«El segundo tipo de planeta más común son los enormes gigantes gaseosos, con atmósferas venenosas y presiones tan elevadas que las naves estelares son aplastadas con facilidad.»
―Servicio de Reconocimiento de la Nueva Repúblicaguía espacial[fuente]
Un gigante gaseoso era un tipo de planeta formado principalmente por capas gaseosas, la mayoría de ellas de hidrógeno y helio con algo de metano. Tan solo unos pocos presentaban capas ricas en oxígeno dentro de sus atmósferas capaces de soportar zonas de vida. Por lo general, los gigantes gaseosos mantenían en órbita una gran cantidad de lunas debido a su elevada masa y gravedad. Algunos también poseían sistemas de anillos planetarios. Bespin, Endor, Taloraan, Yavin Prime u Oovo son ejemplo de los más famosos.
El Imperio Galáctico clasificó a los gigantes gaseosos en base a tipos concretos de planetas con los que se pudieran efectuar comparaciones: este es el caso de los gigantes gaseosos clase Bespin.[1]
Otro tipo de gigantes gaseosos eran los llamados «planetas jovianos».[2]