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«¿Configurar el contrato mercenario de la oficina del Emperador tampoco funcionó? ¿No hay desconfianza? ¿No hay acusaciones dramáticas?»
Barokki hablando con su cómplice[3]

La oficina del Emperador, anteriormente conocida como la oficina del Canciller o la Suite del Canciller, fue un conjunto de oficinas y habitaciones privadas que pertenecieron al Emperador Sheev Palpatine durante el reinado del Imperio Galáctico. Localizada cerca del pináculo del Edificio Ejecutivo Imperial, un complejo gubernamental en el planeta Coruscant, también sirvió como oficina de Palpatine durante su mandato como Canciller Supremo de la República Galáctica. Además de un despacho privado de trabajo, la suite contenía un despacho ceremonial donde el Canciller Sheev Palpatine celebraba reuniones oficiales con miembros del Senado Galáctico y del Alto Consejo Jedi.

Palpatine continuó usando la oficina tras convertirse en Emperador tras el final de las Guerras Clon. Sin embargo, finalmente transfirió su sede de ppoder al recién renovado Palacio Imperial, que antaño había servido como el hogar de la Orden Jedi antes de la Orden 66.

Descripción[]

«El Canciller ha sido trasladado a sus dependencias del Senado, y el perímetro ha sido asegurado.»
―Mace Windu[4]
Kharrus-TCWf

La Suite del Canciller tenía un despacho ceremonial destinado a las reuniones oficiales.

La oficina del Emperador[3] fue una colección de oficinas públicas y privadas[5] donde el Lord Sith Darth Sidious—conocido por la galaxia como Sheev Palpatine—gobernaba en los primeros días del Imperio Galáctico.[2] Antes del ascenso del Nuevo Orden, la oficina sirvió como el espacio de trabajo de Palpatine durante su tiempo como Canciller Supremo de la República Galáctica. Se encontraba[5] en el bien custodiado Edificio de Oficinas del Senado,[6] un complejo gubernamental[5] en uno de los niveles más altos del mundo capital de Coruscant, y constaba de diversas habitaciones,[6] como un despacho ceremonial que contenía la Silla de la Oficina y el escritorio oficial del Canciller.[5]

Como líder de la República, el Canciller a menudo mantuvo reuniones con los miembros del Senado Galáctico y del Alto Consejo Jedi en el despacho ceremonial formal.[1] Era la prerrogativa del Canciller decorar la oficina como considerara adecuado; por eso, la preferencia de Palpatine por el color rojo, inspirada en los Sith, era evidente en la decoración de su oficina, que también contenía estatuas de bronzio de los Cuatro Sabios de Dwartii (una de las cuales contenía un sable de luz oculto tanto en la oficina principal como en la antesala con la que conectaba), junto con reliquias como un par de bajorrelieves que representaban la lucha entre los Jedi y los Sith en un antiguo campo de batalla, encontrados en una excavación arqueológica en[5] Yavin 4,[7] y un Cáliz Sith; una forma de quemador de incienso utilizado en antiguos rituales de meditación, recuperado durante una expedición en Malachor.[5] La seguridad del complejo de la oficina estaba proporcionada por Guardias Rojos centinelas, que estuvieron estacionados en la entrada del despacho ceremonial durante los últimos días de la Crisis Separatista.[1] Como Emperador, Palpatine continuó utilizando el despacho ceremonial como sala de audiencias, aunque el escritorio del Canciller había sido retirado en ese momento.[2]

ChancellorsPrivateOffice-ROTS

La Suite del Canciller también tenía un despacho privado.

El despacho privado del Canciller se encontraba adyacente al despacho ceremonial; desde donde Palpatine podía acceder a los bancos de datos Sith escondidos en otro lugar, monitorizar transmisiones privadas de la HoloNet, y mantener contacto con sus seguidores secretos. Ambos despachos estaban conectados por una antesala polivalente anexa que se utilizaba para reuniones, esperas y servir refrescos. Tras la zona se encontraban los Archivos del Canciller, que contenían un holodisco con archivos y correspondencia de los anteriores Cancilleres. Aunque Palpatine poseía unos apartamentos privados en la exclusiva torre residencial República 500, la oficina del Canciller incluía una pequeña suite de alojamiento para su uso personal. Una de las habitaciones de la suite servía de oficina de trabajo para los ayudantes del Canciller, incluido un Guardia Rojo cuyo deber era monitorizar incesantemente los sistemas de seguridad.[5]

Historia[]

Cancillería de Palpatine[]

El encargo del Canciller[]

«Envíamelo. Tal vez yo pueda ayudar.»
―Sheev Palpatine, solicitando ver a Anakin Skywalker en la oficina del Canciller[8]
Chancellor visit Obi-Wan and Anakin Part II

La oficina del Canciller estuvo ocupada por el Canciller Supremo Sheev Palpatine durante los últimos años de la República Galáctica.

La oficina del Canciller se convirtió en el espacio de trabajo de Sheev Palpatine[8]—un antiguo senador que representaba a su planeta natal Naboo en el Senado Galáctico—en el 32 ABY, tras su elección para el cargo de Canciller Supremo durante la Invasión de Naboo.[9] Durante los primeros días de su cancillería, Palpatine se implicó en la carrera de Anakin Skywalker,[8] el profetizado Elegido que había empezado su entrenamiento como Padawan de la Orden Jedi poco después de la Batalla de Naboo.[9] A petición de Palpatine, el Maestro Jedi Mace Windu envió a Skywalker a reunirse con el Canciller en su oficina bajo la supervisión de su mentor, el recién ascendido Caballero Jedi Obi-Wan Kenobi.[8]

Palpatine llevó al joven Jedi con él al Club Kasakar, afirmando que se trataba de un simple recado para disipar las preocupaciones de Kenobi. Tras volver de su excursión, donde Skywalker presenció un ejemplo de corrupción Senatorial, regresaron a la oficina del Canciller donde Palpatine calibró la dedicación de Skywalker a la Orden Jedi. Aunque Skywalker se mantuvo firme en su decisión de convertirse en Caballero Jedi, Palpatine le informó de que siempre habría un lugar para él al lado del Canciller.[10]

Crisis Separatista[]

«No sé cuánto tiempo más podré posponer la votación, amigos míos. Cada vez más sistemas estelares se están uniendo a los Separatistas.»
―Sheev Palpatine, al Alto Consejo Jedi[1]
Chancellors Office

El Canciller Palpatine discutió asuntos de estado con el Alto Consejo Jedi en su oficina durante la Crisis Separatista.

Para el 22 ABY, la galaxia se encontraba al borde de una guerra civil a medida que miles de sistemas estelares descontentos se unían a la recién formada Confederación de Sistemas Independientes, separándose efectivamente de la República. La Confederación fue ganando apoyo para su causa a pesar de las propuestas de paz y reconciliación del Canciller Palpatine, que prometió evitar que la Crisis Separatista desgarrara a la milenaria República. Durante la agitación política, la oficina del Canciller fue el lugar en el que Palpatine celebró reuniones oficiales con el Comité Leal y el Alto Consejo Jedi, los cuales servían como consejeros para acelerar las negociaciones del Canciller con los Separatistas. Windu manifestó su preocupación por la seguridad de la República, destacando que los Jedi no eran un ejército y, por lo tanto, no podían garantizar la seguridad del estado en caso de una guerra abierta. Su compañero, el Gran Maestro Yoda, también informó al Canciller de que la Fuerza no ofrecía soluciones a su dilema, dado que el poder creciente del lado oscuro hacía imposible predecir el futuro.[1]

Sith to be

Palpatine elogió a Anakin Skywalker, llamándolo el aprendiz más talentoso de la Orden Jedi.

Cuando los Lealistas llegaron a la oficina del Canciller, Palpatine solicitó al Alto Consejo Jedi que asignara a Kenobi y Skywalker la seguridad de la Senadora Padmé Amidala, cuya vida había sido amenazada por un intento de asesinato en Coruscant. Tras un segundo intento, el Alto Consejo envió a Skywalker a hablar con Palpatine con la esperanza de que diera una orden ejecutiva a Amidala, requiriéndole que abandonara la capital por motivos de seguridad. Palpatine aceptó la petición del Alto Consejo y entonces procedió a elogiar a su mensajero, proclamando a Skywalker el Jedi más talentoso y con potencial para superar incluso al Gran Maestro de la Orden Jedi.[1]

Chancellors Office 2

La oficina del Canciller recibió un informe de Kenobi acerca de los planes de guerra Separatistas.

Mientras el Senado continuaba debatiendo el Acta de Creación Militar, el Alto Consejo envió a Kenobi a dar caza y capturar al mercenario implicado en el complot contra Amidala. La investigación de Kenobi lo condujo a seguir al cazarrecompensas Jango Fett de Kamino a Geonosis, donde descubrió las fábricas responsables de la creación secreta de un Ejército Droide Separatista. Sabiendo que los Separatistas pretendían librar una guerra contra la República, Kenobi grabó sus hallazgos en un mensaje que fue recibido por Palpatine, sus colegas, y el Alto Consejo, en la oficina del Canciller.[1]

Habiendo fracasado en evitar un conflicto mediante la diplomacia, el Comité Leal centró su atención en el ejército de soldados clon de los kaminoanos en busca de salvación. Sin embargo, el Senador Bail Organa de Alderaan destacó que el Senado estaba demasiado dividido como para aceptar el uso de un ejército clon antes de que los Separatistas atacaran la República. Después de que el Vicepresidente Mas Amedda sugiriera que el Canciller podía autorizar unilateralmente la creación de unas Fuerzas Armadas de la República, el Representante júnior Jar Jar Binks propuso con éxito una moción en el Senado que concedió poderes de emergencia para tiempos de guerra a Palpatine. En consecuencia, el Gran Ejército de la República fue establecido para defender al estado y suprimir la rebelión Separatista.[1]

Guerras Clon[]

Secuestro de Rotta[]

«Debemos ayudar a Jabba. Es la oportunidad que estábamos esperando. Los Jedi deben rescatar al hijo de Jabba.»
«Hmm. No me gusta tratar con esta escoria criminal. Este es un día aciago para la República.»
«Estoy de acuerdo, amigo mío, ¿pero que otra opción tenemos? Los hutts controlan el Borde Exterior, y vamos a necesitar sus rutas espaciales para movera nuestras tropas.»
―Sheev Palpatine y Mace Windu[11]
Jabba confers

Durante las Guerras Clon, el Canciller Palpatine recibió una petición de ayuda del señor del crimen hutt Jabba Desilijic Tiure.

Durante la Batalla de Christophsis, Palpatine, junto a Mace Windu, Plo Koon y Luminara Unduli, escuchó un mensaje holográfico de Jabba Desilijic Tiure solicitando ayuda para encontrar a su hijo recientemente secuestrado, Rotta, en el holoproyector de la oficina. Juntos, el grupo cruzó la sala mientras discutía cómo la República necesitaba usar las rutas espaciales de los hutts en el Borde Exterior para mover sus tropas. Windu afirmó que había más de lo aparente a simple vista en el secuestro, y el Canciller sugirió enviar a todos los Jedi posibles a investigar. Cuando llegaban a la entrada, Windu afirmó que los únicos Jedi disponibles eran Skywalker y Kenobi.[11]

Poco tiempo después, Palpatine fue contactado por Jabba, que exigió saber por qué los Jedi aún no habían localizado a su hijo. Los Senadores Kharrus y Onaconda Farr estuvieron destrás de Palpatine mientras el Canciller aseguraba al hutt que los Jedi estaban de camino.[11]

Kenobi contacts Palpatine and Yoda

El General Jedi Obi-Wan Kenobi informó de un complot del Conde Dooku a la oficina del Canciller.

Tras la Batalla de Teth, Kenobi contactó con la oficina del Canciller. En su escritorio, Palpatine y Yoda escucharon mientras Kenobi les informaba de que Anakin había llegado a Tatooine con Rotta pero aún se encontraba en peligro. Kenobi continuó diciendo que todo había sido un plan de Dooku ideado para hacer que el Clan Hutt se uniera a los Separatistas. Amidala entró en la oficina después de que Kenobi terminara su mensaje. Tras intercambiar cumplidos con Yoda, Amidala se dirigió a Palpatine, que procedió a informarle de la situación actual de Skywalker. Disgustada por las noticias, Amidala afirmó que convencería a Jabba para que firmara un tratado con la República y se marchó. Palpatine intentó que la senadora reconsiderara sus planes y le informó de que Jabba no aceptaba las comunicaciones de la República. Amidala respondió que acudiría a Ziro Desilijic Tiure, el tío de Jabba, para reabrir las negociaciones, y abandonó la oficina mientras Palpatine le advertía que los hutts eran viles gángsters.[11]

Arma misteriosa[]

«Este arma misteriosa ha atacado en una docena de sistemas y ha desaparecido sin dejar rastro.»
«No podemos permitirnos perder más naves, amigos míos.»
―Mace Windu y Sheev Palpatine[12]
Malevolence meeting

Los Jedi informaron al Canciller Palpatine de la nueva arma secreta de los Separatistas.

Tiempo después, Palpatine se acercó al holoproyector de la oficina mientras los hologramas de Yoda, Windy y Kenobi hablaban de la nueva arma secreta Separatista. Palpatine preguntó si había noticias del Maestro Jedi Plo Koon y su flota tras haber sido atacados por el arma en el sistema Abregado, a lo que Windu respondió negativamente. Entonces, Kenobi añadió que Skywalker había localizado los restos de la flota y estaba buscando supervivientes. Cuando el Canciller preguntó quién había autorizado a Skywalker para hacer eso, Kenobi contestó que Skywalker había actuado por su cuenta y se había llevado a su Padawan Ahsoka Tano consigo.[12]

Robo del holocrón[]

«¿Y tienes alguna pista de quién podría ser?»
«Aún no, Canciller.»
«Ten paciencia, muchacho.»
―Sheev Palpatine y Anakin Skywalker[13]
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Anakin Skywalker y Ahsoka Tano informaron directamente a la oficina del Canciller, pero solo Skywalker fue invitado por Palpatine.

Posteriormente, Skywalker y Tano llegaron a la oficina del Canciller para informar a Palpatine de las novedades de su misión para recuperar el holocrón Jedi robado por el cazarrecompensas Cad Bane.[14] Palpatine recibió a Skywalker y Tano en la entrada de su oficina e hizo pasar a Skywalker al interior mientras dejaba a Tano fuera. Palpatine discutió el descarado complot con Skywalker mientras lo conducía a la ventana de la oficina. Cuando llegaron a la ventana, Skywalker afirmaba que creía que alguien distinto a Dooku se encontraba detrás del complot. Tras preguntar quién podría ser y que Skywalker respondiera que no lo sabía, Palpatine puso su mano en el hombro de Skywalker y le aconsejó ser paciente mientras miraban por la ventana de la oficina.[13]

La amenaza de la Guardia de la Muerte[]

«Estos dos son… Ugh… Este gobierno… ¡Ugh!»
―Satine Kryze, refiriéndose a Sheev Palpatine y Mas Amedda[15]
Satine Palpatine meeting

La Duquesa Satine Kryze tuvo una audiencia con el Canciller Palpatine en su oficina.

Tras sobrevivir a un intento de asesinato, la Duquesa de Mandalore Satine Kryze se reunió con Palpatine y Mas Amedda en la oficina del Canciller. Dos Comandos del Senado hicieron guardia en la entrada de la oficina mientras Kryze se sentaba frente al Canciller y preguntaba por qué no se iba a investigar el incidente. Palpatine le informó de que no había pruebas de que su deslizador hubiera sido manipulado y probablemente todo había sido un simple accidente. Kryze se mostró inflexible en su opinión, a lo que Amedda dio la vuelta y afirmó que eso demostraba que la República debía intervenir en Mandalore y mantener a raya a la Guardia de la Muerte. Después de que Kryze manifestara su desacuerdo con tal acción, Palpatine le informó de que la moción dependía del Senado y le aseguró que tomarían una decisión meditada.[15]

Amidala, Kenobi y Skywalker se reunieron con Palpatine y Amedda en la oficina del Canciller después de que nuevas pruebas revelaran que Mandalore no necesitaba la ayuda de la República. El Canciller expresó su alivio porque la ocupación de Mandalore ya no era necesaria, a lo que Amidala respondió que Kryze merecía el crédito. Kryze entró en la oficina afirmando que no necesitaba ningún crédito mientras dos de sus guardias reales esperaban en la entrada de la oficina. Cuando la Duquesa se acercó al grupo, Amidala le informó de que se había ordenado a las fuerzas de la República que se retiraran. Palpatine ofreció a Kryze una sincera disculpa en nombre de la República y le expresó su gratitud por ser una leal servidora. A continuación, Amidala condujo al Canciller y a Amedda fuera del despacho para discutir la ratificación de la decisión del Senado, mientras Skywalker les seguía.[15]

Kryze y Kenobi se quedaron solos en la oficina. Kryze expresó su agradecimiento a Kenobi por su ayuda pero el Jedi respondió que todo se debía a la devoción de Kryze a su pueblo. Sin embargo, Kryze añadió que aún había demasiados interrogantes y que no tenían ni idea de quién estaba realmente detrás de todo aquello. Kenobi coincidió con ella y afirmó que la línea entre amigos y enemigos era cada vez más difusa, mientras ambos se giraban y miraban por la ventana de la oficina.[15]

Propuesta de paz[]

«Si me lo permite, en confianza, sé que esto es sincero. He estado en contacto con mi vieja amiga Mina Bonteri, y el origen de la propuesta procede de ella.»
«¿Bonteri? ¿Cómo ha contactado con ella?»
«¿Acaso importa, Canciller, si el resultado conlleva el fin de la guerra?»
―Padmé Amidala y Sheev Palpatine[16]
Palpatine and Padme HoBS

La Senadora Padmé Amidala informó al Canciller Palpatine del acuerdo de paz.

Tras regresar de su misión secreta en Raxus Secundus, Padmé Amidala y Ahsoka Tano llegaron a la oficina del Canciller para informar a Palpatine de una iniciativa de paz ofrecida por el Senado Separatista. Palpatine había estado disfrutando de una bebida con Mas Amedda con al menos un Guardia del Senado vigilando en la oficina. Dejando su bebida en una bandeja, el Canciller acompañó a la Senadora a través de la oficina, recordándole que todos los intentos anteriores de paz con los Separatistas habían fracasado. Poniéndose a un lado de Palpatine, Amidala explicó que la propuesta era sincera y procedía de su antigua compañera y Senadora Separatista Mina Bonteri. Tras aceptar exponer la propuesta ante el Senado Galáctico, Palpatine se dio la vuelta y regresó hacia donde se encontraba Amedda.[16]

Principios de la democracia[]

«¿No es extraordinario que uno pueda tener todo el poder de la galaxia y, sin embargo, las palabras de un solo senador puedan influir en los pensamientos de millones de personas?»
«¿Qué piensa hacer al respecto?»
«Por ahora, debemos atenernos a los principios de nuestra democracia. Debemos dejar que las ruedas del Senado giren.»
―Sheev Palpatine y Mas Amedda[17]
Palpatine Pursuite of Peace

Palpatine y Mas Amedda discutieron su estrategia política en privado en la oficina del Canciller.

Después de que la Senadora Amidala pronunciara un discurso contra un proyecto de ley para incrementar el número de soldados clon, Palpatine se sentó en la oscuridad de su oficina mirando por la ventana. Girando su silla a espaldas de la ventana, el Canciller lamentó cómo las palabras de un único senador podían influir en el pensamiento de millones de personas a pesar de él tener todo el poder de la galaxia. Mientras hablaba, se levantó de la silla y se acercó a su escritorio mientras Amedda se aproximaba. Amedda preguntó qué pensaba hacer para lidiar con la situación, y Palpatine le informó de que debían atenerse a los principios de su democracia mientras volvía a girarse hacia la ventana. Mirando por la ventana antes de volver a girarse hacia Amedda, Palpatine afirmó que las ruedas del Senado debían seguir girando y nuevamente miró por la ventana.[17]

Asesinatos en el Senado[]

«Los políticos siempre tienen algo que ocultar, y siempre se vuelve en su contra. ¿Estoy en lo cierto? Oh, mira a quién se lo pregunto: a una sala llena de políticos.»
―Tanivos Exantor Divo[18]
Senate Murder suspects

Los senadores se reunieron en la oficina del Canciller tras el asesinato de Onaconda Farr.

Tras la muerte del Senador Onaconda Farr, la Senadora Amidala, junto a la ayudante de Farr, Lolo Purs, fue informada por un guardia del Senado de que el Canciller Palpatine solicitaba su presencia en sus dependencias. Dos guardias las escoltaron a la oficina donde encontraron a los Senadores Bail Organa, Mon Mothma y Orn Free Taa esperando con Palpatine y Mas Amedda junto a varios droides policía. Palpatine informó a Padmé de que el Teniente Tanivos Exantor Divo deseaba interrogarlos sobre la muerte de Farr, y Divo reveló que se trataba de un asesinato.[18]

Palpatine se movió al otro extremo de la oficina mientras Amedda y Taa avanzaban hacia el escritorio del Canciller. Amidala y Purs se sentaron en un sofá de la oficina con Mon Mothma mientras el Senador Organa seguía en pie y Divo empezaba a interrogarlos sobre quién querría asesinar a Farr. Cuando Divo reveló que lo más probable era que Farr hubiera sido envenenado, subió al nivel superior de la oficina y caminó mientras Amidala empezaba a plantear las posibles razones por las que Farr había sido asesinado. Divo bajó los escalones laterales de la oficina y se dirigió hacia la entrada de la sala informando a la senadora de que resolvería la muerte de Farr mientras ellos seguían centrados en gobernar. Mientras el Teniente y sus droides se marchaban, Palpatine cruzó la oficina comentando lo inconcebible que resultaba todo aquel calvario.[18]

Amidala winds up for the KO

La Senadora Amidala desarma a la asesina de Farr, Lolo Purs, que intentaba escapar de la oficina del Canciller.

Divo reunió a todo el mundo en la oficina del Canciller cuando interrogó a la Senadora kaminoana Halle Burtoni después de que Lolo afirmara que Burtoni había intentado matarla. Mientras se movía por el centro de la oficina, Divo expuso sus argumentos a favor de que Burtoni fuera la culpable no solo del asesinato de Farr, sino también del asesinato del Senador Mee Deechi. Tras revelar que la bebida de Farr había sido contaminada con un veneno desarrollado por científicos kaminoanos, Divo hizo que sus guardias escoltaran a Burtoni al exterior de la oficina. Sin embargo, como el veneno era específico para rodianos, Amidala afirmó que Purs también tendría que haber muerto al beber la misma bebida que Farr, lo que hizo que se diera cuenta de que Lolo en realidad no había bebido.[18]

Descubierta, Purs sacó una pistola y tomó a Amidala como rehén. Mientras retrocedía hacia la entrada, Purs confesó que había asesinado a Farr por haber llevado la guerra a su planeta. En la puerta de la oficina, Purs empujó a Amidala lejos de ella. Divo activó discretamente a sus guardias del exterior de la oficina mientras Purs confesaba. Con Lolo distraída por la apertura de la puerta, Amidala quitó a Purs su bláster y la golpeó en la cara. Mon Mothma y Organa consolaron a Amidala en la entrada mientras Palpatine, Amedda y Taa avanzaban desde el fondo de la sala y Divo y sus guardias arrestaban a Purs.[18]

Percibiendo a Maul[]

«¿Me llamaba, Canciller?»
«Prepara mi nave.»
―Mas Amedda y Sheev Palpatine[19]
Prepare my ship

Amedda se presentó ante el Canciller Palpatine, que ordenó al Vicepresidente que preparara su nave para partir.

El Canciller Palpatine estuvo en pie ante la ventana de su oficina, meditando con los ojos cerrados. Estaba solo con la excepción de dos Guardias Rojos a cada lado de la entrada de la oficina. Mientras meditaba, Palpatine sintió una perturbación en la Fuerza que hizo que adoptara una expresión sombría. Mientras abría los ojos, Mas Amedda entró en la oficina y se detuvo en la entrada, respondiendo a la convocatoria del Canciller. Mirando ligeramente por encima del hombro, Palpatine ordenó al Vicepresidente que preparara su nave. Mientras Amedda partía para cumplir las órdenes, el Canciller se giró de nuevo hacia la ventana y estrechó sus ojos con una expresión oscura en el rostro.[19]

Una tragedia[]

«Por fin podemos dejar atrás toda esta terrible situación. Debemos volver a centrar nuestra atención en la guerra. Cada día estamos más cerca de la victoria.»
―Sheev Palpatine[4]
Informing Palpatine of Tups death

Shaak Ti informó a Palpatine de la muerte del soldado clon Tup.

Tiempo después, la Maestra Jedi Shaak Ti y la Doctora Nala Se contactaron con Palpatine vía holograma en su oficina para informarle de la muerte del soldado clon Tup. Sus hologramas fueron proyectados desde el holoproyector del escritorio del Canciller. Mientras hablaba Shaak Ti, Palpatine se movió por detrás de su silla y puso una mano sobre ella, girándola hacia un lado mientras se dirigía a mirar por la ventana de la oficina. Después de que Shaak Ti sugiriera que los Jedi examinaran el tumor de Tup en el Templo Jedi, Palpatine se giró y se sentó en su silla e hizo frente a los hologramas de Shaak Ti y Se, sugiriendo que el examen podría realizarse en la Gran Instalación Médica de la República de Coruscant. Aunque declaró que la petición procedía directamente del Consejo Jedi, Shaak Ti se vio obligada a acceder a la propuesta de Se y el Canciller. Una vez finalizada la transmisión, Palpatine se inclinó hacia delante mientras juntaba los dedos.[20]

El soldado CAR Cincos intentó asesinar a Palpatine en la Gran Instalación Médica de la República, donde descubrió que el Canciller estaba implicado en una conspiración para usar al ejército clon para destruir a la Orden Jedi. Mace Windu informó a los demás Jedi de que el Canciller había sido trasladado a sus aposentos en el Senado mientras las Fuerzas Armadas de la República daban caza al soldado clon fugitivo en Coruscant. Palpatine se encontraba en su oficina, bajo la protección de los soldados clon de choque de la Guardia de Coruscant, donde fue informado por el Comandante Clon Fox de que un droide sonda había localizado a Cincos en el Sector I-9.[4]

Palpatine se reunió con el Alto Consejo Jedi, así como con Anakin Skywalker, en su oficina después de que Cincos fuera asesinado por Fox en el Nivel 1325. Palpatine informó a los Jedi de que un virus había corrompido los biochips de modificación conductual de Tup y Cincos, haciendo que ambos clones actuaran erráticamente. Como resultado, planeaba tratar a todos los soldados clon como prevención ante ataques víricos. El Canciller también urgió a los Jedi a redirigir su atención hacia el esfuerzo de guerra, asegurándoles que se encontraban al borde de la victoria.[4]

Fin de la República[]

«Maestro Windu. Supongo que el General Grievous ha sido destruido. Debo admitir que viene más pronto de lo que esperaba.»
«En nombre del Senado Galáctico de la República, queda detenido, Canciller.»
―Sheev Palpatine y Mace Windu[21]

Después de la Batalla de Coruscant, el Canciller Palpatine convocó a Anakin Skywalker en su oficina donde informó al joven Caballero Jedi de su decisión de incluirlo en el Alto Consejo Jedi. A pesar de la creencia de Skywalker de que el Alto Consejo rechazaría la decisión del Canciller, Palpatine estaba seguro de que permitirían el nombramiento de Skywalker como su representante personal.[21]

Coruscant Duel

El destino de la galaxia dependía del resultado de un duelo en la oficina del Canciller entre Mace Windu y Darth Sidious.

Durante la Batalla de Utapau, Skywalker regresó a la oficina del Canciller para informar a Palpatine del fin inminente de las Guerras Clon, con su antiguo mentor Obi-Wan Kenobi habiéndose enfrentado al General Grievous en Utapau. Sin embargo, Palpatine eligió este momento para tentar abiertamente a Skywalker con el lado oscuro de la Fuerza, revelando su identidad secreta como el Lord Sith Darth Sidious. Skywalker lo delató ante el Consejo Jedi; como resultado, los Maestros JedivMace Windu, Kit Fisto, Saesee Tiin, y Agen Kolar confrontaron a Palpatine con la intención de arrestar al Canciller en su oficina. El subsiguiente duelo en la oficina de Palpatine terminó con la muerte de Kolar, Tiin y Fisto antes de que Windu tuviera éxito en desarmar a Sidious. Para entonces, Skywalker había regresado a la oficina del Canciller donde finalmente decidió evitar que Windu matara al Lord Sith, creyendo que Sidious poseía el conocimiento necesario para evitar la muerte de Padmé Amidala durante el parto de sus hijos.[21]

Tras la muerte de Windu, Sidious proclamó a Skywalker como su nuevo aprendiz Sith y le concedió el nombre de Darth Vader. La Gran Purga Jedi comenzó con Sidious ordenando al ejército clon ejecutar la Orden 66, lo que hizo que los clones ejecutaran a sus oficiales Jedi por traición contra la República Galáctica.[21]

Era Imperial[]

Maestro y aprendiz[]

«Vosotros dos—marchaos.»
«Pero Emperador… su seguridad…»
«Estoy completamente a salvo, Tarkin. Márchate.»
―Darth Sidious y Wilhuff Tarkin[2]
Emperors office 1-Dark Lord of the Sith 5

Darth Vader regresó ante Darth Sidious tras completar sus primeras pruebas como aprendiz Sith.

Al inicio de la Era Imperial, el Emperador Palpatine se sentó en su silla mientras el Moff Wilhuff Tarkin permanecía a su derecha y Mas Amedda a su izquierda. Dos Guardias Reales Imperiales permanecían en posición firme junto al holoproyector del nivel inferior de la oficina. El Emperador estaba sentado con la barbilla apoyada en las manos cruzadas mientras Tarkin informaba de los avances en la construcción de la Estrella de la Muerte. Mientras Amedda hablaba del progreso en el superláser de la estación, el Emperador vio como los dos guardias activaban sus picas de fuerza y asumían una posición de combate. De pronto, los guardias fueron lanzados a través de la sala y se estrellaron contra la ventana de la oficina, resquebrajándola. Tanto Amedda como Tarkin no sabían qué estaba pasando, mientras que el Emperador mantuvo la calma. Entonces, un maltrecho y dañado Darth Vader entró en la oficina y se dirigió hacia el Emperador.[2]

El Emperador ordenó a Amedda y Tarkin que se marcharan, aunque Tarkin dudaba en hacerlo, preocupado por la seguridad del Emperador. Sonriendo, el Emperador aseguró al Moff que se encontraba a salvo y ordenó de nuevo que él y Amedda abandonaran la oficina, lo cual hicieron. A solas, Vader se mantuvo en pie frente a su maestro mientras él permanecía sentado, mirando a su aprendiz por encima de sus manos cruzadas. Finalmente, el Emperador habló y se dirigió a Vader como su aprendiz. Vader respondió dirigiéndose al Emperador como maestro, encendiendo su sable de luz, revelando su nueva hoja carmesí para gusto del Emperador.[2]

Consecuencias[]

«Me dijiste que no deseas reinar sobre un Imperio de muertos—pero debe haber consecuencias. O elimino a algunos, o los elimino a todos.»
―Darth Vader, a Darth Sidious[3]
No other way

Sidious y Vader discutieron la necesidad de imponer consecuencias a la traición.

Tras deducir el origen de una serie de intentos de asesinato contra su vida, Darth Vader se presentó ante su maestro en su oficina. El Emperador se sentó en su trono y preguntó a su aprendiz si estaba seguro de que sus deducciones eran correctas. Vader aseguró a su maestro que los ataques se debían a que los oficiales Imperiales no entendían que él ostentaba el poder del Emperador. Palpatine preguntó a su aprendiz si estaba seguro de que no había otra forma de abordar su reclamación. De pie ante su maestro, Vader declaró que tenía que haber consecuencias y que mataría a todos los oficiales si no se le permitía eliminar a algunos ahora para que sirvieran de ejemplo. Inclinándose hacia delante, el Emperador accedió a la petición de Vader con la condición de que se perdonara la vida a Tarkin, ya que tenía planes para él.[3]

Apariciones[]

SWCL Palpatine office

Recorte de la Oficina del Canciller en la época de las Guerras Clon.

Fuentes[]

Notas y referencias[]

 La versión original de este artículo, o parte del mismo, fue traducida de Wookieepedia, ver autores
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