- «Los secretos de su cabeza deben ser perjudiciales para el Imperio. Necesitamos sacarlo de Lothal.»
- ―Kanan Jarrus, acerca de Tseebo
El rescate de Tseebo fue una misión llevada a cabo en el planeta Lothal por los Espectros en el 4 ABY, durante las festividades que conmemoraban el decimoquinto aniversario del alzamiento del Imperio Galáctico. Los rebeldes descubrieron a Tseebo, un rodiano que había desertado de la Oficina de Información Imperial, y averiguaron que poseía un constructo cíborg AJ^6 que contenía información crítica acerca de los planes del Imperio para los Territorios del Borde Exterior. Sabiendo que esta información podía ser vital para su lucha contra el Imperio, los Espectros se abrieron camino hacia el exterior de Ciudad Capital junto a Tseebo, mientras eran perseguidos por el Agente Alexsandr Kallus del Buró de Seguridad Imperial. Los rebeldes fueron rescatados de la persecución Imperial por su capitana, Hera Syndulla, que los recogió en su nave estelar Espíritu. Tras un breve enfrentamiento en la órbita contra los cazas TIE que lo perseguían, el Espíritu escapó al hiperespacio.
El Gran Inquisidor, encargado de dar caza a Jedi como los miembros del equipo rebelde Kanan Jarrus y Ezra Bridger, persiguió a los rebeldes con una señal de rastreo que el Imperio había acoplado al Fantasma, la lanzadera del Espíritu. Tras detectar la señal, los rebeldes decidieron separarse; los dos Jedi se dirigieron a la base Fuerte Anaxes, situada en un asteroide, para alejar al Gran Inquisidor de Tseebo, mientras que Syndulla llevó al rodiano ante su contacto rebelde, Ahsoka Tano—operando bajo el nombre en clave Fulcrum como una operativa de la inteligencia rebelde. Mientras Tseebo era puesto a salvo bajo la custodia de los rebeldes, los Jedi se enfrentaron al Gran Inquisidor en un duelo con sables de luz en Fuerte Anaxes, con Bridger usando inadvertidamente el lado oscuro de la Fuerza para derrotar en combate al asesino de Jedi y escapar. Las acciones de Bridger lo dejaron perturbado, y Jarrus pronto lo llevó al Templo Jedi de Lothal para asegurar que su Padawan estuviera listo para ser entrenado como Jedi.
Preludio[]
- «Bocetos Imperiales de los nuevos TIEs y de los nuevos disruptores T-8; horarios de movimientos de tropas, tácticas, y estrategias. La mitad está encriptada, pero parece que hay un plan quinquenal para Lothal y todos los demás mundos del Borde Exterior.»
- ―Sabine Wren, revelando la información contenida en la pieza cerebral de Tseebo
Durante la Era Imperial, el Imperio Galáctico tomó el control del mundo del Borde Exterior de Lothal. Dos de los ciudadanos del planeta, Ephraim y Mira Bridger, emitieron transmisiones rebeldes abogando contra el dominio Imperial de Lothal. Tseebo, un amigo de los Bridgers, los instó a detenerse, pero ellos no compartieron sus preocupaciones y el Imperio capturó a los Bridgers.[1] Sintiendo el peso de su culpa por no haber podido proteger a sus amigos o a su hijo, Ezra Bridger, que terminó viviendo solo en las calles de Lothal, Tseebo se unió a la Oficina de Información Imperial y se ofreció voluntario[3] para ser equipado con un constructo cíborg AJ^6[6] unido a la parte trasera de su cabeza que estaba diseñado para incrementar la productividad. Quince años después del ascenso del Imperio, Tseebo subió secretos Imperiales a su pieza de la cabeza y desertó del Imperio,[3] escondiéndose en la antigua casa de los Bridgers en Lothal. Tseebo pretendía usar los secretos para enmendar haber fallado a sus amigos, y la información que recibió en su pieza cerebral perturbó su mente, haciendo que perdiera de manera intermitente la lucidez. El Imperio sabía que los secretos de su cabeza eran críticos, y buscaron a Tseebo por todo Lothal con la esperanza de encontrarlo.[1]
Para entonces, Ezra Bridger se había convertido en un Padawan Jedi y un miembro de los rebeldes Espectros, asentados en la nave estelar Espíritu, que operaban contra el Imperio en Lothal. Durante las celebraciones del Día del Imperio[1] del 4 ABY que marcaban el decimoquinto aniversario del Imperio, el Imperio celebró un desfile en Ciudad Capital, exhibiendo numerosos vehículos militares, incluido un caza TIE experimental, así como oficiales y soldados. Los rebeldes pusieron un detonador termal en el caza estelar y lo destruyeron, un ataque que hizo que el Imperio enviara una fuerte fuerza militar para encontrarlos. Los rebeldes huyeron por las calles de Lothal, donde fueron perseguidos por soldados de asalto, el Agente Alexsandr Kallus del Buró de Seguridad Imperial, y el cazador de Jedi conocido como el Gran Inquisidor.[1]
Bridger lideró a dos de sus compañeros—el líder rebelde Kanan Jarrus y la guerrera mandaloriana Sabine Wren—a su antiguo hogar para usarlo como casa segura. Fue allí donde descubrieron a Tseebo escondiéndose del Imperio. Bridger no estuvo contento de ver al antiguo amigo de sus padres, puesto que el rodiano le recordaba aquello que había perdido. Wren examinó la pieza de la cabeza de Tseebo y descubrió extensos registros Imperiales, incluido información de nuevas armas y cazas estelares, horarios militares y estrategias, así como un plan quinquenal para el desarrollo del Imperio en los Territorios del Borde Exterior. Jarrus sabía que la información podía ser vital para su rebelión contra el Imperio, por lo que los rebeldes decidieron sacar a Tseebo de Lothal y llevarlo a un lugar seguro.[1]
El rescate[]
Escape de Lothal[]
- Syndulla: «¿Alguien puede explicarme por qué somos tan populares esta noche?»
- Jarrus: «Hemos recogido a un pasajero—el rodiano al que persiguen los Imperiales.»
- Syndulla: «¿Y es importante porque…?»
- Wren: «Por que su implante cibernético tiene descargados la mitad de los secretos Imperiales.»
- Syndulla: «De acuerdo, ya veo por qué es importante. Vamos a sacarlo de aquí.»
- ―Hera Syndulla, Kanan Jarrus, y Sabine Wren durante el escape del equipo de Lothal [fuente]
Los rebeldes abandonaron la casa segura junto a Tseebo. Para abrirse camino hacia el exterior de la ciudad, Jarrus y Wren atacaron a un grupo de soldados Imperiales y secuestraron un Transporte de Tropas Imperial. Bridger, mientras tanto, condujo a Tseebo por las calles hasta el transporte. El vehículo se abrió paso hasta las afueras de la ciudad, donde las fuerzas Imperiales, lideradas por el Comandante Cumberlayne Aresko, habían establecido un punto de control para impedir que nadie escapara. Las tropas atacaron e informaron de que un transporte había sido robado, y el Agente Kallus ordenó a Aresko que no dejara pasar a los rebeldes por su punto de control. Aresko y sus fuerzas, no obstante, no pudieron evitar la huida, a pesar de disparar al vehículo cono sus blásters y Módulos de Defensa Todo Terreno.[7] Wren, que pilotaba el vehículo, no se intimidó y condujo el transporte directamente hacia el punto de control y hacia el exterior de la ciudad, destruyendo a otro TTI y a un AT-DP en el proceso.[1]
El Imperio persiguió al transporte robado con dos motos deslizadoras y un Transporte de Tropas que llevaba a bordo al Agente Kallus. Durante la persecución, Kallus contactó con el Gran Inquisidor para informarle de que los rebeldes habían atravesado las puertas principales. El Gran Inquisidor, flanqueado por varios pilotos de caza TIE, subió a bordo de su TIE Avanzado, sospechando que el Espíritu estaría esperando para reunirse con su tripulación. Mientras el Gran Inquisidor se preparaba para perseguirlos, las fuerzas de Kallus atacaron a los rebeldes para ralentizarlos. Un conductor de combate Imperial puso un detonador en la puerta del transporte robado y la hizo estallar, dando al soldado la oportunidad de subir a bordo. Descubrió que Tseebo se encontraba a bordo del vehículo antes de que Jarrus lo atacara; el Jedi usó la Fuerza para lanzar al soldado fuera del transporte, haciéndolo chocar contra un segundo deslizador.[1]
El transporte de Kallus disparó contra los rebeldes mientras avanzaba, dando a Kallus la oportunidad de saltar de un vehículo a otro. El Espíritu, pilotado por la Capitana Hera Syndulla, llegó justo cuando Kallus llegaba a lo alto del transporte robado, y el agente del BSI fue disparado por el Guardia de Honor lasat y rebelde Garazeb Orrelios. El vehículo Imperial giró su torreta láser hacia el Espíritu, pero los escudos del carguero resistieron los disparos. El droide astromecánico rebelde Chopper usó las armas del Espíritu para disparar contra el transporte Imperial, haciéndolo volar por los aires y dejándolo fuera de combate. Kallus fue noqueado hacia el lateral del transporte robado tras recibir los ataques de Orrelios, pero el agente del BSI resistió en la parte trasera del vehículo mientras los rebeldes comenzaban a subir a bordo del Espíritu en un rescate sobre el aire. Kallus regresó a lo alto del transporte a tiempo para descubrir que Tseebo se encontraba acompañado por los rebeldes, pero falló en detener la huida de los rebeldes. Kallus contactó con el Gran Inquisidor de nuevo, esta vez informándole de que Tseebo iba a bordo del Espíritu, y el Gran Inquisidor lideró a cuatro pilotos para perseguir a la nave estelar fugitiva.[1]
Syndulla puso rumbo al espacio mientras Jarrus y Chopper manejaban las torretas bláster de la nave. Un disparo directo del Gran Inquisidor dañó la nave y dejó a Chopper fuera de servicio, cortocircuitándolo.[1] Syndulla tomó medidas para evadir el ataque entrante y ordenó a Chopper manejar las torretas traseras. Con Chopper derribado, Orrelios tomó su lugar y Syndulla ejecutó su maniobra. Evadieron más fuego enemigo y Orrelios destruyó unos de los cazas TIE, aunque llegaron cuatro cazas nuevos para unirse al ataque. El Gran Inquisidor ordenó a sus fuerzas abrir fuego y romper los escudos del Espíritu, lo cual consiguieron tras varias ráfagas de ataque. El Espíritu quedó vulnerable a más ataques, y la situación se complicó aún más con la llegada de dos Destructores Estelares, incluido el Implacable. Sabiendo que el Espíritu probablemente escaparía, el Gran Inquisidor disparó un dispositivo de rastreo en la nave, que se acopló a la lanzadera de ataque Fantasma. Bridger trabajó para reparar los daños de la computadora de navegación mientras se acercaban a la nave ocho cazas TIE más, pero no pudo repararla. En su lugar, Tseebo entró en la cabina e introdujo directamente unas coordenadas en la nave, permitiendo al Espíritu escapar al hiperespacio.[3]
Salvando a Tseebo[]
- «Pareces estar…mejor.»
«La mente de Tseebo ahora está más clara. Pero es difícil. Hay mucha información dentro de Tseebo.»
«La gente de Fulcrum te ayudará con eso y a mantenerte a salvo.» - ―Hera Syndulla y Tseebo
El Gran Inquisidor regresó al Implacable para hablar con su oficial al mando, el Almirante Kassius Konstantine, que informó al Gran Inquisidor de que el dispositivo de rastreo se encontraba funcional. Mientras tanto, la tripulación del Espíritu atendió los daños de la nave, lo cual incluía al dañado Chopper, y consideró qué hacer con Tseebo. Jarrus preguntó a Bridger qué quería hacer, puesto que el chico tenía una historia con Tseebo, pero Bridger primero se negó a hablar de ello y rechazó la idea de que Tseebo le importara. Aunque Bridger seguía enfadado con Tseebo por no haber ayudado a sus padres, descubrió con la ayuda de Wren que el rodiano se había puesto voluntariamente un implante para enmendar lo que había ocurrido con Mira y Ephraim. Tseebo demostró ser muy útil cuando su pieza cerebral detectó que había un dispositivo de rastreo en algún lugar del casco, y Chopper, de nuevo funcional, escaneó la nave y encontró el rastreador en la lanzadera Fantasma. Aunque era arriesgado, Jarrus ideó el plan de desacoplar al Fantasma del Espíritu mientras seguían en el hiperespacio y llevar la lanzadera al Fuerte Anaxes,[3] una base sobre un asteroide que había pertenecido al Gran Ejército de la República durante las Guerras Clon.[8] Bridger y Jarrus se dirigirían a la base del asteroide para alejar al Gran Inquisidor del Espíritu, mientras que Syndulla y los demás entregarían a Tseebo a «Fulcrum»[3]—el nombre en clave de una operativa de la inteligencia rebelde que, en realidad, se trataba de la Comandante Ahsoka Tano.[5]
Bridger, que aún se negaba a hablar con Tseebo a pesar de que Wren le había animado a perdonarlo, pronto partió con Jarrus a bordo del Fantasma. La lanzadera se separó de la nave y salió abruptamente del hiperespacio, sacudiéndose brevemente por el espacio real entes de que Jarrus estabilizara la lanzadera y pusiera rumbo al Fuerte Anaxes. El Gran Inquisidor percibió su cambio de localización mediante la Fuerza, lo cual Konstantine confirmó afirmando que el rastreador había detectado la salida del hiperespacio de la nave. Por orden del Gran Inquisidor, el Implacable puso rumbo hacia la localización del Fantasma y se abrió paso por el campo de asteroides.[3]
Jarrus aterrizó la lanzadera dentro de la antigua base clon, que estaba repleta de unas feroces criaturas[3] conocidas como fyrnocks.[9] Las criaturas, con las que los rebeldes se habían encontrado en su anterior visita al Fuerte Anaxes,[10] eran parte del plan de Jarrus. Jarrus instó a Bridger, a quien Jarrus había estado hacer conectar con los animales mediante la Fuerza, a conectar con los fyrnocks y calmarlos mientras Jarrus quitaba el rastreador de la nave. Bridger intentó entablar conexión, pero no pudo superar sus propios miedos que le bloqueaban—no miedo a las criaturas, pero miedo a saber qué había ocurrido realmente con sus padres. Superado por la emoción, Bridger finalmente perdonó a Tseebo, lo cual el rodiano pudo sentir a través de la Fuerza. Con sus miedos superados, Bridger calmó a las criaturas, que ya no suponían una amenaza para los dos Jedi.[3]
El Espíritu, mientras tanto, se reunió y se acopló a la nave de Fulcrum. Syndulla llevó a Tseebo a la esclusa de aire, donde su mente estaba más despejada tras haber percibido que Bridger lo había perdonado. Sin saber si vería al chico de nuevo, Tseebo reveló a Syndulla lo que había ocurrido con los padres de Bridger:[3] seguían vivos, pero prisioneros del Imperio.[11] Tseebo fue entonces entregado a Fulcrum, cuya gente podría ayudar a Tseebo con el exceso de información del interior de su implante.[3]
Duelo con el Gran Inquisidor[]
- «Desata tu ira. Yo te enseñaré lo que tu maestro no pudo.»
«Tú no tienes nada que enseñarme.»
«La oscuridad es demasiado fuerte para ti, huérfano. Te está consumiendo, incluso ahora. […] Tu maestro morirá. […] Tus amigos morirán. Y todas tus esperanzas se perderán. Así es como termina la historia.»
«¡No!» - ―El Gran Inquisidor y Ezra Bridger durante su duelo
Siguiendo la señal del dispositivo de rastreo, el Gran Inquisidor llegó al Fuerte Anaxes en una lanzadera Imperial acompañado por varios soldados de asalto. El Gran Inquisidor les ordenó contener a los dos Jedi puesto que los quería con vida, por lo que cuando los soldados entraron en la base, se prepararon para formar alrededor de los rebeldes. Accediendo al interior, los soldados encontraron a los dos Jedi meditando en silencio]], con los fyrnocks en calma detrás de ellos. El Gran Inquisidor percibió algo a través de la Fuerza, pero para entonces era demasiado tarde—los dos Jedi soltaron a los fyrnocks contra los soldados de asalto. El Gran Inquisidor, nada impresionado con el plan, encendió su sable de luz, igual que Jarrus, y los dos se enfrentaron en un duelo con sables de luz.[3]
El Gran Inquisidor fue superior durante el duelo, hasta el extremo de que Jarrus cogió su propio bláster a media pelea e intentó disparar al cazador de Jedi. El Gran Inquisidor lo despojó de su bláster, no obstante, y usó la Fuerza para lanzar a Jarrus volando contra un muro de la base, dejándolo inconsciente. Bridger, que había continuado mediando con los fyrnocks, percibió que su maestro se encontraba en problemas y cogió su sable de luz para enfrentarse al Gran Inquisidor. Sin embargo, el Gran Inquisidor usó rápidamente la Fuerza para arrebatarle el sable láser al chico. El cazador de Jedi usó la Fuerza para hacer retroceder al joven Padawan, y Bridger casi cayó a un pozo profundo al límite de la base. Enfadado y temiendo las amenazas del Gran Inquisidor de asesinar a Jarrus y al resto de sus amigos, Bridger recurrió inconscientemente al lado oscuro de la Fuerza y conectó con un fyrnock gigante de lo más profundo del pozo. La gran criatura salió a la superficie, y el chico envió a la bestia contra el Gran Inquisidor. Al hacerlo, Bridger se vio superado y quedó inconsciente.[3]
Jarrus atendió a su aprendiz mientras el Gran Inquisidor contenía al fyrnock gigante. Bridger recuperó la consciencia pero no tenía recuerdos de lo que había ocurrido, sintiendo únicamente frío. Los dos Jedi escaparon—con el sable de luz de Jarrus, que el Gran Inquisidor había soltado—mientras el Gran Inquisidor seguía luchando contra el fyrnock y el resto de criaturas distraían a los soldados de asalto. El Gran Inquisidor ahuyentó al fyrnock gigante y lanzó su sable de luz hacia Jarrus y Bridger, pero Jarrus lo desvió de vuelta. Los dos Jedi subieron a bordo del Fantasma, y Jarrus lo pilotó hacia el exterior de la base. Mientras lo hacía, usó sus torretas para destruir la lanzadera Imperial antes de abandonar el asteroide.[3]
Consecuencias[]
- «Ezra, cuando estuvimos en ese asteroide, hiciste una conexión peligrosa con la Fuerza. Ahora tengo que saber si… estás listo.»
- ―Jarrus explica a su Padawan que está preocupado por el entrenamiento del chico
La experiencia de Bridger en el Fuerte Anaxes lo dejó perturbado, al no haber lidiado nunca antes con las secuelas del lado oscuro. Restó en silencio al principio, y tanto Jarrus como Syndulla acordaron mantener en secreto la verdad acerca de sus padres hasta que estuviera listo,[3] pero eventualmente él regresó a las actividades normales del equipo. Aun así, Jarrus permaneció preocupado por la tendencia oscura de su Padawan en el asteroide y necesitaba asegurar que el chico estuviera listo para continuar el camino del Jedi. Descubrió que había un Templo Jedi en Lothal y llevó a Bridger a la antigua estructura Jedi, donde el Padawan fue enviado solo para hacer frente a los miedos que le habían empujado a flirtear brevemente con el lado oscuro de la Fuerza.[12]
Dentro del Templo Jedi, Bridger tuvo visiones del Gran Inquisidor matando a sus amigos, a quienes consideraba su nueva familia. Esto le ayudó a darse cuenta de que no tenía miedo a morir, sino a perder a aquellos a los que quería y a ser abandonado de nuevo. Bridger pronto escuchó la voz de Yoda,[12] el antaño–Gran Maestro de la Orden Jedi,[13] quien, desde la distancia, guió a Bridger hasta una sala en lo más profundo del templo. Una vez allí, preguntó al chico por qué quería convertirse en Jedi. Bridger sintió ira contra el Imperio al principio, pero admitió que sus verdaderas intenciones eran ayudar a los demás. Yoda le dijo que a pesar del difícil camino que había ante él, Bridger tenía lo necesario para convertirse en Jedi. El chico recibió un cristal kyber para crear su propio sable de luz, un rito necesario para cualquier Jedi.[12]
Un año después, Bridger supo que Tseebo había informado a Syndulla acerca del destino de los Bridgers: habían sido apresados por el Imperio. Aunque había tenido una visión de sus padres bajo la custodia Imperial, fue demasiado tarde para salvarlos, puesto que pronto descubrió que habían muerto durante una fuga de la prisión en la que habían pretendido escapar junto al resto de prisioneros.[11]
Apariciones[]
- Star Wars Rebels webcomic
- Star Wars Rebels — «Día del Imperio» (Primera aparición)
- Ezra's Duel with Danger
- Star Wars Rebels — «Reuniendo Fuerzas»
- Star Wars Rebels — «El Camino del Jedi» (Solo en mención indirecta)
- Battle to the End (Solo mencionado)
- Star Wars Rebels — «Legado» (Solo en mención indirecta)
- Battlefront: Compañía Crepúsculo (Solo mencionado)
Fuentes[]
Notas y referencias[]
- ↑ 1,00 1,01 1,02 1,03 1,04 1,05 1,06 1,07 1,08 1,09 1,10 1,11 1,12 1,13 1,14 1,15 1,16 1,17 1,18 1,19 1,20 1,21 1,22 1,23 1,24 1,25 1,26 1,27 1,28 1,29 1,30 1,31 1,32 1,33 1,34 1,35 1,36 1,37 1,38 1,39 1,40 1,41 1,42 1,43 1,44 Star Wars Rebels — «Día del Imperio»
- ↑ Star Wars: Atlas Galáctico sitúa los eventos de Star Wars Rebels — «Día del Imperio» en el 4 ABY. Como este suceso ocurre en Star Wars Rebels — «Día del Imperio», tiene lugar en el 4 ABY.
- ↑ 3,00 3,01 3,02 3,03 3,04 3,05 3,06 3,07 3,08 3,09 3,10 3,11 3,12 3,13 3,14 3,15 3,16 3,17 3,18 3,19 3,20 3,21 3,22 3,23 3,24 3,25 3,26 3,27 3,28 3,29 3,30 3,31 3,32 Star Wars Rebels — «Reuniendo Fuerzas»
- ↑ Ezra's Duel with Danger
- ↑ 5,0 5,1 5,2 Los sucesos de «Fuego a Través de la Galaxia» revelan que Fulcrum es Ahsoka Tano y que ella es el contacto de los rebeldes en el movimiento rebelde creciente que se convierte en la Alianza para Restaurar la República.
- ↑ Star Wars Rebels en Facebook: Post about Tseebo. "The Rodian who knew too much." (enlace de respaldo)
- ↑ Star Wars Rebels: La Guía Visual
- ↑ Fort Anaxes en el Databank (enlace de respaldo)
- ↑ Fyrnock en el Databank (enlace de respaldo)
- ↑ Star Wars Rebels — «Fuera de la Oscuridad»
- ↑ 11,0 11,1 Star Wars Rebels — «Legado»
- ↑ 12,0 12,1 12,2 Star Wars Rebels — «El Camino del Jedi»
- ↑ Yoda en el Databank (enlace de respaldo)