Ya sea un asunto de borrado, bloqueo o interpretación de una política existente, ningún miembro de la administración podrá cancelar/revertir la decisión de otro administrador. Excepto al recrear algo con base canónica incontestable, la reversión de una decisión administrativa requerirá de un genuino esfuerzo de buena voluntad para discutir el asunto, en tiempo y forma adecuados, con el administrador cuya decisión es cuestionada por mayoría de votos por los administradores disponibles.
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