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- «¿Soldados de choque? ¿Qué hace aquí la Guardia de Coruscant?»
- ―Hunter
La Guardia de Coruscant fue un cuerpo de élite de soldados clon de choque del Gran Ejército de la República, organizado para servir como una fuerza policial militar y proteger el planeta capital de la República Galáctica, Coruscant. La Guardia de Coruscant sirvió bajo el liderazgo del Comandante Clon Fox, un soldado clon conocido por su feroz lealtad a la República, así como por su estilo de mando basado en liderar desde el frente. Durante las Guerras Clon, el Comandante Fox se convirtió en uno de los soldados más condecorados de las Fuerzas Armadas de la República.
La Guardia de Coruscant desempeñó diversas funciones en su servicio a la República, como patrullar la capital galáctica como soldados antidisturbios para ayudar a la Fuerza de Seguridad de Coruscant, emprender operaciones de rescate de rehenes, y servir como guardias en el Centro de Detención Judicial Central de la República. Suplantaron gradualmente a la Guardia del Senado acompañando a Jedi, senadores y otros diplomáticos en misiones en el exterior. A medida que progresaba el conflicto a escala galáctica con la Alianza Separatista, la Guardia de Coruscant sirvió como guardaespaldas del Canciller Supremo Sheev Palpatine, un estatus que compartieron con la Guardia Roja del Canciller.
Tras la formación del Imperio Galáctico, la Guardia de Coruscant fue conservada por el Nuevo Orden, y continuó sirviendo como una fuerza de seguridad en Coruscant, aunque con la nueva misión de imponer el reinado del autoproclamado Emperador Sheev Palpatine. Fox inicialmente continuó sirviendo como el líder de la Guardia de Coruscant hasta que fue ejecutado por el ejecutor principal del Emperador, el Lord Sith Darth Vader.
Descripción[]
- «¿Arrestamos al hutt, Senadora?»
- ―Fox, a Padmé Amidala, tras arrestar a Ziro Desilijic Tiure
La Guardia de Coruscant patrulla las calles de Coruscant.
La Guardia de Coruscant fue un cuerpo[1] del Gran Ejército de la República durante las Guerras Clon compuesto de mortíferos soldados clon de choque de élite.[13] Liderada por el Comandante Clon Fox, la Guardia de Coruscant sirvió como una Fuerza de Seguridad en Coruscant, el mundo capital de la República Galáctica, donde su tarea principal consistía en proteger edificios gubernamentales e infraestructura vital.[2] Sin embargo, a medida que la guerra progresaba y la Guardia del Senado se volvía cada vez más inepta y corrupta, la Guardia de Corsucant se encontró a menudo complementando a la Guardia del Senado y finalmente asumió su función de servir como guardaespaldas de los miembros del Senado Galáctico y del Canciller Supremo. Los soldados de choque también patrullaban las calles de Coruscant junto a oficiales de policía civiles y droides policía guardían serie GU de la Fuerza de Seguridad de Coruscant, ayudándoles a perseguir sospechosos y a ejercer de antidisturbios.[12] La Guardia de Coruscant también sería responsable de custodiar el Centro de Detención Judicial Central de la República,[24] emprendería misiones de rescate de rehenes,[17] serviría como escolta en misiones diplomáticas,[16] y efectuaría funciones de policía militar.[6]
Historia[]
Guerras Clon[]
Rescatando a una Senadora[]
- «¿Hay alguien en casa?»
- ―C-3PO, después de que la Guardia de Coruscant reviente una puerta
En los últimos días de la República Galáctica, el Movimiento Secesionista, bajo la guía secreta de los Sith, hizo que el Senado Galáctico debatiera establecer una fuerza militar que defendiera a la República. Cuando los Jedi descubrieron que la Confederación de Sistemas Independientes tenía un ejército droide, el Senado concedió al Canciller Supremo Sheev Palpatine poderes de emergencia. Palpatine, en secreto el Señor Oscuro de los Sith Darth Sidious y artífice de la crisis, usó los poderes para establecer un Gran Ejército de la República compuesto por soldados clon que habían sido criados en el planeta Kamino por orden de Palpatine usando la identidad del difunto Maestro Jedi Sifo-Dyas. Los soldados clon aterrizaron en Geonosis en la batalla que marcó el inicio de las Guerras Clon. Mientras el Gran Ejército era desplegado por toda la galaxia,[25] una división fue establecida para proteger a la capital galáctica de Coruscant. Llamada la Guardia de Coruscant, estaba compuesta por mortíferos y poderosos soldados clon de choque que habían sido entrenados como guardianes de la paz y en la pacificación urbana.[13]
Soldados de la Guardia de Coruscant irrumpen en el club nocturno de Ziro.
Cuando el hijo de Jabba Desilijic Tiure fue secuestrado, la Senadora Padmé Amidala acudió al tío de Jabba, Ziro, en su club nocturno en Coruscant con la esperanza de que Ziro convenciera a Jabba de permitir a los Jedi rescatar a su hijo. Sin embargo, Amidala descubrió que Ziro estaba implicado en el secuestro que había sido perpetrado por el Conde Dooku, líder de los Separatistas y Lord Sith. Dooku prometió a Ziro una gran recompensa por la senadora y el hutt hizo que Amidala fuera encerrada en una mazmorra. Desde su celda, Amidala consiguió contactar con su droide, C-3PO, solicitando ayuda. Amidala fue descubierta y eso hizo que Ziro ordenara su ejecución. C-3PO contactó con la Guardia de Coruscant y solicitó su ayuda para rescatar a la senadora. El Comandante Fox y varios soldados de choque acompañaron a C-3PO al club nocturno e irrumpieron en él. Se enfrentaron en combate a los droides, destruyéndolos, y Amidala pudo liberarse en la confusión resultante. Junto a los soldados de choque, acorralaron a Ziro mientras intentaba escapar, y el Comandante Fox arrestó al hutt.[15]
Escoltando al Maestro Yoda[]
- «Aprendido algo ha, ¿verdad, Teniente?»
«Creo que todos hemos aprendido algo.» - ―Yoda y Thire
Los soldados Jek y Rys junto al Teniente Thire en Rugosa.
Con la República y los Separatistas compitiendo por los planetas adecuados para establecer bases, el Gran Maestro Jedi Yoda fue enviado a la luna de coral de Rugosa para reunirse en secreto con Katuunko, el Rey de Toydaria. La Guardia de Coruscant envió a una escolta junto al Jedi liderada por el Teniente Thire y que incluía a los soldados de choque Jek y Rys. Sin embargo, Asajj Ventress, la aprendiz del Conde Dooku, llegó primero para negociar con Katuunko en nombre de los Separatistas. El crucero de la República fue emboscado por varias naves de guerra Separatistas, pero el Maestro Yoda y los soldados de choque pudieron aterrizar en el planeta, aunque no en el sitio en el que iban a tener lugar las negociaciones.[16]
Ventress desafió al Maestro Yoda diciéndole que enviaría a sus mejores droides de combate contra él. Si el Maestro Jedi podía derrotar a su ejército, Toydaria se uniría a la República. Sin embargo, si el Jedi fracasaba, Toydaria se uniría a los Separatistas. Yoda aceptó el desafío. Los Jedi y los Guardias de Coruscant empezaron a dirigirse hacia el sitio de la negociación. Mientras atravesaban un bosque de coral, el Jedi y los soldados de choque se enfrentaron en un duro combate en el que Thire resultó herido. No obstante, con los ánimos del anciano Jedi, la pequeña fuerza pudo prevalecer. Dooku, viendo que su complot había fracasado, ordenó a Ventress asesinar al Rey Katuunko. Yoda y sus soldados llegaron a tiempo para evitar la muerte del rey, aunque Ventress pudo escapar.[16]
Bajo las órdenes de un gungan[]
- «Sugiero que nos quedemos aquí y esperemos a que la República envíe un equipo de rescate.»
- ―Stone
Un escuadrón de la Guardia de Coruscant liderado por el Comandante Stone escolta al Representante Binks.
El Comandante Stone y un escuadrón de soldados de choque acompañaron al Senador Kharrus a entregar una recompensa en especias a una banda de piratas establecida en Florrum que había capturado al Conde Dooku. Sin embargo, fueron emboscados por piratas renegados que querían la especia para sí mismos. Los piratas derribaron la lanzadera de la República e hicieron que se estrellara en los campos de la superficie de Florrum. Tanto los pilotos clon de la lanzadera como el Senador Kharrus murieron en la colisión, sobreviviendo únicamente el Comandante Stone, un sargento, tres soldados de choque y el Representante júnior Jar Jar Binks, que se convirtió en el individuo de mayor rango.[8]
Después de que Kharrus hubiera sido enterrado y recibiera un funeral improvisado, los piratas renegados emboscaron a los clones y robaron la especia. Aunque el Comandante Stone prefería esperar refuerzos, el Representante Binks los animó a seguir adelante. Como Binks técnicamente era la persona de mayor rango en la misión de la República, Stone reconoció que debían seguir sus órdenes, aunque los soldados de choque dudaban. El grupo contraatacó a los piratas y pudo recuperar la especia del rescate. Entonces, los piratas intentaron eliminar a los clones, pero las fuerzas de la República lograron derrotar a los piratas y apoderarse de su nave, llevándosela al puesto de avanzada pirata. Llegaron a la instalación y abandonaron Florrum junto a los Generales Jedi Anakin Skywalker y Obi-Wan Kenobi, que escaparon de un breve cautiverio a manos de los piratas.[8]
Un tiempo después, la Guardia de Coruscant pondría bajo su custodia a los prisioneros capturados por los miembros de la Orden Jedi y los escoltarían al Centro de Detención Judicial Central de la República. Unos Guardias de Coruscant estuvieron en el Centro de Detención de la República para poner bajo custodia a Boba Fett y a Bossk tras su captura a manos del General Plo Koon y la aprendiz de Skywalker, la Comandante Ahsoka Tano.[26] También estuvieron presentes en el Templo Jedi para tomar bajo su custodia a Aurra Sing, que había sido capturada tras su intento de asesinato contra la Senadora Amidala.[27]
Persiguiendo a la Duquesa[]
- «Está escapando en un deslizador. Se dirige a la Sección IG44.»
- ―Un soldado antidisturbios de la Guardia de Coruscant
La Guardia de Coruscant busca a la Duquesa Kryze.
Cuando la Duquesa de Mandalore, Satine Kryze, mantuvo una reunión secreta con el agente del Ministerio de Inteligencia de la República Davu Golec en los niveles bajos de Coruscant, un asesino de la Guardia de la Muerte mató a Golec. El disparo alertó a una sonda policía que llegó al lugar mientras se reunía una multitud. La sonda policía identificó que había tenido lugar un tiroteo, y al ver a Kryze con un bláster sobre el cadáver de Golec, la identificó como sospechosa. Droides policía llegaron al lugar segundos después e informaron a Kryze de que se encontraba bajo arresto. Impactada pero manteniendo su inocencia, Kryze escapó del lugar con la policía persiguiéndola. La sonda policía informó a soldados de choque de la Guardia de Coruscant cercanos, que se unieron a la policía en una persecución a pie. Corriendo hacia la multitud, Kryze emitió un disparo aturdidor con su bláster, deshabilitando a la sonda policía que la seguía y haciéndola caer al suelo. Los droides policía pasaron por encima de la sonda y cayeron al suelo, con los soldados antidisturbios cayendo sobre ellos. El momento de confusión permitió a Kryze mezclarse con los curiosos y meterse en un callejón.[12]
Los soldados, no obstante, avistaron a Kryze girando una esquina y en ese momento un individuo en un deslizador con una capa similar a la de Kryze abandonó el callejón en su deslizador. Creyendo que el individuo era Kryze, los soldados antidisturbios comunicaron a las unidades de la policía que ella estaba escapando hacia la Sección IG-44. Dos droides de la Policía de Coruscant en deslizadores BARC emprendieron una persecución, con más detrás, pero permitiendo a Kryze evitar su captura. Tanto la Policía de Coruscant como la Guardia de Coruscant continuaron buscando a Kryze, interrogando a los locales por si la habían visto, y el Vicepresidente Mas Amedda exigió públicamente a Kryze que se entregara a las agencia de aplicación de la ley de la República. Kryze solicitó la ayuda de su viejo amigo, el Maestro Kenobi, y aceptó reunirse con él en la Plaza de los Monumentos. Evitando a la Policía de Coruscant y a los soldados que la buscaban por el parque, Kryze entregó a Kenobi un holodisco y, tras escapar de una breve lucha con un asesino de la Guardia de la Muerte, los dos se dirigieron al Edificio del Senado. Allí, Kryze se entregó a los Guardias del Senado y Kenobi dio el holodisco a la Senadora Amidala, que entonces reprodujo una grabación completa de Jerec en el Senado. En ella, Jerec confirmaba la capacidad de Mandalore para lidiar con la Guardia de la Muerte y con esto, el Senado votó no ocupar el planeta, Kryze fue absuelta, y la investigación policial por asesinato contra ella fue cerrada.[12]
Crisis de rehenes del Senado[]
- «Misión cumplida, señor. El Canciller está a salvo.»
- ―Un soldado de la Guardia de Coruscant tras irrumpir en la Oficina del Canciller
La Guardia de Coruscant hace frente a unos cazarrecompensas.
Cuando los hutts contrataron al cazarrecompensas Cad Bane para que se apoderara del Edificio de Oficinas del Senado y obligara al Canciller Supremo Palpatine a emitir un indulto para el señor del crimen hutt Ziro Desilijic Tiure, que se encontraba apresado en el Centro de Detención, Bane formó a un equipo de cazarrecompensas y se infiltraron en el edificio ejecutivo. Eliminando a múltiples Comandos del Senado por el camino, el equipo tomó a un pequeño grupo de senadores como rehenes. Bane atrapó a Palpatine y al Senador Orn Free Taa en la oficina del Canciller deshabilitando la luz del edificio. Entonces, Bane exigió la liberación de Ziro o los senadores serían ejecutados. Para asegurar la liberación del hutt a cambio de la vida de los senadores, Bane ordenó a Taa que llevara un disco de indulto al Centro de Detención para liberar a Ziro.[17]
Taa obedeció de mala gana y fue llevado al Centro de Detención por los cómplices de Bane, donde los soldados de choque de guardia liberaron a Ziro. Como última baza contra Palpatine, los cazarrecompensas instalaron un sistema de láseres alrededor de los senadores que activaban explosivos al menor toque antes de abandonar el edificio. Soldados clon de la Guardia de Coruscant liderados por el Comandante Clon Fox llegaron e irrumpieron en la oficina de Palpatine y se dispusieron a arrestar al equipo de Bane en una plataforma de aterrizaje. Sin embargo, con los senadores todavía atrapados, Palpatine ordenó permitir a los cazarrecompensas escapar con Ziro.[17]
La Guardia de Coruscant estuvo posteriormente presente en el Templo Jedi junto a los Maestros Jedi Yoda y Mace Windu esperando la llegada de la Padawan Ahsoka Tano y el Capitán Wilhuff Tarkin, que regresaban de una misión en Lola Sayu. Entonces, escoltaron a Tarkin hasta el Edificio de Oficinas del Senado para que se reuniera con el Canciller Supremo Sheev Palpatine.[28]
Terrorismo y motín en prisión[]
- «Quitad el modo aturdidor. Matad a los prisioneros si es necesario.»
- ―Un soldado de la Guardia de Coruscant durante una revuelta de prisioneros
A medida que la guerra progresaba, la Confederación de Sistemas Independientes se comprometió a firmar un tratado de paz con la República propuesto por la Senadora Separatista Mina Bonteri. Sin embargo, bajo la dirección del Conde Dooku, varios droides de demolición se infiltraron en Coruscant y planearon atentar contra la red de distribución de energía central. Los droides llegaron a los muelles en los que varios soldados de choque se encontraban patrullando. Cuando mostraron su identificación al Comandante Fox, él les dio paso libre. Entonces, llegaron al generador y mataron a varios ingenieros, plantándose después en la pared como bombas. Luego, los droides explotaron, inutilizando todas las fuentes eléctricas de Coruscant, lo que provocó apagones e incendios, así como la muerte de civiles.[29]
La Guardia de Coruscant durante un motín carcelario.
Tiempo después, un motín fue instigado en el Centro de Detención por el cazarrecompensas Cad Bane para cubrir su escape y el de Moralo Eval. El motín comenzó cuando Bane hizo que un joven Boba Fett se enfrentara a Rako Hardeen exigiendo que Hardeen se disculpara con él por haber matado al Maestro Kenobi, privándole de una recompensa. Sin que nadie lo supiera, Hardeen era Kenobi vestido de incógnito. Hardeen y Fett lucharon entre sí antes de ser detenidos por dos soldados de choque. Sin embargo, los guardias fueron noqueados por el trandoshano Bossk, que atacó a Hardeen por enfrentarse a Fett. En ese momento llegaron más soldados de la Guardia de Coruscant para detener a Bossk. No obstante, mientras empezaban a hacer frente a Bossk, los otros prisioneros se unieron al motín. Un soldado de choque solicitó refuerzos desde un balcón mientras aturdía a los prisioneros.[24]
A medida que crecía el motín, los soldados de la Guardia de Coruscant desactivaron sus aturdidores y empezaron a matar a los prisioneros que les atacaban. Durante la confusión, Eval y Bane emprendieron una fuga. Se les unió Hardeen, que les convenció para que lo llevaran con ellos. Los soldados consiguieron restablecer el orden, aunque muchos prisioneros murieron y tuvieron que ser incinerados. Al llegar a la morgue del centro de detención, los tres pudieron entrar en ataúdes antes de que llegaran dos clones. Los clones los enviaron al centro de cremación y allí atacaron y mataron a los tres oficiales clon de guardia. Al llegar a un muelle de carga, los tres prisioneros pudieron atacar a los soldados allí apostados y escapar en un interceptor de la policía Pantera.[24]
Poco después, miembros de la Guardia de Coruscant escoltaron al Canciller Palpatine junto a miembros de la Guardia del Senado y los Generales Jedi Mace Windu y Skywalker a su mundo natal Naboo para el venidero Festival de la Luz. Durante la ceremonia, Cad Bane y Moralo Eval pusieron en marcha su plan bajo la dirección del Conde Dooku para secuestrar a Palpatine. Con su grupo de cazarrecompensas, en el que se encontraba Kenobi como Hardeen, se infiltraron en el dispositivo de seguridad usando matrices de camuflaje holográficas. Kenobi pudo perseguir a Eval y Bane en cuanto tomaron a Palpatine. Entonces, pudo capturarlos poco antes de la llegada de Windu, Skywalker, y un soldado clon de choque que arrestó a ambos secuestradores.[18]
Arrestando a Tano[]
- «No la culpo Comandante Tano, pero aun así, queda arrestada.»
- ―Fox, a Ahsoka Tano
Tiempo después, un hangar del Templo Jedi sufrió un atentado que mató a seis Jedi y a varios soldados clon y empleados del Templo. Tras la explosión, el hangar fue asegurado por soldados de la Guardia de Coruscant mientras el Caballero Jedi Anakin Skywalker y la Padawan Ahsoka Tano investigaban el incidente con la ayuda del droide de análisis de escenas del crimen Russo-ISC. Con la ira y la confusión extendiéndose, los familiares de los empleados asesinados se reunieron fuera del Templo para protestar contra los Jedi. La Guardia de Coruscant fue enviada al Templo con varios antidisturbios y una cañonera LAAT para ayudar a la Guardia del Templo Jedi a controlar a la multitud. La investigación descubrió que Letta Turmond, la mujer del empleado del Templo Jackar Bowmani, lo había alimentado con nanodroides volátiles que explotaron matando a Bowmani y causando el atentado del Templo. Turmond fue arrestada por Skywalker y Tano, y encerrada en una celda del Templo Jedi.[30]
El Comandante Fox arresta a Ahsoka Tano.
Sin embargo, debido a los soldados clon muertos en la explosión, las fuerzas armadas de la República reclamaron la jurisdicción de Turmond, que fue puesto bajo su custodia bajo la dirección del Almirante Wilhuff Tarkin. Turmond fue trasladada al complejo penitenciario de la base de las fuerzas armadas de la República, que estaba bajo el control de la Guardia de Coruscant. Sin embargo, Turmond se negó a hablar con nadie excepto con Tano, por lo que el Almirante Tarkin pidió a Tano que fuera a hablar con Turmond. Al llegar a la base, Tano encontró al Comandante Fox vigilando personalmente en el puesto de guardia. Tras hacerla dejar sus sables láser y su comunicador en el puesto de guardia, Fox y otros dos soldados escoltaron a Tano hasta la celda de Turmond.[6]
Dejando a Tano con Turmond, Fox regresó al puesto de guardia. Mientras tanto, Turmond reveló que un Jedi le había enseñado a fabricar la bomba, en un esfuerzo por hacer una declaración contra la participación de los Jedi en la guerra. Antes de que Turmond pudiera darle el nombre a Tano, fue estrangulada con la Fuerza, sin que nadie lo supiera, por la Jedi Barriss Offee. Sin embargo, la grabación de las cámaras de seguridad hizo parecer que era Tano quien estrangulaba a Turmond, y un soldado de choque avisó a Fox de la agonía de Turmond. Rápidamente, Fox y otros dos soldados entraron en la celda y encontraron a Tano, aparentemente angustiada, inclinada sobre el cadáver de Turmond. Fox, aunque no culpó a Tano por querer vengarse de una traidora, la puso bajo arresto.[6]
El escape de la Padawan[]
- «¡Alerta, alerta! ¡La prisionera Jedi ha escapado!»
- ―Fox
El Almirante Tarkin, al ser notificado de la situación, llegó para interrogar a Tano. Tarkin fue escoltado a su celda por dos Guardias de Coruscant. Mostrando a Tano la grabación, Tano destacó que el vídeo mostraba a Tano estrangulando telequinéticamente a Tano mientras que Tano mantuvo su inocencia. Tarkin ordenó que no se permitiera a nadie más visitar a Tano. Poco después llegó Anakin Skywalker y empezó a discutir con el Comandante Fox, exigiendo verla. Fox hizo que dos soldados de choque activaran sus electrovaras, amenazando con imponer las órdenes de Tarkin por la fuerza, tras lo cual Skywalker se marchó.[6]
La Guardia de Coruscant acorrala brevemente a Ahsoka Tano.
Después, Tano descubrió una llave tarjeta fuera de su celda. Creyendo que se la había dejado Skywalker, aunque en realidad había sido Offee, Tano utilizó la llave para salir de su celda. Al llegar al puesto de guardia, Tano encontró a tres soldados de choque heridos y junto a ellos sus sables láser y su comunicador. En ese momento, el Comandante Fox entró en el puesto de guardia y, al ver a Tano, dio la alerta. Tres Guardias de Coruscant la persiguieron hacia el norte por el pasillo y sellaron la zona antes de que un soldado de la Guardia de Coruscant avisara a Fox. Perseguida por Fox, Tano se encontró con tres soldados que habían sido abatidos por un sable láser. Tano siguió huyendo cuando llegó Fox. Asumiendo que Tano era la asesina, Fox emitió una orden de disparar a matar.[6]
No obstante, Anakin Skywalker llegó en ese momento junto al Capitán Clon Rex, que discutió con Fox afirmando que Tano nunca mataría a los soldados de esa manera. Skywalker, fracasando en convencer a Tano de que se rindiera, ordenó el cierre de la base y buscó. Tano pudo evitar a un escuadrón de la Guardia de Coruscant, incluido al soldado Hound y a su massiff Grizzer, que se encontraban patrullando la zona del memorial. Sin embargo, fue vista por el Comandante Fox y su escuadrón, y fue perseguida hasta las tuberías del exterior de la base. Los soldados de choque intentaron aturdirla, pero Tano pudo bloquear sus disparos. Tano se vio brevemente rodeada por la Guardia de Coruscant pero consiguió escapar al sistema de alcantarillas con Skywalker, Rex, Fox y varios escuadrones de la Guardia de Coruscant persiguiéndola. Skywalker pudo seguirla a través de una gran tubería que terminaba en el portal del inframundo. Tano, reafirmando su inocencia, saltó hacia el portal aterrizando sobre un transporte y evadió su captura mientras el Comandante Fox y el Capitán Rex llegaban.[6]
Cazando a una Jedi[]
- «Queda arrestada, Comandante.»
«Eso no va a ocurrir. Confiad en mí.» - ―Wolffe y Ahsoka Tano
Poco después, dos escuadrones de la Guardia de Coruscant fueron enviados a encontrar a Tano en los niveles bajos de Coruscant. Un escuadrón se encontraba bajo el mando de Anakin Skywalker y el Capitán Rex, mientras que el otro escuadrón estaba dirigido por el Maestro Jedi Plo Koon y el Comandante Wolffe. Utilizando dos cañoneras de la policía, los escuadrones siguieron la pista de la división de policía del inframundo de la Fuerza de Seguridad de Coruscant, que había avistado a Tano en el Nivel 1312. Al descender al inframundo, los escuadrones lograron localizar a Tano junto a la agente Separatista convertida en cazarrecompensas Asajj Ventress. Tano y Ventress activaron la terminal del escudo de una puerta, impidiendo su persecución, tras lo cual Skywalker ordenó a un grupo de droides sonda que encontraran a las dos fugitivas. Wolffe y su equipo de la Guardia de Coruscant desembarcaron de la nave policial para supervisar los hallazgos de los droides sonda.[31]
La Guardia de Coruscant retiene a Tano a punta de pistola.
Al poco tiempo, el escuadrón descubrió que Tano había sido avistada e inmediatamente llevó a sus soldados a detenerlas. Al verse acorralada y encañonada por los hombres de Wolffe, Tano intentó razonar con ellos, pero Wolffe se negó a dejarla escapar. Se produjo una pelea, en la que Ventress activó sus sables láser y cortó los blásters de las tropas de choque. Tano también se unió a la lucha, asegurándose de que ella y Ventress no dañaran a los soldados más allá de dejarlos inconscientes. Incapacitados y agotados, Wolffe y los soldados de la Guardia de Coruscant no pudieron impedir que Tano y Ventress escaparan. Tras informar al Maestro Koon de que Ventress había participado en la huida de Tano, Wolffe y su escuadrón de soldados de choque tuvieron que recuperarse antes de reanudar la persecución.[31]
Mientras tanto, Ventress abandonó a Tano, que llegó a un almacén de municiones abandonado en el Nivel 1315 y fue atacada por Barriss Offee disfrazada de Ventress. La pelea que siguió llamó la atención de dos agentes de la Policía de Coruscant, que avisaron al escuadrón de Skywalker de la Guardia de Coruscant. Los dos escuadrones llegaron y encontraron a Tano en la parte inferior del almacén. Aunque Tano suplicó a Wolffe que le dejara explicarse, éste la dejó inconsciente antes de que pudiera pronunciar otra palabra. La Guardia de Coruscant la puso bajo custodia y la llevaron de vuelta al Templo Jedi.[31] Con todas las pruebas en su contra, y a petición del Senado, Tano fue expulsada de la Orden Jedi y entregada a las fuerzas armadas de la República para ser sometida a juicio por su presunta participación en el atentado contra el Templo. Escoltada hasta la sala del tribunal por la Guardia de Coruscant, fue defendida por Padmé Amidala y acusada por Tarkin. Skywalker descubrió que su compañera Jedi Barriss Offee era la verdadera culpable, ya que había trabajado con Turmond y luego incriminado a Tano por sus crímenes. Offee fue detenida y Tano fue absuelta. Sin embargo, Tano decidió no regresar a la Orden Jedi cuando se le ofreció la readmisión.[32]
La conspiración clon[]
- «¡Hay un siniestro complot en marcha contra los Jedi! ¡Tengo pruebas de ello! ¡Puedo probar que todo lo que sé es cierto sin atisbo de duda!»
- ―Cincos
La Guardia de Coruscant buscando a Cincos.
Durante la Batalla de Ringo Vinda, el soldado clon Tup disparó y asesinó a la General Jedi Tiplar. Tup fue llevado a Kamino bajo la vigilancia de Cincos, pero murió de complicaciones derivadas de un tumor y la descomposición de su biochip de modificación conductual. Para encubrir un complot Sith, la Doctora kaminoana Nala Se inyectó a Cincos una droga para ralentizar sus reacciones.[19]
En Coruscant, Cincos fue acusado por el Canciller Palpatine de haberlo atacado y escapó de la Gran Instalación Médica de la República. Cincos tomó un taxi hasta 79's, un bar de clones donde encontró a su amigo Kix y le pidió que entregara un mensaje a los oficiales al mando de la Legión 501, Anakin Skywalker y el Capitán Rex, para que se reunieran con él y poderles informar de lo que había descubierto en un intento por limpiar su nombre. Sin que Cincos lo supiera, había sido avistado y seguido al punto de reunión y la Guardia de Coruscant fue enviada para capturarlo.[19]
Skywalker y Rex llegaron al lugar que Kix les había indicado y un Cincos oculto les ordenó que tiraran sus armas. Cuando hubieron soltado sus armas, Cincos los atrapó en un escudo de rayos. Tanto Skywalker como Rex querían ayudar a Cincos, pero ninguno de los dos parecía creer su historia, ya que su estado de embriaguez no ayudaba a su causa. El Comandante Fox y un escuadrón de soldados de choque tendieron una emboscada al clon rebelde, apuntándole con sus armas y exigiéndole que se rindiera. Desesperado, Cincos cogió una pistola bláster e intentó detenerlos, pero Fox le disparó en el pecho como represalia. Skywalker y Rex fueron liberados del escudo de rayos y Rex se dirigió directamente a Cincos. Él le explicó que sólo había intentado cumplir con su deber antes de reiterar las últimas palabras de Tup antes de morir él también.[19]
La última resistencia del Comandante Thorn[]
- «¿Qué ocurre, Comandante Thorn?»
«Nos ataca un destacamento Separatista. ¡Parece una invasión a gran escala!»
«¿Una invasión?»
«¡No podemos llegar hasta usted! ¡Le sugiero que vuelva a la nave lo antes posible!» - ―Padmé Amidala y Thorn
A medida que la guerra continuaba, los representantes de la República y de los Separatistas se reunieron en el planeta Scipio para presidir conjuntamente el nombramiento de Rush Clovis como líder del Clan Bancario InterGaláctico. La Senadora Padmé Amidala acudió a Scipio como representante de la República. La acompañó una guarnición de la Guardia de Coruscant liderada por el Comandante Thorn.[5]
El Comandante Thorn y sus hombres son atacados.
Poco después de que Clovis se convirtiera en el líder del Clan Bancario Intergaláctico, sufrió el chantaje del líder Separatista, el Conde Dooku, para que aumentara los tipos de interés a favor de la República y no de los Separatistas. Dooku también presionó a Clovis para que permitiera a los Separatistas hacerse con el control total del banco. Después de que Clovis accediera, el Comandante Thorn y sus soldados de choque detectaron cazas Separatistas acercándose a la plataforma de aterrizaje en la que estaban estacionados. Thorn ordenó a las tropas y cañoneras que le rodeaban que abandonaran la plataforma de aterrizaje y se reagruparan más allá de las puertas de la ciudad. A continuación, advirtió a la Senadora Amidala de la invasión Separatista que se avecinaba. Sin embargo, Thorn le informó de que no podrían llegar hasta ella a tiempo y que debía huir del planeta. Los cazas droides atacantes derribaron las cañoneras y el crucero de clase Consular de la República, dejando a los soldados de choque restantes sin refuerzos.[5]
Mientras Thorn y sus hombres corrían hacia la zona neutral, las cañoneras droides entraron en la lucha y les bloquearon el paso por delante y la pista de aterrizaje por detrás. Los droides empezaron a reducir a los soldados de choque y desplegaron droides comando y superdroides de combate para atacar. Thorn fue el último en permanecer en pie, y siguió luchando, utilizando su cañón bláster rotatorio como arma cuerpo a cuerpo y de largo alcance. Sin embargo, le superaban ampliamente en número y recibió varios disparos en el pecho hasta que finalmente fue abatido por un droide comando. Estas acciones llevaron al Senado Galáctico a enviar fuerzas del Gran Ejército de la República bajo el mando del General Anakin Skywalker para liberar el planeta. Tras la batalla, el Senado entregó al Canciller Supremo Sheev Palpatine el control directo de los bancos.[5]
Fin de las Guerras Clon y Orden 66[]
- «Quiero que vayan al bloque de detención. Ejecuten a Maul.»
«Sí, señor. Vamos, muchachos.» - ―Rex y un soldado de la Guardia de Coruscant
Ahsoka Tano evitó que la Guardia de Coruscant ejecutara a Maul.
Tras el Asedio de Mandalore y la captura del Lord Sith renegado Maul por parte de la 332ª División, un contingente de soldados de choque de la Guardia de Coruscant fue enviado en un transporte clase Nu para escoltarlo y proporcionar seguridad adicional. Cuando el transporte clase Nu llegó[14] al Tribunal,[33] en órbita, más soldados de choque ayudaron a transportarlo a una celda de detención, y lo mantuvieron vigilado. Cuando el Canciller Palpatine, en secreto el Lord Sith Darth Sidious, ejecutó la Orden 66 que tildaba a los Jedi de traidores a la República, los soldados de choque del Destructor Estelar ayudaron a los miembros de la división a atacar a Tano en el puente.[14]
Después de que Tano escapara del puente, un soldado clon de choque ayudó al Comandante Clon Rex a recuperarse. Entonces, Rex ordenó a tres soldados de choque del puente que ejecutaran a Maul, y entonces empezó a idear una estrategia para matar a Tano. Tano, sin embargo, liberó a Maul tras incapacitar a los dos soldados de choque que lo custodiaban para que pudiera distraer a las fuerzas de la República y alejarlas de ella. Entonces, Maul se desbocó por la nave mientras se dirigía al hangar principal, y se encontró con más soldados de choque de la Guardia de Coruscant, algunos de los cuales noqueó mientras que mató a otros. Todos los clones restantes a bordo del Tribunal murieron posteriormente cuando la nave se estrelló en la superficie de una remota luna.[14]
La Guardia de Coruscant persigue a un Jedi a la fuga hasta una plataforma de aterrizaje.
Con la Orden 66 iniciando la Gran Purga Jedi, la Guardia de Coruscant bajo el mando del Comandante Fox ayudó en la implementación de la iniciativa en Coruscant.[11] Cuando el Maestro Jedi Kelleran Beq escapó de la Operación: Caída del Caballero de la Legión 501 junto a Iniciado Jedi Grogu, la Guardia de Coruscant los persiguió a bordo de unos Transportes de Asalto de Baja Altitud/infantería. Después de que uno de los LAAT/i fuera destruido, puesto que Beq engañó al soldado de choque piloto haciéndolo colisionar contra un tren, otro llegó tras él a una plataforma de aterrizaje, donde Beq se reunió con un destacamento de Fuerzas de Seguridad Reales de Naboo para que le ayudaran a escapar a bordo de un yate Nubiano tipo H. Mientras Beq y Grogu escapaban a bordo del yate, los soldados clon, algunos en armadura blanca y otros con la armadura roja de soldado clon de choque de la Guardia de Coruscant, salieron de la cañonera e intercambiaron fuego con las Fuerzas de Seguridad. Varios cazas estelares Ala-V persiguieron al yate pero fracasaron en destruirlo antes de que escapara saltando al hiperespacio.[20]
Servicio al Imperio[]
Primeros días del Imperio[]
- «¡Redoblen la búsqueda!»
«¡Sí, señor! ¡De inmediato!» - ―Darth Sidious y Thire
Los soldados de choque de la Guardia de Coruscant aseguran el Edificio del Senado.
El Maestro Yoda enfrentó posteriormente a Sidious en un duelo en la cámara del Senado que llegó a un punto muerto. Varios soldados de la Guardia de Coruscant llegaron, siendo uno de ellos el Comandante Clon Thire, y buscaron sin éxito el cuerpo de Yoda. Sin embargo, el Maestro Jedi había escapado con la ayuda del Senador Bail Organa. Sidious, sospechando que su aprendiz Darth Vader estaba en peligro, partió de Coruscant hacia el planeta Mustafar con un destacamento de la Guardia del Senado. Los soldados de choque pronto encontraron el cuerpo mutilado y quemado de Vader, derrotado por Kenobi, y alertaron a Sidious. En cuanto vio a Vader, Sidious ordenó a los soldados de choque que lo subieran a un transporte médico. Regresando a Coruscant, Sidious y Vader fueron llevados a la Gran Instalación Médica de la República, bajo la atenta mirada de la Guardia de Coruscant. Allí, Vader fue sometido a una cirugía que lo encerró en un traje de soporte vital.[22]
Durante el funeral de la Senadora Amidala en la ciudad de Theed, Naboo, un destacamento de la Guardia de Coruscant se encargó de la seguridad para la ocasión. Cuando dos de los soldados encontraron al Senador Organa, que había estado hablando con Tano en una zona restringida, comprobaron su identificación y le informaron de que debía ser escoltado de vuelta a la ceremonia, lo cual Bail aceptó.[34]
Caza de Jocasta Nu[]
- «Deténgase, ciudadana. Identifíquese.»
- ―Fox, a Jocasta Nu
Tras regresar a Coruscant, Jocasta Nu utilizó un truco mental Jedi contra el Comandante Fox y sus guardias.
En los primeros días del Imperio Galáctico, la Guardia de Coruscant se encargó de patrullar los niveles de Coruscant, comprobando constantemente las identificaciones de los ciudadanos. Cuando la Maestra Jedi Jocasta Nu regresó a Coruscant tras la purga inicial, se topó con Fox y otros soldados de choque que patrullaban, y utilizó un truco mental Jedi para burlarlos y llegar al Templo Jedi.[23] Mientras Nu conseguía infiltrarse en el Templo, su caza estelar fue descubierto por miembros de la policía del inframundo de Coruscant, y Nu ordenó a su droide, Bedós, que se autodestruyera, lo que provocó una gran explosión que mató a los policías así como a Bedós. Tras la explosión, los miembros de la Guardia de Coruscant participaron en la protección del lugar y ayudaron al recién creado Buró de Seguridad Imperial y a la policía del inframundo en la investigación.[35]
En cuanto Nu fue detectada en el Templo, Vader ordenó a la Guardia de Coruscant y a la policía del inframundo que aseguraran todo el perímetro. Como resultado, la Guardia de Coruscant desplegó dos compañías mientras que la policía del inframundo desplegó un contingente completo.[11] Los soldados de choque dispararon contra Nu cuando intentó huir por un agujero que había abierto en la pared del Templo, lo que provocó que luchara contra ellos con un sable láser. Cuando Vader apareció en la brecha, los soldados de choque lo confundieron con un Jedi, puesto que el Comandante Fox no les había proporcionado una descripción del Lord Sith, y abrieron fuego contra él antes de que Fox llegara en una cañonera de la policía y les ordenara cesar el fuego. Fox intentó disculparse por su error, pero Vader, que no estaba de humor para disculpas, rompió el cuello del comandante con la Fuerza antes de ordenar a los soldados de choque restantes que capturaran a Nu con vida.[36]
La archivista intentó saltar hacia el vacío, pero Vader la sujetó con la Fuerza y Nu fue atada y cargada en la cañonera. Cuando Nu se burló de Vader por los conocimientos que ella poseía y que él ahora conocía, uno de los soldados de choque se ofreció a amordazarla para silenciar sus mentiras Jedi. Nu, aún oscuramente divertida, replicó que ellos mismos estaban recibiendo órdenes de un Jedi en la forma de Vader, que en realidad era Skywalker. A continuación, Vader mató a todos los soldados de choque que se encontraban en la cañonera lanzándolos al exterior del vehículo y haciéndolos caer en picado.[36]
Proyecto de Ley de Reclutamiento de Defensa Imperial[]
- «Guardias, arresten y detengan al Almirante.»
«¡Atrás! Estaba siguiendo órdenes. Estaba siguien--» - ―El Gran Visir Mas Ammeda, ordenando a la Guardia de Coruscant arrestar al Vicealmirante Rampart
La Guardia de Coruscant arrestó a Edmon Rampart por destruir Ciudad Tipoca para su beneficio personal.
Meses después[38] de la destrucción de las instalaciones de clonación de Kamino, el Senado Imperial inició la votación del Proyecto de Ley de Reclutamiento de Defensa Imperial, que formalizaría la transición de unas Fuerzas Armadas Imperiales compuestas enteramente de soldados clon, a una fuerza basada en el reclutamiento de soldados no clones. Varios escuadrones de soldados de choque asistieron a la sesión y proporcionaron seguridad para la ocasión. Cuando el Vicealmirante Edmon Rampart fue expuesto ante el Seando por haber ordenado personalmente la destrucción de Kamino mediante su flota de Destructores Estelares clase Venator, un escuadrón de soldados de choque arrestaron forzosamente a Rampart por orden del Gran Visir Mas Amedda, que apareció junto al Emperador Palpatine para dirigirse al Senado.[37]
Servicio continuado[]
- «Ya se lo hemos explicado. El Imperio requiere de este lugar para una instalación de transmisión. Su ubicación es ideal. Todos serán compensados por las molestias..»
«¿Molestias? Estos son los únicos hogares que hemos conocido. ¿A dónde se supone que debemos ir?»
«A otro lugar.» - ―Un ciudadano protesta a la Guardia de Coruscant mientras imponen las órdenes Imperiales.
La Guardia de Coruscant obligando a civiles a abandonar sus casas para la construcción de una estación de retransmisión Imperial.
Durante el periodo inicial de dominio Imperial, un contingente de[39] soldados de choque arrasó varias casas, incluida la de Orvek, en una zona boscosa para construir una estación de transmisión. Aunque los lugareños iban a ser compensados, Orvek y otros protestaron porque ese había sido su único hogar y no sabían a dónde ir. Sin inmutarse, un soldado de choque respondió de mala gana a Orvek que se fuera a otro sitio. Tras el encuentro, Orvek se unió a un grupo de discípulos liderado por el Padawan Jedi Ferren Barr, que fingía ser un Maestro Jedi.[39]
En el 14 ABY,[40] dos soldados de choque participaron en la persecución de dos Inquisidores Imperiales renegados en cuanto Lord Vader solicitó un deslizador para darles caza. Después de que los Inquisidores destruyeran el motor de su deslizador, Vader saltó de deslizador en deslizador mientras que el deslizador y los dos soldados se estrellaron y explotaron en un parque, matando a una importante Senadora gran y a su acompañante.[21]
Entre bastidores[]
La Guardia de Coruscant apareció por primera vez en Star Wars: Episodio III La Venganza de los Sith.[22]
