fragata. La fuerza de la República se aventuró a través de la nave, y R2-D2 descubrió a Bane corriendo por un pasillo. Los Jedi alcanzaron al cazador de recompensas, pero sin embargo, este último lanzó a sus droides de combate sobre los Jedi y los clones. A través de su guantelete, el cazarrecompensas desactivó la gravedad artificial, lo que permitió a Bane tener la ventaja sobre los Jedi. Tano ordenó a R2-D2 reactivar la gravedad, y el droide cumplió.[27]

El holocrón que el cazarrecompensas había robado en el Templo Jedi, que estuvo fuera de la posesión de Bane por un breve tiempo gracias a las acciones Skywalker, fue recuperado por el mercenario, que huyó rápidamente de la zona. No estando dispuesta a dejar que Bane escapase, Tano lo persiguió sin la aprobación de Skywalker. Cuando Tano salió en persecución de Bane, Skywalker gritó que debían capturar al cazarrecompensas juntos, pero la joven togruta no le hizo caso. Al atraer a Ahsoka a un pasillo sin salida, Bane cerró una puerta blindada detrás de Tano, bloqueando a Skywalker el paso para que no pudiera ayudar a su padawan. Bane abrió fuego contra la joven togruta, no obstante, Tano desvió fácilmente los disparos, hiriendo el brazo derecho de Bane. Tano lo atacó con su sable de luz, aunque Bane se libró de ella con una patada, tirando al suelo el sable láser. Haciendo uso de su arma de nuevo, Bane intentó disparar a la Padawan desarmada, pero con un rápido agarre del brazo izquierdo de Bane, Tano le dio un codazo al cazarrecompensas y lo lanzó al suelo. Sin impresionarse por la habilidad del cazarrecompensas en el combate sin armas, Tano intentó recuperar telequinéticamente su sable de luz caído, aunque Bane engañó la logró engañar. Bane se acercó y agarró el tobillo de Tano, activando una descarga eléctrica paralizante, que dejó a la padawan inconsciente.[27]

Ahsoka hostage

Ahsoka capturada por Cad Bane.

El cazarrecompensas colocó a su rehén Jedi unas esposas aturdidoras, y comenzó a saborear su victoria sobre la padawan. Tras retirarle su trenza padawan de granos del silka, Bane se la ató a la cintura como trofeo. Tano, quien le dijo que todavía no estaba impresionada, recordó a Bane que su maestro la rescataría. Sintiendo el fuerte vínculo entre Skywalker y Tano, Bane activó una descarga eléctrica de las esposas de aturdimiento a través de su guantalete de muñeca, para hacer que Skywalker se apresurase a rescatar a su padawan. Luego, un droide de combate B1 contactó con Bane a través de su comunicador y alertó a Bane de que un Jedi muy enfadado se acercaba. Bane activó un escudo de rayos para bloquear el escape de Tano, que resultó un éxito cuando ella intentó embestirlo y rebotó en él. Skywalker entró en la sala, y pronto fue recibido por Bane.[27]

Al ver a su padawan en grave peligro, Skywalker comenzó a avanzar hacia el cazarrecompensas; Sin embargo, Bane le dijo al Caballero Jedi que si pulsaba un botón de su guantelete, Tano sería arrastrada fuera de una esclusa de aire hacia el espacio exterior. El mercenario dio a Skywalker la elección de sacrificar a su padawan, y matarle, o abrir el holocrón. Aunque Tano temía por su vida, ella, valientemente, trató de persuadir a Skywalker a no cooperar con el cazarrecompensas, pensando que matar a Bane y recuperar el holocrón era más importante que su propia vida. Sin embargo Skywalker no pensaba de la misma manera: lo que le importaba era Tano, mucho más de lo que le importaba el holocrón, por lo que optó por abrir el holocrón para el cazarrecompensas.[27]

BaneTorturesAhsoka

Cad Bane electrocuta a Ahsoka.

Con el uso de la Fuerza, Anakin abrió el holocrón, y Bane colocó en él el cristal kyber de memoria que había robado con anterioridad. Con Bane distraído por un segundo, Skywalker recuperó con la Fuerza tanto su sable de luz como el de Tano. Tras acabar con los guardaespaldas de Bane, dos superdroides de combate B2, Skywalker se dio cuenta de que el cazarrecompensas había abierto la esclusa de aire, que amenazaba la vida de Tano. Skywalker usó la Fuerza y empujó un fragmento del droide para abrir el escudo de rayos y salvó a Tano, aunque Bane había escapado de la habitación con el holocrón. Ambos Jedi salieron de la habitación y comenzaron a perseguir al mercenario. Tano, que se había dado cuenta de que tenían que abandonar la nave, exigió a Skywalker que no persiguieran a Bane y, en lugar de regresar junto a Rex y a los clones, sugirió esperarles en el hangar de la fragata. Skywalker cumplió la propuesta de Ahsoka, y ambos llegaron rápidamente al hangar. Allí, sin embargo, se dieron cuenta de que Rex y sus hombres habían asegurado una lanzadera de transporte clase Sheathipede, y corrieron hacia ella. Por encima del nivel de la cubierta superior del hangar, los soldados clon Denal y Koho se enfrentaron a Bane en un breve duelo, que costó la vida de ambos clones. Disfrazándose de Denal, Bane entró en la nave de huida de Skywalker oculto dentro de la armadura del soldado clon. Tano, quien creía que Bane había muerto, quiso ir a recuperar el holocrón. Sin embargo, Skywalker le dijo que no había tiempo para hacer eso, debido a que la fragata estaba a punto de explotar.[27]

Volviendo al Resuelto, Skywalker le dijo a Tano que aún podía sentir la presencia de Bane a través de la Fuerza, a pesar de que había visto morir al cazarrecompensas en el interior del hangar de la fragata. Tano pidió perdón a su maestro por sus acciones. Sin embargo, Skywalker insistió en que el fracaso de la misión había sido culpa de él mismo de principio a fin.[27]

Persiguiendo a un cazarrecompensas
Ahsoka: «¡Quieto ahí, gusano!»
Cad Bane: «Tú no eres el niño que estaba buscando.»
Ahsoka: «Es evidente.»
Cad Bane: «Eres astuta, pero inocente.»
— Cad Bane, antes de enfrentarse a Ahsoka Tano[src]

A través de la Fuerza, el Consejo Jedi logró determinar a qué niños planeaba secuestrar Cad Bane. Por desgracia, el Maestro Jedi Obi-Wan Kenobi no pudo evitar que el cazarrecompensas capturara a un niño en Rodia. Ahsoka y Anakin Skywalker, sin embargo, fueron asignados a proteger a la pequeña gungan Roo-Roo Page en el planeta Naboo. Cad Bane aterrizó cerca de la casa de Page, que se encontraba en la ciudad Jan-gwa, rodeada de cascadas, y vio como una madre gungan colocaba una pequeña figura en una cuna antes de salir de una habitación. Creyendo que había dejado a Page sola, el cazarrecompensas entró en la habitación y tiró de la manta, sólo para encontrar una muñeca en lugar del bebé esperado. Un momento después, Tano irrumpió en la habitación, sable de luz en mano. Mientras hablada de la inteligencia e ingenuidad de la Padawan, Cad Bane usó una cuerda de su guante para atrapar el sable de luz de Ahsoka y tirar de él. Bane intentó escapar con sus botas cohete, pero fue interceptado por Skywalker, que dio un salto y se agarró a las botas del cazarrecompensas. Con el peso extra, los impulsores de Bane fueron desactivados, y cuando los dos cayeron al suelo, Cad Bane quedó brevemente aturdido. La pareja peleó hasta que Bane elevó la mirada y vio el sable láser de Tano en su rostro.[28]

Mission to Naboo

Tano confronta a Bane en Naboo.

El duros se arrodilló, y Tano recuperó su preciada trenza de padawan que Cad Bane había tomado previamente como trofeo. Bane y el Sangre de Xanadu fueron llevados al Resuelto, donde el cazarrecompensas fue encerrado en una celda blindada, mientras su nave era examinada por los Jedi. Al ser interrogado por los Maestros Jedi Obi-Wan Kenobi y Mace Windu, Bane se negó a revelar el paradero de los niños secuestrados y la ubicación del holocrón. Los dos maestros y Skywalker, unidos, emplearon la Fuerza para obligar a Bane, de carácter fuerte, a conducirlos hasta el holocrón robado -un acto que se produjo con el riesgo de destruir su mente, y que pareció perturbar a Tano. Fatigado de sus intentos de resistir la influencia de los Jedi, Bane finalmente prometió llevarlos al holocrón, aunque con la intención de conducirlos a una trampa. El cazarrecompensas fue escoltado a una lanzadera T-6, desde donde dictó unas coordenadas del espacio profundo hacia la estación Black Stall a sus captores acompañantes -Kenobi, Windu, y el comandante clon CC-2224, apodado "Cody".[28]

Mientras los Maestros Jedi viajaban a la estación Black Stall, Skywalker y Tano se dirigieron a informar a Canciller Supremo Sheev Palpatine de todo lo ocurrido. Al llegar a la Oficina del Canciller, Tano se tuvo que esperar en la puerta, mientras Palpatine conversaba con Skywalker. Después, los dos Jedi examinaron la nave capturada de Bane y al ver dónde el cazarrecompensas había repostado, fueron capaces de determinar que había visitado el planeta Mustafar, que estaba a varios parsecs fuera de su camino. La pareja viajó a una instalación del planeta volcánico, donde lograron derrotar a varios droides niñera para rescatar a los dos niños capturados por Bane. Windu y Kenobi por otro lado, lograron recuperar el holocrón robado, aunque les costó que Bane escapase una vez más.[28]

Segunda Batalla de Geonosis

Más tarde, Ahsoka y Anakin Skywalker se unieron a Obi-Wan Kenobi para combatir contra los separatistas cerca del planeta Dorin. Luego, junto al Maestro Jedi Ki-Adi-Mundi, los comandantes clon CC-2224 "Cody" y CC-1993 "Jet" y el Capitán Clon Rex; participaron en el asalto sobre una fábrica de droides perteneciente a Poggle el Menor, en Geonosis.[29]

Ahsoka-Barris

Ahsoka y Barriss atrapadas dentro de un súper tanque.

La segunda fase de la batalla consistía en que Skywalker y Luminara Unduli distraerían junto a sus tropas a los ejércitos separatistas, mientras que Tano y la Padawan de Unduli, Barriss Offee, completarían su misión de destruir una fábrica de droides accediendo a ella mediante unas catacumbas subterráneas hechas por los geonosianos. Dentro de las catacumbas, las Padawans fueron seguidas por un geonosiano, que pronto alertó a Poggle de su presencia. Poggle ordenó la desactivación de los detonadores termales de las padawans, que cubrían todo el generador de la fábrica de droides. Al hacerlo, Poggle también envió a un escuadrón de droides de combate y un súper tanque para distraerlas. Después de que las dos Jedi destruyeran a todos los droides, Ahsoka sugirió utilizar el súper tanque para volar el generador de energía de la fábrica, del cual los geonosianos habían retirado las bombas. A continuación, Ahsoka se puso en contacto con su maestro, para informarle de lo que iban a hacer. Después de destruir el generador de energía, Tano fue capaz de ayudar a Anakin y Luminara a localizar a Offee y a ella misma punteando una célula de alimentación del tanque. Skywalker y Unduli pudieron localizarlas a ambas a tiempo y les quitaron los escombros que tenían encima.[30]

Invasión en una nave de suministros
BarrissAhsoka-BI

Ahsoka Tano y Barriss Offee se defienden de los soldados clon infectados por el gusano cerebral.

Luego, Ahsoka y Barriss Offee fueron asignadas para llevar una nave de suministros a la estación médica de Ord Cestus. Ya a bordo de la nave, como Tano no era capaz de dormir, decidió ir a comer con Offee. Mientras comían, dos clones llamados Edge y Ox las atacaron, porque estaban bajo el control de gusanos cerebrales. Las Padawans sacaron sus espadas láser y los derrotaron. Entonces Trap y otro clon se acercaron a Ahsoka y Barriss preguntando qué estaba sucediendo. Los soldados prometieron que vigilarían a Edge y Ox; mientras que Tano y Offee decidieron separarse. Ahsoka fue a contactar con Anakin Skywalker y el Maestro Jedi Kit Fisto. No obstante, mientras investigaba en la nave, Offee cayó en una trampa tendida por los soldados infectados, que lograron infectarla a ella, por lo que luego Barriss se fue tras Tano. Cuando Barriss encontró a Ahsoka, la atacó, por lo que la togruta tuvo que huir, no sin antes ser informada por Skywalker de que los gusanos cerebrales podían ser destruidos con el frío. Por eso, Tano rompió el sistema de refrigeración de a bordo de la nave, pero a continuación fue atacada de nuevo por Offee. En medio del duelo, Offee comenzó a recuperar el control de su mente y le rogó a Tano que la matara. Ahsoka se negó a hacerle daño debido a su apego a Offee y sólo mató al gusano que estaba saliendo por la boca de Barriss. Poco después, Fisto, Skywalker y los refuerzos llegaron rápidamente e informaron a Tano de que habían logrado detener la infección. Sin embargo, Tano se mantuvo en conflicto por causa de la elección que hizo de no matar a su amiga. Ahsoka reconoció que si hubiera fracasado, el parásito podría haberse extendido por culpa de su apego, pero Skywalker aseguró a Tano que ella había hecho lo correcto siguiendo sus instintos para salvar tantas vidas como le había sido posible.[31]

Sable de luz perdido

«Bueno, debería volver con mi maestro antes de que me eche de menos.»
«Desde luego, pero antes, necesito que me hagas un último favor.»
«Claro, lo que sea.»
«Transmite lo aprendido.»
―Ahsoka y Tera Sinube.[fuente]

Cuando el Maestro Jedi Eeth Koth fue capturado por el general Grievous, Tano estuvo presente cuando el general envió un mensaje a los Jedi torturando a Koth.[32] Más adelante, Anakin Skywalker y Ahsoka se dirigieron a los bajos fondos de Coruscant en busca de un traficante de armas llamado Car Affa. Eventualmente, llegaron al bar donde se encontraba, y Ahsoka esperó en la salida del bar por si Affa intentaba escapar. Cuando los clientes del bar salieron corriendo asustados por la lucha entre Skywalker y el traficante, Tano quedó atrapada en medio de una multitud y su sable de luz fue robado por Bannamu, aunque ella aún no sabía la identidad del ladrón. Sintiéndose incapaz de explicar a su maestro lo ocurrido, Ahsoka pidió ayuda a Jocasta Nu. Aunque Nu no podía ayudar a Tano, presentó a la Padawan a Tera Sinube, un Maestro Jedi que poseía un extenso conocimiento de los bajos fondos de Coruscant. Tras recibir información del físico del ladrón, Sinube localizó a quien tenía el sable de luz de Ahsoka en los archivos del Templo Jedi, identificándolo como un patroliano llamado Bannamu. Aunque con dudas al principio, pensando que podía ralentizarla, Ahsoka permitió a Sinube acompañarla en su búsqueda de Bannamu.[33]

Sinube helps Ahsoka

Ahsoka recibe ayuda del Maestro Jedi Tera Sinube.

De vuelta en los bajos fondos, ambos se detuvieron en una tienda, donde preguntaron a su propietario acerca del paradero de Bannamu. Tras saber que Ahsoka y Sinube eran Jedi, un amigo del propietario reveló la ubicación del escondite de Bannamu. Al llegar hasta Bannamu, la pareja descubrió que el sable de luz de Tano había sido vendido a un asesino llamado Nack Movers. Los dos Jedi corrieron al apartamento de Movers, donde se encontraron al asesino muerto. Pronto vieron a una mujer llamada Ione Marcy llorando escondida en el apartamento, que preguntó si los asesinos de Movers se habían ido. Tano buscó a los posibles asesinos de Movers, y fue emboscada por Cassie Cryar, quien poseía su sable de luz. Tras saber que Ahsoka era una Jedi, Cryar saltó por una ventana y corrió por los tejados de la ciudad. Tano la persiguió y contactó con Sinube para informarle de todo.[33]

Dado que la atacante de Tano era una mujer e Ione había dicho que los asesinos de Movers eran hombres, además de sentir algo más que miedo en Ione, Sinube dedujo que Ione estaba implicada en el crimen. Mientras tanto, Tano se acercó a Cryar en lo alto de un edificio, pero Ione la recogió a bordo de un speeder. A la mañana siguiente, Sinube recogió a Tano en otro speeder y ambos siguieron un rastreador que Sinube había colocado en el vehículo de Ione la noche anterior. Así, llegaron a una estación de tren, donde Ione fue arrestada. Cryar sin embargo, logró entrar en un tren junto a Tano. Allí, Cryar tomó como rehenes a una madre y a sus hijos, aún con el sable láser de Ahsoka en mano. Cuando el tren llegó a la siguiente estación, Cryar intentó volver a escapar, pero Sinube, habiendo llegado a la estación primero, la interceptó y la desarmó con su propio sable de luz, devolviendo a Tano su sable láser. Luego, Sinube pidió a Tano que explicara su experiencia a un grupo de Iniciados Jedi, quienes recibieron el consejo de Ahsoka de nunca perder sus sables láser, puesto que eran su vida y su responsabilidad.[33]

Vuelta a Felucia

Más tarde Obi-Wan Kenobi, Anakin Skywalker y Ahsoka regresaron a Felucia después de perder el contacto con una estación médica cerca del planeta. Se estrellaron en Felucia y encontraron un pueblo aparentemente desierto. En su exploración se encontraron con cuatro cazarrecompensas llamados Sugi, Embo, Seripas y Rumi Paramita. Al principio, los cazarrecompensas y los Jedi se mostraron hostiles entre ellos, pero entonces, el líder de la aldea, Casiss, les detuvo antes de que comenzaran a atacarse unos a otros.[34]

Seripas armor

Ahsoka planta cara a los piratas junto a Seripas.

Después de familiarizarse con los aldeanos y los cazarrecompensas, Anakin y Obi-Wan se encontraron con un viejo conocido, aunque difícilmente un amigo, Hondo Ohnaka, y su banda de piratas. Ahsoka estaba presente cuando Ohnaka llegó al lugar, aunque ella no lo había conocido hasta entonces. Kenobi intentó que Ohnaka y los piratas abandonaran el pueblo y dejasen en paz a sus aldeanos, pero el weequay quería apropiarse de la cosecha de los aldeanos con fines lucrativos. Los piratas dieron tiempo a los aldeanos hasta el día siguiente para preparar la cosecha antes de salir del pueblo y reagruparse con el resto de las fuerzas piratas.[34]

Después de que los piratas se marcharan, los Jedi y los cazarrecompensas comenzaron a prepararse para su regreso. Trataron de entrenar a los habitantes del pueblo para luchar, con un éxito limitado. Durante los preparativos, Tano se hizo amiga de Seripas que llevaba una armadura para parecer más grande y más intimidante de lo que realmente era. Ella le salvó la vida durante la preparación para el ataque pirata, ya que Seripas había estado cortando un gran árbol en ese mismo momento, sin darse cuenta de que era demasiado pesado para que su traje lo pudiese manejar. Tano fue capaz de apartarlo justo a tiempo, antes de que el árbol lo aplastase. Ahsoka le dijo entonces que aunque no pareciese fuerte, eso no significaba que no pudiera serlo.[34]

Junto con los otros Jedi y los cazarrecompensas, Tano defendió el pueblo de los piratas y, finalmente, lograron derrotarles, obligándolos a retirarse. Sugi ofreció entonces a los Jedi subir a bordo de su nave para volver a casa, ya que la suya había sido destruida. Ahsoka, Anakin y Obi-Wan aceptaron el ofrecimiento de Sugi.[34]

Persiguiendo a Boba Fett

Después de que Boba Fett intentase matar a Mace Windu a bordo del Resistencia, Windu y Anakin Skywalker quedaron atrapados en los escombros del destructor estelar con quemaduras graves, y fueron rescatados por Ahsoka y Plo Koon después de que R2-D2 les llamase para obtener ayuda.[35] Cuando Fett envió un mensaje holográfico mostrando que poseía rehenes de la República Galáctica, Tano partió en su búsqueda con el maestro Plo Koon. Al dirigirse a los bajos fondos de Coruscant, el dúo tuvo alguna dificultad para obtener información debido a la falta de sutileza de Ahsoka.[36]

AhsokaGotsSing-LT

Tano acerca su sable láser a la garganta de Sing.

Antes de entrar en una cantina, Plo Koon le dijo a Ahsoka que fuese discreta mientras él interrogaba al barman. Queriendo ser útil en lugar de esperar a que Plo Koon terminase su interrogatorio, Ahsoka intentó escuchar algo útil, y después de un tiempo, finalmente terminó oyendo una conversación acerca de Aurra Sing. Sin embargo, los participantes de la conversación se dieron cuenta de que Ahsoka les estaba escuchando, y ella y Plo Koon se vieron obligados a pelear para salir del bar. Después de hacerlo, Plo reprendió a Ahsoka por haber sido poco discreta, pero ella le dijo que había escuchado que Sing y Fett estaban en Florrum.[36]

Después de llegar a Florrum, ambos recibieron la garantía del pirata Hondo Ohnaka de que él no estaba involucrado en las acciones de Boba. Al reunirse con Boba y Aurra, el joven Fett apuntó a Plo Koon con un bláster mientras Ahsoka acercaba su sable de luz al cuello de Sing. Después de una breve escaramuza, Sing huyó con Ahsoka persiguiéndola. Tano tomó un vehículo para perseguir a Aurra Sing, y Ohnaka evitó que ninguno de sus piratas disparase a la Padawan Jedi.[36]

Después de perseguir a Sing a través de unos cañones, Ahsoka recibió la información del maestro Plo – que había persuadido a Boba junto a Ohnaka para que hablara – de que los rehenes de la República se encontraban en dirección opuesta. Cuando los rehenes fueron liberados, Aurra Sing trató de escapar en la Esclavo I, pero gracias a los esfuerzos de Ahsoka no logró huir. Luego, Ahsoka y Plo Koon escoltaron a Fett y a Bossk hasta Coruscant para que se enfrentaran a la justicia.[36]

Misión de Rescate

Durante el bloqueo de Pantora, fueron secuestradas las hijas del presidente Papanoida. A la mañana siguiente al secuestro, Tano informó a la senadora Padmé Amidala y a su maestro, Anakin Skywalker, de lo que había sucedido. Dado que los Jedi no podían involucrarse oficialmente, Tano se ofreció a ayudar por su cuenta, ya que la senadora de Pantora, Riyo Chuchi, era una buena amiga suya. Cuando Ahsoka llegó a la oficina de Chuchi, ésta la presentó, e informó al Presidente de que Tano ayudaría en la localización de sus hijas.[37]

AhsokaAggresiveNegotiator-SoI

Ahsoka emplea negociaciones agresivas con Sib Canay.

Alegrándose por la noticia, Papanoida asignó a Tano y a Chuchi efectuar una visita diplomática a la Federación de Comercio, pensando que sus hijas estaban en una nave del bloqueo de Pantora, mientras que él y su hijo buscarían pistas del secuestro por su cuenta. Cuando llegaron a la nave de la Federación, Chuchi anunció al administrador de una posible alianza entre Pantora y los separatistas si estos levantaban el bloqueo.[37]

Después de ser llevadas a los cuarteles de la nave, Tano y Chuchi se escaparon y exploraron la nave con la esperanza de encontrar a las chicas. Cuando su exploración las llevó a una sala de conferencias, se escondieron debajo de una mesa mientras escuchaban una conversación entre el capitán y el administrador de la nave acerca de la captura de las hijas de Papanoida y de su retención en la nave. Chuchi dio un respingo ante la sorpresa, lo que llevó a Tano y a ella a esconderse rápidamente, entre jadeos, en otro lugar. Cuando Tano se dio cuenta de que estaban a punto de descubrir a Chuchi, usó la Fuerza para alzarla fuera de la vista de sus enemigos.[37]

Después de evitar ser descubiertas, ambas se dirigieron al bloque de detención para encontrar a una de las hijas de Papanoida. Cuando llegaron, el guardia no quería dejarlas pasar. Tano usó un truco mental con la Fuerza por primera vez, y Chuchi casi se queda atrás porque Tano no fue lo suficientemente específica y el guardia no la dejaba pasar. La pareja pronto encontró a una de las hijas del presidente, pero fueron descubiertas debido a unos dispositivos de escucha situados en los pasillos. Tras derrotar a un grupo de superdroides de combate B2, Tano se quedó atrás y vio como Chuchi chantajeaba al capitán de la nave para que levantase el bloqueo sobre Pantora, amenazando con informar del secuestro de las hijas de Papanoida.[37]

Corrupción en Mandalore

AhsokaKA-TA

Ahsoka se enfrenta a los hombres del Primer Ministro Almec.

Después de que la duquesa Satine Kryze hiciera la petición a la senadora Padmé Amidala de enviar a un Caballero Jedi a Mandalore, el Maestro Jedi Yoda envió a Ahsoka para ayudar a Kryze en una misión secreta para exponer la corrupción gubernamental. Tano llegó bajo la apariencia de ser una profesora para los estudiantes mandalorianos, entre los cuales se incluía el sobrino de Satine, Korkie Kryze. Después de que Korkie y sus amigos descubriesen que alguien había estado obstruyendo el suministro de alimentos con el fin de impulsar el comercio con el mercado negro en Mandalore, Tano pronto descubrió que se trataba del Primer Ministro Almec, el segundo mandatario más poderoso después de la duquesa. Tras hacer este descubrimiento, Tano y los estudiantes fueron a informar de su descubrimiento a Satine, sólo para encontrarse con que había sido detenida por Almec y encarcelada bajo falsas acusaciones de traición.[38]

Luego, a Ahsoka se le ocurrió el plan de presentar a los estudiantes a Almec como prisioneros a fin de descubrir la ubicación de Kryze. Almec encarceló a los estudiantes, pero no quiso revelar la ubicación de la duquesa a Tano, obligándola a cambiar su plan. Después de conversar con los estudiantes bajo el ardid de un interrogatorio, Tano usó un truco mental para que un guardia le llevase a la duquesa. Al encontrar a Satine, Tano intentó liberarla, sólo para caer en una trampa tendida por Almec. Almec capturó a Ahsoka y trató de forzar a Kryze para que firmase una confesión por cometer traición. Satine se negó a ello, forzando a Almec a torturarla con un collar eléctrico, seguido de Korkie. Ahsoka, sin embargo, logró liberarse y capturar a Almec colocándole el mismo collar que utilizaba con Satine. Después de su encarcelamiento, Satine reveló que había sabido todo lo que estaba ocurriendo en Mandalore desde el principio, y que sospechaba de Almec, por lo que solicitó la presencia de Tano para que descubriese la corrupción en el gobierno mandaloriano y la sacase a la luz.[38]

Obstruyendo a un asesino

Después de los acontecimientos en Mandalore, Ahsoka regresó a Coruscant para informar al Alto Consejo Jedi de su misión. Durante su estancia, Tano empezó a tener numerosas visiones de Aurra Sing y un potencial intento de asesinato. Preguntando al Maestro Jedi Yoda para que la asesorase sobre el tema, Yoda le aconsejó calmar su mente y usar sus visiones para tratar de ver quién iba a ser asesinado. Se determinó que la senadora Padmé Amidala era el blanco de Aurra Sing. Ahsoka fue hasta Amidala para avisarla de la amenaza, y descubrió que Amidala iba hacia Alderaan a petición del senador Bail Organa para hablar sobre la guerra. Al ver que Amidala iba a ir a pesar de la advertencia, Tano insistió en ir con su escolta a Alderaan como parte de su equipo de seguridad, lo cual Amidala aceptó. Después de llegar a Alderaan, Ahsoka tuvo otra visión de Sing, llevándola a creer que Amidala estaba en peligro en ese mismo momento. Sin embargo, era una falsa alarma, pues Tano no tenía experiencia en la interpretación de los sueños y visiones.[39]

AhsokaProtectsPadme-Assassin

Ahsoka defiende a Padmé Amidala de Aurra Sing.

Ahsoka tuvo otra visión que reveló la ubicación de la tentativa de asesinato, siendo la misma sala en la que Amidala daría un discurso. Tras aumentar la seguridad, Amidala procedió a hablar en la reunión, durante la cual Aurra Sing intentó dispararla. Tano detectó a Sing, por lo que supo que estaba allí, intervino y evitó que el disparo fuera mortal, causando daño sólo en el brazo izquierdo de Amidala. Después de una corta batalla y persecución de Sing, Tano la perdió y se vio obligada a regresar junto al equipo de seguridad para planificar acciones futuras. Amidala decidió hablar de nuevo más tarde y se negó a cancelar su aparición. Eso hizo que llevasen a cabo el plan de enviar a un droide disfrazado de la senadora al lugar mientras Amidala hablaba de forma remota desde una ubicación diferente, estando más segura. Durante el discurso, Tano sintió que Amidala seguía estando en peligro y corrió a la habitación en la que se encontraba, por lo que estuvo apenas a tiempo para desviar un disparo láser de Sing. Sing accionó los controles de la puerta de la habitación para bloquearlas a las tres en el interior. Después Sing sacó sus blásteres y procedió a disparar a Ahsoka, quien estaba tratando de seguir el ritmo de los disparos para proteger a Amidala. Poco después de que Sing comenzase a disparar, Tano fue superada y recibió un disparo en el brazo. Cuando Ahsoka cayó al suelo dolorida, Sing se sorprendió al ver a Amidala detrás de Tano con una pistola en la mano. Amidala disparó y dejó a Sing aturdida, justo antes de que la escolta de la senadora fuese capaz de forzar la apertura de la puerta y poner a Sing bajo arresto.[39]

Después de regresar a Coruscant con Aurra Sing bajo custodia, Ahsoka se lamentó de no haber descubierto a la persona que había contratado a Sing para matar a Amidala. Yoda invitó a Tano a usar la Fuerza y sus instintos para percibir quién era el autor del delito. Después de concentrarse, Ahsoka no pudo averiguar la identidad de quién contrató a Sing, pero obtuvo algunos detalles acerca de quién podía ser. Después de escuchar la descripción, Amidala pudo deducir que era Ziro Desilijic Tiure. Ahsoka y Anakin Skywalker fueron a buscar a Ziro para enfrentarse a él. Aunque Ziro negó las acusaciones de los Jedi, Ahsoka logró engañar hábilmente a Ziro para que confesase diciéndole que Sing ya les había hablado de él, a lo que Ziro furiosamente afirmó que debía haber contratado a alguien mejor, confesando su crimen a Ahsoka y Anakin, y ganándose una larga estancia en la cárcel.[39]

Una lección de Yoda

«Lo que te hace única te hace fuerte. Eso usar debes. Tú misma, siempre debes ser."
"Creo que lo entiendo. Necesito luchar como yo misma.»
―Yoda y Ahsoka[fuente]
WaitASecondThisIsWhereSheLearnedThat

Ahsoka entrena con Yoda.

Más adelante, Ahsoka y su maestro Anakin Skywalker entrenaron en el dojo del Templo Jedi, donde Skywalker estaba enseñando a Tano a usar su recién creado segundo sable de luz. Sin embargo, al no haber usado antes dos sables láser a la vez, Tano fue desarmada por Skywalker. Tano se disculpó ante Skywalker por haber olvidado usar su segunda hoja, pero él afirmó que se necesitaba tiempo para aprender a usar dos sables de luz a la vez. Mientras Tano recuperaba su sable láser, el Gran Maestro Yoda entró en el dojo, queriendo ver el progreso de Ahsoka usando su segundo sable de luz. Tano aceptó tras recibir la aprobación de Skywalker, y encendió su sable de luz rápidamente. Skywalker se inquietó cuando Yoda la miró con desaprobación, diciéndole que primero debían hacerse una reverencia antes de enfrentarse a un duelo en el dojo. Tano apagó su sable láser y siguió las instrucciones de Yoda, que le instó a usar su segunda hoja. Entonces, Ahsoka encendió sus sables láser y Yoda encendió el suyo. Con un solo movimiento, Yoda logró hacer retroceder a Tano mientras ella intentaba bloquear su ataque. Entonces, Yoda intentó enseñar a Ahsoka a usar las dos espadas láser como si se trataran de un maestro y un aprendiz. Con esto, Tano se puso de pie e intentó atacar a Yoda, pero él simplemente se agachó y la hizo tropezar. Mientras Tano se levantaba, Yoda le enseñó que siempre debía ser ella misma, y Tano se dio cuenta de que necesitaba luchar como ella misma. Recuperó sus sables láser y Yoda atacó de nuevo, pero esta vez ella consiguió bloquear los ataques. Yoda le dijo que había aprendido bien y los dos se reverenciaron de nuevo.[40]

Escaramuza en Coruscant

«Ahsoka... ¿qué ha ocurrido?»
«Digamos que ha habido algunas complicaciones.»
―Anakin y Ahsoka[fuente]
Ahsoka The Padawan Path

Ahsoka encuentra problemas de camino al Templo Jedi.

En una ocasión, mientras Tano patrullaba por las ajetreadas calles de Coruscant, escuchó la voz de Anakin Skywalker hablando por el comunicador y pidiéndole regresar al Templo Jedi para asistir a una ceremonia en la que debía participar. Mientras se acercaba al templo, escuchó a una multitud de gente pidiendo auxilio. En ese instante, la Jedi togruta se dio la vuelta y se dirigió hacia los gritos para ayudar. Al llegar a la esquina, vio a una madre y a su hijo siento atacados por un enorme droide renegado. Inmediatamente, Tano notó que parte del cableado del droide estaba expuesto. Primero usó la Fuerza para lanzarle una caja y llamar su atención. Mientras el droide se acercaba a ella pasando por debajo de unas cañerías de agua residencial, Tano encendió sus sables de luz, corrió hacia él, cortó una de sus piernas, y saltó para dañar las cañerías de agua. El agua cayó sobre el droide, destruyéndolo. La Padawan comprobó que madre e hijo se encontraban bien, antes de recordar de pronto que llegaba tarde a la ceremonia. Eventualmente llegó al Templo Jedi, donde se reunió con Skywalker y Yoda bajo el Gran Árbol. Mientras la ceremonia empezaba, Yoda afirmó que Tano era humilde y valiente, lo que creía que era un signo de madurez. Yoda añadió que se encontraba en el camino correcto para convertirse en Maestra Jedi, antes de premiarla con un complemento para su trenza de Padawan.[41]

Experiencia política

Más adelante, Ahsoka entrenó con Anakin Skywalker en el uso de armas duales, y adoptó un shoto amarillo junto con su sable de luz original. A medida que el Senado Galáctico debatía sobre los préstamos financieros del Clan Bancario InterGaláctico para financiar la creación de más soldados clon, Tano tuvo dificultades para entender la política de guerra. Por lo tanto, Anakin Skywalker la dejó con la senadora Padmé Amidala para que le diera una lección sobre política para reafirmar la creencia de Tano en la justicia de la causa de la República Galáctica. En contra de los deseos de Skywalker, Padmé tenía otros planes y, finalmente, trató de utilizar a Tano para negociar un tratado de paz con los separatistas.[42]

AhsokaLuxTalk-HOBS

Ahsoka y Lux Bonteri discuten las diferencias entre la República y los separatistas.

Después de que el Senado Galáctico aprobase una ley para que fuese ilegal la celebración de reuniones oficiales con los separatistas para no legitimar su movimiento rebelde, Amidala se aprovechó de la condición de Jedi de Ahsoka con el fin de viajar al mundo neutral de Mandalore. A partir de ahí, Tano y Amidala subieron a una nave rumbo hacia el mundo separatista de Raxus Secundus. A su llegada, la pareja se reunió con Mina Bonteri, una antigua mentora de Amidala y miembro del Parlamento Separatista. Mientras Amidala hablaba con Bonteri de acabar con la guerra a través de negociaciones pacíficas, Ahsoka se reunió con el hijo de Bonteri, Lux. Después de una breve charla acerca de sus diferencias, ambos entablaron amistad. Cuando Bonteri propuso al Parlamento Separatista abrir una negociación de paz con el Canciller Supremo Sheev Palpatine, la moción fue aprobada por mayoría de votos. Ahsoka y la senadora Amidala regresaron a Coruscant para transmitir la noticia al Canciller Supremo Palpatine y que el Senado Galáctico pudiera tener también la oportunidad de votar la finalización de la guerra. Sin embargo, justo antes de que los senadores de la República pudiesen votar sobre el tema, Coruscant fue golpeado inesperadamente por un atentado. Varios droides lograron destruir el núcleo de energía del planeta, inutilizando así todos los sistemas eléctricos del planeta, extendiéndose el pánico, la confusión y el caos.[42]

Cuando se confirmó que el atentado era un ataque separatista, el Senado Galáctico canceló la votación y muchos senadores apoyaron redirigir activos económicos a los fondos destinados a crear soldados clon adicionales. Después de que la sesión concluyese, Skywalker se reunió con Ahsoka de nuevo y expresó su profunda decepción por el hecho de que Ahsoka hubiera participado en una actividad peligrosa e ilegal prohibida por la ley republicana. Aunque Tano intentó defender sus acciones señalando las propias tácticas poco ortodoxas de Skywalker, Anakin desestimó su argumento y afirmó que Ahsoka había ido demasiado lejos al reunirse con los separatistas en secreto. Finalmente, Ahsoka comentó que la política no era tan blanca o negra como ella se pensaba.[42]

Viaje a Mortis

«Hay muchas contradicciones en ti, y en él. ¡Te lo advierto, no vas a progresar si sigues con tu Maestro! ¡Sal de este planeta!»
―Una visión de Ahsoka adulta advierte del peligro que supone Anakin Skywalker[fuente]
SonRevealed

El lado oscuro de la Fuerza, personificado en el Hijo, se muestra ante Ahsoka y Obi-Wan.

Después de que el Consejo Jedi recibiera una señal de socorro Jedi de dos mil años de antigüedad desde el sistema Chrelythiumn, Ahsoka acompañó a su maestro Anakin Skywalker y a Obi-Wan Kenobi para descubrir el origen exacto de la transmisión. El Capitán Clon Rex ayudó en la búsqueda, permaneciendo a bordo de un destructor estelar. Aunque ambas partes llegaron a un punto de encuentro, los Jedi fueron incapaces de encontrar a Rex; y Rex tampoco podía detectar a los Jedi. En ese momento, los sistemas de alimentación y comunicación de la nave Jedi se desactivaron a la vez que una fuerza misteriosa tiró de la lanzadera hacia una estructura en forma de cristal gigantesco; tras eso, los tres Jedi quedaron inconscientes.[43]

Al recobrar el conocimiento, los Jedi se despertaron dentro de la cabina de su nave, aterrizada en un planeta desconocido. A medida que examinaban el paisaje del planeta, un mundo sin consolidar por las leyes de la naturaleza y muy intenso en la Fuerza, los Jedi se encontraron con una mujer misteriosa que se hacía llamar la "Hija", la representación física del lado luminoso de la Fuerza. A pesar de su evidente interés por Skywalker y sin saber nada de ella, los Jedi no tenían otra alternativa que aceptar la oferta de la Hija para darles a conocer a su "Padre", el equilibrio y el orden dentro de la Fuerza. Pero, después, mientras que la hija los guiaba por el estrecho camino de un acantilado, un desprendimiento de rocas fue causado intencionadamente por un desconocido, lo que bloqueó el camino, dejando a Tano y a Kenobi separados de Skywalker y la Hija. Cuando la Hija se fue a enfrentar a su misterioso atacante, Skywalker decidió seguirla mientras que Tano y Kenobi regresaron a su nave dañada con la esperanza de reparar sus sistemas de comunicación con el fin de pedir ayuda.[43]

Tras regresar al lugar del accidente al caer la noche, Tano y Kenobi descubrieron que su nave había desaparecido. Luego fueron confrontados inmediatamente por el "Hijo", hermano de la Hija y el lado oscuro de la Fuerza personificado. Cuando el Hijo preguntó si Skywalker era verdaderamente el Elegido, Ahsoka y Obi-Wan encendieron sus sables de luz, creyendo que la figura oscura era un Lord Sith. El Hijo fácilmente despojó a los dos Jedi de sus armas. Antes de marcharse, les aconsejó que se refugiasen en una cueva cercana a fin de evitar los rayos de la tormenta que se aproximaba.[43]

Ahsoka-Zukunft (1)

Ahsoka tiene una visión de sí misma como adulta.

Mientras dormía dentro de la cueva, Ahsoka fue despertada por el sonido de su propia voz. A continuación, tuvo una visión de su yo futuro, una Ahsoka Tano adulta que la buscaba para advertir a su yo más joven sobre el gran peligro que suponía Anakin Skywalker, quien había plantado semillas del lado oscuro en ella. La visión, también aconsejaba a Ahsoka alejarse de su maestro cuanto antes. Antes de desaparecer, la visión de Ahsoka adulta dio una última advertencia a la versión más joven de sí misma, insinuando que el futuro de Ahsoka nunca podría llegar a pasar mientras ella permaneciese al lado de su maestro.[43]

Cuando Anakin se enfrentó al Padre, se consiguió comprobar si él era realmente el Elegido. Para lograr esto, el Padre utilizó a sus hijos para capturar a Ahsoka y a Obi-Wan. Mientras que Kenobi fue capturado por la Hija, Ahsoka estaba indefensa y a merced del Hijo. El Padre luego trató de forzar a Skywalker para que eligiese quién viviría y quién moriría de entre los dos. Skywalker, no queriendo renunciar a su antiguo Maestro ni a su Padawan, utilizó la Fuerza en un intento de que el Hijo y la Hija se postraran ante él. Anakin logró su objetivo con éxito, y por eso, demostró su capacidad de crear y mantener el equilibrio entre las dos partes en conflicto de la Fuerza. Pero en lugar de permanecer en Mortis para completar su destino, Skywalker optó por irse con Tano y Kenobi y abandonar Mortis en su ya recuperado transporte.[43]

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Ahsoka, envenenada por el lado oscuro de la Fuerza.

El Hijo, por otra parte, no estaba dispuesto a permitir que el Elegido escapase sin que antes sucumbiese al lado oscuro de la Fuerza. Apareciendo a bordo de la nave de los Jedi, el Hijo agarró a Ahsoka y la obligó a salir de la nave con él, llevándola a su torre sabiendo que Skywalker saldría en su búsqueda. Mientras estaba encadenada en su celda de la torre e intentaba liberarse, Tano fue sorprendida por una pequeña criatura aparentemente inofensiva. A pesar de que la criatura trató de profundizar en los pensamientos y temores más profundos de Tano, Ahsoka permaneció firmemente fiel a la creencia de que su maestro la rescataría a cualquier precio. Aunque la criatura ayudó a Ahsoka a liberarse de sus cadenas, trató de convencerla para que se olvidase de Skywalker. Cuando Tano dejó claro que no se iba a volver voluntariamente contra su maestro, la criatura hundió sus dientes en el brazo de Ahsoka. Mientras ella rápidamente perdía el conocimiento, la criatura se reveló como el Hijo disfrazado. Al carecer del tiempo necesario para seducir al joven Jedi a caer voluntariamente en la oscuridad, el Hijo decidió llevar a Ahsokaal lado oscuro infectándola con su mancha tras morderla. Tano estaba completamente indefensa ante el poder del lado oscuro; sus efectos la convirtieron física y psicológicamente en un ser odioso con una sed de sangre para la batalla insaciable y un sentido inquebrantable de fidelidad al Hijo.[4]

Mientras tanto, Skywalker logró escalar la torre del Hijo, sólo para encontrar a su aprendiz esperándolo. Aunque aliviado inicialmente por reunirse con Tano, el alivio de Skywalker se convirtió en incomodidad cuando notó un cambio innegable en la personalidad de su Padawan. Ahsoka, profundamente inmersa en el poder del lado oscuro, inconscientemente se centró cada vez más en sus temores y resentimientos ocultos. Fue entonces cuando ella finalmente reveló sus propias frustraciones con Skywalker, juzgando a su maestro de ser excesivamente crítico y estar constantemente insatisfecho con Tano como su Padawan. Anakin trató de convencer a Ahsoka para volver a la luz, pero ella se negó, declarando su lealtad al Hijo y la causa del lado oscuro para el mayor bien de la galaxia. Con eso, Tano anunció a su maestro un ultimátum — unirse al Hijo y abrazar el lado oscuro al matarla o rechazarlo y morir por la mano de su propia aprendiz. Cuando Skywalker se negó a pelear o dañar a su alumna, Ahsoka respondió en consecuencia, encendió su sable de luz y cargó contra su maestro en una locura frenética.[4]

Ahsoka se apoderó de la ofensiva al desatar una andanada de golpes de sable a su maestro, quien mantuvo una postura defensiva a fin de evitar que ella lo matase sin dañar a Tano en el proceso. Durante la lucha, Ahsoka reveló algunos de sus sentimientos ocultos de amargura y enojo hacia Skywalker, en particular su odio a ser llamada "Chulita" por su maestro. Incluso con la intervención de Kenobi, que había llegado a la torre junto a la Hija para enfrentar al Hijo, Tano acogió con confianza el reto y activó su shoto con el fin de atacar a los dos Jedi con sus dos sables. Incapaz de superar a Ahsoka sin herirla, Kenobi reveló que la Hija le había ayudado a adquirir una daga que podría matar al Hijo. Al darse cuenta de la nueva amenaza que los Jedi suponían para el Hijo, Ahsoka incrementó sus ataques, intentando recuperar la daga.[4]

Al mismo tiempo, el Hijo y la Hija se enfrentaron entre sí en la sala del trono de la torre. Su batalla, sin embargo, fue llevada a un final inesperado por el Padre, que utilizó su poder para expulsar a ambos al patio. Ahsoka rompió su propio enfrentamiento con Anakin y Obi-Wan para ver como el Hijo se levantaba para librarse del Padre de una vez por todas. Cuando el Hijo atacó a su Padre con un poderoso bombardeo de rayos de Fuerza, Ahsoka sonrió con aprobación mientras el Hijo denunciaba al Padre como alguien débil y sin sentido común. A medida que el lado oscuro se hacía más poderoso, el Hijo venció y derrotó al Padre poniéndole de rodillas al incrementar sus ataques con los rayos. Aprovechando un momento de distracción, Kenobi arrojó la daga a Skywalker para que pudiera matar al Hijo por detrás. Sin embargo, Ahsoka interceptó la daga antes de que su maestro pudiera atraparla y, rápidamente, se dirigió al lado del Hijo. Con el Padre derrotado y los otros incapaces de hacer nada al respecto, el Hijo se regodeó de cómo todo había funcionado a la perfección, de acuerdo con sus planes. Cuando él ordenó a Tano entregarle la daga, ella obedeció sin dudas, ignorando el último intento de su maestro para instarla a resistir el lado oscuro. Ya no viendo ningún otro uso para ella, el Hijo agradeció a Tano todo lo que había hecho antes de drenar la fuerza vital de su cuerpo, dejándola al borde de la muerte.[4]

AhsokaFirstDeath-AOM

Ahsoka yace muerta poco antes de ser resucitada.

Aunque el Hijo tenía la intención de utilizar la daga para matar a su padre, sin darse cuenta, apuñaló a la Hija en la espalda cuando ella usó su cuerpo para proteger a su Padre. Horrorizado por haber asesinado a su hermana a quien aún amaba, el Hijo echó a volar sumido en una rabia tremenda. Skywalker le rogó al Padre que salvase a Ahsoka antes de que fuera demasiado tarde. Con la ayuda del Padre, Skywalker actuó como un conducto para transferir el último soplo de vida de la Hija a Tano, con lo que la Padawan de Anakin volvió a la vida purgada de la oscuridad con la que el Hijo le había infectado. Como efecto secundario, Ahsoka no retuvo ningún recuerdo de su conversión al lado oscuro. Sin otra opción, los Jedi dejaron al Padre para que llorase la pérdida de la Hija mientras ellos regresaban a su transporte para poder huir de Mortis y el Hijo.[4]

Cuando Tano intentó reparar la nave para su escape de Mortis, Kenobi y Skywalker debatieron sobre si debían o no salir antes de derrotar al Hijo, debido a la gran amenaza que planteaba en su condición totalmente corrompida. Skywalker tomó la decisión de enfrentar al Hijo y, poco después, Kenobi persiguió a su antiguo alumno, sólo para descubrir que Anakin había abrazado voluntariamente el lado oscuro y se había unido al Hijo por necesidad. Después de describir vagamente las visiones del futuro que lo llevaron a tomar su decisión, Skywalker y el Hijo se dirigieron hacia la nave con la intención de abandonar Mortis para alertar a los Sith del destino de Skywalker.[44]

Jedi jumpspeeder-GoM

Ahsoka utiliza un speeder para escapar de su maestro corrompido.

Obi-Wan contactó urgentemente con Ahsoka y le ordenó abandonar la nave, pero no antes de deshabilitar los motores. Aunque inicialmente contrariada por tener que deshacer su duro trabajo, Ahsoka cumplió cuando Kenobi reveló que Anakin se dirigía a su posición y había caído en el lado oscuro de la Fuerza. A pesar del impacto inicial por la revelación de la caída de su maestro en la oscuridad, Ahsoka abandonó discretamente la nave para poner distancia entre ella y su maestro corrompido. No pasó mucho tiempo hasta que Skywalker se dio cuenta de que su Padawan había saboteado sus esfuerzos por escapar de Mortis. Con el fin de evitar la posibilidad de que Kenobi y Tano recibieran más ayuda de parte del Padre, el Hijo dejó a Skywalker para recuperar la daga de la tumba de su hermana. Fue entonces cuando el Padre aprovechó la oportunidad para acabar con los recuerdos de Skywalker de las visiones que había tenido, devolviendo así a Anakin al lado luminoso, por el momento.[44]

Ahsoka y Obi-Wan se reunieron con Anakin y el Padre en el monasterio, donde se encontraron con el Hijo una vez más. Rechazando la última súplica de su Padre para que se alejase del lado oscuro, el Hijo luchó y venció fácilmente a sus oponentes, contrarrestando sus ataques con su propio poder. La pelea llegó a un final inesperado, sin embargo, cuando el Padre se clavó la daga a sí mismo. Así, el Padre se sacrificó para evitar que el Hijo robara su poder, y al mismo tiempo robó los poderes del Hijo. El Hijo, conmocionado e indefenso, no pudo evitar que Skywalker lo atacase con un sable de luz atravesándole el pecho. Con las tres encarnaciones de la Fuerza destruidas, el reino de Mortis fue destruido en una explosión de luz.[44]

Al despertar, Tano, Skywalker y Kenobi se encontraron una vez más en su nave, flotando en el espacio. En ese momento, fueron contactados por el Capitán Rex y se confundieron al descubrir que tan sólo había pasado un momento desde que perdieron toda la energía y comunicaciones de la nave. Para ellos, el tiempo que habían pasado en Mortis había sido considerablemente más largo. Aunque todavía estaban un tanto confundidos por toda su terrible experiencia, Ahsoka y sus compañeros Jedi se reunieron con Rex en un Destructor Estelar de la República Galáctica.[44]

Rescatando a Even Piell

«Estuvieras destinada a esta misión o no, ahora eres la parte más importante de ella.»
―Piell le dice a Tano lo importante que es como portadora de información antes de su muerte[fuente]
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Tano lucha contra un droide cangrejo en Lola Sayu.

Después de una conferencia del Maestro Jedi Plo Koon acerca de una misión vital, Ahsoka quedó consternada al enterarse de que su maestro, Anakin Skywalker, había decidido que ella no iba a participar en el rescate del Maestro Jedi Even Piell. Skywalker, habiendo juzgado que el riesgo era demasiado grande para Ahsoka, había decidido no arriesgar la vida de su aprendiz en la peligrosa misión. Mientras los soldados clon de Skywalker y Obi-Wan Kenobi estaban preparados para ser congelados en carbonita para poder infiltrarse en la prisión conocida como la Ciudadela, Tano habló con el Maestro Plo Koon acerca de la decisión de su maestro, y le dijo que, en su opinión, ella era ella quien debía decidir cuando poner en riesgo o no su propia vida, no Skywalker.[45]

Tan pronto como la lanzadera Tipo B clase Sheathipede de R2-D2 pasó por el bloqueo que rodeaba Lola Sayu, Skywalker y Kenobi descubrieron que Ahsoka se había colado de polizón en el grupo tras congelarse ella misma anteriormente, a pesar de que afirmaba haber sido asignada al equipo por el Maestro Plo Koon. Aunque estaba disgustado por haber sido desobedecido por su propia estudiante, Skywalker, a regañadientes, permitió a Ahsoka acompañar al grupo.[45]

Después de subir cuidadosamente un peligroso acantilado, el progreso del grupo se detuvo repentinamente; su única entrada a la Ciudadela estaba custodiada por un escudo de rayos. Al ser la miembro más pequeña del grupo, Tano fue la única capaz de meterse en el sistema de ventilación, lo que permitió que desactivase el escudo desde dentro de la base. Una vez dentro, Tano y sus compañeros fueron capaces de rastrear al Maestro Piell, que había sido recluido en una celda de detención con el capitán Wilhuff Tarkin y varios clones. Dado que la información sobre las coordenadas de la Ruta Nexus se había dividido entre el Maestro Jedi y su capitán, se decidió que el grupo se dividiría en dos para disminuir las posibilidades de que las dos mitades cayesen en manos separatistas. Tano acompañó a su maestro y al capitán Tarkin, junto con los soldados CAR CT-1409 "Echo" y CT-5555 "Cincos", y algunos otros clones. Los dos grupos planearon encontrarse en el transporte en el que R2-D2 les esperaba.[45]

Mientras Kenobi y Piell llevaban a su grupo en una dirección diferente, el equipo de Skywalker decidió hacer uso de un sistema de túneles antiguo de la Ciudadela con el fin de evitar a las fuerzas separatistas tanto como les fuera posible. Mientras Skywalker protegía al equipo por la retaguardia, Ahsoka fue la encargada de dirigir al grupo hacia adelante, una decisión que no tenía la aprobación del capitán Tarkin. A medida que avanzaban a través de los túneles, Tano se convirtió en el objeto de crítica de Tarkin. A pesar de las garantías del Capitán Rex, que tenía fe en las habilidades de Ahsoka debido a sus misiones anteriores con ella, Tarkin no quedó convencido de que una simple niña estuviese en condiciones de dirigir exitosamente la misión. Luego, Tarkin comenzó a hablar de su admiración personal por la infraestructura y el excepcional sistema de defensa de la Ciudadela. A Ahsoka le perturbaba que al capitán le gustase tanto el lugar en el que estaban atrapados, pero Tarkin la reprendió por tener poca visión y señaló que toda su terrible experiencia le había dado pruebas de que la Ciudadela era una ventaja altamente estratégica. Lo único que lamentaba era que hubiese caído bajo el control de los separatistas, en lugar de la República Galáctica. Ahsoka quedó aún más sorprendida cuando su maestro se mostró de acuerdo con la opinión del capitán.[46]

Poco después, sin embargo, el grupo se detuvo ante lo que parecía ser un callejón sin salida. Justo cuando un trío de superdroides de combate y varios droides comando armados con escudos de energía asaltaron al grupo, Skywalker exigió saber por qué Tano había detenido el avance del equipo. Cuando Ahsoka declaró que había una enorme pared que bloqueaba su paso, sin darse cuenta dio a entender a su maestro que había mentido acerca de haber sido asignada a la misión, ya que Skywalker razonó que el Maestro Plo Koon habría informado a Ahsoka acerca de que se debía volar esa pared con detonadores térmicos según el plan acordado. Aprovechando la oportunidad, Tano hizo uso de los detonadores térmicos para destruir la pared y a los droides de combate.[46]

Aunque Ahsoka y su equipo fueron capaces de reunirse con Kenobi y su grupo en el punto de encuentro, se vieron rodeados por las fuerzas droides bajo el mando de Osi Sobeck, el sádico guardián de la Ciudadela. Sus esfuerzos por escapar del planeta fracasaron, y a pesar de que escaparon con pequeñas bajas, Echo aparentemente murió en un fallido intento de evitar la destrucción de su nave. Con su único medio de escape destruido, el Consejo Jedi se vio obligado a poner en marcha una operación de rescate secundaria, basada en la fuerza más que en el sigilo.[46]

Con un nuevo conjunto de coordenadas que les indicaban el lugar donde serían recogidos, Ahsoka y el grupo se abrieron paso a través de territorio hostil tan sigilosamente como les fue posible. Durante ese tiempo, Ahsoka expresó su disgusto por el capitán Tarkin y se preguntó por qué el maestro Piell había compartido la mitad de la información de la Ruta Nexus con él. Skywalker se apresuró a salir en defensa de Tarkin, afirmando que Tarkin estaba desilusionado con la Orden Jedi por la forma en que el Código Jedi restringía a los Jedi de hacer lo que fuera necesario para ganar las Guerras Clon. Tano rechazó el punto de vista de Tarkin, un sentimiento compartido por Kenobi, pero Skywalker replicó que, independientemente de su forma de pensar, Tarkin era un buen y capaz oficial de la República.[47]

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Las últimas palabras de Piell fueron pasar su mitad de las coordenadas de la Ruta Nexus a Ahsoka.

Cuando fueron atacados por un grupo de anoobas, acompañado de un escuadrón de droides montados en STAPs, Tano y Piell se separaron de los demás, y lucharon defendiéndose de varias unidades enemigas. Sin embargo, aunque ganaron la pelea, Piell fue atacado de repente y mutilado por un anooba. Tano trató de salvar al Maestro Jedi, pero fue demasiado tarde, pues las heridas de Piell fueron fatales. Antes de su muerte, Piell confió a Tano su mitad de las coordenadas de la Ruta Nexus, a pesar de la confesión de Tano de que había mentido acerca de ser asignada a la misión. Su orden final fue que Tano no compartiera la información con nadie más, excepto con el Consejo Jedi. Cuando Piell murió, Tano llevó su pequeño cadáver en su hombro mientras el resto del grupo observaba en silencio.[47]

A pesar de tener poco tiempo, el grupo celebró un breve funeral ceremonial en honor al Maestro Jedi caído. Al llegar al punto de extracción, Ahsoka y los demás se vieron atacados por más droides separatistas, dirigidos personalmente por el Comandante Sobeck. Durante la lucha, después de que Cincos echase a Sobeck fuera de su STAP, Tano observó como Tarkin, armado con un rifle bláster E-5, se acercaba al alcaide. Con su enemigo indefenso y a su merced, Tarkin aprovechó la oportunidad para ejecutar al phindiano con un único disparo en el pecho, sólo para que Sobeck lo esquivase y saltara rápidamente sobre el capitán. Enfurecido, Sobeck declaró que si no podía obtener la información de la Ruta Nexus, entonces él moriría junto con Tarkin. Ahsoka, sin embargo, logró salvar la vida de Tarkin justo a tiempo al atravesar el pecho de Sobeck con su sable de luz, matándolo al instante. A pesar de sus reservas iniciales sobre la joven Jedi, Tarkin dio las gracias a Tano por salvar su vida y también felicitó a Skywalker por la buena formación de Tano.[47]

Cuando llegaron más refuerzos droides, un par de cañoneras de la República Galáctica, dirigidas personalmente por los Maestros Jedi Plo Koon, Adi Gallia, Saesee Tiin y Kit Fisto, llegaron para rescatar a Ahsoka y su grupo. Después de abordar una de las naves de combate, el grupo regresó a toda prisa a uno de los destructores estelares de la República. Una vez a salvo a bordo, el destructor estelar volvió a Coruscant, completando así la misión de rescate con éxito.[46]

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Ahsoka y Tarkin poseían cada uno una mitad de las coordenadas de la Ruta Nexus tras regresar a Coruscant.

A su regreso a la capital galáctica, Ahsoka y el grupo llegaron al Templo Jedi, donde fueron recibidos por los miembros del Consejo, el Maestro Yoda y el Maestro Mace Windu, así como una pequeña escolta de soldados clon. Tras lamentar la pérdida del Maestro Even Piell, Yoda pretendió informarse tanto de Tarkin como de Tano, ya que cada uno poseía la mitad de la información de las coordenadas de la Ruta Nexus. Sin embargo, Tarkin respetuosamente se negó a cumplir con el Consejo y declaró que sus órdenes eran traer su mitad de la información al Canciller Supremo Sheev Palpatine. Ahsoka respondió afirmando que la orden del Maestro Piell fue la de no compartir su mitad de la información con nadie que no fuera el Consejo Jedi, y por lo tanto dejó claro a Tarkin de que el Canciller no recibiría la información completa de la Ruta Nexus. Debido a la situación de evidente estancamiento, Yoda aseguró a todos que él y el Canciller trabajarían juntos sobre la mejor manera de manejar el dilema.[46]

Antes de salir a atender otros asuntos, Skywalker todavía sospechaba que su aprendiz no sólo le había desobedecido, sino que también había mentido acerca de ser asignada a la misión. Por lo tanto, él personalmente habló con Plo Koon y preguntó si el Maestro Jedi era el responsable de la asignación de Ahsoka al equipo. A pesar de que era claramente consciente de que Tano había mentido a su propio maestro, el Maestro Koon decidió cubrir el engaño de la joven Jedi afirmando que él la envió con el equipo de rescate. Mientras Koon escoltaba a Tano lejos de la mirada sospechosa de su maestro, Tarkin felicitó a Skywalker, lo cual el Caballero Jedi con gusto apreció, consolidando así su recién descubierta amistad.[46]

Felucia y Wasskah

Ahsoka: «Podríamos haberlos detenido.»
Kalifa: «No, Ahsoka. No somos salvadores aquí. Aquí, somos supervivientes.»
— Ahsoka Tano y Kalifa en Wasskah [fuente]
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Ahsoka Tano en Felucia.

Durante la Segunda Batalla de Felucia, Ahsoka lideró un ejército de clones, junto a su maestro, Anakin Skywalker y el Maestro Jedi Plo Koon, contra las fuerzas droides separatistas que ocupaban el planeta. Su regreso a Felucia fue instigado por la necesidad de destruir un puesto de avanzada separatista que había sido reforzado por el general Grievous. Mientras Plo Koon y el comandante clon Wolffe guiaban al Wolfpack en un asalto directo contra la posición del enemigo, Ahsoka y un escuadrón de soldados clon atacaron desde detrás del puesto de avanzada. Pero, a medida que el equipo de Tano se preparaba para escalar la pared del puesto, Ahsoka fue emboscada y dejada inconsciente por una red aturdidora. En medio de la batalla, los clones no se dieron cuenta de que su oficial Jedi había sido secuestrada por un cazador trandoshano.[48]

Más tarde, Ahsoka se despertó en el interior de una nave trandoshana, secuestrada, desarmada y encerrada en una jaula. A través de un compañero de prisión, Tano descubrió que ella y los otros cautivos iban a ser las presas de caza de los trandoshanos, a quien les gustaba practicar ese deporte. Garnac, el líder del equipo de caza trandoshano, decidió reservar a Tano como una presa especial para su hijo, Dar, que ávidamente buscaba la oportunidad de cazar y matar a un Jedi. Una vez que el transporte llegó a la luna trandoshana de Wasskah, Tano y los prisioneros fueron llevados a la Isla Cuatro, donde fueron puestos en libertad en la selva como presa para los cazadores trandoshanos.[48]

Aunque algunos de los prisioneros fueron asesinados a tiros casi inmediatamente por los cazadores, Ahsoka se salvó gracias a la ayuda de tres presos adolescentes, Kalifa, Jinx y O-Mer, los cuales habían sido Iniciados Jedi antes de su captura y encarcelamiento en Wasskah. Inicialmente, Tano estaba aliviada por haber descubierto al trío sensible a la Fuerza, pero también estaba consternada al enterarse de que las duras experiencias que sufrieron en la isla los habían convertido en estrictos supervivientes. Ahsoka era la única Jedi y la única que creía que valía la pena el riesgo de muerte por ayudar a otros prisioneros. Los tres ex iniciados, sin embargo, no tenían ningún interés o deseo de ayudar a cualquiera de los otros presos.[48]

A diferencia de los otros, Ahsoka se burló de la idea de esconderse ante el temor durante el resto de su vida. Por eso, ella tomó medidas para emboscar a un cazador solitario. Sus acciones fueron suficientes para motivar a los iniciados a tomar medidas también. Pero, tantos años de sufrimiento ocasionaron que Kalifa diera rienda suelta a su ira y casi estrangulara con la Fuerza a un cazador, hasta el punto de llevarlo a la muerte. Tano convenció a Kalifa para que resistiera al lado oscuro de la Fuerza pero, al perdonar al trandoshano, sus vidas fueron puestas en peligro en cuanto el cazador pidió ayuda.[48]

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Ahsoka elabora un plan con Chewbacca.

Después de escapar de los cazadores, Kalifa manifestó su confianza en Ahsoka, una estudiante avanzada en el uso de la Fuerza, lo cual podría ayudar a los iniciados a regresar a la senda de los Jedi. Tano sabía que cualquier esperanza de supervivencia dependía de la neutralización de los cazadores y, por tanto, en base a su experiencia militar, ideó un plan para actuar contra los trandoshanos. Sin embargo, antes de que pudieran ejecutar su plan, Dar atacó a Tano y a Kalifa. Durante la lucha, Kalifa resultó herida, pero Tano logró matar al joven cazador trandoshano. Enfurecido por la muerte de su hijo, Garnac abrió fuego desde la distancia y logró herir fatalmente a Kalifa. En los últimos momentos de su vida, Kalifa imploró a Tano que salvase a Jinx y a O-Mer, lo cual Ahsoka, entristecida, aceptó. Con Kalifa muerta, Ahsoka se retiró a encontrar a los dos últimos iniciados restantes.[48]

A pesar de la pérdida de Kalifa, Tano decidió seguir con su plan, por lo que recurrió a la ayuda del resto de los iniciados. Ahsoka, Jinx y O-Mer se centraron en la captura del crucero trandoshano que transportaba a los prisioneros a Wasskah, con la esperanza de utilizar la nave para escapar de la luna. Ahsoka y los iniciados tuvieron éxito en última instancia en su objetivo, aunque con cierta oposición de los trandoshanos. No obstante, el crucero fue derribado por accidente y poco después de que fuese destruido, el trío descubrió a un prisionero wookiee solitario llamado Chewbacca, quien sobrevivió al accidente.[49]

Aunque su intento de fuga había fracasado, Chewbacca anunció que podía ponerse en contacto con su cercano mundo natal, Kashyyyk, para recibir asistencia, pero que sólo podía hacerlo recopilando algunos componentes necesarios de los restos del crucero trandoshano con el fin de construir un transmisor. Ahsoka y Chewbacca regresaron sigilosamente al crucero, que estaba, sin embargo, siendo patrullado y vigilado por un francotirador después de que los trandoshanos se diesen cuenta del “recién descubierto” sentido de audacia de los iniciados. Mientras que O-Mer y Jinx emboscaban al francotirador, Ahsoka y Chewbacca completaron su objetivo. Finalmente, el francotirador fue abrumado y sometido por la fuerza combinada de los tres Jedi y Chewbacca. Sin embargo, el transmisor de Chewbacca no funcionó correctamente en un primer momento, y Jinx, cuyo enojo e impaciencia había aumentado, sugirió el uso del trandoshano que habían capturado para atraer a sus compañeros a tierra y secuestrar una vaina de caza, que luego podrían utilizar para llegar a una fortaleza flotante trandoshana y matar a los trandoshanos restantes. Ahsoka trató de convencer a los impulsivos iniciados para que tuviesen paciencia, pero Jinx y O-Mer se negaron a seguir su consejo. No dispuesta a dejar solos a los iniciados, Ahsoka les acompañó con Chewbacca a su lado.[49]

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Ahsoka se enfrenta a Garnac.

Ahsoka, Chewbacca, Jinx y O-Mer lograron capturar una vaina de caza. Aunque llegaron a la fortaleza flotante de los cazadores, no pudieron evitar que el guardia advirtiera a sus compañeros de caza. A pesar de sus mejores esfuerzos, el grupo fue reducido después de una breve pero feroz lucha. En ese momento, sin embargo, una pequeña fuerza armada de guerreros wookiees, encabezada por el general Tarfful, atacó la base con la ayuda de los cazarrecompensas Sugi y Seripas. Aliviados al darse cuenta de que su transmisor envió con éxito una llamada de socorro a Kashyyyk, Ahsoka y Chewbacca se lanzaron al ataque contra los trandoshanos restantes. A medida que el tiroteo se intensificaba, el último de los cazadores fue asesinado mientras Garnac pereció a manos de Ahsoka. Poco después, los Jedi se separaron de Chewbacca, quien regresó con sus compañeros wookies a Kashyyyk.[49]

Ahsoka cumplió su promesa a Kalifa y trajo a Jinx y a O-Mer con ella al Templo Jedi de Coruscant. Su maestro, Anakin Skywalker, fue de los primeros en darle la bienvenida. A pesar de que estaba visiblemente eufórico de ver a su aprendiz sana y salva, Skywalker se culpó por su incapacidad para protegerla. Ahsoka alivió a su maestro expresando su gratitud hacia él. Todo el calvario en Wasskah fue una revelación para Ahsoka . Sin el entrenamiento y las enseñanzas de Skywalker, Ahsoka nunca habría sobrevivido contra un grupo de cazadores despiadados y salvajes. Por primera vez, Tano realmente se dio cuenta de lo mucho que le beneficiaba ser la aprendiz del Elegido. Con un nuevo sentido de respeto mutuo, Ahsoka y su maestro se inclinaron el uno ante el otro, aliviados de reunirse una vez más.[49]

Guerra Civil en Mon Cala

Ahsoka Tano: «El ejército gungan eran los últimos refuerzos de la República. Ya no habrán más.»
Lee-Char: «El fracaso es mío, no de la República.»
— Ahsoka Tano y Lee-Char [fuente]
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Ahsoka intenta evadir a Riff Tamson

Durante las Guerras Clon, la estabilidad de Mon Cala fue amenazada por el estallido de una guerra civil. De las dos especies dominantes del planeta, los mon calamari mantenían su lealtad a la República Galáctica. Sin embargo, los quarren optaron por la secesión y una alianza con la Confederación de Sistemas Independientes. La República Galáctica trató de disipar las tensiones en Mon Cala mediante la diplomacia, enviando a la senadora Padmé Amidala y el Caballero Jedi Anakin Skywalker, a supervisar las negociaciones entre los mon calamari y los quarren.[50]

La incapacidad de Amidala para resolver la crisis a través de métodos pacíficos fue aprovechada por Riff Tamson, el comandante separatista enviado para representar los intereses mutuos de la Confederación y los quarren. Después de tan solo entretenerse con la idea de la diplomacia, los quarren – ayudados por el militar separatista – lanzaron un ataque sorpresa contra los mon calamari. En respuesta a las acciones agresivas de los quarren, el Consejo Jedi envió una fuerza armada de soldados SCUBA, liderados por el general Kit Fisto y la comandante Ahsoka Tano.[50]

A pesar de la adición de soldados clones y una llamada desesperada de ayuda a los guerreros gungan, Tamson resultó ser un comandante eficiente especializado en la guerra acuática. Con la derrota y la esclavitud de los mon calamari; los oficiales Jedi supervivientes y los soldados de la República Galáctica, entre ellos el capitán Gial Ackbar, fueron tomados como prisioneros de los separatistas. Ahsoka fue capaz de evitar su captura, sólo para encontrarse varada en Mon Cala con la única responsabilidad de proteger al príncipe Lee-Char, el monarca derrocado de los mon calamari.[51]

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Ahsoka y Ackbar reconfortan a Lee-Char.

Ahsoka y Lee-Char, sabiendo que superaban en número a los separatistas, decidieron tratar de reunir a su pueblo. Así, Tano y el príncipe decidieron infiltrarse en uno de los campamentos de prisioneros para encontrar al capitán Ackbar. Ambos pudieron entrar, y luego, se reunieron con el comandante clon Monnk que los llevó hasta un herido capitán Ackbar y la senadora Meena Tills. Tano y el Lee-Char fueron capaces de convencerlos para tener a sus fuerzas listas si Nossor Ri y los quarren decidían unirse a ellos. Sin embargo, varios acuadroides les encontraron. Ahsoka sacó sus sables de luz, pero Lee-Char le dijo que esperase. Ahsoka y Lee-Char fueron llevados a la sala del trono donde Tamson y Nossor Ri decidieron ejecutar a Lee-Char públicamente para destruir cualquier esperanza de victoria de los mon calamari. Entonces, Ahsoka fue llevada a presenciar la ejecución junto a sus compañeros Jedi y más presos. No obstante, cuando los soldados de Tamson iban a ejecutar a Lee-Char; Nossor Ri y los quarren se levantaron contra Tamson. Los quarren dieron a Tano sus sables de luz de nuevo y entonces ella liberó a sus compañeros Jedi de las jaulas en las que estaban atrapados. Después, Tamson y sus fuerzas fueron derrotadas, y Ahsoka, junto con los otros Jedi, asistió a la coronación del príncipe Lee-Char como 83º Rey de Mon Cala.[52]

Batalla de Umbara

Ahsoka, junto a Barriss Offee, luchó en el espacio durante la Batalla de Umbara. Juntas, consiguieron volar a través del bloqueo establecido sobre el planeta permitiendo a las fuerzas clon y Jedi aterrizar en él, en un esfuerzo por capturarlo.[53]

Batalla de Kiros

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Ahsoka luchando durante la Batalla de Kiros.

Diez rotaciones después de la última comunicación del maestro Yoda con la colonia togruta de Kiros, Ahsoka, junto a Anakin Skywalker, Obi-Wan Kenobi y el Capitán Clon Rex aterrizaron en el planeta. Ahsoka y los otros, bajaron en sus deslizadores BARC para explorar la colonia,y pronto, Ahsoka pensó que era extraño que no hubiese colonos alrededor. Entonces, el grupo fue atacado por droides comando. Después de derrotar a los droides, Tano y los otros, desplegaron los AATs. Luego, Ahsoka y el resto de sus fuerzas rodearon la sede separatista ubicada en la torre del gobernador de Kiros.[54]

Después de que el comandante separatista, Darts D'Nar, se pusiera en contacto con ellos, Ahsoka sintió curiosidad acerca de la reacción despectiva de su maestro hacia el zygerriano. Obi-Wan le dijo que Skywalker y su madre fueron vendidos como esclavos por los clanes Hutt, por lo que el hecho de que D'Nar fuese esclavista enfurecía a Anakin. Tano aseguró a Kenobi que mantendría un ojo sobre él. Obi-Wan encomendó la tarea a Ahsoka y a Anakin de buscar a los colonos mientras él negociaba con D'Nar. Mientras Kenobi negociaba, mantuvo su comunicador encendido en contacto con ellos para que pudiesen escuchar su conversación con D'Nar. Ahsoka, al principio, no creyó en la amenaza de D'Nar acerca de la existencia de bombas en la ciudad. No obstante, después de que D'Nar hiciera explotar una de las bombas, Ahsoka y su maestro tomaron un par de AT-RTs y fueron a desarmar el resto de los explosivos mientras Kenobi intentaba ganar tiempo peleando a golpes con el zygerriano.[54]

Tano y Skywalker fueron capaces de desactivar las bombas. Sin embargo, cuando llegaron a las dos últimas, Ahsoka activó accidentalmente el temporizador de las bombas. Tano y Skywalker cayeron bajo el fuego de unos droidekas francotiradores. Finalmente, ambos fueron capaces de acabar con los droides y desactivar las últimas dos bombas. Ahsoka y Anakin persiguieron entonces la nave de D'Nar. Consiguieron utilizar sus AT-RTs para saltar a la nave de D'Nar, y después de que su maestro deshabilitase uno de los motores con su sable de luz, paralizando la nave, D'Nar abrió las puertas de la nave y soltó a una de sus mascotas, un Blixus, para que atacase a Tano y Skywalker.[54]

Durante la lucha contra el Blixus, Ahsoka accidentalmente enfureció más a la bestia haciendo que arremetiera más intensamente contra ellos. Skywalker entonces le ordenó que fuese a estabilizar la nave mientras él hacía frente al Blixus. Tano se dirigió a la sala de control y logró estabilizar la nave antes de ser confrontada por D'Nar, que empuñaba un látigo láser. La Padawan fue capaz de someter a D'Nar, y cuando su maestro hubo derrotado al Blixus, interrogó a D'Nar sobre los colonos. Ahsoka se sorprendió por el método de interrogación tan agresivo de Skywalker, que a pesar de todo tuvo éxito. Los togruta habían sido vendidos a unos esclavistas en Zygerria.[54]

Misión en Zygerria

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Ahsoka y Anakin disfrazados como esclava y esclavista en Zygerria.

Junto con Anakin Skywalker, Obi-Wan Kenobi y Rex, Tano fue de incógnito a Zygerria. Ahsoka se disfrazó como una esclava mientras que Skywalker, Kenobi y Rex se vistieron de esclavistas. En el mercado de la ciudad, Tano detuvo a Atai Molec, el Primer Ministro de Zygerria, que estaba a punto de azotar a un esclavo, e inmediatamente Skywalker se apresuró a salvar la situación y afirmar que tenía una audiencia con la Reina Miraj Scintel. Anakin ofreció a Ahsoka a la reina, como una esclava que había quitado a Bruno Denturri. La Reina expresó su interés en Tano y después de que su esclava se suicidase, estuvo aún más dispuesta a comprársela a Skywalker. Con la esperanza de ganarse la confianza de la reina, Anakin presentó a Ahsoka como un regalo. Más tarde, durante una subasta de esclavos, Kenobi, a quien habían atrapado, fue presentado como uno de los esclavos para la subasta. La Reina, queriendo probar las motivaciones de Skywalker, le dio instrucciones de azotar Kenobi. Sin embargo, R2-D2 disparó los sables de luz de Anakin y Obi-Wan, que atacaron a los guardias. Ahsoka, todavía junto a la reina, subyugó a Molec y utilizó su sable de luz para desarmar al resto de los guardias. Ahsoka trató de someter a la reina, pero esta activó el collar eléctrico que Ahsoka llevaba como esclava y la dejó inconsciente. Después, Rex, Kenobi y Skywalker fueron capturados; la reina envió a Rex y a Kenobi a una planta procesadora de esclavos en Kadavo y encerró a Ahsoka en una jaula suspendida en el aire. La Reina les utilizó como herramienta para asegurar la cooperación de Skywalker. Mientras ella estaba enjaulada, Molec se burló de Ahsoka, regodeándose de que una vez que Skywalker fuera domesticado, la Padawan sería suya. Como respuesta, ella usó la Fuerza para empujarlo fuera de una cornisa, casi enviándolo a su muerte. En represalia, Molec la electrocutó múltiples veces con su collar de esclavos. Tiempo después, Skywalker escapó de los guardias zygerrianos con la ayuda de R2-D2 y fue a rescatar a Ahsoka. Luego, mientras Anakin iba a rescatar a la reina de Dooku, Ahsoka preparó la nave para salir del planeta. Recogió a Skywalker y a la Reina y procedió a volar con Skywalker rumbo a Kadavo para rescatar a Kenobi y a Rex.[55]

Batalla de Kadavo

En Kadavo, Ahsoka y Anakin Skywalker atacaron las instalaciones de procesamiento de esclavos trabajando junto con Obi-Wan Kenobi y Rex en el interior y las fuerzas de ataque del Maestro Jedi Plo Koon en el exterior. Mientras Skywalker desactivaba los cañones que impedían que Plo Koon se acercase a la instalación, Ahsoka acudió en la ayuda de los esclavos togrutas. Las paredes de sus celdas fueron electrificadas y el suelo estaba retrocediendo de manera que enviaba a algunos de ellos a su muerte cayendo al vacío. Cuando se deshabilitaron las armas, Ahsoka sugirió que un Crucero volara bajo las celdas para facilitar que los togrutas pudieran saltar a la nave. Al darse cuenta de que no había manera de conseguir que los togrutas llegaran a la nave, el almirante Coburn siguió las instrucciones de Tano. Ahsoka ayudó a los togrutas a llegar a la nave con seguridad y se fue con ellos a Coruscant. Allí, el gobernador Roshti felicitó a Ahsoka por ayudar a salvar a su pueblo de los zygerrianos. Ahsoka comentó que todo lo ocurrido fortalecería al pueblo de Kiros y se alegró cuando el gobernador Roshti dijo que se unirían a la República Galáctica.[56]

Mandalore y Carlac

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Ahsoka asiste a una Conferencia de Paz entre los Separatistas y la República.

Más tarde, Ahsoka acompañó a los senadores Padmé Amidala, Bail Organa y Mon Mothma junto a R2-D2, a la primera Conferencia de Paz entre la República Galáctica y la Confederación de Sistemas Independientes en Mandalore. Durante la conferencia, Lux Bonteri, ahora el joven senador de Onderon, apareció acusando al Conde Dooku de asesinar a su madre, Mina Bonteri. Después de rechazar sus reclamaciones, los separatistas lo llevaron ante un holograma del Conde Dooku. Preocupada por que Bonteri pudiera estar en peligro, Ahsoka le siguió hasta una nave Separatista. Ahsoka se coló en la nave y vio que varios droides, siguiendo las órdenes del Conde Dooku, estaban a punto de matar a Bonteri. Sin sus sables de luz, Ahsoka usó la Fuerza para derribar a los droides, ayudando a Bonteri a escapar a su nave. Tras pedirle a la Guardia del Senado que se ocupase de los droides que les perseguían, Tano y Bonteri huyeron de Mandalore.[57]

Los dos se pusieron en contacto con Anakin Skywalker, que quería saber dónde estaba Ahsoka. Ella le informó del rescate de Bonteri e insistió en que se le permitiera llegar al territorio de la República. Sin embargo, Bonteri se negó a ello, diciendo que él tenía planes con un grupo independiente. Quería matar a Dooku en venganza por la muerte de su madre. Ahsoka, se burló de su idea, y trató de llevarlo de regreso a Coruscant, pero fue sorprendida por Bonteri, que la dejó inconsciente y pilotó la nave hasta Carlac.[57]

Una vez despertó en Carlac, Ahsoka descubrió que sus sables de luz habían desaparecido. Tras pedir a R2-D2 que los buscase, ella procedió a salir fuera de la nave y enfrentar a Bonteri. Sin embargo, fueron interrumpidos por un grupo de guerreros de la Guardia de la Muerte, liderados por Bo-Katan Kryze, el grupo independiente con el que Bonteri había contactado. Incapaz de revelar su identidad como Jedi, Ahsoka se presentó a sí misma como la prometida de Bonteri. Cuando R2-D2 salió con sus sables de luz, Ahsoka le indicó que los ocultase rápidamente. Como no querían levantar sospechas, tanto Tano como R2-D2 acompañaron a Bonteri y a los guerreros de la Guardia de la Muerte de nuevo a su campamento.[57]

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Bonteri besa a Tano.

Bonteri y Tano fueron llevados a una tienda de campaña donde se les ordenó esperar a que el líder de la Guardia de la Muerte les recibiese, y donde Tano protestó por el plan de Lux. Ella insistió en que la Guardia de la Muerte eran asesinos y enemigos de los Jedi que la matarían a ella y a Bonteri. Al ver que la Guardia de la Muerte se acercaba, Bonteri besó a Tano con el fin de conseguir que dejase de hablar.[57]

Mientras Bonteri y Pre Vizsla, el líder de la Guardia de la Muerte, discutían un plan para matar a Dooku, Bo-Katan dejó a Tano en una tienda de campaña con otras mujeres Ming Po que habían sido secuestradas de una aldea cercana. Ahsoka entabló amistad con una de las mujeres, Tryla, quien le aconsejó no enfadar a los guerreros de la Guardia de la Muerte.[57]

Más tarde, esa noche, en una fiesta de la Guardia de la Muerte, el Jefe Pieter de la aldea cercana vino, exigiendo que la Guardia de la Muerte devolviera a las mujeres y dejara Carlac. Vizsla estuvo de acuerdo, diciendo que irían a la aldea al día siguiente. Bonteri se tomó esto como una evidencia de que la Guardia de la Muerte no era tan terrible como Ahsoka le había mencionado.[57]

Al día siguiente, Tano y Bonteri acompañaron a los guerreros de la Guardia de la Muerte y a las mujeres Ming Po a la aldea. Vizsla empujó a Tryla, la nieta del Jefe, hacia adelante y la apuñaló con sable oscuro. Luego, ordenó a la Guardia de la Muerte asesinar a todos los habitantes de la aldea.[57]

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Ahsoka capturada por la Guardia de la Muerte.

Mientras moría, Tryla imploró a Ahsoka que salvase a su pueblo, y al ver a un aldeano casi quemado vivo por un guerrero de la Guardia de la Muerte, Ahsoka alcanzó un palo con la Fuerza. A continuación, lanzó el palo, clavándoselo al guerrero antes de que más miembros de la Guardia de la Muerte pudiesen atacar. No obstante, Ahsoka fue atacada rápidamente por Vizsla con su sable oscuro. Sin sus sables de luz Ahsoka no podía defenderse, y así fue inmovilizada rápidamente por numerosos cables. Al finalizar la captura de la Jedi, Vizsla ordenó llevarla de vuelta al campamento.[57]

De nuevo en el campamento de la Guardia de la Muerte, R2-D2 había terminado la reparación de varios droides dañados por la Guardia de la Muerte y al ver a Tano siendo arrastrada a una tienda del campamento, pidió a los droides que le ayudaran en el rescate de la joven Jedi.[57]

Mientras tanto, Bonteri intentó convencer a Vizsla para que dejase ir a Tano, diciendo que ella no tenía que haber estado allí. Vizsla se negó, convencido de que todos los Jedi merecían morir por sus crímenes contra Mandalore. Vizsla estaba a punto de decapitar a Ahsoka cuando R2-D2 intervino, girando salvajemente alrededor de la tienda mientras escupía humo. Bonteri se libró del guerrero que lo sujetaba y R2-D2 devolvió a Ahsoka sus sables de luz. Tano cortó los cables que la inmovilizaban y girando en un único salto, decapitó a cuatro guerreros de la Guardia de la Muerte. Vizsla ordenó a sus guerreros que se retirasen, activó su sable oscuro y se batió en duelo con Ahsoka.[57]

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Ahsoka se enfrenta a Pre Vizsla.

Ahsoka bloqueó sus ataques, pero fue expulsada fuera de la tienda, aterrizando frente a los droides arreglados por R2-D2. Cuando Vizsla y el resto de la Guardia de la Muerte se precipitaron fuera de la tienda, Tano atacó a Vizsla de nuevo mientras los droides peleaban contra el resto de miembros de la Guardia de la Muerte. Ahsoka cortó la mochila propulsora de Vizsla, causando que explotara y utilizó ese hecho como distracción para saltar a bordo de un aerodeslizador conseguido por Bonteri y R2-D2.[57]

Todos ellos fueron perseguidos por Bo-Katan y dos miembros de su escuadrón, los Búhos Nocturnos, que comenzaron a disparar contra el aerodeslizador. Ahsoka desvió los disparos hacia ellos, logrando causar que la mochila propulsora de uno de los guerreros estuviese a punto de estallar. El otro guerrero cargó contra Ahsoka, golpeó los sables de luz de su mano y comenzó a estrangularla. Sin embargo, R2-D2 chorreó aceite en su casco, cegando su visión y permitiendo a Ahsoka empujarlo con la Fuerza. Finalmente Bo-Katan aterrizó en el aerodeslizador y atacó a Ahsoka. Bo-Katan se las arregló para golpear a Tano y tirarla casi completamente fuera del aerodeslizador, preparándose para dispararla mientras Ahsoka colgaba de un borde. Sin embargo Bonteri desvió el aerodeslizador causando que Bo-Katan perdiera el equilibrio y Tano pudiera volver a ponerse en pie. Ambas lucharon cuerpo a cuerpo brevemente antes de que Ahsoka la empujase fuera de la parte frontal del aerodeslizador con la Fuerza.[57]

Libres por fin de la Guardia de la Muerte, Ahsoka, Bonteri y R2-D2 subieron a su nave y salieron del planeta. Sin embargo, Bonteri todavía no deseaba unirse a la República, y entró en una cápsula de escape. Ahsoka intentó convencerlo para que la acompañara, pero Bonteri insistió en que tenía otro lugar a donde ir, y se alejó en la cápsula de escape, dejando a Ahsoka sola en su nave.[57]

Cantina del Borde Exterior

Más adelante, Ahsoka y Anakin Skywalker aterrizaron en el planeta Stobar, en la Región de Expansión, y se pasaron por una cantina local. Ahsoka sugirió regresar a su crucero, pero Skywalker rechazó la idea, alegando que tenía hambre y prefería la comida de verdad en lugar de las raciones del ejército.[58]

En el interior, se encontraron con las autoridades locales en la cantina y una camarera en el suelo. Los dos fueron a ayudarla, pero el gerente de la cantina salió con una sartén, diciéndoles que se mantuviesen alejados. Sin embargo, cedió cuando un droide policía le dijo que eran Jedi. Entonces, el gerente les hizo señas para que se acercaran, ofreciéndoles comida gratis.[58]

Maestro y Padawan se sentaron en una mesa, donde Skywalker estuvo meditando. Cuando Ahsoka trató de llamar su atención, él dijo que sentía una perturbación del lado oscuro de la Fuerza, a pesar de que Ahsoka le decía que ninguna perturbación podía realmente estar en el planeta. Skywalker dijo entonces que la perturbación que sentía le resultaba familiar.[58]

Batalla de Onderon

Tiempo después, Ahsoka asistió a una reunión del Consejo Jedi en la que Saw Gerrera y Lux Bonteri enviaron una transmisión solicitando la intervención Jedi para una rebelión contra los separatistas aliados con el rey de Onderon, Sanjay Rash. El Consejo Jedi se negó a intervenir, pero, tras escuchar los consejos de Anakin Skywalker, decidieron enviar a algún Jedi para entrenar a los rebeldes en lucha.[59]

Ahsoka fue junto a Skywalker, Obi-Wan Kenobi y el Capitán Clon Rex a Onderon para ayudar y entrenar a sus fuerzas rebeldes. Allí, Ahsoka compitió por el cariño de Bonteri contra la líder rebelde, Steela Gerrera. Después de que droides de combate atacaran un puesto de avanzada rebelde, se ideó un plan para llegar a la capital. Kenobi, Rex y Skywalker, tras enseñar a los rebeldes todo lo necesario, abandonaron el planeta de vuelta al Templo Jedi, permitiendo quedarse a Tano como enlace con los rebeldes, pero le prohibieron participar en los ataques de los rebeldes, ya que eso alertaría a los separatistas de la intervención Jedi.[59]

Ahsoka, Bonteri, Steela y Saw Gerrera llevaron a cabo un pequeño ataque para destruir un generador de energía en un intento de apagar a todos los droides acabando con su energía, y tuvieron éxito.[60] Después de eso, iniciaron actos de menor importancia para poner a la población de su lado y también protagonizaron un intento de rescate del rey derrocado, Ramsis Dendup, que terminó con Saw Gerrera capturado y condenado a muerte junto a Dendup. Los rebeldes intervinieron para salvarles, y Tano rompió sus instrucciones y se expuso ante sus enemigos para defender a los rebeldes. No obstante, todos pudieron huir a su base.[61]

Los rebeldes continuaron sus ataques contra los droides donde les parecía posible. Durante la batalla final contra los separatistas, Bonteri y Steela estuvieron a punto de caer por un precipicio. Mientras que Ahsoka fue capaz de salvar a Bonteri, un tanque droide le disparó mientras ayudaba a Steela con la Fuerza, lo que la hizo perder la concentración y soltar a Steela, que cayó al vacío muriendo en el acto. Poco después, con Rash muerto y los droides en retirada, Dendup fue reinstalado como rey con Bonteri como senador de Onderon. Ahsoka, junto a Kenobi y Skywalker, asistió al funeral de Steela, cuya amistad se había reforzado considerablemente con el tiempo.[62]

Capturada por Ohnaka

Después de la Batalla de Onderon, Ahsoka fue enviada en una misión para llevar a seis Iniciados Jedi llamados Byph, Katooni, Ganodi, Gungi, Petro y Zatt; hasta Ilum y que pudieran construir sus sables de luz. Después de haber pasado la Asamblea, todos regresaron a su nave, el Crisol, y comenzaron sus lecciones. Ahsoka presentó a Huyang a los Iniciados, y éste les instruyó en la construcción de sables de luz.[63]

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Ahsoka protege a los Iniciados Jedi de Hondo Ohnaka.

Sin embargo, Hondo Ohnaka atacó su nave y el grupo se vio obligado a retirarse a los conductos de ventilación, mientras que los piratas abordaban la nave en busca de los cristales de sable de luz. Ahsoka pidió a Zatt y Ganodi que asegurasen la cabina de la nave mientras ella iba a la sala de máquinas y el resto del grupo se encerraba en la bodega. Después de desviar la potencia de la nave a los motores, Ahsoka descubrió que el resto de Iniciados no habían llegado a la bodega, por lo que fue en su búsqueda.[64]

Finalmente, Ahsoka los encontró acorralados por Ohnaka y sus piratas, por lo que atacó a Ohnaka para permitir que los Iniciados y Huyang escapasen. Confirmando que estaban bien encerrados en la bodega, Ahsoka dijo a Ganodi y Zatt que activasen los motores con el fin de poner en marcha al Crucible y liberarlo de la nave pirata. Al separarse las dos naves se creó un vacío y los piratas, Ohnaka y Tano fueron absorbidos hacia la apertura. Ahsoka usó la Fuerza para empujar a la mayoría de los piratas a su propia nave y dio instrucciones a los Iniciados de saltar al hiperespacio. Sin embargo, antes de que la nave pudiese dar el salto a la velocidad de la luz, un pirata que estaba siendo arrastrado fuera del Crucible empujó a Ahsoka hacia la nave pirata y ella fue capturada.[64]

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Ahsoka capturada por Ohnaka.

En la base de Ohnaka, Ahsoka recibió burlas de los piratas. Ella trató de razonar con Hondo en un intento de conseguir su liberación, pero la intención de Hondo era venderla a un hombre de negocios que tenía especial interés en las Jedi. Al cabo de poco, llegaron hasta allí los Iniciados, disfrazados de artistas del circo llamado El Mundo de las Maravillas Itinerantes de Preigo. Tras engañar a un Ohnaka muy borracho, los Iniciados se las arreglaron para liberar a Ahsoka y recuperar sus sables de luz. Tano y los iniciados escaparon tras robar uno de los tanques de los piratas y se dirigieron de nuevo a hacia el Crucible.[65]

Batalla de Florrum

Mientras estaban siendo perseguidos por los piratas, Ahsoka y los Iniciados Jedi intentaron abordar el Crisol. Sin embargo, los piratas abrieron fuego en la vieja nave, que se estrelló después de haber sufrido demasiado daño. Sin tener hacia dónde huir, los Iniciados Jedi, Huyang, R2-D2 y Tano fueron recapturados por los piratas. No obstante, al ser llevados de vuelta a la base pirata descubrieron que el general Grievous la había atacado.[66]

Sin saber qué hacer, sus captores piratas se quedaron en la distancia, viendo como los droides destruían su base. Ahsoka rechazó la sugerencia de uno de los piratas de entregar a los Jedi a los separatistas, insistiendo en que los separatistas les matarían tanto a ellos como a los piratas, pues estos no habían llegado al planeta para hacer negocios. Tras enterarse de que Hondo Ohnaka poseía una flota secreta de naves, Ahsoka sugirió unir sus fuerzas para rescatar a Ohnaka y huir del general Grievous. Los piratas estuvieron de acuerdo y mientras R2-D2 les proporcionaba una distracción, se colaron en la base. Una vez dentro, rescataron a Ohnaka tras haber sido convencido por Ahsoka de la necesidad de una alianza.[66]

Juntos, los piratas y los Jedi rescataron a todos los prisioneros y lograron robar los vehículos de los droides, huyendo hacia el escondite secreto de Hondo en el que se encontraban sus naves. Ahsoka, Huyang, R2-D2 y todos los iniciados excepto Katooni, se separaron de Ohnaka en la batalla contra los droides y fueron perseguidos por el general Grievous. Entonces. Ahsoka se le enfrentó, logrando mantenerlo alejado de los jóvenes Jedi. Tratando de deshacerse de Grievous y siendo animado por Huyang, R2-D2 actuó con demasiado entusiasmo, estrellando accidentalmente el speeder en el que todos iban a bordo, y tirando a los iniciados, a Ahsoka y a Grievous del vehículo.[66]

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Ahsoka se bate en duelo contra Grievous mientras Ohnaka y los Iniciados escapan.

Entonces, Ohnaka, después de haber sido convencido por Katooni para rescatar a Ahsoka y a los otros, llegó en una renovada Esclavo I. Con el fin de dar a los iniciados tiempo para llegar a la nave, Ahsoka atacó a Grievous, logrando retrasarle el tiempo suficiente como para permitir que Huyang, R2-D2 y los Iniciados subiesen a bordo de la nave. Escapando de Grievous, saltó a bordo de la Esclavo I, y junto a los piratas, sus droides y los Jedi huyó del planeta.[66]

Luego, todos se reunieron con Obi-Wan Kenobi y su flota, donde Ohnaka afirmó a Kenobi que su ataque contra el Crisolhabía sido una "misión de rescate". Kenobi decidió aceptar la historia tal y como Tano se la había contado, aunque lo importante era que los jóvenes Iniciados Jedi estaban a salvo.[66]

Batalla de Cato Neimoidia

«Un minuto, ¿no estaba volando? ¿Dónde está mi nave? ¿Cómo llegué aquí?"
"Tu nave chocó, yo te salvé… De nada.»
―Tano a Skywalker después de recuperar la consciencia.[fuente]
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Ahsoka y Anakin durante la Batalla de Cato Neimoidia.

Poco después, Ahsoka y Anakin Skywalker fueran enviados a retomar Cato Neimoidia de manos de los separatistas. Mientras luchaban contra droides buitre, el caza de Skywalker voló a través de una nube de droides zumbadores, que se acoplaron firmemente a la nave y comenzaron a desmantelarla. Skywalker, fue noqueado por una descarga eléctrica después de que uno de los droides perforase la cabina y, no teniendo otra opción, Ahsoka instruyó a R2-D2 para que aterrizase en un saliente cercano. Pasando el control de su nave a su droide, Ahsoka saltó a la nave de Skywalker, tirando de él hacia fuera y dejándole en el suelo justo antes de que la nave se deslizase por el borde de la cresta y explotara. Luego, ambos llamaron a un transporte de tropas para que los viniera a buscar.[67]

Bombardeo en el Templo

Tras el bombardeo de uno de los hangares del Templo Jedi, Ahsoka y Anakin Skywalker fueron retirados de la Defensa de Cato Neimoidia para investigar. Después de entrevistar a testigos y analizar un holograma de la explosión, descubrieron que una mujer llamada Letta Turmond fue la autora del delito. Ella alimentó con explosivos nano-droides a su marido, Jackar Bowmani, que explotaron cuando él, como uno de los trabajadores del Templo, andaba por allí. Skywalker y Tano se enfrentaron a Letta en su apartamento, pero ella trató de escapar. Después de una breve persecución, Letta fue capturada, detenida por sus crímenes y encarcelada en la base militar de la República.[68]

Poco después, Ahsoka, junto con muchos otros Jedi y funcionarios de la República Galáctica, asistió al funeral por los Jedi que murieron en el atentado. Durante una reunión para discutir el último ataque separatista, el almirante Wilhuff Tarkin informó a Ahsoka de que Turmond quería hablar con ella. Tano visitó a Turmond en la prisión, donde ella le dijo a Ahsoka que un Jedi le había dicho cómo hacer la bomba y le había dado explosivos. Justo antes de revelar el nombre del Jedi, Turmond fue repentinamente ahogada con la Fuerza por una persona desconocida para Tano. Los clones llegaron rápidamente a la celda después de haber visto lo que pasaba, y creyeron que era Ahsoka quien había matado a Turmond. Posteriormente, Ahsoka fue detenida y encarcelada por el asesinato.[68]

Más tarde, Tarkin la visitó, y aunque Ahsoka insistió en que era inocente, Tarkin no la creyó. Anteriormente, ella había expresado su deseo de que Turmond fuese castigada, y en las grabaciones de seguridad se la mostraba frente a Turmond mientras ella estaba siendo asfixiada. Curiosamente, el sonido no funcionaba en la grabación, por lo que Ahsoka no tenía ninguna prueba de lo que había hablado con ella realmente.[68]

Prisión y escape

«Sé que Dooku intentó matarte, y sé que te traicionó. Tal vez, esto lo hizo su nuevo aprendiz. Yo me desvié de mi camino al igual que tú te desviaste del tuyo. Tenemos más en común de lo que crees.»
―Ahsoka convence a Ventress para que le ayude.[fuente]

Más tarde, Ahsoka vio una tarjeta de acceso que estaba fuera de su celda. Suponiendo que era un regalo de su maestro, utilizó la Fuerza para controlar la tarjeta-llave y abrir su celda. Mientras se abría camino hacia el puesto de control de seguridad, se encontró con varios clones heridos yaciendo al lado de sus sables de luz y su comunicador. Justo cuando los estaba recogiendo, el comandante clon CC-1010 "Fox" llegó y vio a Ahsoka de pie frente a los clones. Asumiendo automáticamente que ella era la responsable de los clones heridos y al ver que se había escapado de su celda, activó las alarmas.[68]

Ahsoka huyó, evitando las patrullas de clones hasta que finalmente se encontró a otro grupo de clones, a los cuales había matado alguien con un sable de luz. Cuando Fox encontró a los clones, supuso que Tano los había matado. A él se le unieron rápidamente Anakin Skywalker y Rex, quienes ayudaron en la persecución de Tano. Ahsoka huyó fuera del recinto, escapando de ser capturada por un massiff. Sin embargo, una vez que su nave fue destruida, huyó a través de las tuberías industriales adyacentes a la instalación.[68]

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Ahsoka huye a los niveles inferiores de Coruscant.

Luego, Ahsoka perdió su shoto cuando uno de los clones disparó un misil cerca de ella, dejándola colgando sobre una barandilla. A medida que más clones se unían a la persecución, Ahsoka hizo un agujero en una de gran tubería, huyendo por su interior. Tras lograr evadir a los clones, su huida se vio truncada cuando llegó al final de la tubería, donde había una enorme fosa que conducía a los niveles más bajos de Coruscant. Skywalker, logró encontrarla y trató de convencerla para volver. Convencida de que nadie creería su versión de la historia, Ahsoka saltó de la tubería, aterrizando en una de las naves que descendían a través de los niveles del planeta.[68]

Con la Fuerza de Seguridad de Coruscant buscándola, Ahsoka trató de pasar desapercibida e hizo una llamada a Barriss Offee en el Templo Jedi. Offee prometió hacer algunas investigaciones en su favor y aconsejó a Ahsoka dejar de usar su comunicador. La joven togruta cumplió y rompió el aparato. Entonces vio un vagabundo gotal y negoció con él para conseguir una capa a cambio de una cápsula de alimento. Luego subió a un tren, pero rápidamente vio a un par de oficiales LCR chequeando los pases de los pasajeros. Ahsoka trató de bajar del tren en la siguiente estación, pero se dirigió directamente a más oficiales que rápidamente la identificaron como la Jedi fugitiva. Ahsoka huyó a través del tren, perseguida por los oficiales, y saltó del tren todavía en movimiento sobre una plataforma de paso.[69]

Después de haber despistado a los oficiales, Ahsoka fue emboscada por Asajj Ventress, que ahora era una cazarrecompensas. Aunque Ventress estaba planeando entregar a Ahsoka para ganar la recompensa que ofrecían por su captura, la Padawan la convenció para que la ayudase a demostrar su inocencia. Ventress estuvo de acuerdo cuando Ahsoka prometió persuadir al Consejo Jedi y al Senado Galáctico para otorgar a Ventress un perdón por sus crímenes.[69]

Sin embargo, el Consejo Jedi había enviado a Skywalker, Plo Koon y a un escuadrón de soldados clon para capturar a la Padawan fugitiva. Huyendo de los clones y de los Jedi, el dúo llegó hasta un holoterminal público, que Ahsoka utilizó para ponerse en contacto con Offee. Barriss habló a Ahsoka de un almacén, en el cual Letta Turmond había conseguido los nano-droides del atentado, y Ventress acordó llevar a Ahsoka hasta allí. Antes de que pudieran salir, Tano y Ventress se enfrentaron a un escuadrón clon liderado por el Comandante Wolffe, que exigió que se rindieran. Ahsoka y Asajj lograron desarmar a los clones y escapar. Al encontrar el almacén, decidieron separarse después de que Ventress devolviera a Tano su sable de luz. Después, Ventress fue atacada por una figura femenina sensible a la Fuerza que tomó su ropa y sus sables de luz.[69]

Duelo y captura

«Los clones la sometieron y la encontraron en presencia de explosivos nano-droides.»
―Informe de Plo Koon tras la captura de Ahsoka[fuente]
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Offee y Tano se enfrentan en los niveles inferiores de Coruscant.

Cuando estaba en el almacén, Barriss Offee atacó a Ahsoka fingiendo ser Asajj Ventress. Ahsoka asumió inmediatamente que ella estaba luchando contra Ventress debido al casco y los sables de luz que llevaba Barriss. Mientras las dos luchaban en el edificio abandonado,Barriss condujo lentamente a Tano cada vez más arriba del edificio. La atacante hizo que los barriles de un gas explosivo se encendiesen, provocando una gran explosión que dejó a Ahsoka a sus pies y llamó la atención de la Fuerza de Seguridad de Coruscant y los Jedi. Tambaleándose, Tano fue desarmada rápidamente por su agresora y tras un golpe potente, se estrelló contra el suelo de madera. Después de aterrizar en medio de cajas de nano-droides, Ahsoka fue encontrada inmediatamente por el comandante clon Wolffe y varios clones. Wolffe sorprendió rápidamente a la Padawan y descubrió que las cajas de nano-droides eran del mismo tipo utilizado para volar el hangar del Templo Jedi, lo que le hizo creer que esto era una prueba de que Ahsoka era la verdadera mente maestra del atentado contra el Templo Jedi.[69]

Salida de la Orden

«Pero tengo que solucionar esto por mi cuenta, sin el Consejo, y sin ti.»
―Ahsoka Tano a Anakin Skywalker[fuente]

Después de ser culpada por asesinato y escapar de prisión, Ahsoka fue llevada a juicio, gracias a la influencia ejercida por Wilhuff Tarkin y el Senado Galáctico para que el Consejo Jedi expulsara a Tano de la Orden Jedi. Al ser expulsada, Ahsoka pudo ser juzgada por un tribunal militar. Padmé Amidala representó a Ahsoka, mientras que Tarkin se hizo cargo de la acusación. Justo cuando el veredicto del juicio iba a ser dictado, Anakin Skywalker llegó con la verdadera culpable, Barriss Offee, a quien Ahsoka consideraba su amiga hasta que se dio cuenta de que le había tendido una trampa.[70]

Posteriormente, el Consejo Jedi se ofreció a reincorporar a Ahsoka a la Orden Jedi como Caballera Jedi. Sin embargo, sintiéndose traicionada porque el Consejo Jedi nunca creyó en ella, Ahsoka rechazó la oferta sintiendo que ya no podía confiar en el Consejo Jedi ni en sí misma, por lo que dio la vuelta y se fue. Skywalker la alcanzó cuando salía por la entrada principal del Templo y trató de convencerla para que se quedara, pero Ahsoka mantuvo su decisión, diciendo que necesitaba seguir su propio camino, revelándole que ella sabía que Anakin entendía su sentimiento de querer dejar la Orden. Finalmente, Ahsoka abandonó a Anakin y salió del Templo Jedi hacia el atardecer de Coruscant.[70]

Un nuevo camino

«Lo siento maestro, pero no voy a volver.»
―Ahsoka Tano a Anakin Skywalker[fuente]

La experiencia de Tano eliminó su fe en los Jedi, y le hizo ver que las acciones de la Orden Jedi habían roto su compromiso con la Fuerza para servir a los intereses políticos de la República Galáctica. Habiendo sido enseñada toda su vida que el apego podía traer la ruina a un Jedi y a pesar de que era una decisión difícil, Ahsoka eligió abandonar el único hogar que había conocido en toda su vida. Confiando en la Fuerza para que le revelara su nuevo camino, Tano abandonó la Orden Jedi emprendiendo un nuevo viaje.[70]

Ahsoka leaves

Ahsoka se aleja del Templo Jedi.

La salida de Ahsoka de la Orden Jedi tuvo un profundo impacto en aquellos que la conocían. Durante su búsqueda de los secretos de la inmortalidad, Yoda tuvo visiones de la Gran Purga Jedi. En una de esas visiones, vio a Tano muriendo entre los muros del Templo Jedi, con la visión de Ahsoka preguntándole si podría ser uno con la Fuerza tras haber sido expulsada de la Orden Jedi.[71] La visión de Tano fue resultado de la culpabilidad de Yoda por haber cometido los errores que incitaron a Ahsoka a abandonar la Orden Jedi.[72]

Su antiguo mentor, Anakin Skywalker, estuvo particularmente afectado por su marcha y se sintió todavía más solo por tener que cumplir con lo que se esperaba del profetizado Elegido. En una misión con Obi-Wan Kenobi, Skywalker reveló que aún le costaba aceptar la partida de Ahsoka, describiéndola como "una de los nuestros". Cuando Skywalker criticó al Consejo Jedi por haber propiciado la salida de Ahsoka de la Orden Jedi, Kenobi le recordó que la decisión había sido tomada únicamente por Ahsoka.[73]

Conociendo a las hermanas Martez

Poco después de abandonar la Orden Jedi[74] y cerca del fin de la guerra,[75] Tano estaba viajando por los Talleres de Coruscant a bordo de una moto deslizadora Joben T-85 que había comprado y la pilotó cerca de un portal del inframundo, sólo para que el vehículo comenzase a funcionar mal. Aunque en última instancia consiguió evitar chocar contra un crucero clase Gozanti y la moto deslizadora volvió a la normalidad brevemente, pronto comenzó a funcionar mal de nuevo, obligando a Tano a chocar contra la plataforma de un taller de reparaciones en el Nivel 1313. Eso llamó la atención de la mecánica de la tienda, una humana llamada Trace Martez, quien se acercó a Tano mientras arrastraba los restos de su moto deslizadora. Martez felicitó a Tano cuando se dio cuenta de que la antigua Jedi estaba familiarizada con los motores después de que notase que el repulsor y el motor del vehículo estaban dañados.[76]

Ahsoka meets Trace

Ahsoka conoce a Trace Martez en el Nivel 1313 de Coruscant.

Después de que Tano le preguntara quién era, Martez se presentó a sí misma, y Tano hizo lo mismo mientras le daba la mano. Trace afirmó que poseía uno de los mejores talleres de reparación del nivel. Aunque se ofreció a reparar su moto deslizadora a cambio de un pago, Tano respondió a Trace que podía repararla ella misma con las herramientas necesarias. Aunque Martez aún necesitaría un pago por las herramientas, Tano admitió que no tenía muchos créditos, pero Martez le dijo que no se preocupara. Después de que Martez abriera las puertas de su taller, Tano vio un carguero clase Nebulosa, que Trace estaba modificando para incrementar su velocidad. Después, Trace señaló a Tano un espacio para trabajar con la moto deslizadora, y Tano le preguntó por qué le estaba ayudando, a lo que Martez contestó que parecía lo correcto. Aunque ofreció a Tano marcharse si lo deseaba, la antigua Jedi decidió quedarse.[76]

Después de que Tano comenzase a reparar su moto deslizadora, Martez se ofreció a ayudar a la antigua Padawan, pero Tano rechazó cualquier ayuda que pudiera costarle dinero. Aunque la mecánica quedó molesta por ello, afirmando que en el nivel 1313 todo tenía un precio, Tano preguntó si tenía algunas piezas que pudiera comprar. Dado que las únicas piezas de Martez ya se estaban usando en su carguero, no había piezas disponibles. Afirmando que eso no era bueno y que necesitaba irse de allí, Ahsoka no respondió a Martez después de que la mecánica le preguntara si estaba huyendo de algo. Aunque Martez le dijo que podía quedarse con ella tanto tiempo como quisiera, Tano salió a la plataforma y miró hacia hacia el cielo de Coruscant. Después, sin embargo, Tano escuchó el sonido de su moto deslizadora funcionando dentro del taller y entró, descubriendo que Martez le había ayudado con el vehículo sin cobrarle un precio. Entonces, Tano admitió proceder de los niveles superiores de Coruscant, escondiendo el hecho de que había sido una Jedi, pero defendió a la Orden Jedi cuando Martez la acusó de iniciar las Guerras Clon. Martez, quien sentía que los Jedi se habían olvidado de la gente como ella, admitió que los Jedi no eran lo que se había imaginado en base a las historias que había oído, revelando que quería alejarse de la guerra y los Jedi a bordo de su nave con su hermana mayor, Rafa.[76] La opinión de la mecánica sobre los Jedi convenció a Tano para[74] seguir manteniendo[76] su pasado en secreto.[74]

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Ahsoka ayuda a Trace a derrotar a los matones de Pintu Son-El.

Tano y Martez fueron de pronto interrumpidas cuando Pintu Son-El,[76] un gángster[77] de los niveles inferiores,[78] y sus[76] matones[78] entraron, buscando el dinero que Rafa le había prometido. Martez inicialmente instó a Tano a no intervenir e intentó enfrentarse sola a los matones de Son El, pero terminó siendo superada y pidió la ayuda de Tano. Habiendo sido entrenada como Jedi, Tano se encargó rápidamente de los dos matones de Son El, que se marchó afirmando que el asunto aún no había quedado zanjado. Al ver la habilidad en combate de Tano, Martez le preguntó dónde había aprendido a luchar, por lo que ella mintió y afirmó que le había enseñado su hermano mayor. Entonces, las dos se dirigieron a la lavandería de Rafa para informarle sobre Son El, donde ella afirmó que tenía un trabajo en camino que les daría mayores beneficios. Rafa también preguntó quién era Tano, y, tras haberse presentado, Trace relató cómo Tano había caído sobre su plataforma. Tras una breve conversación entre Rafa y Lokann, un twi'lek cuyo socio de negocios había hecho un trato con Rafa para que le construyera tres droides, Tano y Trace trabajaron en los tres cargadores binarios, con Tano recordando a la mecánica que pusiera el cerrojo de seguridad a los droides. Después de que Tano activara el droide en el que había estado trabajando, ella y Trace hablaron acerca del comportamiento de la gente, con Trace mencionando su creencia de que algunas personas eran buenas, otras eran malas, y algunas eran complicadas como el cargador que estaba construyendo. Mientras afirmaba eso, Tano se dio cuenta de que estaban construyendo cargadores de tipo dos y, después de poner el cerrojo de seguridad a la unidad en la que había estado trabajando antes de que le atacara, explicó que esas unidades eran fraudes, habiendo sido convertidos en droides de demolición violentos. Por desgracia para las dos, Trace no puso a tiempo el cerrojo de seguridad a su droide, permitiendo que escapara del taller.[76]

Tras pasar por el lado de Rafa en la calle, Tano y Trace persiguieron al droide hasta que saltó a una calle inferior desencadenando el caos. A sugerencia de Trace, Tano regresó a la lavandería de Rafa para encontrar un dispositivo de seguimiento mientras Trace buscaba un vehículo. Una vez allí, Rafa preguntó dónde se encontraban el droide cargador y Trace antes de que Tano subiera al vehículo que la mecánica había encontrado. Las dos localizaron al droide y lo persiguieron, intentando sujetarlo con las pinzas del vehículo y pulsar el botón azul de apagado de la placa frontal del droide. Tras agarrar al droide, sin embargo, éste comenzó a escalar una pared, haciendo que Trace soltara al droide y subiera encima de él ella misma. Aunque consiguió apagar la unidad, el cuerpo inerte del droide comenzó a caer con Trace aún a bordo, obligando a Tano a sujetarlo con las pinzas del vehículo. Rápidamente ancló al vehículo a una tubería cercana con un cable de remolque, pero el droide y Trace pesaban demasiado.[76]

RafasLaundry-GWT

Ahsoka conoce a Rafa Martez.

Antes de que Trace pudiera caer a su perdición, no obstante, Tano usó en secreto la Fuerza para ayudar a subir el vehículo, con sólo un niño twi'lek dándose cuenta de lo que había hecho. Aliviada de ver a Trace a salvo, las dos regresaron a la lavandería, donde Rafa rechazó deshacerse de los cargadores a pesar de las protestas de Tano, creyendo que si dañaban a alguien no era su problema. Ignorando el argumento de Tano alegando que era nueva, Rafa prometió a Trace que haría lo correcto. Tano y Trace se dirigieron al muelle, donde Tano preguntó si Trace participaba en la toma de decisiones de Rafa. Trace respondió que Rafa intentaba hacer lo mejor para ellas, aunque Tano cuestionó a qué precio las hacía. Entonces, Rafa llegó para reunirse con ellas, revelando que había exigido a Lokann el doble del precio anterior, defendiéndose afirmando que los droides no eran de su propiedad y otra persona los habría construido si ella se hubiera negado, causando problemas tanto a ella como a Trace. Aunque Trace estaba visiblemente molesta, Rafa afirmó que los créditos habían sido usados para pagar a Son-El y le dio algo de dinero para que comprara nuevas herramientas, esperando que mereciera la pena. Tras mirar con desaprobación a Tano, Rafa se alejó. Tano también se marchó para terminar de reparar su moto deslizadora, y Trace le dio las gracias por haber salvado su vida antes de partir con la antigua Padawan.[76]

Viaje a Kessel y Oba Diah

Mientras Tano y Trace Martez trabajaban en el carguero de Trace en su taller, Tano continuó ocultando su pasado afirmando que había asistido a una academia llamada «Academia Skywalker». Aunque la mecánica nunca había oído hablar de esa academia falsa, creyó que era real, sin conocer el nombre de ninguna academia real. Cuando Tano le preguntó por qué nunca había asistido a una escuela, la mecánica contestó que no había ninguna donde vivían, y de todas formas no podría pagarla. Entonces, Trace afirmó que ella y Rafa habían heredado el hangar en el que se encontraba el taller, alegando que sus padres se habían separado, y que Rafa había ganado su propio local apostando, pero la mecánica reveló que había construido el carguero ella misma, anunciando que su nombre era Ángel Plateado. Aunque a Tano le hizo gracia el nombre, le dijo a Trace que podía llamar a su nave como quisiera, y Tano regresó al trabajo con su moto deslizadora, a la que Trace bautizó como Basura. Tras hablar de a dónde debería ir tras reparar la moto deslizadora, Tano aceptó la sugerencia de Trace de quedarse un poco más de tiempo, siempre que a Rafa no le importara. En ese momento, Rafa entró en el taller y fue informada de que la togruta se quedaría. Tras preguntar qué habilidades tenía la antigua Padawan, Tano contestó que sólo tenía las útiles.[79]

SilverAngelCruiser

El Ángel Plateado se introduce por error en una línea militar restringida.

Rafa había entrado para informar a su hermana de que la tripulación y la nave que había contratado se habían retirado de un trabajo que ella había aceptado. Aunque Trace estaba enfadada con Rafa por haber contratado a otro piloto en vez de a ella, se dio cuenta de que su hermana ahora la necesitaba a ella y su carguero. Tano preguntó cuál era el trabajo, pero Rafa se negó a contestar hasta que hubieran partido, y Trace aceptó el encargo. Rafa dijo a su hermana que no podían depender de la ayuda de nadie, pero Trace estaba empezando a confiar en Tano. Después de que Trace entrara en el Ángel Plateado, Rafa se enfrentó a Tano y preguntó cuáles eran sus intenciones, pero Tano afirmó que no tenía ninguna tal como Rafa sospechaba, salvo mantener a las hermanas fuera de peligro. Entonces, Tano y Rafa entraron en la nave, no sin que antes Rafa dijera a Tano que quizás ella era el peligro del que Trace necesitaba mantenerse alejada. Con las tres dentro de la cabina, el Ángel Plateado atravesó el portal del inframundo y ascendió a la superficie, pero Trace pilotó la nave hasta una línea militar restringida. El Ángel Plateado pronto fue contactado por un Destructor Estelar comandado por Anakin Skywalker y el Almirante Wullf Yularen,[79] el mismo almirante con el que Tano había servido.[24] Después de que Tano y Skywalker se percibieran el uno al otro,[80] el Caballero Jedi decidió permitir que ella y el Ángel Plateado prosiguieran su camino.[79]

La última reunión

«Tú captura a Maul. Yo me encargaré de Grievous. Con suerte, esto habrá acabado pronto.»
«El maestro Kenobi siempre decía que la suerte no existe.»
«Menos mal que yo te enseñé lo contrario.»
[Skywalker empieza a irse]
«¡Anakin! Buena suerte.»
―Las últimas palabras entre Anakin Skywalker y Ahsoka Tano como amigos[fuente]

Tras aliarse con los mandalorianos, Ahsoka recibió una nueva indumentaria hecha de beskar y empezó a trabajar para averiguar dónde se escondía el Sith renegado Maul. Pasado un tiempo, Tano y la Resistencia de Mandalore consiguieron averiguar la localización de Maul en Mandalore con la ayuda de la información que Tano había obtenido de los pykes en Oba Diah. Sabiendo que no tenían la fuerza suficiente como para asediar Mandalore, Tano y Bo-Katan Kryze contactaron con Anakin Skywalker y Obi-Wan Kenobi, quienes estaban finalizando una batalla en el planeta Yerbana, para solicitar su ayuda en el asedio. Usando la frecuencia subespacial «Fulcrum», Tano y Kryze fueron respondidas por el Almirante Wullf Yularen, quien entonces contactó con Skywalker y Kenobi solicitando su regreso a la nave. Cuando Skywalker y Kenobi llegaron a la nave, Tano dio la bienvenida a Skywalker y comentó que había pasado mucho tiempo desde la última vez que se habían visto. Hubo un breve silencio antes de que Skywalker preguntara a Tano cómo se encontraba y qué había estado haciendo. Respondiendo a las preguntas de Skywalker, Tano dijo que se encontraba bien, pero que sabía que no tenían tiempo para hablar y necesitaba proporcionar la importante información que ella y Kryze poseían inmediatamente. Después de que Kenobi preguntara cuál era la información, Tano explicó que finalmente habían conseguido averiguar la localización de Maul y que podrían capturarlo si actuaban con rapidez.[81]

AhsokaTanoAndBoKatan

Ahsoka saluda a Skywalker tras un largo tiempo sin verse.

Con esa información, Skywalker y Kenobi permitieron a los mandalorianos subir a bordo de su Destructor Estelar clase Venator. Mientras Tano descendía por la rampa de embarque, R2-D2 le dio la bienvenida cálidamente. Después de eso, ella avanzó hacia Skywalker, quien le dijo que se alegraba mucho de verla, pero ella le interrumpió y le dijo que ya se pondrían al día en otro momento, puesto que todo el tiempo perdido daba a Maul una oportunidad para escapar, tal como afirmó Kryze. Con eso, el grupo se dirigió al centro de estrategia para discutir un supuesto asedio. Al llegar allí, Tano explicó a Skywalker y Kenobi que habían conseguido determinar la ubicación de Maul con la información que ella había reunido en Oba Diah, lo cual hizo que Skywalker preguntara qué había estado haciendo ella en Oba Diah en primer lugar. Sin embargo, Tano respondió que eso no era relevante en ese momento.[81]

Después de que Kryze explicara que Maul se encontraba en Mandalore, Kenobi preguntó qué quería de la República Galáctica. Kryze, avergonzada, explicó que no poseían la fuerza suficiente como para asediar la ciudad capital de Mandalore, Sundari, por lo que necesitaban la ayuda de los clones del Gran Ejército de la República para ello. Para garantizar su apoyo, Kryze propuso entregarles a Maul en cuanto fuera capturado mientras que ella asumiría el liderazgo de Mandalore en cuanto el asedio concluyera. No obstante, Kenobi explicó que si les ayudaban, se romperían tratados entre la República Galáctica y los mandalorianos de más de cien años de antigüedad, por lo que estallaría una nueva guerra. Kryze contestó preguntando qué importancia tenía una guerra más, pero Skywalker afirmó que no querían una nueva guerra cuando aún estaban combatiendo en las Guerras Clon. Con eso, Kenobi informó de que hablaría con el Consejo Jedi para discutir el asunto, pero Kryze, desesperada por ayuda, le gritó que no había tiempo para hablar e intentó despertar los sentimientos de Kenobi por Satine Kryze, a quien Maul había asesinado meses antes. Kryze miró con desdén a Kenobi mientras él se alejaba para hablar con el Consejo Jedi, sin permitir que sus sentimientos controlaran sus acciones. Kryze luego se alejó mientras Tano la observaba partir.[81]

KryzeTanoSkywalkerKenobi

Ahsoka y Bo-Katan Kryze se reúnen con Skywalker y Kenobi.

Cuando Kryze se hubo marchado, Skywalker bromeó que la reunión había ido bien teniendo en cuenta la situación. Al escuchar el comentario ingenioso de Skywalker, Tano se volvió hacia Skywalker y le dijo que él y Kenobi no habían cambiado desde la última vez que los había visto. Entonces, Skywalker preguntó si eso era algo malo, tras lo que Tano sonrió. Entonces, él le pidió que le siguiera porque tenía una sorpresa para ella esperando en el hangar. Mientras caminaban hacia el hangar, Tano vio cómo los clones le saludaban mientras pasaba por su lado, comentando que los clones no deberían saludarla debido a que ya no era su comandante. Sin embargo, Skywalker explicó que lo hacían para mostrarle su respeto por los años que pasó con ellos sirviendo en el frente de las Guerras Clon. Cuando llegaron al hangar, la puerta se abrió y reveló al Capitán Clon Rex y su compañía con cascos recién pintados imitando las marcas faciales de Ahsoka. Ahora que los había visto, Skywalker le indicó que se moviera entre la pequeña multitud de soldados que la estaban esperando. Después de ver a los soldados, Tano regresó junto a Skywalker y Rex, quien dijo que la pintura de los cascos era un poco tosca, pero que aún así era bueno volver a verla. Antes de separarse, Skywalker le regaló a Tano una caja que contenía una de sus posesiones más preciadas. Sin embargo, justo cuando él le presentaba la caja, la alarma de emergencia de la nave sonó, alertando a todos los soldados de a bordo para que se prepararan para la batalla.[81]

Kenobi llegó corriendo, pidiendo a Skywalker y Rex preparar a todas sus fuerzas e informando de que saltarían al hiperespacio en breve para ayudar a hacer frente a un ataque sorpresa del General Grievous en Coruscant. Kenobi informó Skywalker de que el Canciller Supremo Sheev Palpatine se encontraba bajo la protección de la Maestra Jedi Shaak Ti, pero que Mace Windu había perdido el contacto con ella. Enfadada por sus juegos políticos, Tano preguntó si iban a abandonar a los mandalorianos, a lo que Kenobi contestó que les necesitaban en Coruscant puesto que este era un momento decisivo de las Guerras Clon. Tano se enfadó aún más, opinando que debido a que seguían jugando a hacer política, había gente en la galaxia que había perdido la fe en los Jedi. Kenobi intentó defenderse afirmando que la gente de Coruscant necesitaba ser defendida, pero Tano contestó que el asunto en realidad se trataba de proteger al Canciller Supremo. Sin embargo, Skywalker propuso dividir la Legión 501 dando lugar a la creación de la 332ª Compañía, que sería liderada por Rex ascendido a Comandante Clon, mientras que Tano serviría como consejera. Tano aceptó su nueva posición y con la aprobación de Kenobi, el Asedio de Mandalore podría empezar. Antes de partir, Kenobi aconsejó a Tano capturar a Maul en vez de intentar matarlo, puesto que parecía que darle muerte era altamente difícil.[81]

AhsokaNewSabers-OFNF

Skywalker muestra a Tano sus sables de luz en su último encuentro como amigos.

Entonces, Tano agradeció a Skywalker que le hubiera dado su apoyo de nuevo y él le presentó una caja, sabiendo que necesitaría su contenido si iba a enfrentarse a Maul. Dándose cuenta de lo que había dentro, Tano abrió la caja, cogiendo sus sables de luz del interior y encendiéndolos, dándose cuenta de que ahora eran azules. Mientras miraba a Skywalker, él dijo que ahora estaban un poco mejor que cuando ella los había tenido la última vez. Antes de partir, Skywalker miró a Tano y dijo que si ambos tenían suerte en sus misiones, todo habría acabado pronto y podrían reunirse de nuevo. Entonces, ella deseó buena suerte a Skywalker, y él se detuvo y se giró brevemente para mirar hacia Ahsoka antes de partir a prepararse para hacer frente a Grievous. De inmediato, Tano se adentró en el hangar para reunirse con Rex.[81]

Asedio de Mandalore

Ataque por aire
«Lo siento. No le he traído mochila propulsora.»
«No la necesito. ¡Una carrera hasta la superficie!»
―Rex y Ahsoka Tano durante el Asedio de Mandalore[fuente]
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Kryze contacta con Ursa Wren mientras Tano observa.

Al llegar a Mandalore, Tano subió a bordo de un LAAT/i junto a Bo-Katan Kryze, el Comandante Clon Rex y el soldado CAR CT-5597 «Jesse», y se unió a un equipo de ataque que se aproximaba a Sundari. Mientras se acercaban, el Primer Ministro Almec contactó con ellos y preguntó por qué la República Galáctica estaba atacando Mandalore, pero después de que Kryze anunciara su presencia a Almec, declarando que sabían que él era un títere de Maul, Almec entendió lo que ocurría. Mientras él le informaba de que este ataque la convertiría en una enemiga a ojos de los habitantes de Sundari, Kryze cortó la transmisión, afirmando que no le importaba. Tano se dirigió a Kryze y comentó lo distinta que era ella de su hermana, Satine Kryze. Entonces, Kryze contactó con Ursa Wren, otra miembro de los Búhos Nocturnos, y le preguntó si podía confirmar dónde se encontraba Maul, pero Wren sólo pudo confirmar que el antiguo Lord Sith no había abandonado la ciudad y también informó de que las fuerzas de Maul se estaban preparando para el combate. Cuando terminó la transmisión con Wren, la cañonera comenzó a zarandearse violentamente a medida que las fuerzas de Maul iniciaban su ataque. Abrieron las puertas de la cañonera y vieron la batalla que se estaba desarrollando en el exterior, con otra cañonera siendo destruida cerca de ellos, obligando a Tano a protegerse de los escombros. Poco después, todos los de a bordo abandonaron las naves para enfrentarse a los enemigos en el aire usando mochilas propulsoras y Rex se disculpó por no haber traído una para Tano. Sin embargo, Tano sonrió y le dijo que no necesitaba mochila propulsora, retándole a una carrera hasta la superficie entre ambos.[81]

Saltando de su cañonera, Tano encendió sus sables de luz y aterrizó en otra cañonera, destruyendo las mochilas propulsoras de dos supercomandos que le atacaron con sus sables de luz. Viendo que había más supercomandos mandalorianos dentro de la nave, Tano saltó hacia el interior, destruyendo una mochila propulsora antes de destruir dos más tras acceder al interior de la nave. Entonces, cortó los blásteres de otros dos supercomandos antes de golpear a uno y expulsar al otro de la nave con la Fuerza. Antes de partir, Tano golpeó al último de los supercomandos de a bordo antes de destruir su mochila propulsora, lo que le permitió saltar hasta un caza/transporte clase Kom'rk y correr por encima de él hasta observar una cañonera en rumbo de colisión. Aterrizando encima de ella, vio que el asiento eyector del piloto había fallado y que éste necesitaba ayuda para abandonar la nave. Para ello, Tano usó sus sables de luz para abrir la cabina, permitiendo al asiento eyector salir disparado mientras el piloto le daba las gracias. Antes de que la cañonera chocara, Tano saltó hacia la superficie de Sundari donde los supercomandos mandalorianos dispararon contra ella. Habiendo saltado a una plataforma, la cañonera explotó detrás de Tano mientras ella desviaba los disparos, lo cual le permitió matar a varios de ellos. Mientras continuaba defendiéndose, Ursa Wren y otros mandalorianos llegaron junto a Rex. Con la llegada de Rex, Tano mencionó que le había ganado en la carrera, y Rex recordó que algunas cosas nunca cambiaban. Entonces, los dos amigos corrieron hacia el interior de Sundari.[81]

La ciudad subterránea
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Los últimos momentos de Vaughn.

Poco después, Gar Saxon, uno de los líderes de los supercomandos mandalorianos, escapó a la ciudad subterránea de Sundari, llevándose a varios supercomandos con él. Observando cómo ocurría la lucha en la ciudad desde un balcón, Tano vio como Rex regresaba de su misión de exploración y confirmaba que Maul aún no había sido encontrado. Con estas noticias, Bo-Katan Kryze les dijo que ella y sus mandalorianos se dirigirían al Palacio Real de Sundari para capturar al Primer Ministro Almec y les ordenó encontrar a Maul, puesto que no podían permitirse mantener un asedio prolongado. Después de que Kryze se hubiera ido, Tano ordenó a Rex apoyar a Ursa Wren en los muelles para asegurar que Maul no escapaba. Antes de partir, Rex dijo a Tano que si Maul no se encontraba en Sundari, entonces todo el asedio sería parte de sus planes. Justo entonces, el Capitán Clon Vaughn contactó con Rex, informando de que tenían una pista de la localización de Maul mientras Tano y Rex corrían a investigar la situación.[81]

Tras ser trasladada por una cañonera, Tano se adentró en la ciudad subterránea, reuniéndose con Vaughn, quien le dijo que se habían enfrentado a Saxon, quien había escapado por un túnel de acceso y parecía tener prisa. Tano preguntó que había debajo de Sundari y Vaughn le informó de que se trataba de una serie de túneles de alcantarillado y puntos de acceso a conductos, pero no sabía si conducían hacia fuera de la ciudad. Entonces, Tano ordenó a los clones moverse para investigar a dónde llevaban los túneles.[81]

Sin que ellos lo supieran, se dirigían a una trampa puesto que otra líder de los supercomandos, Rook Kast, estaba preparando a sus fuerzas para emboscar a Tano y los clones. Mientras continuaban explorando, Kast salió de su escondite y lanzó un explosivo contra ellos, obligando a Tano a usar la Fuerza para desviar el explosivo hacia otro camino. Sin embargo, aun así el explosivo estalló cerca, tirando a Tano al suelo y desorientándola brevemente junto a sus tropas. Mientras Tano se recuperaba, Vaughn y el resto de clones persiguieron a Kast y a sus supercomandos mandalorianos, ignorando los gritos de Tano para que esperaran. Mientras Tano seguía el rastro de los cuerpos, llegó hasta un claro en la ciudad subterránea donde Vaughn se disculpó por sus acciones, muriendo mientras ella sostenía su mano.[81]

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Maul y Tano se enfrentan brevemente.

Poco después, los supercomandos aparecieron y rodearon a Tano, quien encendió sus sables de luz para defenderse mientras Maul salía de su escondite. Al verla, Maul explicó que él había estado esperando a Obi-Wan Kenobi, y preguntó a Tano qué hacía ella en su lugar.[81] Entonces, Tano miró alrededor de sus oponentes y reajustó su posición defensiva, girándose de cara a Maul. Luego, Maul dijo que asumía que tenían algunos conocidos en común. Mientras Maul hablaba, Tano presionó un botón de su comunicador de muñeca, informando a Rex de que necesitaba ayuda. Mientras Rex rastreaba su señal, Maul explicó que había estado seguro de que Kenobi vendría en vez de enviar a Tano, quien explicó que se le necesitaba en la Batalla de Coruscant y no luchando contra Maul. Maul empezó a preguntarse si el plan de Darth Sidious estaba finalmente culminando, pero no explicó demasiado a Tano. Entonces, Maul preguntó por qué Kenobi enviaría a Tano, y ella contestó instando a Maul a rendirse y preguntárselo a Kenobi ellos mismos. Sin embargo, Maul respondió que eso no tenía sentido, puesto que creía que la República Galáctica y los Jedi pronto serían derrocados por Darth Sidious. No obstante, antes de poder terminar la conversación, Rex y varios clones llegaron, atacando a dos supercomandos mandalorianos por la espalda mientras Maul encendía su sable de luz y atacaba a Tano, quien pudo defenderse a tiempo. Sin embargo, tras una breve lucha, Maul declaró que no era el momento de su verdadera confrontación e hizo retroceder a Tano. Antes de que ella se pudiera recuperar, Maul agarró a Rex con la Fuerza y lo lanzó contra Tano. Maul, Kast, y otro supercomando mandaloriano huyeron entonces, por lo que Tano ordenó a sus fuerzas perseguirles mientras ella misma se recuperaba y también les daba caza. Al separarse, Tano persiguió lo que creía que era Maul, pero tras tomar un atajo, sólo llegó ante Rex, perdiendo a Maul. Sabiendo que habían fallado, Tano declaró que habían perdido a Maul.[82]

Conferencia con Kenobi
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Kenobi informa a Kryze, Tano, y Rex de las sospechas del Consejo Jedi sobre Darth Sidious.

Tras el escape de Maul, Tano se reunió vía holograma con Obi-Wan Kenobi junto a Rex en el Gran Salón del Palacio Real de Sundari mientras supervisaban un holograma del propio Sundari. Durante su reunión, Bo-Katan Kryze se acercó e informó al grupo de que aún había luchas en el sector 11, y felicitó a los clones por su eficacia en el asedio; sin embargo, también destacó que Maul todavía debía ser puesto bajo custodia o de lo contrario todo el asedio habría sido en vano. Con eso dicho, Tano habló de cómo mientras se encontraba en la ciudad subterránea, Maul mencionó el nombre de Darth Sidious, tras lo que Kryze preguntó a Kenobi de quién se trataba, pero Kenobi sólo pudo compartir poca información de él, sólo siendo capaz de informar de lo que el Consejo Jedi sospechaba. Después de que Rex apagara el holomapa de Sundari e hiciera alejarse al droide astromecánico que lo proyectaba, Kenobi informó al grupo de que el Consejo Jedi sospechaba que Sidious era un Lord Sith, el cual había orquestado las Guerras Clon y jugado con ambos bandos durante todo el conflicto. Entonces habló de cómo habían descubierto el nombre por primera vez gracias al Conde Dooku en Geonosis, aunque cualquier posibilidad de aprender más sobre Sidious gracias a él se habían desvanecido cuando Anakin Skywalker lo decapitó durante la Batalla de Coruscant, sorprendiendo brevemente a Tano. Tras eso, Kenobi afirmó que capturando a Maul, quizás podrían resolver el misterio de Darth Sidious y juntar todas las piezas del rompecabezas que se les presentaba. Luego, Tano solicitó más tropas, pero Kenobi le informó de que eso no era posible puesto que él había sido enviado a dar caza al General Grievous en Utapau. Entonces Tano preguntó si podían recibir refuerzos de Skywalker, pero, como respuesta, Kenobi pidió a Rex y Kryze que le permitieran hablar a solas con Tano.[82]

Con su marcha, Kenobi informó a Tano de que Skywalker había recibido la tarea de espiar al Canciller Supremo Sheev Palpatine por parte del Consejo Jedi, algo que Tano consideró de mal gusto. Cuando ella preguntó el motivo, Kenobi le dijo que el Senado Galáctico había permitido a Palpatine estar demasiado tiempo en el poder tras la verdadera conclusión de su mandato, incluso con los poderes de emergencia otorgados a Palpatine poco antes del comienzo de las Guerras Clon, y que el Consejo Jedi sospechaba de las verdaderas intenciones de Palpatine. Entonces, Tano respondió que Palpatine había sido un gran amigo para Skywalker desde hacía mucho tiempo y por eso no creía que él estuviera contento con su misión actual. Kenobi confirmó sus deducciones y le dijo que lo mejor sería que Tano hablase con Skywalker, lo cual disgustó a Tano, creyendo que Kenobi le estaba pidiendo que defendiera el juicio de la situación del Consejo Jedi, y pensando que ella no era la persona adecuada para ello tras todos sus problemas con el Consejo Jedi. Sin embargo, Kenobi admitió que el Consejo Jedi no siempre acertaba en todas sus decisiones y por eso le estaba pidiendo ayuda. Justo entonces, Rex irrumpió en la sala, disculpándose por haber interrumpido la conversación, pero informando a ambos de que había habido un ataque en la ciudad subterránea. Kenobi permitió a Tano partir y, mientras ella se alejaba, pidió a Kenobi que dijera a Skywalker que el Consejo Jedi no siempre tomaba las decisiones correctas, a lo que Kenobi contestó afirmando que lo haría. Entonces, Tano corrió a la ciudad subterránea mientras Kenobi observaba.[82]

Interrogando a Almec

Regresando a la ciudad subterránea, Tano inmediatamente recibió noticias de que los clones estaban siendo emboscados de camino a reforzar la cubierta C por lo que ella ordenó a Rex reforzar el lugar, y él corrió a cumplir sus órdenes. Tras eso, Tano avanzó hacia un soldado clon herido llamado Sterling, quien solicitó su presencia. Sterling le informó de que Maul había atravesado sus defensas, preguntando por Tano todo el tiempo. Eventualmente, Maul se había dado cuenta de que el soldado CAR Jesse era el clon más viejo de los presentes y miró en su mente, viendo que había servido con Tano anteriormente, por lo que lo secuestró tomándolo como prisionero para poderlo interrogar y obtener toda la información posible. Con eso, Tano se adentró aún más en la ciudad subterránea.[82]

AlmecInterrogation

Tano, Kryze y Rex interrogan a Almec.

Poco después. Tano abandonó la ciudad subterránea y se dirigió a la prisión real junto a Rex y Bo-Katan Kryze para interrogar a Almec y saber más del plan de Maul. Al entrar en su celda, Almec mencionó sarcásticamente lo halagado que se sentía por que los tres hubieran podido encontrar tiempo para reunirse con él. Después de eso, Kryze comenzó el interrogatorio preguntándole a Almec cuál era el plan de Maul y cómo planeaba escapar. En respuesta, Almec les informó de que Maul no intentaba escapar ya que no veía ningún sentido en ello. Kryze creía que esto significaba que Maul pensaba que podía ganar, pero Almec le aseguró que esa no era la razón, ya que había estado lleno de temor en los últimos días. Tano luego le preguntó si había mencionado a Darth Sidious, a lo que Almec contestó que Maul no había hecho eso en su presencia. Continuando con las preguntas, Kryze preguntó por qué Maul quería a Obi-Wan Kenobi presente, a lo que Almec respondió que no se trataba exclusivamente de Kenobi y que había otro individuo al que Maul también quería. Sin embargo, Almec fingió haber olvidado el nombre de esa persona. Tano pidió a Kryze que «ayudara» a Almec a recordar y, con esto, él se dispuso a hablar, pero Gar Saxon le disparó de inmediato, habiéndose infiltrado en la prisión para asesinar a Almec bajo las órdenes de Maul para que no pudiera decir nada. Mientras Kryze corría tras Saxon, Tano ordenó a Rex pedir un médico mientras Almec le informaba de que Maul había tenido una visión y un nombre había aparecido ante él. Mientras Almec moría lentamente, Tano le suplicó que le dijera el nombre de ese individuo. Almec lentamente pronunció el nombre de «Skywalker» antes de morir en los brazos de Tano. Ella, brevemente impactada por eso, se recuperó eventualmente y se unió de nuevo a Rex y Kryze—quien había perdido a Saxon mientras lo perseguía—regresando al Palacio Real de Sundari.[82]

La confrontación final
«Obi-Wan tenía razón. Eres difícil de matar.»
―El breve comentario de Tano antes de su enfrentamiento final con Maul[fuente]

Tras dirigirse de vuelta al Palacio Real de Sundari, Tano, junto a Bo-Katan Kryze, Rex, Ursa Wren y otros mandalorianos, permaneció en un balcón supervisando las calles de Sundari donde los ciudadanos estaban siendo trasladados a lugares protegidos por los clones, que recibieron el rechazo de los ciudadanos, que no querían soldados clon en Sundari. Eventualmente, Kryze se hartó de observar la situación y se alejó mientras Tano y Rex la seguían de cerca. Mientras entraban en el palacio, Kryze informó a Tano y Rex que de los ciudadanos de Sundari no aceptarían una ocupación de la República Galáctica por mucho más tiempo y ella tampoco. Como respuesta, Rex argumentó que él y sus hombres no querían permanecer como fuerza policial en la ciudad con Tano añadiendo que se marcharían en cuanto Maul fuese capturado y que Kryze tendría entonces la oportunidad de liderar a su gente. Sin embargo, mientras decía eso, Maul apareció sentado en el trono del Gran Salón junto al soldado CAR capturado Jesse, a quien Maul había sacado información acerca de Tano mediante la Fuerza.[82]

MaulSundari

Maul recibe a Ahsoka, Rex y Bo-Katan en el Palcio Real de Sundari.

Kryze intentó atacar a Maul con sus pistolas bláster WESTAR-35 y disparó contra el Lord Sith antes de ser detenida por Maul, que la retuvo en su lugar con la Fuerza. Maul la retuvo brevemente antes de soltarla, tras lo que Tano y Rex acudieron en su ayuda. Entonces, Maul liberó a Jesse y se lo entregó como muestra de buena fe hacia ellos. Mientras Jesse regresaba con ellos, Rex le preguntó si se encontraba bien, tras lo que Jesse se disculpó, explicando que le había confesado a Maul todo lo que quería saber. Tano ordenó a Rex que sacara a Jesse del palacio. Mientras Rex se iba, comenzaron a sonar explosiones en el exterior—habiendo sido orquestado por Maul un contraataque de sus supercomandos mandalorianos para que Tano y él se quedaran a solas—haciendo que Tano se girara y Maul sugiriera que alguien debía ocuparse de las explosiones. Tano pidió a Kryze que se ocupara del asunto, tras lo que Maul se levantó y afirmó que él y Tano estarían bien a solas. Con una última instancia de Tano para que se fuera, Kryze se puso el casco y corrió al exterior a defender a su gente.[82]

Ahora a solas, Maul comenzó a destacar lo ignorantes que eran los combatientes del exterior, lo que hizo que Tano preguntara si Maul estaba haciendo esto para ser escuchado por el Consejo Jedi o por ella. A eso, Maul respondió que quería hablar específicamente con ella. Luego, Maul mencionó la traición de la Orden Jedi a Tano y le preguntó si eso era cierto, a lo que Tano contestó que ella había abandonado la Orden Jedi voluntariamente, pero Maul sabía que la decisión había estado motivada por la hipocresía del Consejo Jedi. Que Maul dijera eso hizo que Tano se detuviera brevemente antes de que Maul mencionara cómo ambos habían sido herramientas de poderes superiores. Entonces, Tano avanzó y anunció que estaba allí para llevar a Maul ante la justicia, a lo que él explicó que la justicia sólo era el constructo de la moral del poder gobernante. También dijo que creía que el gobierno actual pronto sería derrocado, y Tano preguntó si Darth Sidious se encontraba detrás de lo que Maul predecía. Entonces, Maul comenzó a explicar que Sidious se encontraba detrás de todos los acontecimientos recentes de la galaxia, siempre orquestando desde las sombras, pero que pronto se revelaría a sí mismo. Tano pidió a Maul que se uniera a ella para ayudar a los Jedi a detener a Darth Sidious antes de que tomara el control de la galaxia. Sin embargo, Maul sabía que la República Galáctica ya había caído pero los demás no podían verlo. Maul explicó que los Jedi no serían capaces de derrotar a Darth Sidious y que su tiempo ya había expirado, pero que creía que él y Tano podrían ser capaces de derrotar a Darth Sidious si trabajaban juntos.[82]

Siege of Mandalore

Tano y Maul se enfrentan en el Palacio Real de Sundari.

Mientras las explosiones continuaban en el exterior, Maul extendió su mano para que Tano se uniera a él mientras ella meditaba su decisión. Mientras lo hacía, una explosión rompió el cristal de alrededor de ambos. Eventualmente, Tano decidió que ayudaría a Maul con la condición de que respondiera a la pregunta de por qué quería que Anakin Skywalker acudiera a Mandalore. A esto, Maul explicó que Skywalker era la clave del plan de Darth Sidious, lo que hizo que Tano preguntara si él era el Elegido, pero Maul sólo sabía que su papel era destruir a los Jedi y que durante mucho tiempo había sido preparado para esa tarea. Entonces, Tano exclamó que Maul estaba mintiendo, pero Maul permaneció firme en sus creencias, afirmando que había orquestado la guerra actual en Mandalore para atraer a Skywalker y Obi-Wan Kenobi hasta allí en un intento por matar a Skywalker, privando a Darth Sidious de su preciado pupilo y peón principal. Tano rechazó esa respuesta y encendió sus sables de luz, preparada para luchar contra Maul y ponerlo bajo custodia, afirmando que la visión de Maul era errónea y que ella conocía a Skywalker lo suficiente como para saber que eso nunca ocurriría. Maul encendió su propia arma y dijo que debía dar a la Padawan una última lección. Entonces, Maul saltó hacia Tano y los dos iniciaron su duelo.[82]

Tano consiguió esquivar varios de sus ataques antes de verse obligada a detener varios de sus otros ataques. Entonces, vio una apertura en las defensas de Maul y comenzó a atacarle, obligándolo a pasar a la defensiva. Tano intentó golpear a Maul sin resultado, lo que hizo que él le diera un codazo en la cara y le obligara a soltar su shoto. Tano estaba ahora a la defensiva de nuevo, siendo obligada a luchar sólo con un sable de luz; sin embargo, pronto consiguió golpear a Maul, lo que le permitió usar la Fuerza para recuperar su shoto, obligando a Maul a esquivar el sable de luz mientras regresaba a su mano. Entonces, la lucha dio paso a una breve pausa en la que Tano se burló de Maul afirmando que si Skywalker hubiera venido, Maul no habría durado mucho en su lucha, a lo que Maul respondió que Tano tenía la arrogancia de Kenobi antes de que ella apuntara con su sable hacia él, mencionando que probablemente tenía muchas cualidades que no le gustaban. Reanudando la lucha, Tano consiguió de nuevo llevar la delantera pero se vio eventualmente obligada a retroceder saltando varias veces para esquivar los ataques de Maul. Forzado a un bloqueo de sables de luz, Maul gruñó, intentando desorientar a Tano, pero esto le dio la oportunidad de empujarlo hacia fuera por una de las ventanas del palacio. Tano hizo una breve pausa para recuperar el aliento antes de perseguir a Maul para reanudar su lucha.[82]

TanoMaul

Tano se enfrenta a Maul una última vez.

Mientras Tano salía al exterior, vio que los refuerzos mandalorianos llegaban para ayudar a los clones a contener el ataque de los supercomandos; sin embargo, al girar la cabeza, vio que Maul estaba intentando escapar a lo alto de un edificio, por lo que lo persiguió hasta las bigas de apoyo del tejado de la cúpula de la ciudad. Mientras llegaba a las bigas de apoyo, Tano encendió sus sables de luz y afirmó que Kenobi tenía razón al decir que Maul era difícil de matar. Cuando Maul se giró a mirarla, Tano corrió hacia él mientras éste encendía su propio sable de luz para continuar su duelo. Maul bloqueó los ataques de Tano mientras ella se abalanzaba sobre él, obligándola brevemente a pasar a la defensiva antes de que volviera a intentar golpear a Maul, pero él evitó el golpe. Mientras la lucha continuaba, Tano saltó hacia una de las bigas de apoyo y casi perdió el equilibrio, pero consiguió recuperarse antes de que Maul exclamara que si se hubiera unido a él, podrían haber detenido a Darth Sidious juntos, pero Tano sabía que eso sólo habría ocurrido para que Maul pudiera tomar su lugar, lo cual afirmó como respuesta. Al saltar Maul hacia ella, Tano logró empujarlo hacia otra viga de apoyo, lo que provocó que Maul perdiera brevemente el equilibrio. Luego, una vez más, se abalanzó sobre él, pero recibió una patada, apenas logrando agarrarse a una viga de apoyo.[82]

Justo entonces, el caza/transporte clase Kom'rk de Maul llegó y le instó a partir. Maul rompió el cristal del techo de la ciudad en un intento de escapar, pero Tano lo persiguió, saltando y tirándolo de donde se encontraba. Mientras los dos recuperaban el equilibrio una vez más, el duelo continuó. Sin embargo, Maul pronto consiguió tirar uno de los sables de luz de Tano, haciendo que cayera al combate de debajo. Mientras ella intentaba luchar con sólo uno de sus sables láser, Maul cortó la viga de apoyo sobre la cual se encontraban los dos, haciendo que se hundiera. Tano permaneció en una posición de combate, preparada para el ataque de Maul una vez más. Cuando Maul saltó sobre su lado de la viga de apoyo hundida, le dio una última oportunidad de unirse a él, que ella rechazó. Eso hizo que Maul continuara su ataque, pero fue detenido cuando Tano agarró su sable de luz y le lanzó desde lo alto de la viga. Entonces, Tano detuvo a Maul de su caída usando la Fuerza mientras Maul suplicaba a Tano que le dejase morir. Mientras las cañoneras llegaban para apresarlo, Maul gritó aterrorizado por lo que estaba por venir, afirmando que todos morirían antes de que los mandalorianos le ataran con cables salidos de su muñeca, lo que permitió a Rex aturdir a Maul. Entonces, Rex dijo a Tano que ellos se llevarían a Maul mientras Tano recuperaba el aliento y miraba al agujero en el techo que Maul había hecho.[82]

Consecuencias
TanoCouncilMeeting

Tano contacta con el Consejo Jedi tras la captura de Maul.

Mientras se hacía de día nuevamente en Mandalore, Tano llegó con el capturado Maul para reagruparse con Bo-Katan Kryze. Al salir de su cañonera, Kryze expresó su sorpresa por la habilidad de Tano para capturar a Maul, afirmando que estaba impresionada y devolviendo a Tano sus sables de luz. En respuesta, Tano dijo que eso era lo que quería el Consejo Jedi, con Kryze contestando que su logro era impresionante debido a que muchos otros habían fracasado en capturar a Maul en el pasado. Mientras continuaban hablando, Tano afirmó que su logro se debía a que había prendido de los mejores de la galaxia, incluida Kryze. Sin embargo, Kryze no se sentía halagada y expresó su deseo de destacar en algo más que el combate. Con esto, Kryze miró las ruinas que el asedio había causado, y Tano respondió a la afirmación de Kryze diciendo que la gente de Mandalore necesitaba un nuevo tipo de líder. No obstante, Kryze continuó diciendo que su hermana Satine Kryze había intentado y fracasado en ser un nuevo tipo de líder para Mandalore, preguntándose si ella podría ser diferente. Antes de poder continuar, Rex se acercó a ambas e informó a Tano de que había conseguido contactar con el Consejo Jedi. Dejando a Kryze, Tano preguntó si Anakin Skywalker estaba con el Consejo Jedi, a lo que Rex respondió que cuando él había partido para informar a Tano de la reunión, Skywalker estaba presente. Antes de irse, Kryze se giró hacia Tano y le dio su permiso para irse, diciendo que ella podría encargarse de Maul. Con eso, Tano partió con Rex.[83]

Cuando Tano y Rex llegaron a la reunión vía holograma, los miembros del Consejo Jedi se giraron para mirarlos a ambos, con el Maestro Jedi Mace Windu destacando que su misión había sido un éxito. Tano confirmó su afirmación y confirmó que escoltaría a Maul de vuelta a Coruscant en cuanto partieran. Yoda agradeció a Tano su servicio, a lo que Tano respondió diciendo que sólo había cumplido con su deber como ciudadana de la República Galáctica. Entonces, Yoda preguntó si hizo ese acto como Jedi en lugar de como ciudadana, pero Tano continuó informando de que no se sentía preparada para ser considerada Jedi una vez más. Cambiando de tema, Tano dijo que deseaba hablar con Skywalker, pero fue informada de que Skywalker había partido a informar al Canciller Supremo Sheev Palpatine de que el General Grievous había sido localizado en Utapau. Habiendo recibido un informe previo de que Obi-Wan Kenobi había sido enviado a Utapau, Tano preguntó si Kenobi era quien había entablado combate con Grievous, con Yoda confirmando que Kenobi efectivamente había iniciado la lucha contra las fuerzas Separatistas en el planeta. Tano afirmó que la guerra podría terminar pronto si Kenobi conseguía matar a Grievous pero, en respuesta, Windu dijo que el final de la guerra dependía de si Palpatine decidía acabarla o no. Con Tano preguntando el significado de esas palabras, Windu explicó fríamente que ese era un asunto exclusivo del Consejo Jedi. Tano, decepcionada, inclinó la cabeza y le dijo a Windu que lo entendía. Antes de cortar la transmisión, Windu miró por última vez a Tano antes de abandonar la reunión junto a Ki-Adi-Mundi y Aayla Secura. El único Jedi que se quedó fue Yoda, quien preguntó si Tano tenía algo más que decir o si tenía algún mensaje para Skywalker; sin embargo, Tano lo negó, omitiendo la información que había recibido de Maul e informando al Gran Maestro de que hablaría con Skywalker ella misma en cuanto lograra contactar con él. Yoda deseó que la Fuerza acompañara a Tano y cortó la transmisión. Con la reunión terminada, Rex se acercó a Tano y destacó que ella no había comunicado la información que Maul había revelado sobre Skywalker, pero Tano le quitó importancia y simplemente confirmó que no lo había hecho. Entonces, los dos caminaron hasta reagruparse con Kryze y atestiguaron el traslado de Maul hasta un transporte clase Nu.[83]

BoKatanTano

Tano y Kryze observan el traslado de Maul a una lanzadera.

Mientras caminaban, Kryze, Ursa Wren, y varios otros mandalorianos custodiaron a Maul capturado en una vieja bóveda mandaloriana. Entonces, Kryze avanzó hacia Tano y las dos se saludaron mutuamente inclinando sus cabezas con Rex dejando a Tano para acompañar a los mandalorianos mientras escoltaban a Maul. Mientras los mandalorianos lo subían a un transporte, Tano destacó la bóveda y afirmó que era impresionante, lo que hizo que Kryze mencionara que la bóveda era de una época en la que los mandalorianos estaban en guerra con los Jedi. Con esto, Tano chistosamente remarcó que pensaba que la hermana de Kryze, Satine, había prohibido esos dispositivos, pero Bo-Katan contestó que ese era el último que los mandalorianos poseían. Con su conversación terminada, Kryze y Tano se dieron la mano y se despidieron antes de que Tano subiera a bordo del transporte. Ahora con Maul bajo su custodia, el transporte se dirigió al Destructor Estelar clase Venator Tribunal[84]. Mientras estaban a bordo, Tano y Rex hablaron entre ellos. Al llegar al 'Tribunal, Tano y Rex salieron del transporte y se dirigieron al puente de la nave.[83]

Mientras Tano y Rex entraban en el puente, los oficiales presentes se giraron y saludaron a Tano con una sonrisa en la cara. El Destructor Estelar pronto saltó al hiperespacio mientras Rex y Tano observaban. Mientras Tano miraba al vacío del hiperespacio, Rex le preguntó si estaba pensando en algo, lo que hizo que Tano explicara que todo lo que había aprendido desde que era una Padawan había sido ser una soldado, contrariamente a su entrenamiento como guardiana de la paz. A esto, Rex contestó que en toda su vida sólo había sido un soldado y que él y sus hermanos tenían sentimientos contradictorios sobre la guerra porque sin ella, él y sus hermanos clones no existirían. Entonces, Tano lo miró y sonrió, diciendo a Rex que la existencia de los clones era una de las cosas buenas que las Guerras Clon habían implicado y que la República Galáctica nunca habría podido tener unos soldados mejores, igual que ella no habría podido tener un mejor amigo que Rex. Entonces los dos se saludaron mientras un oficial llegaba para informar de que se había convocado una nueva reunión y, cuando se le preguntó si quería unirse a Rex en la reunión, Tano declinó, creyendo que serían más buenas noticias. Entonces, Tano volvió a mirar al vacío azul del hiperespacio.[83]

Orden 66

Salvando a Rex
«Rex, ¿qué está pasando?
¡Atrás! Búsquelo. Búsquelo. Cincos. Búsquelo. ¡Cincos!
»
―Rex insta a Tano a investigar sobre Cincos[fuente]
Order 66 Ahsoka

Tano se defiende de la Orden 66.

Mientras Tano contemplaba el hiperespacio, tuvo una visión en la que escuchó al Maestro Jedi Mace Windu enfrentándose a Darth Sidious en su oficina y a Anakin Skywalker traicionando a Windu. Por eso, Tano corrió hacia el centro de mando e informó a Rex de que creía que algo terrible le había ocurrido a Skywalker. Sin embargo, los clones comenzaron a apuntarle con sus blásters en cumplimiento de la Orden 66. Uniéndose a ellos, Rex les ordenó bajar sus blásters para poder matar a Tano él mismo, con una lágrima cayendo por su cara mientras intentaba resistirse a su chip inhibidor, un implante orgánico en el cerebro de los soldados clon que les obligaba a cumplir la Orden 66. Con todo su cuerpo temblando, Rex pidió a Tano investigar sobre el soldado CAR Cincos antes de dispararle. Tano saltó para esquivar los disparos, corrió hacia Rex y lo empujó, encendiendo sus sables de luz para defenderse de los ataques del resto de clones, consiguiendo matar a dos de ellos. Entonces, cerró una puerta blindada mientras Rex empezaba a ponerse en pie, pero ella le golpeó la cabeza contra la consola de mando. No obstante, el soldado CAR Jesse y un grupo de clones llegaron, obligando a Tano a desviar su atención mientras todos los presentes le disparaban. Tano intentó dirigir los disparos hacia el techo en un intento de escapar. Mientas escapaba, los clones pensaban que la habían abatido, pero pronto descubrieron que Tano había huido a los conductos de ventilación de encima.[83]

Saliendo de los conductos, Tano se abrió camino hasta el bloque de detención en un intento por liberar a Maul de su captura como distracción. Al llegar, dos miembros de la Guardia de Coruscant estaban apuntando a Maul, preparados para ejecutarlo, pero ella usó la Fuerza para empujar a uno y noqueó al otro lanzándolo hacia el techo. Con esto, Ahsoka miró a Maul y le dijo que no le hiciera arrepentirse de su decisión antes de liberarlo de su cautiverio. Mientras Maul caía de la bóveda, expresó su sorpresa por que Tano hubiera sobrevivido, pero en lugar de sentirse halagada, Tano apuntó con su sable de luz a Maul y le preguntó si él se encontraba tras la traición de los clones. Maul explicó que no sabía exactamente qué había pasado, pero afirmó que estaba seguro que Tano había percibido las voces gritando de dolor y muerte mientras los Jedi por toda la galaxia eran asesinados, incluido el antiguo mentor de Tano, Plo Koon. Entonces Tano explicó que sus clones se habían vuelto contra ella y que no sabía el motivo, tras lo que Maul empezó a reír y dijo que no había sabido cuál era el gran plan concreto de Darth Sidious, pero que ahora sí—el Gran Ejército de la República había sido vuelto en contra de la Orden Jedi. Entonces se levantó y afirmó que Tano había hecho bien en buscar su ayuda, pidiéndole que siguiera su liderazgo, pero Tano le apuntó con su sable de luz una vez más y dejó claro que ella sólo quería usar a Maul como distracción para los clones, y no como compañero. Tano ordenó a Maul partir a sembrar el caos mientras Maul le miraba con odio. Mientras los dos salían de la celda, Maul pidió a Tano uno de sus sables de luz para tener oportunidades en la lucha, pero ella se negó y le ordenó partir una vez más. Habiendo liberado a Maul, Tano se dirigió a la sala de almacenamiento de droides para reclutar la ayuda de los droides estacionados allí.[83]

AhsokaFreesMaul

Ahsoka libera a Maul.

Mientras los clones la buscaban, Tano avanzó de incógnito por el Tribunal, llegando eventualmente a su destino. En cuanto llegó a la sala de almacenamiento de droides, Tano reactivó a su antiguo droide astromecánico R7-A7, quien estuvo entusiasmado por verla, pero Tano le dijo que se calmara mientras los otros dos droides, CH-33P y RG-G1, se activaban. Mientras se activaban, los droides empezaron a preguntar a Tano qué estaba pasando, pero Tano no les podía dar respuestas que ella no tenía; sin embargo, pidió su ayuda para descubrir qué ocurría. Los droides prometieron ayudarla y Tano les ordenó empezar a actuar. Con todos ellos de acuerdo, Tano ordenó a R7-A7 acoplarse al ordenador central y buscar archivos seguros relacionados con CT-5555 «Cincos» tal como Rex le había pedido. Mientras R7-A7 buscaba, descubrió archivos relacionados con un incidente ocurrido a bordo de la estación espacial de Ringo Vinda entre CT-5385 «Tup» y la General Jedi Tiplar, así como un informe de la doctora kaminoana Nala Se en el que decía que Cincos había sufrido un mal funcionamiento de su chip inhibidor. Nala Se continuó mencionando un informe de queja elaborado por Rex, el cual Tano pidió a R7-A7 que abriera, pero pronto descubrió que estaba sellado. Para abrirlo, Tano probó el código de acceso de Skywalker, 8108, con el que consiguió abrir el archivo. En el archivo abierto, Rex dijo que los chips inhibidores del cerebro de los clones posiblemente podían tener un propósito alternativo que desconocían. Con esta nueva información, Tano se embarcó con los droides en un intento de capturar a Rex y extraer su chip inhibidor.[83]

Mientras Rex avanzaba por un pasillo, R7-A7 y CH-33P lo detuvieron, cerrando las puertas blindadas de su alrededor separándolo así del resto de clones y dejándolo a solas con Tano. Con Rex atrapado, R7-A7 mostró un holograma de Tano, informando a Rex de que creía que sabía por qué él le había traicionado y que había visto el informe sobre Cincos. Debido a todo eso, Tano explicó a Rex que había programado para volverse contra ella y que su mente había sido alterada por su chip inhibidor, afirmando que podía ayudarle. Rex apuntó a R7-A7 con sus blásters y preguntó dónde se encontraba Tano, quien apareció detrás de él, con R7-A7 electrocutándole para llevarlo hasta la bahía médica. Cuando Rex cayó al suelo, Tano pidió a los droides que tuvieran cuidado de no hacerle daño. Mientras los clones empezaban a gritar detrás de las puertas blindadas, Tano preguntó a CH-33P si todas las puertas estaban cerradas entre los clones y la bahía médica, lo cual él confirmó. Con eso, Tano y los droides cargaron a Rex y entre todos lo llevaron hasta la bahía médica. Mientras los clones procedían a atravesar las puertas blindadas, Tano cerró incluso más puertas para cubrir su huida.[83]

RexAnguished-Shattered

Rex dispara a unos clones tras despertar de su operación.

Al llegar a la bahía médica, Tano puso a Rex en una camilla. Con Rex en posición, Tano ordenó a R7-A7 efectuar un escaneo del cerebro de Rex en busca de su chip inhibidor; sin embargo, el escaneo inicial daba resultados negativos por lo que Tano instó a un droide médico a revisar los resultados de nuevo. Mientras llevaban a cabo el escaneo una vez más, CH-33P alertó a Tano de que los clones estaban empezando a romper la puerta. Entonces, Tano preguntó a R7-A7 de nuevo si había encontrado algo en los escáneres, pero nada había sido descubierto. Con estas noticias, Tano se acercó a Rex y puso las manos alrededor de su cabeza, comenzando a murmurar y repetir que era una con la Fuerza y que la Fuerza estaba con ella. Continuando con su cántico, el inconsciente Rex comenzó a unirse a ella mientras que el chip inhibidor fue finalmente localizado. Con su ubicación por fin descubierta, Tano ordenó a R7-A7 extraer el chip inhibidor, lo cual R7-A7 inicialmente objetó preguntando si funcionaría, pero Tano no lo sabía, afirmando que si no extraían el chip, todos morirían de todas formas. Mientras intentaban extraer el chip inhibidor, los clones finalmente abrieron la puerta y Tano, en un intento por contenerlos, encendió sus sables de luz. Mientras los clones comenzaban a disparar a Tano, ella desvió sus disparos y usó la Fuerza para empujar a varios mientras CH-33P intentaba cerrar la puerta de nuevo. Cuando los clones empezaban a superar a Tano, Rex despertó de su operación y usó sus blásters para matar a varios clones mientras CH-33P sellaba la puerta de nuevo. Ahora con Rex despierto, Tano le preguntó si se encontraba bien, y él le aseguró que así era. Entonces, Rex se disculpó por volverse contra ella y casi haberla matado. Tano le preguntó cómo de extendidos estaban los chips inhibidores y cuántos Jedi estaban siendo traicionados por toda la galaxia, a lo que Rex respondió con la demoledora noticia de que todo el Gran Ejército de la República había traicionado a los Jedi y tenía órdenes de perseguir y destruir a los pocos supervivientes. Sin embargo, poco después, los clones empezaron a abrir una brecha en la puerta mientras Tano y Rex se giraban para mirar.[83]

Escapando del Tribunal
«Ahsoka, somos todos. A todo el Gran Ejército de la República se le ha ordenado perseguir y destruir a los Caballeros Jedi.»
―Rex explica cómo está de extendida la traición contra los Jedi[fuente]
TanoAndRexMedBay

Tano y Rex se preparan para enfrentarse a sus antiguos aliados.

Con Rex ahora del lado de Tano, los dos amigos estaban preparados para escapar del Tribunal. Permaneciendo frente a la entrada mientras los clones intentaban atravesar la puerta, Rex preguntó a Tano cómo planeaba salir de la bahía médica, a lo que ella respondió que tenía una idea. Cuando Rex le preguntó cuál era su idea, Tano le pidió poner sus blásters en modo aturdir puesto que no quería matar a ningún soldado clon. A medida que los clones continuaban abriendo la puerta, Rex informó a Tano de que ya casi habían terminado, pero Tano le dijo que esperara. Cuando hubieron abierto la puerta, Tano usó la Fuerza para empujar la puerta y golpeó con ella a varios soldados, facilitando su escape. Brevemente aturdidos, los tres clones restantes fueron fácilmente noqueados por Rex; sin embargo, varios clones más aparecieron de ambos lados mientras Tano salía de la bahía médica, con sus sables de luz encendidos, bloqueando los disparos mientras Rex aturdía a todos los clones que se interponían en su camino. Mientras luchaban con los clones que se acercaban, Tano ordenó a R7-A7 encontrar un camino de huida del Destructor Estelar. Mientras lo hacía, R7-A7 cerró las puertas blindadas de alrededor de ellos, bloqueando el paso de varios soldados clon, y permitiendo a Tano y Rex deshacerse de los que quedaban. Ahora sin enemigos a la vista, R7-A7 informó a Tano de que todas las cápsulas de escape habían sido destruidas, lo que hizo a Tano concluir que tomar una lanzadera era el mejor modo de escapar. Con eso, Tano empezó a marcharse, pero mientras caminaban Rex le informó de que Maul había escapado de su apresamiento, pero Tano, habiéndolo liberado ella misma, informó a Rex de este hecho, para su sorpresa. Rex preguntó por qué ella haría una cosa así, pero Tano simplemente respondió que se trataba de una distracción y corrió hacia el hangar, instando a Rex a apresurarse.[85]

Mientras continuaban corriendo hacia el hangar, la nave tembló mientras salía del hiperespacio, habiendo sido detenida por Maul, quien había destruido el hipermotor usando la Fuerza, haciendo que la nave quedara atrapada en el campo gravitacional de una luna cercana. Finalmente llegando al centro de control del hangar, Rex fue el primero en entrar, aturdiendo a los oficiales de su interior poco antes de que Tano empujara a uno con la Fuerza mientras Rex aturdía a otros dos. Mientras llegaban a los controles, Rex informó a Tano de que los clones habían cerrado todo y que si no estuvieran intentando matarles, se habría sentido orgulloso. Mientras Rex decía eso, Tano ordenó a R7-A7 abrir las puertas de la bahía 12, a CH-33P preparar una lanzadera, y a RG-G1 descubrir qué había ocurrido. RG-G1 informó a ambos de que el hipermotor había sido completamente destruido para incredulidad de Rex. Los dos pronto descubrieron que habían entrado en el campo gravitacional de una luna cercana. Tano pidió a R7-A7 que abriera las puertas principales del hangar y, de ese modo, vieron que se aproximaban a la luna, lo que hizo que Tano exclamara que debían salir de la nave. A medida que la nave iba cayendo profusamente, Rex preguntó por el estado de las puertas del hangar mientras Tano preguntaba por la lanzadera. R7-A7 consiguió abrir una de las puertas del hangar, revelando una lanzadera para ellos; no obstante, cuando R7-A7 continuó abriendo el resto de puertas del hangar, apareció un ejército de soldados clon, liderado por el soldado CAR Jesse, que les estaba esperando.[85]

AhsokaRexFeint-VaD

Jesse lidera un ejército de clones en un intento de eliminar a Tano y Rex.

Mientras los clones tomaban posiciones en el hangar, Rex rápidamente preguntó qué debían hacer, pero Tano admitió que había demasiados clones en su camino como para poder llegar a la lanzadera, y afirmó que no quería hacerles daño. Rex contestó que a ellos eso les daba igual, y le dijo que el Destructor Estelar estaba cayendo con todos los clones de a bordo dispuestos a morir para así poder matar a ambos. Tano se acercó a Rex y le quitó el casco, revelando su estado de angustia. Tano dijo a Rex que él era un buen soldado, igual que todos los demás clones de a bordo, y continuó afirmando que aunque ellos estuvieran dispuestos a morir, no iba a ser ella quien los matara. Entonces, Rex pensó que ella estaba admitiendo la derrota. Tano lo negó, aunque Rex no veía otra opción a rendirse que la de matar a los clones en un intento de escapar. Entonces, Tano se acercó a la ventana para observar al ejército de soldados clon que se interponía entre ellos y la lanzadera, afirmando que tenía una idea. Tano devolvió a Rex su casco y añadió que creía que la idea era buena. Entonces, se arrodilló para preguntar a los droides si podía contar con ellos, lo cual ellos confirmaron. Con su aceptación, Tano se levantó y dijo a sus cuatro aliados que les explicaría su plan de camino al hangar. Mientras se acercaban al hangar, Tano explicó a Rex que fingirían su captura ante los clones como distracción, mientras los droides se infiltraban por detrás de ellos y activaban los ascensores de debajo de los clones. Antes de llegar, Rex tomó los sables de luz de Tano para asegurarse de que el engaño era creíble.[85]

Mientras Rex y Tano llegaban al hangar, Rex pidió a los clones que no dispararan mientras él escoltaba a una supuestamente capturada Tano con sus manos en su cabeza. Cuando los clones se preparaban para disparar a Tano, Rex de nuevo ordenó no disparar mientras Jesse le decía que o cumplía la orden de ejecutar a Tano o lo haría él mismo. A medida que los clones apuntaban con sus blásters a Tano, Rex explicó que la orden que tenían era la de eliminar a los Jedi por traición pero como Tano ya no era una Jedi, no debía ser considerada como traidora bajo esa directriz. Esto hizo que Jesse se detuviera brevemente antes de informar a Rex de que él mismo había comunicado a los clones que tenían órdenes especiales de Darth Sidious de eliminar a Tano, aunque ya no fuese considerada una Jedi, así como a cualquier clon que desobedeciera la orden. Mientras Jesse hablaba, Tano miró a los droides, que le informaron de que necesitaban un poco más de tiempo, por lo que Tano instó a Rex a mantener ocupados a los clones un poco más. Respondiendo a lo que Jesse había dicho, Rex dijo que él y Jesse se conocían desde hacía mucho tiempo y que si no hacían las cosas bien, ellos serían los traidores. Tras tomar un momento para reflexionar, Jesse desposeyó a Rex de su rango de comandante, acusándolo de traición a la República Galáctica. Sin embargo, los clones se dirigieron a Tano de nuevo e indicaron que habían completado su tarea, por lo que Tano preguntó a Rex si estaba preparado, a lo que él respondió que no le gustaba demasiado ser comandante de todas formas. Cuando Jesse ordenó a los clones disparar a Tano y Rex, el plan de Tano se puso en marcha y los ascensores de debajo de los clones comenzaron a caer. Con eso, Tano empujó a Jesse hacia el hueco de un ascensor y recibió de vuelta sus sables de luz de manos de Rex.[85]

MaulAttemptsToEscape

Tano intenta impedir la huida de Maul.

Ahora llevando sus sables de luz una vez más, Tano, junto a Rex, fácilmente consiguió incapacitar a los demás soldados clon. Sin embargo, mientras luchaban contra los clones restantes, Maul apareció en el hangar, también intentando escapar del Destructor Estelar caído. Mientras Tano y Rex seguían luchando contra los clones, Maul corrió por su lado, y, notando que Maul estaba cerca gracias a RG-G1, Tano informó a Rex. Considerando a los clones restantes como poco numerosos, Tano persiguió a Maul y permitió a Rex lidiar con el resto de ellos mientras le seguía. Cuando llegó para detener a Maul, él le lanzó varias cajas con la Fuerza, diciéndole que ella había querido que él sembrara el caos y lanzándole otra caja que ella saltó para esquivarla. Finalmente llegando para atacar a Maul, Tano le lanzó un ataque antes de que él usara la Fuerza y la empujara hasta el hueco de un ascensor; sin embargo, antes de que ella pudiera caer al piso inferior de debajo del hueco, RG-G1 consiguió lanzarle uno de sus cables para que se pudiera sujetar. Mientras RG-G1 ayudaba a Tano a subir, los clones que habían caído por el hueco del ascensor empezaron a recuperar la consciencia, obligando a Tano a usar uno de sus sables de luz para defenderse de los disparos. Mientras ella se defendía, Rex hizo todo lo que pudo por ayudarla, aturdiendo a tantos clones como podía con sus blásters. No obstante, Tano comenzó a perder la lucha mientras los disparos láser empezaban a alcanzar su armadura de beskar. Los clones, dándose cuenta de que los droides estaban ayudando a los fugitivos, comenzaron a disparar contra ellos, obligando a CH-33P y RG-G1 a retroceder. Sin embargo, mientras eso ocurría, Maul robó la lanzadera y la encendió para escapar del Tribunal. Finalmente consiguiendo subir de nuevo, Tano corrió hacia la lanzadera y usó la Fuerza para intentar detener el escape de Maul. Mientras lo hacía, Maul incrementó la energía de los motores, haciendo que ella empezase a deslizarse por el suelo del hangar y obligando a Rex a cogerla de la mano para evitar que se alejara. Los refuerzos clon pronto llegaron al hangar, lo cual Rex comunicó a Tano, quien aún intentaba retener a Maul. Viéndose obligado a desviar su atención Rex tuvo que soltar a Tano y defenderla de los clones entrantes. Tano continuó reteniendo a Maul y atestiguó cómo R7-A7 era destruido por uno de los disparos de los clones. Sin embargo, al ver que Rex empezaba a ser superado por los clones, Tano decidió soltar la lanzadera de Maul para permitirle escapar. Entonces, Tano regresó al combate junto a Rex.[85]

Viéndose obligada a defenderse desde todas direcciones, Tano vio que estaban siendo enormemente superados en numero y lanzó sus sables de luz al suelo, usando la Fuerza para cortar un agujero en él para así escapar al piso inferior. Sin embargo, allí encontraron a numerosos clones que se estaban recuperando de su caída anterior por un ascensor. Cuando Jesse ordenó a los clones que atacaran de nuevo, Tano tuvo que volver a defenderse a sí misma. Por suerte, desde arriba, CH-33P y RG-G1 consiguieron manipular los ascensores una vez más, haciendo subir a muchos clones hasta el hangar principal. Sin embargo, los esfuerzos de los droides no pasaron desapercibidos, y los dos fueron ejecutados de inmediato por los clones. Acabando con los soldados restantes, Tano y Rex empezaron a buscar una nave estelar con la que escapar, viendo que muchas de las naves del nivel inferior estaban en mantenimiento. Eventualmente, Tano consiguió encontrar un Caza estelar BTL-B Ala-Y pero, antes de poder llegar a él, fueron atacados de nuevo por los clones. En un intento de llegar a la nave, Tano saltó por encima del hueco de un ascensor y empujó con la Fuerza a Rex hasta el Ala-Y. No obstante, con muchos más clones llegando al lugar, Tano tuvo que usar la Fuerza para empujarlos mientras iba viéndose superada. Mientras esto ocurría, el Destructor Estelar comenzó a romperse y perdió la gravedad artificial de a bordo, haciendo que todo lo de a bordo de la nave cayera en dirección a la superficie de la luna. Esto obligó a Tano a usar sus sables de luz en un intento de impedir caerse. Mientras ella hacía eso, Rex le instó a apresurarse y correr hacia el Ala-Y, lo que hizo que Tano reuniera energía suficiente como para correr por la superficie del hangar y saltar hacia el Ala-Y, pero cayó en el espacio abierto mientras el Ala-Y salía del hangar. Tano comenzó a caer por el aire mientras Rex la buscaba desde el Ala-Y, localizándola eventualmente y abriendo la escotilla del artillero para que ella subiera a bordo. Tano intentó moverse por el aire hasta llegar al Ala-Y, pero, mientras se agarraba a la escotilla, perdió su agarre y se alejó volando. Tano tuvo que usar los restos de la nave en su favor y correr por encima de ellos en un intento de reunirse de nuevo con Rex. Con un salto final, Tano usó la Fuerza para acercarse al asiento de la artillero del Ala-Y, y finalmente entró en la escotilla. Habiendo rescatado finalmente a Tano, Rex pilotó el Ala-Y lejos del lugar. Mientras se alejaban, Tano contempló todo lo que había ocurrido recientemente.[85]

AhsokaGraveyard-VaD

Tano permanece en pie frente a las tumbas de sus antiguos compañeros de armas.

Rex más adelante aterrizó el Ala-Y cerca del lugar en el que se estrelló el Destructor Estelar y los dos erigieron tumbas para cada uno de los clones caídos que pudieron encontrar, así como para R7-A7. Al completar el cementerio, Tano permaneció en pie frente a los clones caídos, tomando sus sables de luz y mirándolos una última vez antes de dejarlos allí en un intento de aparentar que ella también había muerto en la colisión.[85] Ahora fugitivos y enemigos de la República Galáctica, Tano y Rex tuvieron que pasar a la clandestinidad,[85] emprendiendo caminos separados eventualmente.[8] Años después,[86] uno de los sables de luz que Tano dejó atrás fue descubierto y tomado por Darth Vader.[85] Ni Tano ni Rex sabían que el Lord Sith era en realidad el antiguo maestro de Tano, Anakin Skywalker, quien había caído en el lado oscuro de la Fuerza y masacrado todo el Templo Jedi bajo el nuevo nombre de «Darth Vader».[87] Durante los últimos días de las Guerras Clon, Darth Sidious usó la frustración de Skywalker con el Consejo Jedi, así como su miedo de perder a su mujer mientras daba a luz, para atraerle al lado oscuro.[87] Tras la destrucción de la Orden Jedi, Tano estuvo presente en una lista de objetivos prioritarios entre los supuestos supervivientes de la purga.[88]

Los tiempos oscuros

Vida en Thabeska

Tras abandonar Mandalore, Ahsoka fue al Borde Exterior para esconderse del Imperio Galáctico. Viajó a Thabeska, que estaba bajo el control del Clan Fardi, una poderosa familia de contrabandistas que escondían sus operaciones de los imperiales gracias a la posesión de varios negocios legales que escondían a los ilegales. Al llegar a Thabeska, Ahsoka fue recibida por varias chicas jóvenes que le mostraron dónde podía encontrar comida y un lugar en el que quedarse, y que también le presentaron a Fardi, quien compró su nave por menos de un precio razonable. Luego descubrió que las chicas eran las hijas y sobrinas de Fardi, y que Fardi era el nombre de su familia. Las chicas tomaron a Ahsoka bajo su protección, y Tano se aseguró un puesto trabajando para Fardi en cuanto las chicas supieron que era una buena mecánica. Bajo el falso nombre de Ashla, Ahsoka trabajó para la familia Fardi durante varios meses, ganando dinero mientras seguía lamentando la caída de la República Galáctica, los soldados clon y la Orden Jedi.[8]

Dos meses antes del Día del Imperio, el primer aniversario del ascenso al poder del Emperador Sheev Palpatine, Ahsoka estaba trabajando con unos droides en el espaciopuerto de Thabeska cuando vio a varios niños Fardi jugando con unas cajas. Cuando una de las cajas empezó a caer sobre los niños, Ahsoka usó la Fuerza para evitar que las cajas les golpearan. Ahsoka había mantenido en secreto sus habilidades Jedi desde que había abandonado Mandalore, y temía que hubiera revelado su identidad a los niños. Les recordó que no debían jugar cerca de las cajas y ellos suplicaron que Ahsoka no explicase a Fardi lo ocurrido, ignorando lo sobrenatural de lo que acababa de ocurrir. Sólo la joven Hedala Fardi miró a Ahsoka con fascinación, y Tano descubrió después a Hedala elevando unas piedras con la Fuerza, averiguando que era sensible a ella.[8]

En el Día del Imperio, en el 18 ABY, Ahsoka fue informada por las chicas Fardi de que su padre iba a recibir unos importantes huéspedes imperiales durante una cena y que querían conocer a cualquiera que fuese nuevo en el planeta. Las chicas ofrecieron a Ahsoka que asistiera a la cena y se sentara con ellos durante el desfile del Día del Imperio, y también afirmaron que la seguridad era un desastre debido al gran número de naves del espaciopuerto. Ahsoka se tomó la invitación como una sutil advertencia y como una oportunidad para escapar del planeta, la cual usó en su ventaja. Ahsoka reunió sus cosas y escapó de la ciudad, robando una de las naves de Fardi y huyendo del planeta. Una vez en órbita, Ahsoka recordó a Hedala Fardi y el peligro en el que se encontraba, ya que al ser sensible a la Fuerza probablemente iba a ser capturada por el Imperio, pero Ahsoka sabía que ya era demasiado tarde, y se marchó.[8]

Raada

Un nuevo refugio
FFG-Ahsoka-green-lightsabers

Ahsoka Tano, refugiada Jedi.

Ahsoka llegó a la remota luna de Raada, en el Borde Exterior. Allí, Ahsoka aterrizó la nave de los Fardi en el asentamiento principal del lugar. Bajo el alias de Ashla, Ahsoka conoció a una local llamada Kaeden Larte, que formaba parte de una comunidad de granjeros. Kaeden permitió a Tano alojarse en la casa abandonada de su hermana mayor Cietra. Ahsoka aceptó trabajar como mecánica reparando droides y otra maquinaria a cambio de raciones de comida. Mientras se adaptaba a su nuevo entorno, Ahsoka se acordó de su viejo amigo droide R2-D2, y tuvo que ocultar su sensibilidad a la Fuerza. Al día siguiente, Kaeden contrató a Tano para reparar su trilladora, y mientras reparaba la máquina, Ahsoka supo más acerca de la vida de Kaeden y su trabajo como granjera en el asentamiento, que no contaba con presencia imperial. Tras reparar la trilladora de Kaeden, Ahsoka exploró la ciudad y avistó numerosas colinas y cuevas que podían servirle como lugares para ocultarse ante una emergencia.[8]

En su tercer día en Raada, Tano aprovechó para explorar más las colinas y cuevas cercanas al asentamiento. Encontró una cueva adecuada para esconderse, y decidió convertirla en su refugio. Luego Ahsoka se reunió con Kaeden, su hermana Miara Larte y varios amigos locales como el granjero Tibbola, el líder de los granjeros Vartan y los gemelos Hoban y Neera en la cantina de Selda, que poseía la mejor comida del asentamiento. La cantina pertenecía al camarero togruta Selda y estaba dirigida por la sullustana Malat, quien recordaba a Ahsoka al Maestro Jedi Plo Koon. Mientras hablaba con sus huéspedes, Tano averiguó que Kaeden y Miara eran huérfanas que habían perdido a sus padres en un accidente, por lo que Vartan había adoptado a las dos chicas. Cuando Kaeden preguntó a Ahsoka por su familia, Tano respondió que era adoptada. Cuando Selda preguntó a Ahsoka si ella era parte del flujo de alienígenas que había emigrado a fuera de los Mundos del Núcleo, Tano contestó que no estaba huyendo de nadie si no sólo buscando tranquilidad.[8]

A medida que pasó el tiempo, Ahsoka se convirtió en la mecánica del asentamiento y reparó numerosas trilladoras y otras máquinas de los granjeros. Kaeden y Miara pasaron a considerar a Ahsoka como parte de su familia adoptiva, y la visitaron con regularidad entregándole regalos como un cerrojo de seguridad para la puerta de su casa. A pesar de su amistad con las hermanas Larte, Ahsoka se aburrió con su nueva rústica y discreta vida. Un día, Ahsoka reunió varios suministros y fue a meditar a una de las cuevas sola. Allí sintió una perturbación en la Fuerza, y fue testigo de la llegada de un Destructor Estelar Imperial al asentamiento. El oficial imperial Jenneth Pilar había decidido explotar los cultivos de Raada en beneficio del Ejército Imperial. A pesar del pánico, Ahsoka llegó a la conclusión de que el Imperio Galáctico no había venido en su busca.[8]

Ahsoka fue a la cantina de Selda y habló de la llegada del Imperio con Kaeden y sus amigos. Miara especuló que el Imperio podría haber venido para explotar los cultivos de Raada. La llegada de los imperiales supuso la introducción de nuevas leyes más restrictivas, incluyendo toques de queda nocturnos, la prohibición de grandes reuniones, y restricciones en las horas de apertura de cantinas y la venta de comida y alcohol. Como respuesta, Ahsoka aconsejó a sus amigos almacenar raciones de comida. Mientras varios imperiales visitaban la cantina, Ahsoka y sus compañeros evitaron el contacto con ellos jugando a un juego llamado crokin.[8]

Sembrando semillas de rebelión

Al día siguiente, Tano fue visitada por una par de soldados de asalto que intentaron reclutarla para la producción de comida. Sin embargo, Tano usó un truco mental para convencer a los soldados de asalto de que no debían reasignarla. Tras evadir a los soldados de asalto, Tano se dirigió a las cuevas para esconder sus raciones. Entonces, se dirigió al espaciopuerto para recuperar su nave. Tras regatear con un oficial Imperial, consiguió esconder su nave en un barranco cercano. Para asegurar una rápida huida, posicionó la parte frontal de la nave mirando hacia el cielo.[8]

Después, Tano se reunió con Kaeden, Miara y otros granjeros en la cantina de Selda donde descubrieron que Malat y su marido habían emigrado a Sullust. Tano también averiguó que el Imperio Galáctico había añadido dos horas a cada turno, para resentimiento de los granjeros. Tano y sus amigos estuvieron presentes cuando un bebido Tibbola se metió en una pelea con un oficial Imperial. El oficial Imperial venció a Tibbola y ordenó a un soldado de asalto que matara a tiros al granjero. Tras el incidente, Tano aconsejó a los granjeros que se resistieran al Imperio Galáctico ralentizando la producción de los cultivos ya que carecían de armas para expulsar a los ocupantes. También animó a los granjeros a formar un movimiento de resistencia de entre los equipos de trabajo.[8]

Durante las dos semanas siguientes, Tano pasó sus días haciendo contrabando de comida, suministros médicos y recicladores de agua hacia las cuevas. Tano fue ayudada por la camarera Selda y varios vendedores locales. En respuesta a la ralentización de la producción, los Imperiales extendieron los turnos de trabajo de los agricultores sin aumentar las raciones de alimentos, el agua y los descansos. Vartan descubrió que el Imperio Galáctico estaba haciendo crecer un nuevo cultivo artificial en Raada que lixiviaba los suelos del planeta, evitando que las granjas produjeran más cultivos. Eso alimentó el resentimiento local contra el Imperio Galáctico puesto que Raada poseía pocas tierras cultivables. Tano convenció a Vartan para que le prestara a Miara y Kaeden, a quienes reclutó para ensamblar bombas que serían usadas para atacar a las fuerzas Imperiales. Tras varios días, Vartan había reclutado a cuarenta granjeros incluido Hoban para el movimiento de resistencia.[8]

Luego, Tano lideró a un equipo formado por Miara, Neera y el rodiano Kolvin en una misión consistente en instalar cargas corrosivas en los caminantes Imperiales almacenados en un astillero local. Debido a la débil presencia de soldados de asalto, Tano y su equipo se infiltraron en el astillero fácilmente. Mientras colocaba las cargas, Tano descubrió que Miara había introducido una bomba real. Tras evadir a los soldados de asalto centinelas, Tano y su equipo regresaron a la cantina de Selda. Allí, descubrió que Vartan había enviado a Hoban y Kaeden a atacar el edificio de la administración Imperial. Como el alzamiento era prematuro, Tano urgió a los granjeros a regresar a casa y rechazar cualquier conocimiento de lo que había sucedido esa noche. Sin embargo, Miara se negó a abandonar a su hermana mayor. Una reticente Tano aceptó rescatar a Kaeden y a los demás pero advirtió a Miara para que siguiera sus órdenes y le pidió coger los explosivos.[8]

Un alzamiento fallido

Mientras se dirigían hacia el edificio de la administración Imperial, Neera reveló que Hoban había dividido a los luchadores de la resistencia en tres grupos y que habían tomado la mayoría de explosivos y blásters. Tano ordenó a Miara esconderse en las cuevas y a Neera llevar a los luchadores de la resistencia restantes a las cuevas. Tano decidió destruir los tanques Imperiales. Cuando Miara le preguntó qué iba a hacer, Tano respondió que se dirigiría a la parte más intensa de la lucha y evacuaría a tantas personas como pudiera. Tano también le confesó que era una veterana de las Guerras Clon.[8]

Tras separarse de Miara, Tano y Neera se dirigieron al complejo Imperial. Los luchadores granjeros de Hoban poco equipados, habían sido repelidos con artillería pesada y los cinco supervivientes restantes, incluidos Hoban y Kaeden, estaban atrapados bajo el fuego enemigo. Mientras Neera rodeaba a los granjeros supervivientes, Tano colocó explosivos tras los tanques Imperiales. Los explosivos no destruyeron a los tanques, pero los inmovilizaron. Con el avance Imperial detenido, Tano aprovechó la oportunidad para guiar a los cinco supervivientes hasta un lugar seguro. Tano consiguió derribar a un soldado de asalto y robó su bláster. Mientras huían de la lucha, Tano y los granjeros fueron bloqueados por una hilera de soldados de asalto. Hoban se rindió pero fue abatido a tiros por los soldados de asalto.[8]

Antes de que los soldados de asalto pudieran ejecutar a los supervivientes restantes, Tano usó la Fuerza para tirar sus blásters al suelo. Tano y los granjeros huyeron entonces a las cuevas. Sin más opciones, Tano reveló su identidad como antigua aprendiz Jedi a Kaeden y los demás. Kaeden se enfadó con Tano por no haber revelado su identidad como Jedi puesto que podría haber salvado la vida de Hoban. Tras el fallido alzamiento, Tano consideró marcharse para evitar atraer más la atención del Imperio Galáctico. Mientras meditaba, Tano fue interrumpida por Miara, quien le informó de que su hermana Kaeden había abandonado las cuevas y estaba regresando a la ciudad. Tano pidió a Miara que se quedara en las cuevas mientras ella iba a buscar a Kaeden.[8]

Mientras tanto, Kaeden regresó a su hogar sólo para ser capturada por ocho soldados de asalto. A pesar de que fue torturada, Kaeden se negó a revelar el nombre de Tano y la localización de los demás rebeldes. Tano consiguió infiltrarse en el edificio de la administración Imperial y sacar a Kaeden de su celda. Usando sus poderes de la Fuerza, Tano consiguió sacar a Kaeden por una ventana. Tras escapar a las afueras, Kaeden informó a Tano de que el comandante Imperial había tomado interés por ella y le aconsejó abandonar la luna. Kaeden agradeció su ayuda y Tano prometió que regresaría.[8]

Retorno con los Fardi

La presencia de Tano en Raada llamó la atención tanto del Imperio Galáctico como del senador Bail Organa, un viejo amigo de los Jedi. El Imperio Galáctico también envió a un inquisidor conocido como el Sexto Hermano a Raada para sacarla de su escondite. Mientras tanto, el senador Bail Organa se interesó en los informes de actividad Jedi en Raada y contactó con el capitán Raymus Antilles para recuperar a R2-D2 para una misión secreta consistente en encontrar a Tano. Tras recuperar a R2-D2, Organa contrató a los pilotos Chardri Tage y Tamsin para encontrar a Tano y contactar con él para programar una reunión de encuentro. Organa creía que la antigua Jedi sería una magnífica aliada para el movimiento rebelde que estaba construyendo.[8]

Tras viajar por siete sistemas escuchando informes de la represión Imperial en el mundo natal de los wookiees, Kashyyyk, Tano decidió regresar a Thabeska para comprobar cómo se encontraba la sensible a la Fuerza Hedala Fardi. Al aterrizar en el astillero de los Fardi, Tano fue recibida por el patriarca de la familia quien le dijo que sus hijas le habían echado de menos y le invitó a cenar. Tano recibió la bienvenida de la ahora con nueve años Hedala, quien le confesó que había percibido una sombra mientras Tano había estado fuera. Mientras cenaba, Tano habló sobre la vida con las mayores de las hermanas Fardi, Chenna y Makala, intentando no revelar sus aventuras en Raada. Tano afirmó que había visto gente sufriendo en la galaxia, pero que no podía hacer nada para evitarlo. Tano también destacó que le era difícil esconderse debido a que era fácilmente identificada como togruta.[8]

Durante los cinco días siguientes, Tano pasó su tiempo trabajando en un enorme transporte de los Fardi, girando el motor e instalando un nuevo compresor. Cuando consiguió estar a solas con Hedala, Tano preguntó a la niña sobre la sombra. Hedala explicó que nunca la había visto como una entidad pero podía sentir su presencia. Hedala también mencionó que la sombra había desaparecido misteriosamente un día. Tano creía que la sombra era una criatura del lado oscuro, recordando los rumores de un señor oscuro que servía al Emperador. La sombra era en realidad el Sexto Hermano, quien había estado buscando a Hedala pero fue enviado de inmediato a Raada en respuesta a las actividades de Tano. Tano felicitó a Hedala por haberse mantenido al margen del camino de la sombra y le pidió que no hablara de ello con sus hermanas. Tano decidió permanecer con los Fardi puesto que estaba a salvo con ellos.[8]

Una semana después, Tano solicitó un nuevo trabajo al patriarca Fardi, que le envió a entregar suministros a las otras ramas de la familia Fardi en otras ciudades de Thabeska. Durante sus vuelos, Tano empezó a sospechar que los Fardi le estaban usando para hacer contrabando de bienes. Luego Fardi le asignó a misiones de transporte fuera del planeta. En un vuelo rutinario, Tano rescató a un grupo de humanos de una cápsula de escape. Su nave había sido atacada por piratas, que habían tomado como rehenes a algunos de ellos. Los humanos eran parte de una compañía que había sido fijada como objetivo de una firma rival que competía con ellos por un mismo proyecto. Tano sospechaba que la compañía rival había contratado a los piratas para secuestrar rehenes en un intento de hundir la compañía. Tano aceptó ayudar a los humanos a rescatar a sus compañeros de los piratas.[8]

Embrollos

Más adelante, Tano regresó a la casa de los Fardi y descubrió que los soldados de asalto estaban llevando a cabo una inspección rutinaria de la casa. Para evitar llamar la tención Imperial, Tano afirmó que había reparado la nave de los Fardi y había dado una vuelta con ella por el sistema. El patricarca Fardi defendió a Ahsoka y afirmó que ella era su mecánica. Tano también habló con Hedala y averiguó que no había percibido sombras ese día. Cuando los soldados de asalto y su oficial al mando preguntaron por unas piezas de metal que habían encontrado en su habitación, Tano afirmó que sólo eran chatarra que había recopilado de varios trabajos. Los Imperiales aceptaron su historia pero aconsejaron a Fardi que tuviera cuidado de no asociarse con elementos criminales.[8]

Cuando los soldados de asalto se hubieron marchado, Fardi se disculpó por haber implicado a Tano en las actividades de su familia. Fardi le confesó que sabía que ella había estado usando las naves para llevar a cabo sus propias misiones humanitarias. Aunque apreciaba sus servicios como mecánica y piloto, Fardi aconsejó a Tano que se fuera para evitar más problemas con el Imperio Galáctico. Sin explicar a Fardi que su hija más joven era sensible a la Fuerza, Tano le dijo que era especial y que tuviera cuidado con ella. Pensando que Hedala tenía potencial para ser una mecánica, Fardi prometió proteger a su hija pequeña. Antes de partir, Tano abrazó a Hedala y le aconsejó evitar a las sombras. Los Fardi le permitieron marcharse en su nave.[8]

Tano llevó a la nave Fardi a un pequeño mundo escasamente poblado del sistema Thabeska. Sin embargo, fue seguida por una nave pilotada por una agente del Sol Negro, que había venido a extorsionarle por el daño que sus actividades de contrabando con los Fardi habían infligido a sus operaciones. Para pagar esas deudas, la agente del Sol Negro le ofreció un trabajo, pero amenazó con matarla si no aceptaba su oferta. Tano rechazó la oferta de la agente del Sol Negro y regresó a su nave bajo fuego enemigo. La agente del Sol Negro le persiguió en su nave, y durante una escaramuza, Tano decidió rechazar su seudónimo de Ashla para asumir su identidad como Ahsoka Tano.[8]

La nave del Sol Negro consiguió dañar el motor de estribor de su carguero. Antes de que la nave de Tano pudiera sufrir más daños, una nave más grande apareció en la atmósfera y alejó a la nave del Sol Negro. Tano logró llevar su nave al espacio, pero quemó su motor de babor. Antes de poder activar el hipermotor, fue atrapada en el rayo tractor de la segunda nave que había encontrado. Esa nave pertenecía a Chardri Tage y Tamsin, quienes habían sido enviados por el senador Bail Organa para encontrar a Tano. Creyendo que la segunda nave también era hostil, Tano se armó con bastones. Cuando Tage y Tamsin entraron en la nave por la escotilla, ella los dejó inconscientes.[8]

Mientras avanzaba hacia el puente para desactivar el rayo tractor, Tano se encontró con su viejo amigo, el droide astromecánico R2-D2, en la sala de máquinas. R2-D2 le dijo que ahora trabajaba para el senador Organa y que Tage y Tamsin habían sido enviados a llevársela para reunirse con alguien. El droide también confirmó que el senador era un simpatizante de los Jedi y que era él quien había enviado a los pilotos a recogerla. Sin embargo, ella le pidió que se asegurara de que nadie podía rastrear su nave. Tras reparar su nave, Tano abandonó la nave de Tage y se escondió en una de las pequeñas lunas que orbitaban el planeta en el que se había encontrado a la agente del Sol Negro. Después de que R2-D2 le transmitiera las coordenadas de la nave de Tage, Tano se durmió en su carguero.[8]

Un nuevo aliado

Después de que el senador Bail Organa llegara en su Corbeta CR90 Tantive IV, Tano se puso un traje de presión y subió a bordo de la nave del senador a través de la escotilla que R2-D2 había dejado abierta. Tano sorprendió al senador Organa en su oficina temporal. Después de intercambiar bromas sobre R2-D2, Tano explicó que no vino con Chardri Tage porque desconfiaba de cualquiera que empleara un rayo tractor antes de saludar. Organa admitió no haber explicado a sus pilotos quién era ella para proteger su verdadera identidad. Dirigiéndose a ella como Padawan Tano, Organa le informó de que estaba reclutando gente para una rebelión contra el Emperador Sheev Palpatine, el Imperio Galáctico y cualquiera que estuviera de su lado.[8]

Tano respondió que ella ya no era una Padawan y relató los eventos ocurridos en Raada a Organa. El senador Organa le dijo que no podía luchar contra el Imperio Galáctico ella sola y le ofreció un lugar en la rebelión emergente. Sin embargo, Tano declaró que no podía volver a ser comandante debido a sus experiencias durante las Guerras Clon. Organa respondió que podría encontrar otro trabajo para ella. Luego, Tano le dijo a Organa que algo estaba cazando niños sensibles a la Fuerza en toda la galaxia, y acordó unirse a la rebelión si Organa aceptaba ayudarla a proteger a los niños. El senador Organa aceptó su oferta y dijo a Tano que necesitaba su ayuda para una misión en Raada.[8]

Tano aceptó la misión, pero solicitó una comida ya que estaba exhausta de sus aventuras anteriores. Bail le informó de que sus contactos en el sector Raada habían informado de la presencia de un nuevo agente Imperial que tenía piel gris y estaba armado con un sable de luz. Este agente resultó ser el inquisidor conocido como Sexto Hermano, que había estado acechando a Hedala y ahora pretendía encontrar a Tano. El Sexto Hermano había lanzado antes un ataque contra los insurgentes de Raada que se habían retirado a las cuevas, y había capturado a Kaeden asesinando al resto de granjeros, incluidos Kolvin y Neera. Sólo la hermana pequeña de Kaeden, Miara, sobrevivió a la masacre.[8]

Tano opinó que el nuevo agente Imperial era sensible a la Fuerza y había sido enviado por el Imperio Galáctico a cazar Jedi. Tano asoció la llegada del inquisidor al interés Imperial en sus actos en el sector. El senador Organa advirtió a Tano que el Imperio Galáctico podría estar preparándole una trampa. Mientras estudiaba las imágenes del agente Imperial en el datapad de Organa, Tano descubrió que su amiga Kaeden había sido capturada y estaba atada a una silla. Tano entró en pánico, pero Organa le pidió firmemente que se calmara. Hizo hincapié en que ella necesitaba descansar y planificar un curso de acción. Organa también le aseguró que el Imperio Galáctico no lastimaría a Kaeden porque querían sacarla de su escondite. En el hangar de la Tantive IV, Tano reflexionó sobre su misión con R2-D2.[8]

Cuando el capitán Raymus Antilles entró en la oficina para investigar la intrusión de Tano, Organa le aseguró que ella era una amiga. Entonces, Tano descansó en una habitación que Organa le había proporcionado. Mientras dormía, Tano tuvo en sueño en el que vio en retrospectiva cómo había adquirido su cristal kyber como Iniciada Jedi en el planeta cristalino Ilum. Tras descansar, Tano reunió dos empuñaduras de sable de luz de las piezas de chatarra que había adquirido en Raada. Luego, Tano se reunió con el senador Organa y le contó sobre su plan de misión en Raada.[8]

Evacuación de Raada

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Tano con un par de sables de luz blancos creados a partir de los cristales de la doble hoja de un inquisidor.

Antes de la misión en Raada, Tano declinó la oferta del senador Bail Organa de proporcionarle refuerzos debido a que prefería trabajar sola. Cuando Organa recordó que muchos de los Jedi con los que se había encontrado preferían trabajar solos, Tano reiteró que ella no era una Jedi. Organa preguntó qué era Tano, afirmando que todavía sonaba y actuaba como un Jedi. Tano respondió que se lo haría saber en cuanto descubriera quién era. Después de terminar las modificaciones de su nave, Tano descansó antes de partir a su misión. De camino a Raada, Tano viajó al planeta Ilum. Allí descubrió que el Imperio Galáctico había estado minando el planeta extensivamente. Tano consideró regresar a la tumba falsa de Rex para recuperar sus sables de luz, pero decidió no hacerlo.[8]

Tras llegar a Raada, Tano aterrizó la nave en el lado de la luna opuesto al asentamiento principal. Después de cargar sus armas en una pequeña bolsa de transporte, Tano caminó durante dos horas hasta el asentamiento de Raada. En el camino, encontró a Miara sentada junto a un pequeño fuego. Tano se enteró de que Miara era la única superviviente de los granjeros que habían huido a las cuevas y que el misterioso inquisidor había hecho prisionero a Kaeden. Tano convenció a Miara para que apagara el fuego y vigilara mientras ella meditaba en la Fuerza. Mientras meditaba, Tano decidió que, aunque ya no era Jedi, seguiría usando su entrenamiento Jedi para ayudar a la gente a luchar contra el Imperio Galáctico. Mientras se acercaban al asentamiento, Tano descubrió que los cultivos Imperiales habían drenado la vida del suelo del planeta. Le dijo a Miara que le recordara quemar los campos moribundos si tenían la oportunidad. Miara también informó a Tano de que el Imperio Galáctico no estaba obligando a los granjeros a trabajar durante todo el día. Mientras Tano se dirigía al complejo Imperial, indicó a Miara que buscara a Selda o Vartan y les diera la grabación holográfica que había grabado en el hiperespacio.[8]

De camino al complejo Imperial, Tano se encontró con el Sexto Hermano, quien le reprochó su amistad con Kaeden y se burló de Tano por haber roto el Código Jedi desarrollando apego. El inquisidor le atacó usando su sable de luz de doble hoja giratorio, pero Tano lo esquivó usando la Fuerza. El Sexto Hermano intentó apagar su arma y luchar contra ella con dos cuchillas. A pesar de carecer de sus sables de luz, Tano usó la Fuerza para vigorizar su mano mientras tocaba la empuñadura del sable de luz enemigo. La empuñadura del sable láser se hizo añicos y el inquisidor murió por la explosión resultante. Tano sintió lástima por su enemigo caído y cerró su casco como señal de compasión. Luego recuperó los cristales kyber de su sable de luz y usó la Fuerza para curarlos de la presencia del lado oscuro, haciendo que se volvieran blancos.[8]

Armada con un nuevo par de sables de luz blancos, Tano entró en el complejo Imperial y se abrió paso evitando a los soldados de asalto hasta la celda de Kaeden. Tano también logró liberar a los demás prisioneros en el proceso. Después de reunirse, Tano y Kaeden se dirigieron a la cantina de Selda. Cuando Kaeden preguntó sobre el plan de Tano, Selda les aseguró que Miara había transmitido el mensaje de Tano y que Vartan estaba evacuando a los granjeros. Tano les dijo a los granjeros que había contactado con un viejo amigo. En respuesta, Kaeden dijo que entendía que Tano había mentido para mantenerlos a salvo mientras que el inquisidor había mentido porque le gustaba hacer sufrir. Después de tratar las heridas de Kaeden, Tano salió de la cantina y vio a varios Alas-A de Organa bombardeando el complejo Imperial.[8]

Poco después, Organa desembarcó varios transportes y naves de carga, que procedieron a evacuar a los agricultores. Tano condujo a Kaeden, Selda y Miara a la Tantive IV. Cuando el capitán Raymus Antilles le dijo que tenían que evacuar pronto, Tano respondió que las Alas-A de Organa se estaban ocupando de los Imperiales. Después de velar por la evacuación de las hermanas Larte, Tano ayudó en la evacuación de los granjeros restantes, que consistían en menos de cien. Luego aparecieron tres tanques Imperiales que comenzaron a atacar a las naves y los civiles. Usando sus poderes de la Fuerza, Tano saltó al tanque principal y cortó su cañón con su sable de luz. Luego abrió la puerta y sacó al piloto. Después, Tano destruyó los controles del tanque y sobrecargó el cañón.[8]

La explosión resultante derribó el tanque cercano, deshabilitando su mecanismo de desplazamiento. Tano cortó su cañón y lo dejó estrellarse contra una casa. Tano luego se dirigió al tercer tanque, pero no pudo evitar que disparara a Vartan y a un grupo de refugiados. Enfurecida, Tano usó la Fuerza para hacer que la torreta del tanque explotara. Tano luego atendió al herido Vartan y lo llevó a la Tantive IV. Después de evacuar al último de los refugiados, Tano y sus aliados rebeldes partieron en las naves. Una vez a bordo, Tano consoló a la herida Kaeden. Cuando Kaeden gimió diciendo que no debería haber escuchado sus sentimientos, Tano le aseguró que los Jedi habían cometido ese error. Tano expresó su confianza en que ahora podría desenvolverse en la galaxia y prometió encontrarse con Kaeden nuevamente.[8]

Uniéndose a la Rebelión

Fulcrum is born DoR

Ahsoka muestra a Bail un holograma con el símbolo de Fulcrum.

Tras la evacuación de Raada, Ahsoka se coló a bordo de la Tantive IV para reunirse con el senador Bail Organa. Ahsoka escuchó por casualidad una conversación entre el senador y su joven hija adoptiva, la princesa Leia Organa. Tras intercambiar chanzas con ella, Organa afirmó que el Imperio Galáctico esperaba usar su imagen de un hombre de familia como un modo de garantizar su lealtad. Cuando Ahsoka le preguntó si estaba preocupado por Leia, Bail respondió que ella se parecía a su madre. Ahsoka también preguntó a Organa qué estaba haciendo para enfrentarse al Imperio, y él le transmitió un informe del capitán Raymus Antilles acerca de la evacuación de Raada. Se habían producido quince bajas incluyendo a catorce de los evacuados y un piloto de Ala-A. Sin embargo, el equipo médico de Antilles había sido capaz de salvar a Vartan.[8]

Tano por su parte, afirmó que el Inquisidor con el que se había encontrado no era el último de los suyos. Aunque el Inquisidor había recibido algún tipo de entrenamiento, Ahsoka observó que mayoritariamente éste se basaba en la fuerza bruta y carecía de las habilidades de un Jedi. Bail prometió que haría lo que pudiera para investigar más sobre ese asunto y preguntó por Raada. Ahsoka explicó que los granjeros no podrían regresar a su asentamiento porque el Imperio purgaría toda su superficie. Por eso, Bail aceptó asentar a los habitantes de Raada en Alderaan. Sin embargo, Ahsoka respondió que los granjeros querían unirse a la red rebelde, que estaba en proceso de formación. Bail propuso entonces entrenar como pilotos y soldados a todos aquellos granjeros que quisieran.[8]

A petición de Bail, Ahsoka le mostró sus nuevos sables de luz. Ahsoka dijo a Organa que había obtenido los cristales kyber de los sables del sable de luz del inquisidor. También explicó que éstos habían sido rojos porque habían sido corrompidos por el lado oscuro en contra de su voluntad, lo que había causado que los cristales "sangrasen", y especuló con la posibilidad de que los cristales hubieran sido robados del Templo Jedi. Ahsoka también remarcó que su antigua amiga Barriss Offee, a pesar de su traición y atrocidades, había tenido razón acerca de la actitud de los Jedi y la República Galáctica frente a las Guerras Clon. Organa comentó en respuesta que el Canciller Supremo Sheev Palpatine había sido un habilidoso manipulador.[8]

Ahsoka añadió que había intentado escapar de la guerra, pero había sido atraída de nuevo a ella. Bail contestó que su trabajo era centrarse en el presente, que él consideraba un punto intermedio entre la guerra y la paz. Ahsoka se mostró de acuerdo con el punto de vista de Bail y opinó que ella quería seguir un camino separado del de ser una General o una Padawan. En ese momento, la Tantive IV salió del hiperespacio sobre Alderaan. Ahsoka comentó que la falta de comunicación había provocado muertes en Raada y su respuesta hostil ante Tage y Tamsin. Después de una breve charla, Ahsoka convenció a Bail para que le dejara dirigir sus redes de inteligencia y le proporcionara una nueva nave. A petición de Organa, Ahsoka adoptó el nombre en clave de "Fulcrum" para su trabajo en la red de espías. Sin que Ahsoka lo supiera, sus actividades también llamaron la atención del Gran Inquisidor, que informó a Darth Vader de que había descubierto pruebas de la existencia de otro superviviente de la Gran Purga Jedi.[8]

Trabajando como "Fulcrum"

«Ahsoka. Me llamo Ahsoka Tano.»
―Ahsoka se presenta a los Espectros[fuente]
Hera Fulcrum Hologram

Ahsoka habla con Hera, instándola a pasar a la clandestinidad.

En el 5 ABY, Ahsoka ya era un miembro clave de la red rebelde de los senadores Bail Organa y Mon Mothma. Bajo el nombre en clave de "Fulcrum", Tano facilitaba información e informes de inteligencia y gestionaba las comunicaciones entre células rebeldes de toda la galaxia. Una de estas células era la tripulación del Espíritu, que operaba alrededor del mundo del Borde Exterior llamado Lothal. Tano sólo hablaba con Hera Syndulla, la dueña y piloto del Espíritu, y se identificaba sólo como "Fulcrum".[89]

Como "Fulcrum", Ahsoka proporcionó a los Espectros información para sus misiones con el fin de atacar intereses imperiales, y a su vez, esas misiones eran parte de un plan más amplio que sólo Syndulla conocía. La información de Ahsoka era generalmente precisa, pero a veces sólo parcialmente. En una de las misiones que encargó Tano, Syndulla, junto con Ezra Bridger y Sabine Wren, atacó un convoy Imperial. La información de Ahsoka fue correcta sobre las rutas y horarios del convoy, pero subestimó las defensas imperiales. Como resultado, el Fantasma sufrió daños, siendo perseguido por un escuadrón de cazas TIE.[89]

Poco después, Syndulla junto con Wren, quien insistió en saber más acerca de "Fulcrum", fue enviada al Fuerte Anaxes, un asteroide utilizado como base para el Gran Ejército de la República durante las Guerras Clon, con el fin de recoger varias cajas de suministros para Tano. Ahsoka contactó con Syndulla mientras estaba en ruta e informó a Syndulla de que los suministros habían sido descargados y estaban listos para ser recogidos. Sabine, ansiosa por saber más sobre Ahsoka, sugirió a Tano que se esperase en el Fuerte Anaxes para poder verla, lo que provocó que Tano preguntase si algo iba mal. Syndulla convenció a Tano de que Wren estaba allí para ayudar con la misión. No obstante, Wren siguió queriendo saber por qué las misiones de los rebeldes se estaban volviendo tan peligrosas, a lo que Syndulla respondió que no lo sabía. Una vez llegaron al Fuerte Anaxes, Ahsoka ya se había ido.[89]

Chopper Ahsoka

Ahsoka Tano se reúne con Chopper tras rescatar a Kanan Jarrus.

Algún tiempo después, los rebeldes rescataron a Tseebo, un disidente imperial rodiano que poseía información vital para el Imperio, incluyendo un plan de cinco años para todo el Borde Exterior. Después de huir de Lothal, el Espíritu se reunió con la nave de Ahsoka. Syndulla llevó a Tseebo ante Tano, para que analizara la información que contenía Tseebo.[90]

En el 4 ABY, después de la captura de Kanan Jarrus, líder de la célula rebelde de Lothal, a manos del Imperio, Tano contactó con Syndulla y la disuadió para que no intentara rescatar a Jarrus. Después, recordó a Hera que Jarrus sabía a los riesgos que se exponía actuando contra el Imperio, y añadió que Bridger era demasiado importante para que su vida fuera arriesgada. Tano informó a Hera que sus actividades habían atraído la atención de los altos cargos del Imperio. Tano instó a Syndulla a pasar a la clandestinidad para evitar poner en peligro su misión. La tripulación ignoró la advertencia de Tano y puso en marcha una misión para rescatar a su líder cautivo.[91]

Los rebeldes pronto descubrieron que Jarrus se encontraba en el Destructor Estelar personal del Gran Moff Wilhuff Tarkin, en la órbita de Mustafar. La tripulación se dispuso a rescatarlo y tuvo éxito, pero se vio desbordada por las fuerzas imperiales. El droide de la tripulación, C1-10P, contactó con Ahsoka y pidió refuerzos. Tano y una flota de naves rebeldes llegaron a Mustafar y ayudaron a la tripulación del Espíritu a escapar; pilotando Ahsoka el Espíritu. Cuando los rebeldes estuvieron a salvo y lejos de Mustafar, Tano les reveló su identidad y les informó de que formaban parte de un movimiento rebelde mucho más amplio.[92] Tano escribió un informe al general Davits Draven acerca de la operación, resumiendo la batalla y detallando cómo los Espectros se habían integrado en el Escuadrón Fénix, así como que Syndulla había recibido una posición como oficial de la Alianza.[93]

Una lección para Bridger

«¿Qué se siente al ser uno de los pocos con un sable láser?»
«Uh, fuerza, supongo, confianza, poder.»
«Oh, ¿así que no eres poderoso sin él?»
―Ahsoka habla con Ezra acerca de sus sentimientos al ser uno de los pocos con un sable de luz, dando paso a una lección de la antigua Padawan Jedi[fuente]
FODADisarmingLesson

Tano imparte a Bridger una lección poco ortodoxa para el Padawan.

En algún momento, Tano y Ezra Bridger viajaron a un planeta en el que Bridger practicó su manejo del sable de luz. Mientras Bridger practicaba, Tano se acercó y le preguntó dónde consiguió su arma. Bridger explicó el origen de su arma y se la entregó a Tano. Con el arma, Tano le quitó el cristal kyber y preguntó a Bridger qué se sentía al ser uno de los pocos de la galaxia con un sable láser. Al no satisfacerle su respuesta, Ahsoka decidió impartir una lección a Bridger y lanzó el cristal kyber a un campo cercano. Exasperado, Bridger recuperó su arma mientras Tano activaba sus sables de luz. Tano comenzó a atacar a Bridger, quien creía que no había otra manera de defenderse que usando la espada láser, y él cuestionó sus intenciones. Mientras Tano continuaba atacando a Bridger, ella le dejó concentrarse en la Fuerza para esquivarla, mientras simultáneamente buscaba su cristal kyber. Mientras la esquivaba, Bridger terminó encontrando su cristal y activó su sable de luz para detener un ataque de Tano. Desactivando su arma, Tano preguntó a Bridger sobre la recuperación del cristal, a lo que él respondió con una broma y los dos comenzaron a reír.[94]

Percibiendo a Darth Vader

RebelLeaders-SoL

Hera, Ahsoka, Kanan y Jun Sato reflexionan sobre la transmisión enviada por Maketh Tua.

Más adelante, Tano participó en una reunión estratégica de la red rebelde. A media reunión, C1-10P apareció con un mensaje de la ministra de Lothal, Maketh Tua, que ante las amenazas de Wilhuff Tarkin y Darth Vader planeaba desertar del Imperio Galáctico. Mientras Ahsoka permanecía en silencio, muchos de los rebeldes se negaron a ayudar a Tua.[9]

Cuando la ministra ofreció revelar a los rebeldes una lista de simpatizantes rebeldes en Lothal y otros planetas cercanos, así como la existencia de un proyecto imperial en Lothal solicitado por el propio Emperador Sheev Palpatine, Ezra Bridger se mostró a favor de socorrer a la ministra. A continuació, Ahsoka y Kanan Jarrus aceptaron también rescatar a Tua. Por último, el comandante Jun Sato apoyó el rescate, y los Espectros se dirigieron a rescatar a Maketh Tua.[9]

En Lothal, Maketh Tua fue asesinada por el Imperio, y los rebeldes fueron acusados de ser responsables de su muerte. Tras un enfrentamiento con Darth Vader, los Espectros se reunieron con la flota en la cual estaba Ahsoka. Una vez reunidos con Ahsoka, apareció el caza TIE avanzado x1 de Darth Vader, que comenzó a atacar a la flota rebelde. El comandante Jun Sato envió al Escuadrón Fénix a enfrentarse con Vader.[9]

Cuando el Escuadrón Fénix comenzó a ser aniquilado por Darth Vader, Hera Syndulla decidió unirse a la lucha a bordo del Espíritu. El resto de Espectros la siguieron, y tras preguntar a Ezra si podía unirse a ellos en el combate, Ahsoka subió también a bordo del Espíritu. Allí se sentó en el puente junto a Kanan y Hera, mientras el resto de rebeldes ocupaban las torretas de la nave.[9]

Vader descubierto por Ahsoka

Ahsoka descubre que Darth Vader es su antiguo maestro, Anakin Slywalker.

Sorprendida por lo fuerte que era la Fuerza en Vader, Ahsoka pidió a Kanan que se uniera a ella en un intento de descubrir la identidad de Vader mediante la Fuerza. Mientras Ahsoka y Kanan meditaban, Ezra percibió que Vader era el Lord Sith con el cual se habían enfrentado en Lothal. Entonces, tanto Darth Vader como Ahsoka, se percataron mutuamente de su presencia. Cuando Vader expresó en voz alta el descubrimiento de que Ahsoka estaba viva, Tano, horrorizada por ser consciente de que Vader era su antiguo maestro, Anakin Skywalker, perdió el conocimiento.[9]

Kanan vigiló a Ahsoka durante el resto del combate, y finalmente, los rebeldes lograron escapar de Vader y los destructores estelares que habían llegado al lugar para apoyarlo. Luego Ezra y Kanan se reunieron con Ahsoka, que una vez recuperada se había puesto a meditar, y le preguntaron si conocía la identidad de Darth Vader. Ahsoka negó conocer quién era Vader, pero aseguró que lo que si sabía era que el Lord Sith volvería a por ellos.[9]

Reencontrándose con Rex

«Comandante. Has crecido.»
«Alguna vez tenía que pasar, Rex.»
«Me alegro de que sigas viva.»
«Lo mismo digo.
»
―Ahsoka se reencuentra con Rex tras quince años sin verle[fuente]

Tras el Asedio de Lothal, Ahsoka se reunió con los Espectros y Jun Sato. Durante la reunión, Ezra Bridger propuso encontrar una base para la red rebelde, con lo que Sato se mostró de acuerdo. Sin embargo, Hera Syndulla recalcó que los rebeldes no poseían ninguna ubicación en la cual establecer una base con ventajas tácticas para proteger a la flota. Kanan Jarrus sugirió centrarse en ayudar a los necesitados en lugar de centrarse en la base, y Hera respondió que serían incapaces de ayudar a nadie si no podían ayudarse a ellos mismos. A continuación deseó tener más aliados.[95]

Someone You Can Count On (1)

Ahsoka proporciona la cabeza de un droide táctico a los rebeldes para que puedan localizar a Rex.

Entonces, Ahsoka afirmó que conocía a un gran líder experto en estrategia y en los Territorios del Borde Exterior que podría unirse a los rebeldes y ayudarles a encontrar una nueva base con sus conocimientos. Sato preguntó cómo podrían localizar a ese líder, el Capitán Clon CT-7567, apodado "Rex". Ahsoka contestó que perdió su ubicación hacía mucho tiempo, y que no había logrado jamás contactar con él. Sin embargo, también informó de que había algo que aún no había intentado para localizarlo.[95]

Sabiendo que Rex había sido visto por última vez en el sistema Seelos, Ahsoka encomendó a los rebeldes seguir la pista de Rex usando la cabeza de un droide táctico. Antes de que los rebeldes partieran en busca de Rex, sin saber aún su identidad, Ahsoka informó a los rebeldes tras una pregunta de Ezra de que no les iba a acompañar. Luego añadió que debía atender asuntos más importantes.[95]

Cuando Kanan dedujo que Ahsoka iba a ir en busca de información sobre Darth Vader, Tano se limitó a responder que había preguntas que necesitaban respuestas. Finalmente, abandonó el Espíritu para que los rebeldes pudieran partir a Seelos en busca de Rex. Justo antes de abandonar la nave, Ahsoka insistió a Kanan en que confiara en su amigo, Rex, pasara lo que pasara. Kanan respondió que si tan solo pedía eso, no habría ningún problema.[95]

Al llegar a Seelos, Kanan descubrió que el amigo de Ashoka era Rex, un Capitán Clon que iba acompañado de los clones Gregor y Wolffe. Por causa del papel de los clones durante la Orden 66, Kanan fue incapaz de cumplir la petición de Tano de confiar en Rex en todo momento, y mantuvo una actitud hostil hacia los clones. Tras un conflicto con el Imperio Galáctico, Rex y los clones decidieron unirse a la Red Rebelde, por lo que subieron a bordo del Espíritu con la intención de reunirse con la flota rebelde.[95]

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Ahsoka se reencuentra con Rex.

Cuando los Espectros regresaron de su misión, Ahsoka se reencontró con Rex. Al verla, Rex saludó a Ahsoka y comentó amablemente que Ahsoka había crecido. Ahsoka, respondió que algún día tenía que ocurrir. A continuación, abrazó a Rex, quien correspondió a Tano con otro abrazo. Rex dijo a Ahsoka que se alegraba de que siguiera con vida, a lo que Ahsoka respondió que ella también se alegraba de ver a Rex aún con vida.[96]

Rex contestó que no seguiría con vida si no fuera por los Rebeldes de Lothal, por lo que Ahsoka agradeció a los rebeldes su labor. Ahsoka también agradeció a Kanan por haber confiado finalmente en Rex, a lo que Kanan respondió que no había sido fácil, ni aún lo era. Por último, Ahsoka dijo que nada que realmente merezca la pena es fácil.[96]

Los niños de la Fuerza

Ahsoka Tano: «¡Sé por qué quieres a los niños!»
Séptima Hermana: «Bueno, ¿quién no quiere ser madre?»
— Ahsoka habla con la Séptima Hermana mientras se enfrenta a ella y al Quinto Hermano [fuente]

Durante los días siguientes a su reencuentro con Rex, Ahsoka se dedicó a investigar al Lord Sith Darth Vader, con la esperanza de recavar más información sobre él que le permitiera afirmar o descartar que Vader era en realidad su antiguo maestro, Anakin Skywalker. Para ello, Ahsoka se dirigió al planeta Mustafar, donde no encontró información relevante sobre Darth Vader, pero sí descubrió que los inquisidores planeaban secuestrar a bebés sensibles a la Fuerza.[97]

The Future of the Force 08

Ahsoka pide a Kanan y Ezra rescatar a un bebé sensible a la Fuerza.

Por eso, Ahsoka se reunió con Kanan Jarrus en Garel para informarle de sus descubrimientos. Tras contarle todo a Kanan, Ahsoka le pidió que fuera a ayudar a un bebé sensible a la Fuerza mientras ella se dirigía a otras coordenadas para ayudar a un segundo bebé. También pidió a Kanan que se llevara consigo a Garazeb Orrelios y a Ezra Bridger.[97]

Kanan respondió a Ahsoka que no le haría falta informar a Bridger de su misión, puesto que el chico había estado escuchándolo todo tras una puerta. Entonces Kanan abrió la puerta de la sala en la que estaban él y Ahsoka, y tras ella apareció Ezra. Ahsoka sin embargo, no se enfadó por lo que acababa de ocurrir, y miró a Ezra con cierta diversión.[97]

Después, Ahsoka entró en una nave situada sobre la órbita del planeta Chandel, donde los inquisidores habían secuestrado a un bebé anteriormente. Al entrar en la nave, Ahsoka examinó las marcas de sable de luz que habían dejado los inquisidores en las paredes de la nave. A continuación, Ahsoka escuchó un llanto y se dirigió hacia su origen. Allí, encontró a Darja, una mujer herida por los inquisidores cuando había tratado de impedir que su nieta fuese secuestrada. Darja contó a Ahsoka que su nieta, Alora, había sido secuestrada, y Ahsoka, tras prometer rescatar a Alora, recomendó a Darja reposar.[97]

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Ahsoka promete a Darja que rescatará a su nieta Alora.

Mientras tanto, en el planeta Takobo, Ezra, Kanan y Zeb se habían enfrentado a dos inquisidores, la Séptima Hermana y el Quinto Hermano. Cuando los tres rebeldes fueron derrotados por los inquisidores, y el bebé que habían rescatado, Pypey, iba a ser secuestrado, Ahsoka llegó al lugar. Entonces, Ahsoka entabló combate con los inquisidores mientras los rebeldes huían hacia el Fantasma, donde se encontraba Alora, que ya había sido rescatada por Zeb.[97]

Durante el combate, Ahsoka tiró fácilmente al suelo al Quinto Hermano, dejándolo momentáneamente fuera de combate. Después, mientras peleaba con la Séptima Hermana, Ahsoka dijo a la inquisidora que sabía por qué quería secuestrar a los bebés. Con ironía, la Séptima Hermana preguntó a Ahsoka que quién no quería ser madre. Entonces, el Quinto Hermano volvió a la carga, y Ahsoka lo arrojó contra una columna, dejándolo inconsciente. Acto seguido, se centró en la Séptima Hermana.[97]

Tras un breve tiempo peleando con la Séptima Hermana, Ahsoka propinó una patada a la inquisidora y optó por apagar sus espadas láser. Cuando la Séptima Hermana volvía a atacar, Ahsoka agarró el sable láser de la inquisidora, pillándola por sorpresa, y consiguió quitárselo de las manos. Después, Ahsoka usó la Fuerza para arrojar contra una pared a la Séptima Hermana. Entonces, encendió su sable de luz y lo apuntó hacia la Séptima Hermana, comunicándole que había sido derrotada.[97]

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Ahsoka se enfrenta a la Séptima Hermana.

La Séptima Hermana, se rió de Ahsoka cuando comenzaron a llegar soldados de asalto a la zona, y dijo a Ahsoka que al final parecía que la derrotada era ella. Usando la Fuerza, la Séptima Hermana encendió su sable láser y lo dirigió hacia Ahsoka, que saltó para esquivarlo. Entonces, el Quinto Hermano despertó y se unió a la Séptima Hermana para volver a atacar a Ahsoka. Antes de atacar, la Séptima Hermana dijo a Ahsoka que su captura complacería a Darth Vader. Ahsoka, vio por encima de ella al Fantasma encendido, listo para huir de Takobo.[97]

Por eso, Ahsoka dijo a la Séptima Hermana que informara a Vader de que debería esperar más tiempo para tenerla ante él, y a continuación saltó a bordo del Fantasma justo cuando el Quinto Hermano la iba a atacar. A bordo del Fantasma, Ahsoka dijo que un Lord Sith ya había tratado de secuestrar niños sensibles a la Fuerza durante las Guerras Clon, pero que la Orden Jedi lo había impedido. Kanan lamentó que la Orden Jedi ya no estuviera para seguir protegiendo a niños sensibles a la Fuerza, y Ahsoka permaneció pensativa.[97]

Descubriendo la identidad de Vader

«Ahsoka. Ahsoka, por qué te fuiste? Dónde estabas cuando te necesitaba?»
«Tomé una decisión. No podía quedarme.»
«Fuiste egoísta.»
"No!»
«Me abandonaste! Me fallaste! Sabes en lo que me he convertido?»
«No. No!
»
―Ahsoka Tano, comunicándose con una visión de Anakin Skywalker a través de la Fuerza[fuente]
AhsokaAnakinEzra

Ahsoka habla a Ezra sobre Anakin Skywalker.

En el 3 ABY, Ahsoka se dirigió a una de las habitaciones del Espíritu y allí, usó el holocrón de Kanan Jarrus para observar varias grabaciones en las que aparecía su maestro, Anakin Skywalker, enseñando como emplear la Forma IV de combate. Mientras Ahsoka contemplaba las imágenes de su maestro, Ezra Bridger entró en la sala, y al ver la grabación de Anakin, dijo a Ahsoka que era fantástico.[98]

Ahsoka respondió a Ezra que Anakin había sido su maestro. Al saberlo, Ezra dijo a Ahsoka que Kanan Jarrus le había dicho que Anakin fue el Caballero Jedi más poderoso que había tenido la Orden Jedi. Ahsoka contestó que Anakin había sido muy poderoso, y que raramente había perdido una batalla durante las Guerras Clon. También añadió que lo que más sorprendía a la gente de Anakin era su simpatía, así como su profunda preocupación hacia sus más allegados, a quienes trataba de ayudar hasta el final.[98]

Cuando Ezra preguntó a Ahsoka si sabía qué había sido de Anakin, ella respondió que la última vez que lo vio fue poco antes de que partiera a rescatar al Canciller Supremo Palpatine, que había sido secuestrado por el general Grievous. Poco después de eso, los Jedi fueron acusados de traición a la República Galáctica y fueron ejecutados uno a uno, por lo que Ahsoka no pudo saber nada sobre qué le había ocurrido a Anakin.[98]

KananEzraAhsokaTemple

Ahsoka observa como Kanan y Ezra abren el Templo Jedi de Lothal.

De pronto, Kanan irrumpió en la sala y preguntó a Ahsoka qué hacer con los inquisidores y con Darth Vader, puesto que apenas eran capaces de defender a los rebeldes de ellos. Ahsoka contestó que cuando ella y Anakin se encontraban en esas situaciones, lo que hacían era pedir consejo a Yoda o a Obi-Wan Kenobi. Recordando que Yoda había contactado con él en el Templo Jedi de Lothal, Kanan sugirió ir allí a tratar de comunicarse con Yoda.[98]

Ahsoka estuvo de acuerdo y subió a bordo del Fantasma junto a Ezra y Kanan para dirigirse al planeta Lothal. Al llegar delante del Templo Jedi de Lothal, Ezra sugirió que Ahsoka y Kanan usaran la Fuerza para poder acceder al Templo. Sin embargo, Ahsoka consideró que lo mejor era que Ezra y Kanan fuesen quienes utilizasen la Fuerza para poder entrar en el Templo, puesto que ella ya no era una Jedi desde que eligió abandonar la Orden Jedi tiempo atrás.[98]

Finalmente, Ezra y Kanan usaron la Fuerza y así Ahsoka pudo entrar en el templo junto a sus dos compañeros. Dentro del Templo, Ahsoka, Kanan y Ezra se pusieron a meditar. De repente, Kanan vio una puerta que tanto Ahsoka como Ezra eran incapaces de ver. Kanan pasó a través de la puerta, y desapareció ante los ojos de Ahsoka. Entonces, Ezra explicó a Ahsoka cómo Kanan le había descrito el aspecto de Yoda.[98]

Vision of Darth Vader

Ahsoka descubre que Anakin se convirtió en Darth Vader.

Ahsoka concordó con la descripción de Kanan sobre Yoda, y añadió que el Gran Maestro siempre había sido muy alegre cuando ella era joven. Sin embargo, Ahsoka dijo que desde que empezaron las Guerras Clon, Yoda fue volviéndose más serio, como si supiese que una era estaba llegando a su fin para dar paso a otra nueva. Mientras Ahsoka decía eso, Ezra también desapareció ante sus ojos. A pesar de eso, Ahsoka siguió meditando sin moverse de donde estaba.[98]

Durante su meditación, apareció detrás de ella una visión de Anakin Skywalker. Anakin, preguntó a Ahsoka por qué abandonó la Orden Jedi. Entonces, recriminó a su Padawan que lo hubiera abandonado cuando más la necesitaba. Ahsoka replicó que hizo su elección y no podía permanecer en la Orden Jedi. Anakin dijo a Ahsoka que fue egoísta, lo cual Ahsoka negó. Por último, la visión de Anakin gritó a Ahsoka que lo había fallado y abandonado. Finalmente, la visión de Anakin preguntó a Ahsoka si sabía en qué se había convertido él.[98]

Entonces, la visión de Anakin se transformó en Darth Vader. Horrorizada, y consciente de que su maestro se había convertido en el Lord Sith Darth Vader, Ahsoka comenzó a llorar. Su llanto pronto acabó en un grito de desesperación por lo que acababa de descubrir. Nerviosa por el ruido de la respiración de Vader proveniente de su visión, Ahsoka encendió su espada láser y se giró dispuesta a atacar a la visión de Vader. Sin embargo, al girarse, su visión ya se había esfumado. A continuación, Ahsoka se dejó caer al suelo impactada por el destino de Anakin.[98]

YodaAhsoka

Yoda saluda a Ahsoka apareciéndose ante ella desde Dagobah.

Pasado un rato, el Quinto Hermano y la Séptima Hermana atacaron el Templo Jedi de Lothal, que comenzó a temblar. Entonces se abrió una puerta ante Ahsoka, que decidió correr por el pasillo que había tras ella. Tras correr durante un rato, Ahsoka se encontró con Kanan y Ezra. Justo antes de salir del Templo Jedi, Ahsoka vio al Maestro Jedi Yoda, que desde Dagobah había conseguido poder ser visto físicamente por aquellos que él quisiera y que estuvieran en el Templo Jedi. Contento por ver a Ahsoka viva, Yoda la saludó desde la distancia. Contenta de ver a Yoda aunque conmocionada por lo que acababa de descubrir, Ahsoka también saludó a Yoda.[98]

Al salir del Templo Jedi, Ahsoka, Kanan y Ezra fueron recogidos por C1-10P a bordo del Fantasma. Allí, Ezra explicó que había hablado con el maestro Yoda en el Templo Jedi de Lothal. Cuando Ahsoka y Kanan le preguntaron qué le había dicho Yoda, Ezra respondió que el anciano le había encargado encontrar a Malachor. Ahsoka aclaró a Ezra que Malachor no era una persona, sino que era el nombre de un planeta.[98]

Búsqueda en Malachor

Lidiando con los inquisidores
«¿Estás preparada para este enfrentamiento entonces?»
«Tengo que conocer la verdad.»
«Que así sea, pero comprende esto, mucho cambiará como consecuencia de este encuentro, incluida tú.»
«¿No ocurre eso en todas las cosas, a medida que el tiempo transcurre?»
«Querida, cuando digo cambio, me refiero a muerte.»
«¿Entonces moriré?»
«¿Lo harás? No lo sabía. Adiós entonces, Ahsoka Tano, antigua Caballera Jedi. »
―Bendu y Ahsoka Tano, antes del enfrentamiento de Tano con su antiguo maestro[fuente]

Después de que los rebeldes hubieran establecido una base en Atollon, Ahsoka acudió al planeta para reunirse con Kanan Jarrus y Ezra Bridger e irse a continuación al planeta Malachor. En Atollon, Ahsoka se encontró en primer lugar con Ezra, quien le dijo que unos kryknas casi les impedían establecer la base. Cuando Ezra explicó a Ahsoka que no conseguía conectar mediante la Fuerza con los kryknas, Ahsoka le contestó que en su experiencia, cuando uno cree que comprende la Fuerza, pronto se da cuenta de que a penas sabe nada sobre ella. Acto seguido, ambos se fueron a reunir con Kanan.[99]

Antes de partir, Tano se reunió con el Bendu, un viejo ser sensible a la Fuerza que vivía en el planeta. Durante su conversación, Bendu mencionó el futuro enfrentamiento de Tano con su antiguo maestro. Cuando Tano explicó que necesitaba conocer la verdad, Bendu respondió que todo podría cambiar como resultado de su encuentro, incluida ella. Como la togruta no lograba entender sus palabras, Bendu aclaró que con cambio se refería a muerte. Entonces, Tano preguntó si iba a morir, pero Bendu actuó como si ella lo estuviera afirmando, y por ello contestó que no lo sabía antes de despedirse de ella.[100]

Twilight of the Apprentice 15

Rex propone a Ahsoka acompañarla a Malachor.

Más tarde, cuando Ahsoka, Rex y Kanan estaban a bordo del Fantasma rumbo a Malachor, Rex contactó vía holograma con Ahsoka. Rex, preguntó a Ahsoka si estaba segura sobre su decisión de ir a Malachor sola, y se ofreció a acompañarla si ella así lo deseaba. Ahsoka recordó a Rex que iba acompañada de Kanan y Ezra, y le dijo que estaba segura de lo que hacía. Rex respondió que si hubiera querido, podría haberla ordenado que le permitiera acompañarla a Malachor. Ahsoka, amistosamente, dijo a Rex que él ya no la superaba en rango.[101]

Repitiendo las palabras que había dicho a Ahsoka cuando la conoció en Christophsis, Rex contestó que en su opinión, la experiencia estaba por encima de todo. Ahsoka zanjó la cuestión afirmando mientras sonreía que ella también tenía ya más experiencia que Rex. Rex sonrió brevemente a Ahsoka y se despidió de ella deseando que la Fuerza la acompañara. Al acercarse a Malachor, Ahsoka y Kanan contaron a Ezra que Malachor tenía una mala reputación entre los Jedi, por causa de diversas leyendas. Ahsoka afirmó que siempre había algo de verdad en las leyendas y que en Malachor iban a encontrar conocimiento.[101]

Sobre la superficie de Malachor, Ahsoka, Ezra y Kanan encontraron una roca con inscripciones escritas en una antigua lengua. Mientras Ahsoka intentaba leer las inscripciones, Ezra tocó la roca a pesar de que Ahsoka intentó frenarlo, de modo que se abrió un agujero a los pies del trío y todos cayeron hasta el subsuelo de Malachor. Allí, vieron que bajo el planeta había un Templo Sith. De camino al Templo Sith, Ahsoka y los demás comenzaron a ver cadáveres petrificados de un gran número de gente, así como un elevado número de sables de luz arcaicos.[101]

Twilight of the Apprentice 19

El Octavo Hermano ataca por sorpresa a Ahsoka, Ezra y Kanan.

Ahsoka dijo que muchos años atrás, una batalla había tenido lugar en Malachor entre Jedi y Sith. Ezra preguntó si eran los Jedi quienes habían ganado, y Ahsoka respondió que por lo que ella sabía, nadie ganó la batalla. De repente, la conversación de Ezra y Ahsoka fue interrumpida por la aparición de un inquisidor, el Octavo Hermano. Por culpa del Octavo Hermano, Ezra cayó a un nivel todavía más inferior al del subsuelo. Ahsoka y Kanan acordaron con Ezra reunirse de nuevo en la entrada del Templo Sith, y entonces, Ahsoka persiguió al Octavo Hermano con la ayuda de Kanan.[101]

Finalmente, con la colaboración de C1-10P, Ahsoka y Kanan lograron arrestar al Octavo Hermano. Al preguntar al Octavo Hermano cuántos inquisidores había, éste se limitó a responder que suficientes para destruir a los Jedi. Kanan le preguntó qué hacía en Malachor, y el Octavo Hermano contestó que estaba cazando. Consciente de que el Octavo Hermano no sabía que ellos iban a venir hasta Malachor, Ahsoka le preguntó a quién había acudido a cazar. El inquisidor, resolvió la duda de Ahsoka diciéndole que estaba cazando a una sombra.[101]

A continuación, Ahsoka y Kanan vieron que una parte de la cúpula del Templo Sith se estaba abriendo, por lo que pensaron que Ezra ya había llegado hasta allí. Aprovechando que Ahsoka y Kanan estaban distraídos, el Octavo Hermano logró enviar una señal pidiendo refuerzos imperiales. Al llegar a la entrada del templo, entraron en escena el Quinto Hermano y la Séptima Hermana, que habían sido avisados por el Octavo Hermano. La Séptima Hermana rompió las ataduras del Octavo Hermano y Ahsoka y Kanan tuvieron que prepararse para enfrentarse a los tres inquisidores.[101]

Twilight of the Apprentice 35

Ahsoka, Maul y Kanan se enfrentan a los inquisidores.

A media lucha, salieron del interior del Templo Sith Ezra y Maul, que resultó ser el individuo a quien el Octavo Hermano había venido a cazar. Kanan advirtió a Ezra de la peligrosidad de Maul, y Ahsoka permaneció callada. Entonces, Maul decidió ayudar a los Jedi y se enfrentó a los inquisidores junto a Ahsoka y Kanan. Finalmente, Ahsoka y los demás lograron ahuyentar a los inquisidores. Al acabar la lucha, Ahsoka preguntó a Maul a qué estaba jugando. Él respondió que ellos eran el enemigo de su enemigo, y como tenía sus propios motivos para desear la caída del Imperio, había decidido ayudarles.[101]

Ezra confirmó las palabras de Maul mostrando el holocrón sith que el Zabrak le había ayudado a coger. Ahsoka informó a Ezra de que un holocrón sith sólo podía ser abierto por un sith, por lo que su información no estaba a su alcance. Maul sugirió que introdujeran el holocrón en una máquina situada en lo alto del templo, que les permitiría obtener su información a pesar de que no fuesen sith. Aunque Ahsoka y los demás confiaron en Maul, lo que el zabrak pretendía en realidad era que los Jedi metiesen el holocrón en la máquina para activar un arma de poder devastador.[101]

Para llegar a lo alto del Templo, había dos ascensores para dos personas cada uno. Maul intentó subir en un ascensor con Ezra, pero Kanan se lo impidió, y Maul tuvo que subir en el otro ascensor con Ahsoka. Al salir del ascensor, Maul y Ahsoka vieron al Octavo Hermano atacando a Ezra y a Kanan. Ahsoka corrió a asistir a Kanan, que había caído al suelo, y Maul corrió a enfrentarse al inquisidor y logró espantarlo. Al encontrar nuevamente dos ascensores para dos personas cada uno, Maul subió esta vez con Ezra en el ascensor. Ahsoka y Kanan tuvieron que dirigirse a otro ascensor situado lejos de Maul y Ezra.[101]

AhsokaTanoVsMaul-TOTA

Ahsoka se dispone a enfrentarse a Maul.

Al salir de nuevo del ascensor, Ahsoka y Kanan fueron emboscados por el Quinto Hermano y el Octavo Hermano. Mientras Ahsoka peleaba contra el Quinto Hermano y Kanan contra el Octavo Hermano, Ezra siguió subiendo por el templo para llegar hasta la máquina que había en su cúspide. Maul sin embargo, se dirigió a ayudar a Ahsoka y Kanan. Entonces, asesinó al Quinto Hermano, y junto a Ahsoka y Kanan, dañó la espada láser del Octavo Hermano. Acobardado, el Octavo Hermano decidió huir saltando por un acantilado, y usando su sable de luz como un helicóptero para no caer al vacío. No obstante, como su sable estaba dañado, éste explotó mientras el Octavo Hermano volaba por el acantilado, de modo que el inquisidor cayó al vacío.[101]

De pronto, Maul atacó a Kanan, de modo que el golpe del sable de luz de Maul le dio de lleno en los ojos. Con Kanan ciego, Ahsoka se interpuso entre él y Maul, dispuesta a pelear contra él. Maul afirmó que Ezra se iba a convertir en su aprendiz, y que en cuanto accionase sin saberlo el arma de la cúspide del Templo Sith, iba a poder vengarse de todos sus enemigos, tanto Sith como Jedi. Acto seguido, Ahsoka y Maul se enzarzaron en una feroz lucha. En un momento dado, Ahsoka saltó fuera del alcance de Maul, y éste la preguntó si estaba huyendo.[101]

Ahsoka se limitó a contestarle que si quería venir a por ella, primero debía vencer a Kanan, que se había recuperado de su aturdimiento, y a pesar de su ceguera estaba dispuesto a atacar a Maul. Siguiendo instrucciones de Kanan, Ahsoka le dejó solo peleando con Maul, y ella se dirigió hacia la posición de Ezra para tratar de ayudarle.[101]

Lucha con Darth Vader
Ahsoka Tano: «Estaba empezando a creer que sabía quién eras, tras esa máscara. Pero es imposible. Mi maestro jamás podría haber sido tan malvado como tú.»
Darth Vader: «Anakin Skywalker era débil. Yo lo destruí. »
Ahsoka Tano: «Entonces yo vengaré su muerte.»
— Ahsoka Tano y Darth Vader[fte.]
Twilight of the Apprentice thumb

Ahsoka se enfrenta a Darth Vader.

Al llegar a la cúspide del Templo Sith, Ahsoka se encontró con Darth Vader, que acababa de desarmar a Ezra Bridger y se disponía a matarle. Justo antes de intentar asestar un golpe final sobre Ezra, Vader le dijo que tal vez se había equivocado al decirle que iba a morir más valerosamente que muchas otras personas que se habían enfrentado a él. Antes de que Vader atacara, Ahsoka gritó a Vader, su antiguo maestro, para alertarle de su presencia y le dijo que no sería la primera vez que estaba equivocado.[101]

Vader se giró e ignoró a Ezra, mirando fijamente a Ahsoka. Entonces le dijo que estaban predestinados a encontrarse en Malachor, y celebró irónicamente que su tan esperado reencuentro se hubiera producido al fin. Ahsoka contestó sarcástica que ella se alegraba de haberle proporcionado algo de lo que él esperaba. Vader trató de persuadir a Ahsoka y le dijo que no había necesidad de que fuesen adversarios, puesto que el Emperador se mostraría misericordioso con ella si proporcionaba información sobre Jedi supervivientes a la Orden 66.[101]

Molesta, Ahsoka respondió que ya no quedaban Jedi, puesto que Vader y sus inquisidores habían tenido éxito en eliminarlos. Vader decidió entonces que Ezra le podría proporcionar toda la información que Ahsoka se negaba a darle. Ahsoka explicó a Vader que había estado empezando a saber quién era aquél que se ocultaba tras la máscara de Vader, pero que era imposible que Vader fuese quien ella sospechaba. Ahsoka, afirmó que Anakin Skywalker jamás podría haber sido tan cruel como lo era Vader.[101]

Ahsoka Vader Mask

Ahsoka contempla a Vader sin la mitad de su máscara.

Vader contestó que Anakin Skywalker había sido débil, por lo que le había destruido. Profundamente triste por oír las palabras de Vader, Ahsoka decidió que iba a vengar la "muerte" de su maestro. Vader replicó que la venganza no era el camino Jedi, y Ahsoka se limitó a murmurar que ella ya no era una Jedi. Entonces, Ahsoka encendió sus sables de luz y se abalanzó sobre Vader. Así, comenzó una larga confrontación entre quien había sido como un hermano para Ahsoka, y la propia Ahsoka.[101]

Mientras Ahsoka y Vader peleaban, Ezra y Kanan Jarrus, que llegó poco después a la cúspide, lograron obtener el holocrón sith que habían colocado en la máquina, de modo que ésta se desactivó y el Templo Sith comenzó a desmoronarse. A media pelea, Vader tiró a Ahsoka mediante la Fuerza, y aprovechó que su antigua Padawan estaba lejos para tratar de recuperar el holocrón sith que tenía Ezra. Ahsoka, sin pensarlo dos veces, aprovechó que Vader estaba ocupado intentando recuperar el holocrón y corrió hasta él.[101]

Al alcanzar a Vader, Ahsoka logró golpear su máscara y tirarle al suelo. Cuando Vader se reincorporó, Ahsoka vio la mitad de la cara desfigurada de Vader, que antes había estado cubierta por la máscara. Con los ojos rojos e inmerso en el poder del lado oscuro, Vader musitó el nombre de Ahsoka. Ahsoka, mirando fijamente la cara de Vader, pudo ver lo que había sido el rostro de Anakin en él. Entonces, mientras Ezra y Kanan volvían al Fantasma, Ahsoka decidió permanecer con Vader.[101]

Twilight of the Apprentice 61

Ahsoka tras su duelo con Darth Vader.

Ahsoka, gritó a Vader que esta vez no lo iba a abandonar, tal como había hecho años atrás cuando dejó la Orden Jedi. Vader, impasible, afirmó que entonces Ahsoka moriría, y encendió su sable de luz de nuevo. Ezra trató de correr hacia Ahsoka, pero ella lo alejó mediante la Fuerza y prosiguió su lucha con Vader mientras Kanan y Ezra abandonaban Malachor. Poco tiempo después, el Templo Sith explotó.[101]

Vader salió de los restos del templo cojeando y herido, con su máscara rota. Por otra parte, Ahsoka fue vista descendiendo lentamente por unas escaleras de los restos del Templo Sith, con los brazos cruzados. No obstante, Kanan y Ezra regresaron a la base de la red rebelde e informaron de que Ahsoka había muerto, aunque realmente no habían llegado a ver cuál había sido su destino. Al oír la noticia, el capitán Rex, quien había mantenido con Ahsoka una gran amistad durante años, quedó devastado.[101]

Un mundo entre mundos

Mientras Ezra Bridger y Kanan Jarrus abandonaban Malachor, Ahsoka siguió enfrentándose a Darth Vader en lo alto del Templo Sith del planeta. A pesar de conseguir resistir a los ataques del Lord Sith, Ahsoka cada vez se vio más superada por quien había sido su antiguo maestro. Consciente de que el Templo Sith iba a explotar, Ahsoka empujó a Vader y cortó el suelo con sus sables de luz con la intención de hundirlo. Mientras hacía eso, Vader se acercó dispuesto a matar de una vez por todas a Ahsoka. En ese momento, una mano arrastró a Ahsoka hasta el interior de un portal, y el suelo de derrumbó bajo los pies de Vader. Momentos después, el Templo Sith explotó, aunque Vader se salvó por el hecho de haber caído a través del hundimiento del suelo y Ahsoka sobrevivió al entrar en el portal.[102]

A World Between Worlds 03

Ezra atestigua el enfrentamiento entre Ahsoka y Darth Vader desde el Mundo Entre Mundos.

De repente, Ahsoka se encontró en una extraña dimensión conocida como el Mundo entre mundos, que se encontraba en el interior del Templo Jedi de Lothal y que poseía un conjunto de portales que conectaban tanto con el pasado como el presente. Allí, Ahsoka se encontró con un Ezra Bridger dos años mayor, quien había arrastrado a Ahsoka a través del portal para impedir que muriera a manos de Vader, de modo que la troguta había viajado en el espacio y en el tiempo, hasta el año 1 ABY.[102]

Ezra explicó a Ahsoka dónde se encontraban y todo lo que había ocurrido durante los dos años siguientes a su lucha contra Vader en Malachor, incluyendo la reciente muerte del Caballero Jedi Kanan Jarrus en Lothal.[102]

Ahsoka aseguró a Ezra que le debía la vida, y se alegró de ver al convor Morai, a quién Ahsoka también consideraba que debía la vida. Luego, Ezra habló a Ahsoka de un místico y enorme lobo de Lothal llamado Dume, quién le había guiado hasta el Mundo Entre Mundos. Ahsoka pensó que la aparición de ese lobo justo tras la muerte de Kanan no podía ser una coincidencia. Por eso, Ahsoka sugirió que tal vez la voluntad de Kanan se estaba manifestando a través del lobo, puesto que él ahora era parte de la Fuerza Cósmica y en cierta manera podía influenciar a los vivos. Al concluir que Kanan le había guiado hasta el Mundo Entre Mundos, Ezra asumió que también debía salvar a Kanan de su muerte a través de un portal.[102]

Sin embargo, antes de que Ezra pudiera salvar a Kanan, Ahsoka le recordó que el Jedi había muerto para salvar la vida de sus compañeros, de modo que si Ezra evitaba su muerte, él y el resto de Espectros morirían. Ezra respondió a Ahsoka que ella no entendía lo que le estaba pidiendo. Ahsoka, contestó que lo entendía perfectamente, puesto que tanto Ezra como ella no podían salvar a sus respectivos maestros. Una vez más, Ahsoka aconsejó a Ezra dejar marchar a Kanan. Él comprendió la veracidad de las palabras de Ahsoka, y definitivamente, aceptó la pérdida de su maestro. Acto seguido, Ahsoka concluyó que no podían permanecer más tiempo en el Mundo Entre Mundos, y preguntó a Ezra si sabía como cerrar la puerta de acceso a esa dimensión. Ezra aseguró que Sabine Wren sabría como hacerlo, y Ahsoka le informó de que no podía ir con él.[102]

A World Between Worlds 07

Ahsoka repele un ataque de Darth Sidious.

De pronto, tras un portal, apareció el Emperador Galáctico Sheev Palpatine, quien en realidad era el Lord Sith Darth Sidious. Sidious, había logrado usar magia Sith para poder presenciar el Mundo Entre Mundos a través de un portal. Al ver a Sidious, Ahsoka rápidamente se puso ante Ezra para protegerlo. Malévolamente, Palpatine afirmó que por fin tanto Ezra como Ahsoka eran suyos. Rápidamente, Palpatine lanzó contra ellos una llamarada de fuego usando la magia Sith, por lo que Ahsoka se vio obligada a usar la Fuerza para repelerla, sin apenas fuerzas para resistir. Consciente de la superioridad de Palpatine, Ahsoka instó a Ezra a huir, y ambos corrieron mientras Palpatine usaba su magia Sith para atrapar en una llamarada a ambos y arrastrarlos hacia su portal.[102]

En un momento dado, Sidious atrapó a Ezra, pero Ahsoka consiguió usar sus sables de luz para liberarlo y los dos siguieron corriendo. Poniéndose de acuerdo, cada uno de ellos se dirigió a un portal distinto. Sin embargo, antes de separarse, Ahsoka prometió a Ezra que iría en su búsqueda y que volverían a encontrarse. De ese modo, Ezra atravesó un portal y regresó a Lothal en el año 1 ABY. Por su parte, Ahsoka atravesó el portal del que había salido y apareció en Malachor en el año 3 ABY, poco después de su lucha contra Darth Vader. Así, ambos escaparon del alcance del Emperador y Ezra pudo sellar el acceso al Mundo Entre Mundos, de modo que Sidious no pudiera controlarlo. En Malachor, Ahsoka deseó que la Fuerza acompañara a Ezra, y procedió a descender las escaleras del Templo Sith.[102]

Perdida y encontrada

En busca de Ezra Bridger

SWR Ahsoka Gandalf

Ahsoka regresa a Lothal tras el fin de la Guerra Civil Galáctica.

En el 0 ABY, Ezra Bridger y un grupo de rebeldes consiguieron liberar el planeta Lothal del yugo del Imperio Galáctico. En consecuencia, Ezra desapareció tras la liberación del planeta, perdiéndose en el hiperespacio. Sabine Wren permaneció en Lothal hasta el fin de la Guerra Civil Galáctica, con la intención de proteger al planeta ante una posible invasión imperial. Sin embargo, el ataque del Imperio Galáctico nunca tuvo lugar. Después de la Batalla de Endor, en el 4 DBY, en la que el Emperador Galáctico Sheev Palpatine y el Lord Sith Darth Vader murieron a bordo de la Segunda Estrella de la Muerte; Ahsoka Tano regresó a Lothal para reunirse con Sabine. Juntas, partieron en busca de Ezra, cumpliendo así Ahsoka con la promesa que había hecho a Ezra muchos años atrás.[103]

Buscando a Thrawn

«Te estaba esperando.»
«Entonces ya sabes lo que quiero.»
«No averiguarás nada de mi.»
«No te daré elección.
»
―Tano y Elsbeth[fuente]

Alrededor del 9 DBY,[104] Tano había empezado a buscar al Gran Almirante Thrawn[105] y había llegado hasta el planeta boscoso Corvus[106] buscando información sobre la localización del Gran Almirante. Para obtener esa información, Tano se aventuró a la ciudad de Calodan, que estaba gobernada por la Magistrada Morgan Elsbeth, una sirviente y antigua aprendiz de Thrawn, y su ejército.[105] Bo-Katan Kryze sabía de su viaje a Corvus y, tras apoderarse de un crucero clase Gozanti Imperial, guió a Din Djarin, quien había recibido la tarea de la Armera de entregar a un niño de la misma especie que Yoda a los Jedi, hasta su localización como agradecimiento por su ayuda en capturar el Gozanti Imperial.[106]

AhsokaCloakedCorvus-TMCh13

Tano atacando a los guardias exploradores.

Al llegar a Calodan, Tano se encontró con una gran resistencia y fue atacada por los guardias exploradores de Elsbeth. Sin embargo, Tano consiguió superarlos y obligarles a retirarse. Mientras se retiraban, Tano usó sus sables de luz para eliminar a uno de los guardias que se dirigían tras los muros de Calodan. Apagando sus sables láser, Tano se escondió detrás de un árbol y usó la Fuerza para crear una distracción, por lo que los guardias volvieron a disparar contra ella, que usó la Fuerza para lanzarles un gran tronco que había cortado previamente. Luego, desapareció entre la niebla. Usando la Fuerza para cortar a través de otro de sus enemigos, Tano emergió brevemente de nuevo y se deshizo de otro guardia antes de volver a desaparecer mientras seguían disparando contra ella. Deslizándose tras los guardias, los partió por la mitad, dejando sólo a uno en pie. Mientras el último guardia intentaba retirarse a la ciudad, Tano apareció de entre la niebla bloqueando sus disparos antes de eliminarlo tal como había hecho con los demás.[105]

Cuando Tano apareció entre la niebla, Elsbeth, desde lo alto de la muralla que rodeaba Calodan, exigió que Tano se mostrara, lo cual ella hizo, con sus sables de luz encendidos otra vez. Elsbeth anunció que había estado esperando a Tano, a lo que ella respondió afirmando que entonces Elsbeth sabía lo que quería. Elsbeth declaró que Tano nunca averiguaría nada de ella, pero Tano respondió que no daría elección a Elsbeth. Convocando a uno de sus droides asesinos HK-87, Elsbeth presentó a uno de los habitantes de la ciudad, que era cautivo de Elsbeth, y preguntó cuántas vidas estaba Tano dispuesta a sacrificar para obtener la información que buscaba. Elsbeth afirmó que los habitantes de la ciudad no le importaban y que estos sufrirían por culpa de la interferencia de Tano. Sin embargo, Tano declaró que la gente ya estaba sufriendo bajo el mandato de Elsbeth y que Elsbeth debía rendirse si no quería afrontar las consecuencias de sus crímenes. Alzando uno de sus sables de luz, Tano anunció que daría a Elsbeth un día para decidir mientras ella le sonreía. Apagando sus sables de luz, Tano se retiró entre la niebla lejos de Elsbeth.[105]

La búsqueda del mandaloriano
«¡Ahsoka Tano! Me envía Bo-Katan. Tenemos que hablar.»
―Din Djarin[fuente]
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Tano conoce a Din Djarin.

A la mañana siguiente, Tano se retiró a lo más profundo del bosque y eventualmente fue descubierta por el mandaloriano Din Djarin, quien la había estado buscando por la zona. Viéndolo como una amenaza, Tano se lanzó hacia él usando sus sables de luz. Oyéndola, Djarin consiguió bloquear sus sables láser usando su armadura de beskar. Tano continuó el ataque, pero Djarin consiguió bloquear todos sus ataques antes de usar su lanzallamas para alejarla y su lanzalátigo para inmovilizarla. Viendo una rama sobre ella, Tano dio un rodeo alrededor de la rama, y como el látigo aún estaba unido a Djarin, consiguió alzar al mandaloriano hasta que el látigo se rompió. Ahora libre, Tano encendió de nuevo sus sables de luz y se preparó para seguir luchando hasta que Djarin pronunció su nombre, pistola bláster en mano, y declaró que Bo-Katan Kryze le había enviado, solicitando hablar con la antigua Jedi. Viendo al niño de la misma especie que Yoda, Tano informó a Djarin de que esperaba hablar sobre el niño.[105]

Por la noche, ella y el niño se comunicaron telepáticamente a través de la Fuerza bajo la luz de una lámpara y la luna. Poniéndose en pie, Tano cogió al niño, quien, tal como ella había descubierto mediante su comunicación telepática, se llamaba Grogu y había sido criado en el Templo Jedi. Poco después, Tano llevó a Grogu y la lámpara cerca de Djarin y se sentó junto al niño. Djarin preguntó si Grogu estaba hablando con ella y si ella le entendía. A esto, Tano respondió que ella y Grogu podían percibirse los pensamientos. Djarin quedó sorprendido al conocer el nombre de Grogu por primera vez y preguntó acerca del nombre tras escucharlo. Tano reafirmó que su nombre era Grogu y explicó a Djarin que Grogu había sido criado en el Templo Jedi de Coruscant, siendo entrenado por numerosos maestros Jedi a lo largo de los años. Sin embargo, Grogu había sido escondido por alguien al final de las Guerras Clon, cuando la República Galáctica fue convertida en el Imperio Galáctico, pero, tras eso, su memoria se encontraba nublada y no recordaba mucho de los años posteriores. Prosiguiendo, Tano explicó que Grogu se había sentido solo y perdido tras la destrucción de la Orden Jedi.[105]

Después, Tano explicó que ya había conocido a otro miembro de la especie de Grogu, el Gran Maestro Jedi Yoda, y destacó lo sabio que había sido. Tano preguntó a Djarin si Grogu aún podía usar la Fuerza tal como había hecho en el Templo Jedi, a lo que Djarin contestó preguntando si se refería a sus poderes. Tano explicó que la Fuerza era lo que daba a Grogu sus poderes y que consistía en un campo de energía creado por todas las cosas vivas. Con esto, explicó que se requería mucho entrenamiento y disciplina para controlar los poderes de la Fuerza. Conociendo esto, Djarin habló de las cosas supuestamente inexplicables que Grogu había hecho anteriormente y de cómo tenía la tarea de entregar a Grogu a los Jedi. Sin embargo, Tano respondió que la Orden Jedi había caído tiempo atrás, a lo que Djarin contestó destacando que aunque el Imperio también había caído, aún perseguía a Grogu, necesitando la ayuda de Ahsoka para evadirlos. Tano recomendó dejar dormir a Grogu y poner a prueba sus aptitudes al día siguiente.[105]

LetTheTrainingBegin

Tano, Djarin, y Grogu inician las pruebas de éste último.

Al día siguiente, Tano, Djarin y Grogu se aventuraron a un claro despejado y, al llegar, Tano se acercó a Grogu y afirmó de forma juguetona que ahora descubrirían que conocimiento poseía Grogu. Tano pidió a Djarin que pusiera a Grogu sobre una roca, lo cual él hizo. Recogiendo una pequeña piedra, Tano usó la Fuerza para hacerla levitar hasta las manos de Grogu, y le instó a que le devolviera la piedra usando la Fuerza. Antes de que Grogu pudiera hacer nada, Djarin intervino y dijo que Grogu no la entendía, pero Tano contestó afirmando que Grogu sí entendía sus palabras. Con su mano aún tendida, Ahsoka pidió de nuevo la piedra a Grogu. Sin embargo, en luegar de devolver la piedra, Grogu la soltó, por lo que ella bajó el brazo decepcionada y se acercó a él. Cogiendo una de sus pequeñas manos, Tano usó la Fuerza para percibir sus emociones y calmadamente anunció que sentía un gran miedo en Grogu, por lo que volvió a su posición original, y explicó a Djarin que Grogu había escondido sus habilidades durante los años para ocultarse.[105]

Entonces Tano anunció que deseaba intentar otra cosa y pidió a Djarin que se acercara a ella. Djarin la entendió mal e indicó a Grogu que se acercara a Tano en su lugar, y cuando el niño no se movió, exclamó que Grogu era tozudo. Sin embargo, Tano rápidamente lo detuvo e informó de que quien haría la prueba no era Grogu, si no el propio Djarin, explicando que quería ver si Grogu escuchaba a Djarin. Eso hizo que Djarin comenzara a quejarse afirmando que, si Grogu le escuchaba, sería una de las primeras veces, a lo que Tano contestó jocosamente que a ella le gustaban las primeras veces, tanto si eran buenas como malas, porque eran memorables. Entregando la piedra a Djarin, Tano le indicó que sostuviera la piedra en la palma de su mano y que pidiera a Grogu que elevara la piedra usando la Fuerza. Mientras Tano se movía a un lado para observar la prueba, susurró en la oreja de Djarin para que llamara a Grogu por su nombre. Desde la distancia, Tano vio cómo Djarin solicitaba a Grogu recoger la piedra una vez más, rindiéndose al cabo de poco y de nuevo afirmando que Grogu era tozudo. Tano aconsejó a Djarin que intentara conectar con Grogu, por lo que el mandaloriano se sacó del bolsillo una pequeña esfera plateada que pertenecía a los mandos de control de su cañonera, la Razor Crest, y que a Grogu le gustaba mucho. Arrodillándose, Djarin instó a Grogu a coger la esfera. Sin dudar, Grogu usó la Fuerza para acercar la esfera hacia él.[105]

Djarin felicitó a Grogu por ello, y, al hacerlo, Tano notó el vínculo que Grogu había establecido con él, decidiendo que no entrenaría a Grogu. Djarin quedó impactado por esto y preguntó el motivo de la decisión, citando las habilidades de Grogu. Tano explicó que el apego de Grogu a Djarin lo hacía vulnerable al lado oscuro. Djarin, sin embargo, no lo entendió e insistió que esa era una razón más para entrenar a Grogu, pero Tano se negó de nuevo,[105] citando indirectamente a su antiguo maestro, Anakin Skywalker, hablando de cómo sus emociones habían hecho caer a uno de los mejores integrantes de la Orden Jedi al lado oscuro.[87] Tano se negó a permitir que Grogu sufriera ese destino y afirmó que era preferible que Grogu perdiera sus habilidades con la Fuerza a medida que crecía. Apresurándose, Tano informó a Djarin de que había esperado demasiado tiempo y debía regresar a Calodan para salvar a sus habitantes.[105]

Mientras Tano se alejaba, Djarin habló de cómo Morgan Elsbeth le había enviado a matar a Ahsoka, aunque él no se había comprometido a nada. Intentando cerrar un acuerdo, Djarin dijo a Tano que él le ayudaría a salvar Calodan si ella le ayudaba a entrenar a Grogu. Aceptando sus términos, Tano y Djarin partieron de vuelta a Calodan.[105]

Liberando la ciudad
«¿Un mandaloriano y una Jedi? Nunca se lo esperarán.»
―Din Djarin[fuente]

En el camino de regreso a Calodan, Din Djarin describió las fuerzas que Morgan Elsbeth tenía bajo su control, incluyendo droides asesinos HK-87, guardias exploradores, y un tirador a sueldo, Lang, y expresó su creencia de que los sables de luz de Tano no la protegerían de tantos disparos bláster. En respuesta, Tano afirmó que también debían ir con cuidado con la propia Magistrada Elsbeth. Cuando Djarin preguntó quién era Elsbeth, puesto que le había ofrecido una lanza de beskar puro, Tano reveló su nombre a Djarin y que su hogar había sido saqueado durante las Guerras Clon y su gente había sido masacrada. También explicó que eso le había causado una profunda ira, lo que hizo que ayudara a construir naves de guerra para la Armada Imperial y que saqueara mundos ella misma. Eso hizo que Djarin pensara en el bosque quemado que tenían alrededor. Cambiando de tema, Tano preguntó a Djarin si había visto prisioneros tras los muros de la ciudad, y él informó de tres aldeanos que habían sido apresados. Tano declaró que debían encontrar el modo de liberarlos, a lo que Djarin contestó afirmando que el ejército de Elsbeth nunca esperaría una alianza entre ambos.[105]

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Tano bloqueando uno de los ataques de Elsbeth.

Al anochecer, los dos finalmente completaron su viaje. Corriendo hacia la entrada de la ciudad, Tano usó la Fuerza para saltar hasta el puesto de vigilancia sobrela puerta de la ciudad, encendiendo uno de sus sables de luz y golpeando a uno de los guardias exploradores. Bloqueando los disparos bláster lanzados contra ella por otro guardia explorador, Tano agarró al guardia y lo arrojó contra la viga de apoyo de un gong, el sistema de alarma de la ciudad, antes de bloquear rápidamente los disparos de otro guardia. Luego arrojó el cuerpo del guardia explorador que había agarrado antes y lo lanzó hacia la pared opuesta a donde había estado antes. Inmediatamente después, usó la Fuerza para quitar el rifle bláster a un guardia y se lo arrojó a otro de ellos, noqueando al guardia. El guardia al que le había quitado el bláster levantó las manos en señal de rendición y escapó de Tano. Esquivando el golpe de un arma pesada, cortó a un centinela por la mitad, cortando el gong por la mitad en el proceso.[105]

Mientras las fuerzas de Elsbeth formaban fuera del edificio principal de la ciudad, Tano emergió de alrededor de una de las cabañas de la ciudad y comenzó a caminar lentamente hacia el ejército de Elsbeth. Frenando hasta detenerse, arrojó al suelo una placa del hombro de la armadura de Djarin para que Elsbeth y su ejército la vieran, alegando que Djarin no había podido matarla, y una vez más le pidió a Elsbeth que le diera lo que buscaba. Sin embargo, Elsbeth ordenó a sus guardias que atacaran a Tano, obligándola a saltar al techo de una de las cabañas y bloquear los disparos que se le aproximaban con sus sables de luz. Al verse obligada a retirarse, Tano saltó detrás de las cabañas y se ocultó del ejército de Elsbeth.[105]

Saltando detrás de dos guardias, Tano rápidamente usó sus sables de luz para eliminarlos antes de desaparecer una vez más. Emergiendo detrás de otros dos guardias exploradores, Tano reveló lentamente sus sables de luz y se deshizo de los guardias. Apareciendo en una azotea y encendiendo sus sables de luz, saltó para enfrentarse al tirador contratado por Elsbeth. Desarmando rápidamente a Lang, Tano se quedó inmóvil por un momento, pero pronto se vio obligada a desviar su atención cuando los dos droides asesinos HK-87 de Elsbeth aparecieron desde esquinas opuestas. Reaccionando rápidamente, Tano corrió hacia uno y lo cortó por la mitad antes de retirarse y desaparecer en otra esquina.[105]

De pie encima de una de las paredes externas del edificio principal, Tano presenció un enfrentamiento entre Djarin, que se había colado en la ciudad durante el caos, y Lang, antes de entrar en el edificio para enfrentarse a Elsbeth en su jardín. Señalando que una pelea estaba a punto de tener lugar, Tano y Elsbeth se quitaron la túnica y prepararon sus armas. Usando la lanza de beskar que le había ofrecido a Djarin antes, Elsbeth se abalanzó sobre Tano, quien rápidamente bloqueó su lanza con uno de sus sables de luz antes de bloquear un segundo golpe con la misma hoja. Bloqueando otro de sus golpes, ahora con ambos sables de luz, Tano y Elsbeth intercambiaron varios golpes más mientras la pelea se intensificaba. Comenzando a pasar a la ofensiva, Tano ejecutó varios ataques contra la lanza de beskar de Elsbeth antes de tener que esquivar dos de los ataques de Elsbeth. Cambiando de posición, Tano volvió a la ofensiva cuando Elsbeth bloqueó un golpe de sus dos sables de luz y luego efectuó un bloqueo de sable que resultó en que Elsbeth fuera empujada hacia atrás por la fuerza bruta de Tano.[105]

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Tano con el Gobernador Wing.

Con Elsbeth lanzando un ataque contra su garganta, Tano se vio obligada a esquivar mientras Elsbeth rápidamente comenzaba a apuntar a sus piernas, lo que hizo que Tano caminara lentamente hacia atrás, bloqueando cada uno de sus golpes antes de que Elsbeth barriera sus piernas, lo que obligó a Tano a realizar un giro frontal. Volviendo a la ofensiva, Elsbeth y Tano entraron en un breve bloqueo de sables antes de que Tano lanzara un golpe a Elsbeth, lo que la llevó a agacharse por debajo del golpe que se aproximaba. Tambaleándose un breve momento, Elsbeth logró tirar uno de los sables láser de Tano hacia un estanque cercano. Ahora armada sólo con su sable de luz shoto, Tano retrocedió lentamente someter a su única hoja restante a un agarre inverso, intentando recuperar el aliento mientras empujaba lentamente a Elsbeth hacia atrás. Mientras Tano lanzaba varios ataques fuertes, Elsbeth continuó bloqueando sus golpes antes de intentar, sin éxito, barrer la pierna de Tano, dándole a Tano la ventaja y permitiéndole cortar parte de la lanza de Elsbeth y tirar al suelo lo que quedaba de ella. Poniendo su sable en la garganta de Elsbeth, Tano le preguntó por última vez dónde se encontraba su maestro, el Gran Almirante Thrawn.[105]

Al día siguiente, Djarin y Tano, lanza en mano, caminaron fuera de las puertas de la ciudad mientras los ciudadanos de Calodan celebraban su liberación del gobierno de Elsbeth. Al presentar la lanza a Djarin, Tano declaró que creía que la lanza de Elsbeth era un pago por su derrota. Sin embargo, Djarin rechazó la oferta, citando que no había completado la misión que le habían ofrecido, lo cual Tano confirmó, pero afirmó que creía que un mandaloriano debía poseer la lanza. Cuando Djarin tomó el arma, Tano preguntó dónde estaba Grogu, tras lo que Djarin reveló que se encontraba en la Razor Crest y que iría a por él. Mientras Djarin se alejaba, Tano se unió a Gobernador Wing, a quien indicó que regresara a la ciudad como gesto de amistad. Luego, los dos regresaron al interior de las murallas de la ciudad.[105]

Más tarde, Tano estuvo presente frente a la Razor Crest cuando Djarin salía con Grogu en la mano para dárselo para entrenar. Al salir, Tano declaró que Grogu ahora veía a Djarin como a un padre y una vez más declaró que no podía entrenar al joven. Djarin se sorprendió por esto, afirmando que había cumplido su parte del trato, cuando Tano se acercó a él y tomó la mano izquierda de Grogu. Cuando cogió las dos manos, Tano dirigió a Djarin al planeta Tython donde le recomendó que colocara a Grogu en la piedra vidente de la cima de la montaña que contenía las ruinas de un templo antiguo con una fuerte conexión con la Fuerza. Djarin luego preguntó qué se suponía que debía hacer desde allí, a lo que Tano respondió que Grogu podría elegir su propio camino y que si Grogu usaba la Fuerza desde la piedra, un Jedi podría percibirlo y llegar al planeta en busca de Grogu. Sin embargo, también declaró que quedaban pocos Jedi, lo que posiblemente podría suponer un problema para los dos. Djarin luego dio las gracias a Tano y ella deseó que la Fuerza estuviera con ambos antes de sonreír e inclinar la cabeza hacia Grogu, mirando como la pareja se iba en su cañonera. Con esto, Tano caminó de regreso hacia Calodan, sonriendo.[105]

Construyendo el Templo Jedi de Luke Skywalker

Luke Skywalker: «A veces me pregunto si de verdad le interesa.»
Ahsoka Tano: «Como le pasaba a tu padre.»
— Ahsoka compara a Luke con su padre, Anakin Skywalker [fuente]
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Tano observa la construcción del Templo Jedi de Luke Skywalker junto a Din Djarin y R2-D2.

Posteriormente, Ahsoka visitó al Maestro Jedi Luke Skywalker y a Grogu, cuya tutela había asumido Skywalker, en un planeta boscoso en el que Luke estaba construyendo un nuevo templo Jedi. En él, Luke pretendía entrenar a una nueva generación de Jedi. Más adelante, Din Djarin acudió al templo para visitar a Grogu y regalarle una armadura de beskar, encontrándose con Ahsoka para su sorpresa. Tano le explicó que era una vieja amiga de la familia Skywalker, y Djarin le preguntó qué estaba haciendo allí, a lo que ella contestó haciéndole la misma pregunta. Djarin confirmó que se encontraba allí para ver a Grogu. Tano explicó que por eso el droide astromecánico R2-D2 había llevado a Djarin ante ella.[107]

Entonces, Djarin preguntó a Ahsoka acerca del templo y ella afirmó que sería una gran escuela, de la que Grogu sería el primer estudiante. Cuando Djarin preguntó qué tal se encontraba Grogu, Ahsoka respondió que se encontraba bien, aunque Djarin siguió insistiendo en verle. En consecuencia, Tano invitó a Djarin a que la acompañara a través de un bosque de bambú.[107]

Durante el paseo, Ahsoka recordó a Djarin su advertencia acerca de que el apego entre él y Grogu sería una dificultad costosa de superar. Djarin explicó que Grogu era un huérfano mandaloriano bajo su cuidado, por lo que quería asegurarse de que se encontraba a salvo. Ahsoka afirmó que no había un lugar en la galaxia más seguro que estar al lado de Luke. Djarin preguntó a Ahsoka acerca de haber permitido que Skywalker entrenara a Grogu cuando ella misma había rechazado esa opción. Ahsoka inspiró profundamente y explicó que esa era la decisión de Luke, y que ella no controlaba los deseos y elecciones de los demás. En respuesta, Djarin dijo que también era su elección ver a Grogu en ese momento.[107]

Ahsoka acceptó respetar los deseos de Djarin y avanzó hasta avistar una colina en la que Luke se encontraba sentado con Grogu. Ahsoka pidió a Djarin que considerara si estaba actuando en favor de Grogu o mirando por sí mismo. Djarin contestó que sólo quería dar a Grogu su armadura de beskar, que pertenecía a Grogu por derecho. Tano sugirió que tal vez Grogu ahora era un Padawan. Djarin razonó que la armadura le protegería tanto si escogía ser un Jedi como un mandaloriano, y Ahsoka pidió a Djarin que considerara permitirle entregar la armadura a ella.[107]

Djarin aclaró que había recorrido un largo camino para ver a Grogu, y Ahsoka lo entendió, pero afirmó que Grogu le echaba mucho de menos y que verlo solo le haría las cosas más difíciles. Djarin aceptó el ofrecimiento de Ahsoka y le entregó la armadura de beskar, pidiendo a continuación a Tano que se asegurara de que Grogu estaba protegido.[107]

Tano and Skywalker

Tano habla con Luke Skywalker acerca de Grogu, mientras le observa entrenar a la orilla de un río.

Después, Ahsoka se unió a Luke en observar a Grogu llevando a cabo un ejercicio de entrenamiento, quedándose impresionada por el progreso de Grogu. Cuando Grogu usó la Fuerza para inmovilizar a un remoto de entrenamiento antes de hacerlo cortocircuitar y caer a un río, Grogu se mostró exaltado y Luke lo felicitó. Ahsoka dijo a Luke que había enseñado bien a Grogu. Sin embargo, Luke respondió que creía que Grogu estaba recordando sus lecciones anteriores con la Orden Jedi en lugar de aprender de él. Ahsoka observó que a veces es el estudiante quien guía al maestro.[107]

A continuación, Luke mencionó que había percibido la presencia cercada de Djarin, y Ahsoka le explicó que él y Grogu compartían un fuerte vínculo, habiendo acudido Djarin a hacer un regalo a Grogu. Ahsoka mostró a Luke el pañuelo rojo que contenía la armadura de beskar, y Luke admitió que en ocasiones se preguntaba si realmente Grogu estaba decidido a ser un Jedi. Ahsoka respondió a Luke que le recordaba a su padre, Anakin Skywalker, su antiguo maestro. Cuando Luke preguntó qué hacer con Grogu, Ahsoka le aconsejó confiar en su instinto. Entonces, mientras Grogu descansaba sobre una roca, Luke preguntó a Ahsoka si volverían a verse de nuevo. Ahsoka contestó que tal vez sí, y le deseó que la Fuerza le acompañara antes de irse. Por último, Ahsoka dejó la armadura de beskar junto a Grogu reposando en la roca.[107]

Legado

Anakin Skywalker: «La Fuerza te rodea Rey.»
Aayla Secura: «Deja que te guíe.»
Ahsoka Tano: «Como nos guió a nosotros»
―Ahsoka, Anakin y Aayla hablando a Rey [fuente]

En algún momento, el Maestro Jedi Luke Skywalker, el hijo del maestro de Tano, Anakin Skywalker, supo de la existencia de la togruta y narró su historia en su diario personal durante su exilio en el planeta Ahch-To.[108] Tras la Batalla de Crait[109] en el 34 DBY,[110] Tano fue mencionada en la Guía del Explorador Galáctico, un libro escrito por[109] su viejo enemigo[34] y aliado Hondo Ohnaka.[66] El libro rememoraba que la Maestra Jedi Luminara Unduli había sido una mentora de Tano.[109]

En el 35 DBY, durante la Batalla de Exegol, la voz de Ahsoka fue escuchada por Rey entre las voces de muchos grandes Jedi del pasado que le ayudaron a liberar todo su potencial Jedi y destruir al resucitado Darth Sidious de una vez por todas.[111]

Ahsoka fue recordada en el tiempo posterior a la Batalla de Endor de la Guerra Civil Galáctica, y un miembro de los Whills lo mencionó como alguien para ser recordado en la historia galáctica.[112]

Apariciones

Fuentes